Alisarte el cabello puede tomar mucho tiempo, especialmente si tu cabello es rizado, largo o grueso. Para hacer que el proceso sea más rápido, cepíllate el cabello minuciosamente después de lavarlo y secarlo. Sepáralo en secciones para evitar tomar mechones aleatorios que ya hayas alisado y usa herramientas tales como un peine de tensión para hacer que el proceso sea aún más fácil.

Parte 1
Parte 1 de 2:
Usar una plancha alisadora

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    Si tu cabello es grueso, sepáralo en secciones. Para asegurarte de alisar toda tu cabeza uniforme y rápidamente, separa tu cabello por lo menos en 2 secciones. Puedes dividirlo por la mitad o puedes sujetar la capa superior usando una horquilla o una goma para el cabello.[1]
    • Si tu cabello es muy grueso, considera separarlo en 4 secciones. Amarra la capa superior en 2 moños en la parte superior de la cabeza y luego separa la capa inferior en 2 secciones.
    • Si divides tu cabello por la mitad, simplemente puedes jalar cada lado delante de los hombros para mantenerlos en su lugar si tu cabello es más largo. Si tienes cabello corto que no llega a los hombros, usa una goma o una horquilla para mantenerlo separado en secciones.
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    Si tu cabello es muy delgado, amárralo en una cola de caballo baja. Ahorra tiempo y omite el proceso de separar el cabello en secciones si tu cabello es más delgado. Después de haberte amarrado el cabello en una cola de caballo baja, solo aprieta la plancha en la parte superior de la cola y alisa todo el largo.
    • Una vez que la cola de caballo esté lisa, suéltala y alisa la parte superior del cabello y cualquier otro bulto.
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    Ajusta la plancha a la temperatura correcta en base a la textura de tu cabello. En lugar de subirle la temperatura lo más que se pueda, toma en cuenta la textura de tu cabello al calentar la plancha alisadora.[2]
    • Si tu cabello es delgado o fino, la temperatura debe ser menor a 180 ºC (360 ºF).
    • Si tu cabello es normal a medio, ajusta la temperatura entre 180 ºC y 200 ºC (360 ºF y 390 ºF).
    • Para el cabello grueso, usa una temperatura de 200 ºC a 210 ºC (390 ºF a 410 ºF).
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    Sujeta la primera sección de 2,5 cm (1 pulgada) de cabello en la plancha alisadora. Al elegir una sección de 2,5 cm (1 pulgada) de cabello, podrás alisarlo con mucha más rapidez y eficiencia. Sujeta los mechones de cabello en la parte superior de la cabeza, aproximadamente a 1 cm (0,5 pulgadas) de las raíces.[3]
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    Usa una presión ligera para jalar la plancha rápidamente por el largo del cabello. Una vez que la hayas apretado, jala la plancha por la sección de cabello. Tensa el cabello de tal manera que se alise más rápido.[4]
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    Trabaja sistemáticamente en secciones de 2,5 cm (1 pulgada) de un lado al otro. Termina de alisar toda una sección de cabello antes de pasar a la siguiente para ahorrar tiempo. Esto evitará que alises accidentalmente los mismos mechones de cabello varias veces.[5]
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    Suelta una sección separada de cabello y repite el proceso. Una vez que la sección suelta esté lisa, muévela detrás de los hombros. Suelta la siguiente sección y jálala delante de los hombros. Repite el proceso alisando secciones de 2,5 cm (1 pulgada) de cabello.[6]
    • Poner secciones de cabello ya alisadas detrás de los hombros evitará que se mezclen con las secciones que aún no hayas alisado, lo que te ahorrará tiempo.
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    Agrega productos para reducir el encrespamiento cuando termines. Para asegurarte de que tu cabello se mantenga liso a lo largo del día, considera aplicar una laca o un producto contra el encrespamiento. Aplica el producto o la laca rociando rápidamente un cepillo y luego pasándolo uniformemente a lo largo del cabello para lograr una aplicación minuciosa.[7]
    • Asegúrate de que tu cabello se haya enfriado completamente antes de aplicar un producto.

Parte 2
Parte 2 de 2:
Acelerar el proceso

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    Primero lávate el cabello con champú y acondicionador. El cabello limpio es más fácil y rápido de alisar. Usar un acondicionador junto con el champú hará que el cabello esté más suave y sedoso, lo cual hará que el proceso de alisado sea mucho más rápido.[8]
    • Usa un champú y acondicionador alisadores para ayudar a alisar el cabello y hacer que el proceso de planchado sea aún más fácil.
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    Sécate el cabello completamente antes de usar una plancha alisadora. Si tu cabello está húmedo mientras usas una plancha alisadora, no solo lo dañarás, sino que también te tomará mucho más tiempo alisarlo. Para secarte el cabello rápidamente, usa un secador con la boquilla apuntando hacia abajo.[9]
    • Los secadores pueden dañar el cabello; siempre mueve la boquilla de un lado para otro al secarte el cabello, nunca apuntándola directamente a un mechón.
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    Cepíllate el cabello minuciosamente antes de usar la plancha alisadora. Si tu cabello no está cepillado de antemano, terminarás con bultos o ángulos dentados en donde la plancha haya pasado sobre cabello apuntando en direcciones diferentes, lo que desacelerará el proceso de alisado. Tómate tu tiempo para cepillarte o peinarte el cabello para desenredar cualquier nudo o maraña antes de alisarlo con el fin de obtener mejores resultados.
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    Usa un peine de tensión para hacer que el proceso sea más rápido. Los peines de tensión (también llamados peines de alisado) peinan el cabello y lo separan uniformemente por ti a medida que lo alisas.[10] Si tu cabello es medio o grueso, un peine de tensión es una herramienta ideal para alisarlo.
    • Usa una mano para insertar un mechón de cabello en el peine de tensión y ciérralo comenzando en la parte superior de este.
    • Con la otra mano, comenzarás a alisar el mechón, jalando tanto el peine de tensión como la plancha alisadora por la sección de cabello.
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    Invierte en una herramienta que seque tu cabello a medida que lo alise. Existen varias herramientas para el cabello en el mercado que están diseñadas para secar y alisar el cabello al mismo tiempo. Busca en línea si alguna de estas herramientas es adecuada para ti.
    • Estas herramientas incluyen un cepillo que también actúa como un secador de cerámica y secadores de cabello con tecnología de iones negativos.

Consejos

  • Siempre aplica un protector térmico al cabello antes de alisarlo.
  • Usa una temperatura apropiada para tu tipo de cabello y nunca te pases de 230 ºC (450 ºF) o tu cabello se quemará.
  • Cuando llegues a las puntas del cabello, voltea la plancha alisadora hacia dentro, lo que hace que tu cabello se vea liso y elimina la apariencia de puntas abiertas.
  • Elige una plancha alisadora de cerámica antes que una metálica; causará menos daño a tu cabello.

Advertencias

  • Mantén los dedos alejados de la parte caliente de la plancha alisadora.
  • Desconecta la plancha alisadora una vez que hayas terminado de usarla para prevenir un peligro de incendio.
  • No te alises el cabello todos los días para evitar daños permanentes.

Cosas que necesitarás

  • alisador de cabello
  • protector térmico
  • cepillo
  • horquillas para el cabello
  • secador de cabello (opcional)
  • peine (opcional)
  • laca o producto contra el encrespamiento (opcional)

Acerca de este wikiHow

Ashley Adams
Coescrito por:
Estilista profesional de cabello
Este artículo fue coescrito por Ashley Adams. Ashley Adams es una cosmetóloga y estilista licenciada en Illinois. Completó su educación en Cosmetología en la Escuela de Diseño de Cabello John Amico en 2016. Este artículo ha sido visto 308 874 veces.
Categorías: Cabello liso