En algún momento de tu vida, te verás en la situación de que tú o alguien que conoces necesite comer sin masticar. Esta restricción puede deberse a una cirugía en la mandíbula o en la boca, a una cirugía gastrointestinal, a la extracción de las muelas del juicio, a un tratamiento de ortodoncia recién ajustado, o a problemas para deglutir (llamado también disfagia). Seguir una dieta blanda no quiere decir que la dieta sea insípida ni que sea un gran esfuerzo. Lo más probable es que pronto puedas comer comida sólida nuevamente.

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Pasos

  1. Imagen titulada Protein shake 5123
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    Comprende tus restricciones, tanto lo que puedes como lo que no puedes comer, y por qué tu dieta es limitada. Por ejemplo, si un médico prescribe algún tipo de dieta líquida o blanda por algún estado de salud o por alguna cirugía, quizás las restricciones sean mayores que si la dieta blanda es recomendada por una dificultad al masticar. Por supuesto, siempre sigue las recomendaciones de tu médico, pero conocer tus restricciones específicas te permitirá ser más creativo dentro de ellas.
    • Conoce la duración de tu dieta restringida.
    • Averigua si existen comidas específicas que debes evitar.
    • Averigua si puedes "masticar" sin peligro comidas blandas aplastándolas bien entre tu lengua y la parte superior de tu boca.
    • Averigua si puedes comer alimentos sólidos hechos puré o aplastados.
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    Comienza con los fundamentos de una dieta de líquidos claros. Un médico puede ordenar una dieta de líquido claro (o fluidos claros) en el caso de laceraciones o incisiones en la boca, un sistema digestivo comprometido, u otras razones. Un médico que ordena esta dieta también te debe decir por cuánto tiempo estarás limitado a líquidos claros. Una dieta de líquidos claros está limitada a líquidos a través de los cuales puedes ver, tales como el jugo de manzana y otros jugos libres de pulpa, postres como la gelatina (aunque sea sólida estando a temperatura ambiente), gaseosas claras, té y caldos. Los trozos de hielo y otros tipos de postres de hielo también pueden ser fluidos claros, siempre y cuando no estén hechos con pulpa ni sean sorbetes (sherbet).
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    Añade "fluidos completos" apenas sea apropiado hacerlo. Los fluidos completos pueden incluir los sólidos en suspensión así como todos los elementos que son líquidos claros. Si puedes ingerir fluidos completos, puedes ingerir la mayoría de los suplementos nutricionales líquidos como la leche, malteadas, yogur (bien mezclado y sin trozos de fruta, cereales calientes suaves, tal como la avena), jugos con pulpa y pudín.
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    Busca alimentos que de por sí sean suaves. Los cereales calientes y suaves, tales como la avena, las sopas hechas crema o coladas, la compota de manzana, los batidos con leche, papa o camote aplastado, los huevos revueltos, la natilla, el requesón y muchos otros alimentos son lo suficientemente blandos para comerlos sin masticarlos.
  5. Imagen titulada Blender! 1145
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    Usa tu licuadora y tu tenedor para que mastique por ti. Corta la pasta blanda en pedazos pequeños con un tenedor. Tritura una sopa con sólidos y mira lo que obtienes. Aplasta un poco de ensalada de patatas o colócala en la licuadora. Aplasta o tritura solo los contenidos de un burrito o unos frijoles refritos.
    • Está bien dejar algunos trozos pequeños, siempre y cuando puedas tragarlos sin masticarlos.
    • Las licuadoras funcionan mejor con suficiente líquido. Si la ensalada de patatas se pega a las paredes de la licuadora y no se mueve, añade un poco de leche, yogur, agua o crema agria. Intenta agregar líquidos con sabores que sean compatibles con lo que vas a licuar. Utiliza caldo, agua, salsa barbacoa o salsa de tomate para carnes. Añadir líquido también ayudará a ingerir los alimentos por medio de un sorbete.
    • Algunos alimentos quedan mejor que otros al ser licuados. Si no estás seguro, prueba con una cantidad pequeña para ver qué sucede.
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    Cocina los alimentos hasta que estén blandos. El apio y las zanahorias frescas y crujientes tienen que ser masticados, pero el apio y las zanahorias cocinados en una sopa pueden ser lo suficientemente suaves para aplastarlos entre la lengua y la parte superior de tu boca. Definitivamente pueden pasarse por una licuadora.
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    Disuelve los alimentos. Si no puedes comer pan porque no puedes masticarlo, quizás en lugar de eso podrías comer pudín de pan o panqueques con bastante jarabe.
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    Come una variedad de alimentos hasta donde tu dieta lo permita y sé creativo. Cualquier fruta o vegetal cocido puede ser triturado hasta el punto en que no necesites masticarlo. También se puede hacer eso con varios platos de fondo. Ten como objetivo ingerir una mezcla balanceada de almidón, proteínas, frutas, verduras, grasas y, de vez en cuando, algo dulce así como lo harías si estuvieras masticando.
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    Come postre. Muchos postres tienen bastantes calorías, así que si te preocupa no estar consumiendo las suficientes calorías, haciendo esto puedes obtener un poco más de ellas.
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    Evita las cosas muy chiclosas. Puedes moler atún o pollo sancochado lo suficiente para comerlos sin masticar, pero probablemente un bife no sea una buena opción mientras estés en una dieta líquida o si recién sales de una.
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    Adopta medidas para agregar calorías si es necesario hacerlo.
    • Come pequeñas cantidades de comida más frecuentemente.
    • Usa leche entera, productos lácteos y crema.
    • Agrega proteína en polvo, suplementos en polvo, leche en polvo o incluso jarabe de chocolate a los alimentos.
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    Presta atención a tus dientes mientras comas una dieta blanda o líquida. Los alimentos crujientes y crocantes sirven para ayudar a limpiar los dientes y estimulan el tejido de la encía. Consúltale a tu médico o dentista si debes probar lavándote los dientes o, en caso eso falle, enjuagarte la boca con agua y enjuague bucal después de comer.
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Consejos

  • Conforme tu dieta vaya siendo menos limitada, haz la transición lentamente. Comienza con porciones pequeñas de alimentos que se parezcan a los que has estado comiendo y crea así un respaldo hacia una dieta menos limitada.
  • Los problemas para deglutir deben ser evaluados por un médico u otro especialista, por seguridad. Alguien que tiene problemas para deglutir puede aspirar o inhalar alimentos y líquidos especialmente ralos.
    • Los espesantes están disponibles para mezclarlos con líquidos ralos con el fin de espesarlos hasta que tengan la consistencia de un "néctar" o "miel" y que sean más fáciles para tragar.
    • Una evaluación de la capacidad para deglutir puede resultar en recomendaciones tales como una determinada posición del cuerpo y de la cabeza (generalmente sentarse derecho, con el mentón hacia abajo, si fuera posible) y la recomendación de evitar el uso de sorbetes. Consulta y pide una demostración si no entiendes estas recomendaciones.
  • Conversa con un médico o nutricionista si no estás seguro sobre lo que puedes o debes comer bajo ciertas circunstancias. Si te has sometido a algo como una cirugía o ajuste de ortodoncia, el médico que lo hizo podrá aconsejarte sobre lo que debes y lo que no debes comer, o referirte a alguien que pueda hacerlo.
  • Si normalmente comes carne, intenta incluir un poco de carne en tu dieta apenas puedas hacerlo. Las dietas con o sin carne se pueden seguir de manera segura, pero cambiar de una dieta que no incluye carne a una que sí la incluye, luego de un periodo de tiempo, puede ser duro para la digestión.
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Advertencias

  • No todos estos alimentos son apropiados para todas las dietas. Comprende tus propias restricciones y conversa con tu médico si tienes dudas al respecto.

Acerca del artículo

Categorías: Programas de dieta