Un terreno puede aprovecharse de varias formas, desde construir una casa hasta convertirlo en un lugar para cultivo, depende de varios factores como la superficie, la ubicación, el presupuesto con el que cuentes y la legislación local, a todo esto tienes que sumarle tus intenciones. Así es que, si piensas adquirir un terreno con algún motivo específico, analiza si cuentas con lo necesario para realizar tu proyecto en este.

Parte 1
Parte 1 de 2:
Conocer las posibilidades del terreno

  1. 1
    Revisa el uso de suelo y la legislación. Actualmente todos los terrenos tienen una clasificación de acuerdo al uso que le puedes dar, para empezar ubica si el predio está en zona urbana, agrícola o en algún ejido ya que, los terrenos que se encuentran en zona urbana tienen más restricciones.
    • Si el terreno está dentro de una ciudad, se considera zona urbana, revisa el tipo de edificación permitida, ya sea habitacional, comercial, equipamiento y algunas mixtas. Revisa los planes de uso de suelo. [1]
    • Otras restricciones importantes son la cantidad de pisos permitidos sobre el nivel del suelo y la altura máxima de cada uno de ellos.
    • Si vas a construir deberás dejar área libre y área permeable, la primera es el espacio sin techar pero que puede se puede pavimentar, la segunda es la cantidad de terreno que debe permitir la filtración de agua de lluvia.
    • En algunas legislaciones te permiten cambiar el uso de suelo de tu terreno, consulta esto con tu ayuntamiento o delegación local.
  2. 2
    Investiga las características del suelo. Así conocerás el tipo de material que se encuentra en el terreno, además de sondear la ubicación de agua subterránea para la creación de pozos. Acude a un laboratorio especializado en estudios de mecánica de suelos para que ellos te den información más exacta.
    • El estudio te debe arrojar datos como la cantidad de toneladas que resiste el suelo y la composición de materiales.
    • Busca a un topógrafo para que te haga un plano del terreno, en éste te indicarán las medidas del perímetro, área y orientación. También conocerás si hay montañas y zonas completamente planas.
  3. 3
    Estudia la infraestructura de la zona. Este es otro factor importante, pues el tipo y calidad de la infraestructura limita las actividades que se pueden realizar, además de que en un mundo donde es importante mantenerse comunicado, la falta de infraestructura puede ser un problema.
    • Busca que tu terreno esté conectado a través de la red de autopistas y carreteras, si está fuera de la ciudad, si está dentro de ésta, que las calles sean accesibles, .
    • Tener conexión al servicio de enrgía eléctrica, internet y agua potable es básico. Hoy en día hay tecnologías ecológicas que pueden sustituir una parte de esto, pero no completamente.
    • La red de drenaje también es un punto importante, aunque en este caso se puede reemplazar con una fosa séptica.
  4. 4
    Conoce las necesidades locales. El qué hacer en el terreno también depende de para quién. Para ello debes entender tus necesidades y las de la gente que te rodea, así sabrás perfectamente los potenciales del terreno. Basta con que recorras un poco los alrededores del predio y veas si habitan familias o personas que laboran en oficinas o fábricas. Un radio de 1 kilómetro es adecuado para esta inspección.
    • Si lo quieres para construir tu vivienda, verifica que sea una zona segura y lejos de industria contaminante.
    • Para hacer algo de tipo comercial o vivienda masiva, te conviene estar en zonas cercanas a oficinas, escuelas y centros comerciales, ya que muchas de las personas que trabajan en esas oficinas aprovecharán tu edificación.
    • En zonas agrícolas es deseable que el terreno esté cerca de alguna población, así las personas de ésta pueden tener acceso en caso de que quieran trabajar contigo.
    • Existen los parques industriales para quienes buscan tener una fábrica y oficinas, estos ya cuentan con su propia infraestructura.

Parte 2
Parte 2 de 2:
Construir o lotificar en el terreno

  1. 1
    Realiza un proyecto. Una vez que sepas qué es lo que quieres, es tiempo de que te acerques a un profesional para realice tu proyecto. Él te podrá asesorar de tal forma que aproveches todo el potencial del terreno, además de ayudarte para que el costo esté de acuerdo a tus posibilidades.
    • Si buscas casa habitación basta con que contrates a un arquitecto, él se puede encargar de todos los aspectos.
    • Para proyectos complejos requerirás de varios especialistas, acude a una constructora o a una oficina especializada en el rubro que buscas.
  2. 2
    Revisa tu proyecto. Este deberá cubrir 5 aspectos básicos, solamente así tendrás el panorama completo de lo que debes hacer. Revisa que te entreguen todo en versiones impresas y digitales, las impresas deberán estar firmadas por el especialista en la materia, así avalas delante de la autoridad la validez de tu proyecto.
    • En los planos arquitectónicos podrás ver el tamaño de los espacios y la forma de estos.
    • Las ingenierías especifican la forma de las conexiones eléctricas, agua, drenaje, gas así como telefonía e internet.
    • Los planos estructurales te indican el tipo de cimentación, la ubicación de las columnas, muros de carga y todo lo que mantenga en pie al edificio.
    • En algunos casos existen las instalaciones especiales, que describen elevadores, aire acondicionado y calefacción, además de tuberías que transporten gases y líquidos en el caso de hospitales.
    • El presupuesto es parte del paquete que te deben entregar en tu proyecto, así sabrás cuanto debes gastar y el tiempo que durará tu obra.
  3. 3
    Haz un estudio de impacto ambiental. Una de las preocupaciones de hoy en día es el tema del calentamiento global y la forma de reducir la contaminación producto de nuestras actividades. El estudio de impacto ambiental te indicará qué tanta flora o fauna podrás afectar, sin que esto comprometa el equilibrio del ecosistema local.[2]
    • Haz un levantamiento de todos los árboles y arbustos existentes, así sabrás cuáles tendrás que reubicar y cuáles si podrás talar. Este debe estar avalado por un biólogo.
  4. 4
    Consigue los permisos correspondientes. Por lo general las zonas urbanas tienen más restricciones que zonas agrícolas y ejidales. Esto lo puedes conocer acudiendo a tu ayuntamiento o delegación local, la información también está presente en internet. Lo que debes conocer con respecto a permisos es lo siguiente:
    • Formato de solicitud para el permiso de construcción y la vigencia de éste.
    • Aranceles que debes cubrir por concepto del permiso para construir.
    • Firmas tanto de especialistas como de autoridades locales necesarias.
    • Permiso de demolición en caso de que haya una construcción existente.
  5. 5
    Inicia la construcción. Una vez que tienes autorización del gobierno local, puedes iniciar con los trabajos constructivos, es importante que hagas preparativos previos para que las personas que viven cerca, no sean un factor que entorpezca la obra.
    • Haz una junta vecinal y explica tu proyecto.
    • Pon señalamientos de seguridad alrededor de la zona de construcción, así las personas conocerán los espacios seguros para transitar.
    • Coloca en un lugar visible una manta que indique el tipo de proyecto y su duración, así como el nombre de la persona responsable.
    • En algunos casos, cuando acabes tu proyecto tendrás que notificar la terminación en tu ayuntamiento o delegación correspondiente.
  6. 6
    Lotifica tu terreno. Dada la magnitud del proyecto, busca a un urbanista para que realice este trabajo, él te indicará el tipo de lotificación adecuada, orientación y tamaño de los lotes, además de la infraestructura que deberás proveer en caso de que no exista. Para ello revisa las normas de desarrollo urbano locales.[3] #* Cuando lotificas debe haber espacios dedicados a vivienda, comercio y otros para recreación y educación, el urbanista deberá conocer los porcentajes dedicados a cada uno de estos rubros.
    • Procura que haya fuentes de trabajo cercanas a la lotificación y que no sean industrias contaminantes, así garantizas la venta de tus lotes.
    • Es importante que hagas un estudio de impacto ambiental.

Acerca de este wikiHow

wikiHow es un "wiki", lo que significa que muchos de nuestros artículos están escritos por varios autores. Para crear este artículo, autores voluntarios han trabajado para editarlo y mejorarlo con el tiempo. Este artículo ha sido visto 18 576 veces.
Categorías: Manuales regionales