Cómo soldar el aluminio

Soldar aluminio es un proceso único que requiere de soldaduras y procesos para lograr una unión sólida. Debido a que el aluminio se está utilizando cada vez más en la industria electrónica, hay más oportunidades para soldar aluminio con aluminio y aluminio con cobre. Romper la capa de óxido por agitación y adición de fundente es una clave para soldar exitosamente, especialmente en el caso del aluminio, el acero inoxidable y las piezas niqueladas. Es importante seguir estos pasos en una secuencia oportuna e ininterrumpida de 1-2-3… De otra manera, la capa de óxido fuerte puede enderezar y entorpecer la unión soldada. De manera que asegúrate de tener todas las herramientas y provisiones montadas y listas antes de comenzar.

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Pasos

1
En el caso de algunas juntas de superficie grandes y difíciles de soldar, puede ser extremadamente útil pre-estañar la zona de la unión en cada pieza con la soldadura antes de prepararte para unir las piezas. Simplemente sigue los pasos a continuación para cubrir el área de unión de cada pieza con una capa uniforme de soldadura. Luego de que las piezas se hayan enfriado, sigue los pasos nuevamente para unirlas. La regla del 1-2-3 también se aplica aquí. No pre-estañes un día y sueldes al día siguiente. Es importante tener una superficie fresca y libre de óxido para el éxito de la soldadura. Pre-estañar las piezas con la soldadura adecuada puede mejorar enormemente las uniones en los metales difíciles de soldar y en las piezas de superficie grande.

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2
Haz una pre-limpieza del metal o metales precursores que vas a unir. Prepara las superficies de aluminio con un cepillo de alambre de acero inoxidable. El secreto para soldar aluminio es romper la resistente capa de óxido de aluminio. Estas barreras se vuelven a formar rápidamente, así que agita, haz la adición de fundente y suelda en una secuencia rápida.
3
Aplica el fundente para soldaduras de aluminio adecuado para romper la barrera de óxido y meter la soldadura en la zona de unión o de reparación. Podrías usar fácilmente una varilla de soldadura para extender el fundente.
4
Usa una llama blanda, una pistola de aire caliente o un soldador para calentar el metal precursor adyacente al área de reparación. Es probable que una llama directa en el área de reparación recaliente la soldadura y el fundente. Si vas a utilizar un soplete, sujeta la punta del soplete a 10 o 15 cm (4 a 6 pulgadas) del metal precursor. Si es necesario aplicar la llama directamente a la varilla o al fundente, jala la punta del soplete alejándola incluso de la superficie de trabajo y sigue moviéndola.
5
El fundente comenzará a burbujear y a volverse marrón claro. Aparte de preparar el metal precursor para la soldadura, estos cambios indican la temperatura de trabajo adecuada para el fundente. Si el fundente se pone negro, deja que el área se enfríe, límpialo y vuelve a empezar.
6
Cuando el fundente burbujee y se ponga marrón, es hora de aplicar la varilla. Arrastra la varilla por el área que vas a soldar, hasta que comience a fluir. Una vez que la soldadura empiece a fluir, retira el calor. Si se necesitaran capas adicionales, sigue arrastrando la varilla por el área. Con algunas aplicaciones, por ejemplo con alambres muy delgados, puede ser útil estañar la superficie de aluminio con la varilla antes de soldar y unir las piezas. En este caso, sigue los pasos del 1 al 5 para aplicarle una capa uniforme de soldadura a las piezas de aluminio. Deja que estas piezas se enfríen y luego sigue los pasos del 1 al 5 nuevamente, soldando y uniendo las piezas. Con frecuencia esto resulta en una unión soldada más consistente para piezas pequeñas.
7
Observa el depósito para soldadura. La soldadura debe unirse de manera uniforme.
8
Retira e exceso de fundente con agua tibia y un cepillo de alambre. Los residuos de fundente son ácidos y SIEMPRE se deben retirar, incluso los fundentes “No Limpios”.

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Consejos

A veces es necesario calentar la punta de la varilla con la llama para ayudar a que la soldadura fluya más fácilmente en la zona de reparación. Sé precavido al calentar la varilla ya que si se recalienta, la soldadura no se unirá.
No recalientes. La varilla se derretirá si se recalienta, pero no unirá adecuadamente.
No calientes directamente la soldadura ni el fundente. Aplica calor del lado opuesto del área de unión/ fundente.
Si dejaste de soldar y quieres aplicar más soldadura o dejar fluir más del depósito, déjalo enfriar un poco, añade más fundente y vuelve a calentarlo. El fundente ayudará al proceso de unión, ya sea agregando más soldadura o solo haciendo que fluya del depósito previo.

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Advertencias

No recalientes. La varilla se derretirá si se recalienta, pero no unirá adecuadamente. (En realidad no se puede enfatizar esto lo suficiente. Soldar es un proceso de calor bajo diseñado para que las piezas electrónicas y los metales base no se dañen durante la unión.)

*Al utilizar soldadura y fundente, hazlo en un lugar bien ventilado, ya que los gases del fundente son tóxicos. Las soldaduras con plomo o cadmio también son tóxicas y solo se deberían usar en zonas bien ventiladas en aplicaciones de agua no potable.

Cosas que necesitarás

Fuente de calor: soplete de propano, pistola de aire caliente o soldador.
Soldadura de aluminio: aleaciones de estaño y zinc mojados para aluminio y cobre. El 91%Sn/9%Zn y 85%Sn/15%Zn son las dos soldaduras blandas más populares. Estas aleaciones son difíciles de encontrar en tiendas. Elige un diámetro que funcione mejor para ti. Entre los diámetros comunes están los de 125" (1/8"), .079" (2mm) y .062" (1/16"). Las soldaduras duras también están disponibles para temperaturas más altas y aplicaciones de fuerza.
Fundente de aluminio: generalmente basado en el rango de temperatura y en el metal base con el que vas a trabajar. Los fundentes de aluminio también son difíciles de encontrar en tiendas locales, es más fácil encontrarlos en línea. Lo mejor es comprar tanto la soldadura como el fundente usando la misma fuente, ya que así es muy probable que funcionen bien juntos. Los fundentes vienen en líquido, pasta y algunos en polvo.