Cómo utilizar miso
El miso es una pasta fermentada densa elaborada a base de frijoles de soya, arroz o cebada y un hongo llamado kōji. Usualmente está combinado con sal marina. El miso tiene un amplio rango de usos, desde sopas hasta estofados y puede añadir un toque especial a una comida con poco sabor. Este artículo explica cómo aprovechar el miso al máximo.
AnuncioPasos
- 1Usarlo como reemplazo de caldo o añadirlo a este. El miso puede usarse en una receta que incluya caldo, ya sea para reemplazarlo o para hacer más intenso su sabor.Anuncio
- 2Utilizarlo como reemplazo de salsa de soya, sal o pasta de anchoas. Estos ingredientes salados pueden sustituirse fácilmente por miso sin perder el toque salado.
- 3Preparar sopa. Este es el uso más común para el miso. Una versión muy simple consiste en:
- Mezcla miso con agua, añade cebolletas picadas (cebolla de verdeo), hongos y pequeños trozos de tofu. Espolvorea la sopa con un poco de pimienta. Tómala así o añade fideos udon para obtener una sopa más sustanciosa.
- 4Preparar una marinada. Agrega miso a salsas para marinar o úsalo solo.
- 5Darle sabor a la salsa de carne. Añade un par de cucharadas para mejorar el sabor de la salsa de carne.
- 6Preparar un aliño. Puedes preparar un aliño muy simple y sabroso de la siguiente manera:
- Mezcla miso con el aceite que desees, jengibre fresco rayado y ajo fresco finamente picado. Viértelo sobre ensalada.
- 7Añadir al puré de papa. Agrégale miso en vez de leche; simplemente disuélvelo en un poco de agua caliente e incorpóralo al puré. Usa miso claro para esto; sabrá delicioso.
- 8Prueba una receta con miso de wikiHow. En wikiHow puedes encontrar algunas recetas que incluyen miso: revisa los "wikiHows relacionados". Siéntete libre de añadir más recetas con miso a wikiHow.Anuncio
Consejos
- El miso puede ser de color claro u oscuro, lo cual es un indicador de la intensidad de su sabor. Los más comunes son:
- Shiromiso, "miso blanco"
- Akamiso, "miso rojo"
- Awasemiso, "miso combinado"
- Hatchomiso[1]
- El miso es muy nutritivo, además de sabroso. Contiene isoflavonoides (aproximadamente 20 mg por cada 100 g), saponinas, proteína de soya (parcialmente digerida) y enzimas vivas (solamente si se trata de miso sin pasteurizar).[2] El miso tiene un alto contenido de proteínas, vitaminas y minerales. Una cucharada de miso contiene 2 gramos de proteína y solo 25 calorías.[3]
Advertencias
- Utilízalo con moderación; el miso es alto en sodio.