Cómo ponerse las pantis

3 partes:Elegir las que te queden bien Deslizarlas con facilidad Ponérselas cómodamente y con estilo

Las pantis están hechas de una tela de nailon delicada que te cubre desde la punta de los pies hasta la cintura y te ayuda a uniformizar el tono de tu piel y a reducir la fricción. Es sabido que se rasgan o se corren al manipularlas, pero una vez que logras ponértelas, pueden hacer que tu atuendo se vea refinado y elegante. Utilizar la técnica correcta para colocártelas extenderá su duración y garantizará que te queden lisas y cómodas.

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Parte 1 de 3: Elegir las que te queden bien

1
Decide cómo quieres que te quede la parte de arriba. Todas las pantis están hechas para que la parte de arriba te quede como unas bragas, lo que tiene dos propósitos: no permitir que la panti se caiga y aferrarse a tu figura para crear una silueta más esbelta. El nivel de "control" en la parte superior de la panti puede ser alto o inexistente. Elige el tipo que vaya de acuerdo a tus preferencias personales y que te proporcione la apariencia y el nivel de comodidad que quieras.
- Las pantis con control en la parte de arriba tienen una ropa interior incorporada que se acomoda apretando el área central. Si quieres uniformizar tus curvas, esta podría ser la opción adecuada para ti. Sin embargo, a muchas personas les parece que este tipo de pantis son tan apretadas que incomodan y a veces se hunden en la cintura, lo que crea una apariencia fajada.
- Las pantis normales tienen una estructura más simple y su objetivo no es proporcionar soporte extra en el área central. Si no quieres que tu forma cambie, elige este tipo en lugar del otro.
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2
Decide qué nivel de transparencia que deseas. Las pantis pueden variar entre muy (o súper) transparentes y opacas, y estas diferencias hacen que la apariencia final varíe bastante. Si eliges pantis muy transparentes que son del mismo color que tu piel, podría parecer que no te las has puesto. Por otro lado, las opacas son mucho más notorias.
- Las pantis transparentes son un poco más delgadas que las opacas, que son más densas. Esto es algo que debes tomar en cuando si te preocupada su durabilidad.
- Las pantis opacas son un poco más abrigadoras que las transparentes, así que son más apropiadas para el invierno.
3
Elige la talla adecuada. Las pantis vienen en tallas de acuerdo al peso y la altura, pues tienen que estirarse desde los pies a la cabeza de una persona. Observa el paquete en el que vienen para saber si la talla se adecúa a tu peso y altura.
- ¡Si te desagrada la sensación que producen las pantis muy apretadas, compra una talla más! Es probable que, de todas maneras, sean lo suficientemente ajustadas para quedarse en tu cintura y no caerse.
4
Considera las opciones que aumentan la comodidad. Algunas pantis vienen con elementos extras que tienen el propósito de volverlas más cómodas. Si antes tenías problemas para encontrar un par que te pareciera cómodo, piensa en probar varias características para ver si hacen alguna diferencia. Por ejemplo, puedes probar las siguientes:
- Pantis con una banda elástica en la cintura. Podrías encontrarlas como pantis "elasticadas".
- Elige pantis con dedos o pies libres, o sin puente (el área de la ingle), dependiendo de las partes que sueles sentir más restringidas cuando te las pones.
5
Elige pantis con más estilo. Las que tienen diseño o costuras pueden ser muy bonitas. Por ejemplo, las que tienen la costura notoria en la parte de atrás de las piernas pueden darle una apariencia antigua interesante a tu atuendo. Son un poco más difíciles de poner pues el diseño tiene que verse derecho en ambas piernas, pero si haces uso de la técnica adecuada, se verán fantásticas.

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Parte 2 de 3: Deslizarlas con facilidad

1
Prepara tus manos, pies y piernas. Para que las pantis no se enganchen en una uña o un pedazo de piel áspera, prepara tus manos, pies y piernas para que el proceso sea más fácil. Estas son algunas de las preparaciones que podrías llevar a cabo:
- Lima tus uñas de las manos y de los pies.
- Depílate las piernas con rasurador o cera (especialmente si las pantis son transparentes).
- Humecta tus manos, piernas y pies.
- Sácate cualquier anillo o brazalete que podría engancharse en el nailon y dañar las pantis.
2
Coloca la parte de adelante de las pantis hacia afuera. Revisa dónde está la etiqueta y coloca las pantis de modo que al ponértelas, esta quede atrás. Estas prendas están hechas para que te las pongas de cierta manera y si están al revés podrían verse y sentirse extrañas.
3
Reúne una pierna de las pantis en la punta del pie. Comenzando con el lado derecho o el izquierdo, sostén la parte de la cintura y amontona con delicadeza la pierna de modo que la parte interior del pie quede expuesta. El objetivo es crear un camino fácil para tu pie con el fin de meterlo dentro de la pierna de la panti sin romper la tela.
4
Pon tus dedos en punta y desliza tu pie hacia adentro. Es probable que tengas que estirar un poco la abertura para asegurarte de que tu pie entre sin agarrarse en la tela. Pon tus dedos en punta para evitar que las uñas de los dedos se enganchen. Mete todo tu pie y acomoda la parte de abajo de la panti para que la costura de la punta quede a lo largo de tus dedos.
- Cerciórate de que la pierna no esté torcida al meter el pie. Si lo está, será difícil tirar de la panti hacia arriba de tu pierna.
- Puedes estar sentada o parada cuando te la pongas. ¡Si te parece difícil mantener el equilibrio en un pie, mejor siéntate!
5
Tira de la tela hasta el muslo con delicadeza. Muévela cuidadosa y lentamente, asegurándote de que la tela no se corra o rasgue. Mantén la pierna de la panti centrada y jálala hasta que llegue a tu muslo. Si la tela se amontona o se tuerce a la altura de la rodilla, estírala antes de continuar.
6
Repite el mismo proceso con el otro lado. Junta la cintura y la punta de los pies de la otra pierna para crear un camino que tu pie pueda recorrer fácilmente. Pónlo en punta y mételo; luego alinea la puntera para que la costura quede a lo largo de tus dedos. Tira de la panti hacia arriba de tu pierna, pasando por la pantorrilla y la rodilla, hasta llegar al muslo. Cerciórate de que no esté amontonada ni torcida.
7
Termina de subir las pantis. Debes tener suficiente tela para terminar de jalarlas con facilidad hasta tu cintura. Si estabas sentada, ponte de pie en esta parte y tira de las pantis de modo que el elástico quede alrededor de tu cintura.
- Cuando estés terminando de subirlas, es posible que tengas que alternar las piernas para garantizar que la tela esté distribuida equitativamente y no se tuerza.
8
Echa un vistazo y realiza los ajustes necesarios. Busca áreas en las que la panti se haya amontonado o lugares en los que sientes la piel apretada. Las medias deben sentirse ajustadas, pero no incómodas. Si ves algún lugar donde estén torcidas, vale la pena sacártelas y repetir el proceso con más cuidado, ¡sobre todo si las vas a tener puestas todo el día!
- Si tienes puestas unas pantis con diseño o costura, ponte con un par de guantes de goma para realizar ajustes pequeños y obtener un acabado perfecto en lugar de manipularlas con los dedos y correr el riesgo de romperlas.
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Parte 3 de 3: Ponérselas cómodamente y con estilo

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Ponte pantis con ropa cómoda. Vestir prendas apretadas encima de un par de pantis puede hacer que tu día se vuelva incómodo. De ser posible, ponte ropa que se saque fácilmente cuando tengas que ir al baño y no te haga sentir muy apretada ni restringida. Si tu atuendo se amolda a tu figura, podrías tener en cuenta las siguientes opciones:
- Las pantis hasta la rodilla o el muslo: se ven como las completas pero no tienen la parte restrictiva de arriba.
- Las medias: son similares a las pantis pero las puedes encontrar en telas diferentes que dejan respirar mejor a tu piel.
2
Presta atención al clima. Las pantis no son muy prácticas en climas muy húmedos o calientes porque atrapan la humedad en tu piel y se vuelven incómodas cuando sudas. Si quieres ponértelas en climas cálidos, elige las súper transparentes sin modeladores en la parte superior, pues así recibirás la mayor cantidad de aire durante el día.
3
Aprende a que las medias no se sigan corriendo. Es inevitable, de vez en cuando se van a enganchar sin importar cuan cuidadosa seas. Si ves el lugar donde comienza la rasgadura, corta el hilo que se corrió y echa un poco de esmalte transparente sobre ese punto. Esto evitará que se corra hasta abajo.
- Si se convierte en un agujero, puedes reparar tus pantis para volverlas a usar. Sin embargo, las pequeñas imperfecciones suelen notarse porque el material es muy fino. Si se te suelen correr, compra pantis opacas, no te las pongas o almacena varios pares para que tengas uno extra a la mano por si acaso.
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