Cómo romper una relación

2 partes:Tomar la decisión Terminar la relación

Muchas letras de canciones expresan que “romper una relación es difícil”, algo que es absolutamente cierto para la mayoría de las personas. Tomar la decisión de romper una relación con tu pareja puede ser estresante y molesto para ambos. Sin embargo, al tomarte el tiempo para considerar si esta es la medida adecuada y romper con tu pareja de una manera racional, respetuosa y tranquila podrías minimizar el dolor y separarte de manera eficaz.

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Parte 1 de 2: Tomar la decisión

1
Evita tomar una decisión apresurada. Es importante considerar tu decisión cuando no estés emocionalmente molesto y puedas pensar con claridad. Esto te ayudará a no tomar una decisión impulsiva que puedas lamentar o que lastime a la otra persona.^[1]
- Es más difícil solucionar los problemas cuando estás emocionalmente molesto, pues eso puede contribuir a la toma de decisiones irracionales.^[2]
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2
Aclara la razón por la que quieres ponerle fin a la relación. Es importante que seas claro en lo que respecta a la razón por la que quieres romper. Esto puede ayudarte a distinguir entre los obstáculos simples que hay en una relación y los problemas más serios e irreconciliables que hay entre tú y tu pareja.^[3]
- Solo tú puedes definir cuáles son los problemas irreconciliables y cuáles, aquellos que puedes superar. Por ejemplo, el hecho de que tu pareja no trate bien a los demás o no quiera tener hijos suelen ser factores que no pueden cambiarse. Por otro lado, el rechazo de una persona a ayudar con los quehaceres podría ser algo que tiene solución.
- Todas las parejas tienen discusiones, pero si esas disputas son continúas e intensas, podría ser un indicador de problemas más profundos e incompatibilidad.^[4]
- Si te encuentras en una relación emocional o físicamente perjudicial, generalmente es un indicador claro de que debes ponerle fin.^[5]
3
Elabora una lista de aspectos positivos y negativos. Considera la posibilidad de escribir una lista de las razones por las que quieres terminar tu relación. También podrías incluir los aspectos positivos y negativos de tu pareja así como las interacciones y la relación que comparten.^[6]
- Ver los aspectos positivos de tu relación plasmados en papel podría ayudarte a enfocarte en ellos en lugar de en los negativos que puedan surgir con los sentimientos que tienes actualmente.^[7]
- Una lista también podría ayudarte a no terminar la relación con base en la idea de que “parece ser lo correcto”.^[8]
- Recuerda que cualquier forma de abuso es una razón clara para terminar una relación.^[9]
- Mira la lista y reflexiona, y pregúntate si la relación es más destructiva que constructiva para tu vida.^[10]
4
Determina si existe la posibilidad de un cambio. Si solo estás molesto con tu pareja, piensa si existe una forma de cambiar la dinámica de tu relación. Antes de tomar una decisión final, tal vez debas enfocarte en resolver los problemas en lugar de solo considerar el término de la relación como la primera solución. Si existe la posibilidad de cambiar, determina si tu pareja está dispuesta a hacerlo o no.^[11]
- Si ya se ha discutido el problema en cuestión sin lograr ningún cambio que mejore la relación y sigues teniendo un sentimiento de insatisfacción, dolor o traición, entonces ponerle fin podría ser la única forma de terminar con el patrón.^[12]
5
Comunica tu frustración. Antes de tomar la decisión de una ruptura definitiva, discute tus frustraciones y consideraciones con tu pareja. Dale la oportunidad de cambiar para mejor. Si al final decides ponerle fin a la relación, quizás parezca menos abrupto y suavice el golpe debido a que ya habrás expresado la frustración que sientes.^[13]
- Por lo general, reprimir tu frustración y sentimientos te hará explotar o expresar tus emociones de formas inapropiadas.^[14]
- Procura comunicarle a tu pareja lo que te molesta de una manera respetuosa y tranquila. Evita gritarle, abusar de ella o culparla.
- Si tu pareja te ha engañado o lastimado de alguna manera, podrías considerar estos actos como diferencias irreconciliables que no merecen que expreses tu frustración o que le des la oportunidad de cambiar.
6
Establece un plazo razonable para lograr el cambio. Es necesario que evites quedar atrapado en una cadena interminable de esperanza en el cambio de tu pareja para luego sufrir una decepción. Establecer un tiempo límite para que tu pareja cambie puede ayudarte a facilitar tu decisión a largo plazo.
- Tienes la opción de decirle a tu pareja acerca de dicho plazo. Emitir un “ultimátum” al decir “Si dejas de fumar para el próximo mes, podremos seguir juntos” puede hacer que las parejas llegar a un acuerdo en el corto plazo antes de retomar las viejas costumbres en un futuro cercano.
- Asegúrate de que el ultimátum sea de utilidad. En la mayoría de los casos, los ultimátums no funcionan, pero podrían ser necesarios para seguir manteniendo la relación. Por ejemplo, puedes decir algo como “Para que esto funcione, necesito ver que te esfuerzas por dejar de fumar o reducir tu hábito de manera significativa”. Dar ultimátums como “Es necesario que desees tener hijo” probablemente nunca funcione y solo provoque daño y sentimientos de culpa.^[15]
- A algunas personas puede tomarles mucho tiempo cambiar los comportamientos arraigados desde hace mucho. Por ejemplo, a los fumadores puede tomarles meses o años dejar este hábito. Por ello, dale a tu pareja el tiempo para que realice un esfuerzo coordinado para modificar tu comportamiento.
7
Recurre a una persona de confianza. Si tienes dificultades para aclarar las cosas, habla de tus sentimientos con una persona de confianza. Esto te permitirá expresar tus sentimientos y aclarar tu posición de una manera más eficaz. Esta persona de confianza probablemente también pueda añadir un poco de perspectiva al comportamiento de tu pareja.^[16]
- La persona de confianza puede ser un amigo, un familiar, un consejero o un profesional de la salud.
- Asegúrate de que la persona no traicione tu confianza y discute el problema con algún tercero. Tal vez debas asegurarte de que esta persona tampoco trate a tu pareja de una manera distinta.^[17]
8
Expresa tu decisión final. Después de haber considerado las diferentes dinámicas de tu relación, haberlas discutido con tu pareja y haberle dado a la relación una segunda oportunidad (si es posible), toma una decisión final acerca de su futuro.^[18] Esto puede ayudarte a seguir adelante y planificar una ruptura respetuosa y honesta con tu pareja o a enfocarte en curar más tu relación.^[19]
- Recuerda que tu decisión debe basarse en lo que es mejor para ti y no para alguien más.^[20]
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Parte 2 de 2: Terminar la relación

1
Fija un tiempo para hablar sobre la ruptura. Es mejor y más respetuoso terminar la relación en persona y expresar tus razones. Fijar un tiempo en un lugar tranquilo que les permita tanto a ti como a tu pareja estar a solas puede ayudar a que el proceso sea más sencillo y minimizar las interrupciones indiscretas.^[21].
- Considera la posibilidad de fijar un momento que no sea durante la semana laboral o escolar para darle a la otra persona la posibilidad de llorar la relación en privado sin tener que ver a los demás inmediatamente.^[22]
- Tal vez quieras darle una pista a tu pareja sobre la naturaleza de la conversación para que pueda prepararse y no sentir que la toman por sorpresa.^[23] Por ejemplo, puedes decir algo como “Me gustaría hablar sobre el estado de nuestra relación de una manera tranquila y pacífica”.
2
Elige un lugar adecuado para la ruptura. Probablemente quieras tener la conversación en privado para evitar el riesgo de avergonzarte a ti o a la otra persona. Además, elige un lugar del que puedas salir con facilidad para que no termines inmerso en una conversación prolongada o tortuosa.^[24]
- Si no te sientes a salvo estando al lado de tu pareja, rompe la relación en un lugar público o lleva a alguien que pueda respaldarte sin generar una confrontación.
- Si tú y tu pareja viven juntos, la ruptura puede ser especialmente problemática y estresante. Depende de ti si quieres mudarte inmediatamente o tomarte tu tiempo.
- Si no te sientes a salvo o te sería incómodo quedarte en casa que compartes con tu pareja, asegúrate de contar con un lugar donde puedas quedarte. Puedes mover todas tus pertenencias mientras tu pareja no está en casa y luego romper con ella cuando llegue o incluso romper y salir de ahí con algunas de tus cosas, con la intención de volver cuando las cosas se hayan calmado.
3
Planifica la conversación de la ruptura. Considera lo que quieres decirle a la persona. Tener un plan básico de tu conversación puede minimizar las emociones excesivas y ayudarte a mantener el rumbo. También puede ayudarte a no lastimar a la persona más de lo necesario.^[25]
- La conversación real en la que rompas con esta persona puede durar mucho más de lo necesario, sobre todo si tu pareja se siente devastada o completamente sorprendida por tu decisión. Muchas conversaciones pueden ser repetitivas, así que considera la posibilidad de darle un tiempo límite.^[26]
- Sé honesto con la persona sin llegar a ser cruel o despiadado. Tal vez debas considerar la posibilidad de decirle lo primero que te atrajo o resaltar algunas de sus cualidades buenas mientras discutes la razón por la que no deseas continuar con la relación.^[27]
- Por ejemplo, puedes decir “Lo que realmente me atrajo fue tu personalidad extrovertida y tu amabilidad cuando nos conocimos, pero temo que tenemos metas diferentes en la vida que nos impiden continuar como pareja”.
4
Rompe la relación en persona. Si bien puede ser más fácil hacerlo sin tener que mirar cara a cara a la persona, terminar una relación por teléfono, mensaje de texto o correo electrónico es un método impersonal además de una falta de respeto. A menos que se encuentren separados a una larga distancia y no quieras esperar hasta volver a ver a esa persona o que tengas miedo de la otra persona, es necesario que le des el respeto que se merece.^[28]
- Romper en persona también puede ayudar a que tu pareja se dé cuenta de que en verdad quieres terminar la relación.^[29]
5
Mantén la compostura y el respeto. Siéntate con tu pareja y dile que has decidido ponerle fin a la relación. Aborda la ruptura de la manera más calmada y respetuosa posible teniendo un sentido de resolución que pueda ayudarte a hacer que una mala situación parezca un poco menos negativa y devastadora.^[30]
- No hables mal de la persona o digas cosas de las que podrías arrepentirte. Recuerda que esto puede regresar a ti y lastimarte a largo plazo.^[31] Por ejemplo, no debes decir algo como “Creo que tu higiene personal es terrible y me desagrada estar contigo”. En lugar de eso, puedes decir algo como “Creo que tenemos estilos de vida diferentes que no son compatibles”.
- Si es posible, evita que las emociones te invadan demasiado. Esto puede ayudarte a minimizar los sentimientos de culpa que puedas tener así como a mantenerte firme en tu decisión.^[32]
- Puedes decir “Creo que eres una buena persona con muchas cualidades realmente buenas que harán feliz a alguien, pero no son compatibles con lo que busco en una relación”.
6
Enfócate en los problemas de la relación en lugar de en la persona. Habla de los aspectos de la relación que no funcionan para ti en lugar de decirle a la otra persona lo que anda mal con ella. Hablar de ella a un nivel personal puede empeorar aún más una situación probablemente devastadora.^[33]
- Por ejemplo, en lugar de decir “Eres una persona pegajosa e insegura”, di “Necesito mucha independencia y libertad en mis relaciones”.^[34]
- Tampoco condiciones las razones de la ruptura a la otra persona. Por ejemplo, si dices “Mereces algo mejor”, le das a tu pareja una oportunidad para decir que eres perfecto para ella y que no hay ninguna razón para separarse.^[35] En lugar de eso, puedes decir “Siento que seguimos rumbos distintos en la vida. Quiero estudiar una profesión en una academia que me exige viajar mucho y pasar tiempo a solas”.
7
Evita darle falsas esperanzas. Existen algunas frases y palabras abiertas que pueden darle a la persona falsas esperanzas de retomar la relación. Dejar la posibilidad abierta solo lastimará más a ambos.^[36]
- Decir cosas como “Hablaremos después”, “Quiero que seamos amigos” o “Quiero tenerte en mi vida” deja abierta la disponibilidad para que la persona anhele que las cosas salgan bien al final, aun cuando no será así para ti.^[37]
- Necesitarás decirle amablemente que no puedes entablar ningún contacto en el futuro. Tal vez quieras decirle que es lo mejor para que ambos puedan recuperarse.^[38]
- En caso de que quieras mantener la amistad, fija los parámetros en tu conversación. Ambos podrían darse cuenta de que la ruptura es lo mejor para la relación. Sin embargo, sé muy claro con lo que esperas y necesitas de la amistad.
8
Anticipa la reacción de tu pareja.^[39] Prepárate para contrarrestar los argumentos, las reacciones y los arrebatos de tu pareja. Esto puede ayudarte a mantenerte fiel a tus decisiones y podría minimizar la manipulación potencial de la otra persona. Prepárate para lo siguiente:
- Preguntas: lo más probable es que tu pareja quiera saber la razón por la que no quieras continuar la relación y si hay algo que podría haber hecho para evitar la ruptura. Responde a las preguntas con la mayor honestidad posible.^[40]
- Llanto: tu pareja podría sentirse muy molesta y demostrarlo. Puedes ofrecer consuelo, pero no permitas que te manipule para cambiar tu decisión.^[41]
- Discusión: tu pareja podría discutir todo lo que has dicho durante la ruptura, incluyendo el análisis de los ejemplos que utilizaste para explicar tus razones. No te arrastrar hacia una lucha sobre los detalles insignificantes que no importen en el panorama general. Indícale a tu pareja que discutir no cambiará tu decisión. Si intenta hacerlo, simplemente puedes decirle “No me dejaré involucrar en una discusión y me iré si sigues así”.
- Negociación o ruegos: tu pareja podría ofrecerse a cambiar o a hacer las cosas de manera distinta para continuar con la relación. Si no ha cambiado cuando discutiste los problemas anteriormente, es demasiado tarde para que pretenda cambiar en este momento.
- Agresiones: tu pareja podría decir cosas hirientes e irritarte como una forma de hacerte sentir mejor. Por ejemplo, si tu pareja te pone un nombre desagradable, simplemente reconócelo y sigue adelante. Puedes decirle “Puedo ver que estás muy enojada conmigo, pero no toleraré que me llames así, así que creo que es necesario ponerle fin a esta conversación”. Las amenazas físicas son algo serio, así que si esta persona recurre a ellas, aléjate inmediatamente.
9
Toma distancia. Esta es una de las partes más difíciles pero importantes de una ruptura. Intenta minimizar el contacto con tu expareja y con sus amigos a fin de minimizar los sentimientos de culpa y darle falsas esperanzas.
- Si tienes hijos con esta persona, tal vez no puedas distanciarte de ella por completo. Mantén la relación lo más civilizada posible y prioriza el bienestar de tus hijos.
- Quizás sea útil borrar su número telefónico y la dirección de correo electrónico.
- Si viven juntos, múdate lo más pronto posible. Si no puedes mudarte de manera permanente, busca un lugar donde puedas guardar tus cosas y en donde puedas quedarte. Prolongar el tiempo en que tus cosas permanezcan en el lugar que solías compartir con tu pareja puede hacer que el proceso sea demasiado complicado.
- Al cabo de un tiempo, probablemente descubras que puedes mantener una amistad con esta persona. Si ese es el caso, asegúrate de establecer los parámetros para la amistad y cualquier relación futura.
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Consejos

Si sabes a ciencia cierta que quieres romper con alguien, es mejor hacerlo pronto en lugar de retrasar las cosas. Sin embargo, si tu pareja ya ha tenido un día particularmente malo, tal vez debas considerar la posibilidad de esperar un mejor momento. Romper con una persona que ya está deprimida hará que la ruptura sea mucho más difícil para ambos.
Nunca rompas en un momento acalorado. Si la relación ya está rota sin posibilidad de remediarse, eso no cambiará una vez que la discusión termine y la ira haya disminuido. Termina la relación cuando ambos estén calmados y hablen de manera pacífica. Es en ese momento cuando tienes la mejor oportunidad de ponerle un fin a las cosas.

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Advertencias

Siempre toma con seriedad las amenazas físicas y las relaciones violentas. Si es posible, aléjate de la situación o ponte en contacto con las autoridades respectivas en caso de que sea necesario.