3 partes:Prepara los ingredientesBate la crema inglesaSirve la crema inglesa

La crème anglaise o crema inglesa es una salsa para postre elaborada a base de huevos, crema y vainilla fresca. Suele usarse en restaurantes refinados para decorar y realzar el sabor de pasteles y otros postres, pues añade un poco de suculencia o contraste y mejora el sabor y la presentación del plato. Es deliciosa junto con un tazón de fresas o vertida sobre una tajada de pastel de chocolate oscuro. Empieza con el paso 1 para aprender cómo prepararla.

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Ingredientes

  • 2 tazas de leche entera
  • 6 cdas. de azúcar
  • 6 yemas de huevo
  • 1 vaina de vainilla
  • Equipamiento especial: cacerola para baño María

Parte 1 de 3: Prepara los ingredientes

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    Abre la vaina de vainilla. Haz una incisión a lo largo del centro de la vaina, usando un cuchillo de mondar afilado. Ten cuidado de no atravesar la vaina al cortarla. Si lo haces correctamente, la vaina tendrá un corte largo en uno de los lados, mientras el otro permanece cerrado. Eso permitirá que las semillas que están dentro de la vaina emerjan y den sabor a la crema inglesa.
    • Puedes comprar vainilla en vaina en tiendas especializadas en cocina o comestibles gourmet. También puedes ordenarla en línea.
    • Mientras más larga sea la vaina, más fuerte será el sabor a vainilla de la salsa. Para esta receta, busca una que mida de 5 a 10 cm (2 a 4 pulgadas).
    • Si no tienes vainilla en vaina, añade ½ cdta. de extracto de vainilla.
    • Como una alternativa, puedes preparar crema inglesa de naranja o limón. Simplemente reemplaza la vainilla por la cáscara de 1 naranja o 1 limón.[1]
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    Calienta a baño María. Llena el fondo del baño María con 5 a 7,5 cm (2 a 3 pulgadas) de agua y colócalo sobre la estufa a temperatura media. Deja que el agua empiece a hervir suavemente.
    • Una cacerola para baño María es simplemente una cacerola alojada dentro de otra. La más grande se utiliza para contener agua, mientras que la otra para contener los alimentos que deseas cocinar.
    • El propósito de utilizar una cacerola para baño María es calentar alimentos a temperatura baja. Si no tienes un baño María, llena una cacerola con 5 a 7,5 cm (2 a 3 pulgadas) de agua y coloca un tazón de metal o una cacerola más pequeña dentro.
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    Separa las claras de huevo de las yemas. Coloca dos recipientes sobre una superficie plana, uno para las claras y otro para las yemas. Sostén una mano sobre el recipiente reservado para las claras y parte un huevo en tu mano. Deja que la clara se deslice entre tus dedos, pero no la yema. Coloca la yema en el otro tazón.
    • Repite este proceso con el resto de los huevos (6 en total) hasta que hayas separado todas las yemas de las claras.
    • También puedes separar los huevos sosteniendo un huevo partido sobre un tazón y pasando la yema de una mitad a otra de la cáscara, de forma que la clara caiga dentro del tazón. Coloca la yema en un segundo tazón.
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Parte 2 de 3: Bate la crema inglesa

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    Bate el azúcar y las yemas de huevo. Coloca las yemas y las 6 cdas. de azúcar en un tazón mediano. Bátelas vigorosamente con un batidor de alambre hasta que la mezcla se ponga esponjosa y de color amarillo claro. También puedes usar una batidora eléctrica.
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    Calienta la leche con la vaina de vainilla. Coloca las 2 tazas de leche y la vainilla en una cacerola pequeña. Caliéntala a temperatura media baja hasta que esté muy caliente, pero no hirviendo. Retírala del calor.
    • Puedes saber cuándo está lo suficientemente caliente leche prestando atención a los bordes de la cacerola. Cuando emerja vapor de donde la leche toca el borde de la cacerola, es el momento de retirarla del calor.
    • Si prefieres una salsa más sustanciosa, usa 2 tazas de crema. Para una menos sustanciosa, usa solo leche o una taza de leche y una taza de crema.
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    Incorpora la leche caliente a la mezcla de huevo. Vierte la leche lentamente dentro del tazón con la mezcla de azúcar y huevo, mientras bates constantemente con un batidor de alambre. Continúa hasta incorporar la leche a la mezcla por completo.[2]
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    Vierte la salsa dentro del baño María. Asegúrate de que el agua en el fondo de la cacerola para baño María esté hirviendo a fuego lento y vierte la mezcla de huevo, azúcar y leche en la cacerola más pequeña (o dentro del tazón, si improvisaste tu propio baño María).
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    Calienta la salsa lentamente. Revuélvela constantemente con una espátula pequeña de goma. No permitas que se caliente demasiado, ya que puede cortarse. Sigue revolviendo la salsa hasta que sea tan densa que pueda cubrir la parte trasera de una cuchara metálica y luego retírala del calor.
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Parte 3 de 3: Sirve la crema inglesa

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    Enfría la crema inglesa. Siempre se sirve helada, nunca caliente. Vierte la salsa en un recipiente de vidrio y colócalo en la nevera. Sírvela solo cuando esté totalmente fría. Puedes preparar la salsa un día antes y sacarla de la nevera cuando estés listo para usarla.
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    Sírvela con una tajada de pastel. Es una forma clásica de servir la crema inglesa, ya que provee un balance delicioso para el chocolate y otros sabores de pastel. Vierte un poco de la salsa en el centro de un plato de postre, de forma que se expanda y forme un pequeño charco. Coloca la rebanada de pastel sobre la crema inglesa. Corónala con un segundo chorro de crema, un poco de coulis de bayas o jarabe de chocolate para obtener una presentación perfecta.
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    Sírvela con un sorbete. La crema inglesa ligera y cremosa es un acompañamiento excelente para una bola de sorbete ácido, como el de lima, frambuesa o durazno. Vierte un poco de crema dentro de un plato para sorbete y luego coloca una bola de sorbete en el centro. Corónala con una ramita de menta para añadir aún más estilo al postre.
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    Sírvela con fruta. Si quieres un postre ligero y delicioso, sirve crema inglesa con un poco de fruta picada. Prueba utilizar fresas para preparar una versión gourmet de las fresas con crema clásicas. También va perfectamente con zarzamoras, cerezas o rebanadas de mango.
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Consejos

  • Para preparar un helado de vainilla fresco, congela una tanda de crema inglesa.
  • Para preparar crema inglesa más rápidamente, sustituye el baño María con una cacerola pesada. Sin embargo, debes ser extremadamente cuidadoso al prepararla, ya que la salsa puede cortarse o quemarse fácilmente cuando se prepara de esa forma.
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Cosas que necesitarás

  • Tazón de metal o cacerola para baño María
  • Espátula pequeña de goma
  • Batidor de alambre delgado

Referencias

Acerca del artículo

Categorías: Cremas