Cómo caerle bien a tu gato

Los gatos son mascotas populares en todo el mundo. Sin embargo, a veces pueden ser criaturas volubles que demuestran amor en un momento y te evitan o te arañan en otro. Al forjar una relación positiva con tu gato y al entender su comportamiento, podrás caerle bien e incluso hacer que te ame.

Parte 1

Parte 1 de 2:
Demostrar preocupación por tu gato

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Prepara espacios especiales para tu gato. A los gatos les encanta dormir, tener tiempo a solas, jugar y que los ambientes se encuentren limpios. Si preparas espacios cómodos y limpios para tu gato, lo ayudarás a relajarse y a aceptarte como su cuidador y “padre”.^{[1]
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Fuente confiable
American Society for the Prevention of Cruelty to Animals
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- Prepara una cama acogedora para tu gato. Puedes comprarle una cama muy cómoda o incluso hacerla tú mismo. Asimismo, recuerda que los gatos aman las cajas. Por este motivo, una buena solución podría ser crear una cama a partir de una caja y luego colocarle sábanas o toallas encima. Considera poner una de tus prendas en la cama del gato para que se acostumbre a tu olor.
- Asegúrate de que tu gato tenga una caja de arena nueva y limpia.^{[2]
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  Fuente confiable
  The Humane Society of the United States
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- Crea un espacio en el que tu gato pueda jugar. Por ejemplo, podrías comprar un poste rascador o contar con una caja de juguetes que el gato pueda morder o llevar de un lugar a otro. Asimismo, debes colocarlos en un área de fácil acceso en tu sala.^{[3]
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  Fuente confiable
  American Society for the Prevention of Cruelty to Animals
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- Crea otro espacio designado para sus platos de comida. Al hacerlo, alentarás a tu gato a comer en un solo lugar y le harás saber que sus comidas estarán en el mismo sitio.
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Alimenta a tu gato con regularidad. La salud de tu gato se basa parcialmente en brindarle comida saludable con regularidad. Sin embargo, también utiliza estos momentos para ayudar a establecer un vínculo con tu gato y ayudarle a amarte.^{[4]
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Fuente de investigación}
- Considera alimentar a tu gato a la misma hora todos los días. Al hacerlo, crearás una rutina y tu gato te buscará cuando llegue el momento de alimentarlo.^{[5]
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  Fuente de investigación}
- Alimenta a tu gato con una mezcla de comida húmeda enlatada y comida seca. Puedes mezclar ambos tipos de comida o colocarlos en platos diferentes.^{[6]
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  Fuente de investigación}
- No olvides darle un tazón con agua a tu gato. Asegúrate de llenar el tazón con agua fresca y limpia todos los días.^{[7]
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  Fuente de investigación}
- Muchos profesionales que se dedican a la salud felina recomiendan alimentar a tu gato en un horario específico en oposición a alimentarlo libremente, lo que puede generar que suba de peso.^{[8]
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  Fuente de investigación}
- Es mejor no alimentar a tu gato con comida para humanos, ya que esta puede causarle problemas estomacales.^{[9]
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  Fuente de investigación}
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Premia a tu gato con bocadillos. Si tu gato duda en acercarse a ti, coloca un bocadillo en tu mano, llámalo por su nombre y deja que el gato coma dicho bocadillo. Hacerlo es útil para mostrarle que puede confiar en ti y disfrutar tu compañía.
- Evita darle demasiados bocadillos a tu gato, ya que, por lo general, estos contienen una cantidad muy elevada de azúcar y podrían causar que el gato suba de peso. Si esto te preocupa, considera darle un poco de comida enlatada en lugar de un bocadillo.^{[10]
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  Fuente de investigación}
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Limpia su caja de arena todos los días. Los gatos son muy sensibles ante la limpieza, especialmente en lo que respecta a su caja de arena.^{[11]
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Fuente confiable
The Humane Society of the United States
Ir a la fuente} Limpia la caja de arena de tu gato todos los días, o más veces de ser necesario, para mantenerlo feliz y saludable.^{[12]
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Fuente confiable
The Humane Society of the United States
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- Considera comprar una nueva caja de arena cada vez que tengas una nueva mascota. Asimismo, asegúrate de que la caja sea lo suficientemente grande para el tamaño de tu gato. Esto minimizará el riesgo de que olfatee a otro gato y no quiera usar la caja.
- Las cajas de arena sucias pueden espantar a los gatos e invalidarán tus esfuerzos de intentar caerle bien a tu gato.^{[13]
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  Fuente confiable
  The Humane Society of the United States
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- Los gatos no dejar de utilizar su caja de arena por despecho. Por el contrario, se trata de una señal que evidencia que algo está mal. Determina cuál es el problema y rectifícalo lo antes posible.^{[14]
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  Fuente confiable
  The Humane Society of the United States
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- Las razones más comunes por las que un gato no usa su caja de arena es porque el gato: no ha sido castrado; no se encuentra complacido con algún detalle de su caja, tal como el tamaño o tipo de arena; se encuentra enfermo; se siente inseguro ante la presencia de otros gatos; se encuentra estresado por algo y marca su territorio.^{[15]
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  Fuente confiable
  The Humane Society of the United States
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- Si no puedes limpiar la caja de arena con regularidad, invierte en una caja de arena eléctrica, la cual limpiará los desechos de tu gato tan pronto como este termine de usarla. Puedes encontrar estos dispositivos en la mayoría de tiendas para mascotas.
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Promueve la buena salud de tu gato. Un gato saludable es un gato feliz, lo que lo hará menos propenso a agredirte o a que no le caigas bien. Además de alimentar a tu gato y limpiar su caja de arena con regularidad, permanece atento a las señales que evidencien malestar o enfermedad y llévalo al veterinario si algo te preocupa.
- No utilizar la caja de arena puede ser una señal de una infección urinaria, lo que requerirá una visita al veterinario.
- Tal como sucede con los humanos, los problemas dentales pueden ser graves y dolorosos para los gatos. Permanece atento a las señales de dificultad para comer, las cuales incluyen comer menos, pérdida de peso o comer por un solo lado de su boca.
- Los gatos también necesitan recibir vacunas contra la rabia y el distemper. Programa una cita anual con el veterinario para conseguir estas vacunas y asegúrate de que le hagan un examen completo a tu gato.
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Parte 2

Parte 2 de 2:
Pasar tiempo de calidad con tu gato

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Interactúa con él en los momentos apropiados. Tal como sucede con los humanos, a veces es mejor darle espacio a tu gato. Darle tiempo a solas para que se asee o para que duerma puede ayudarle a confiar en ti, a que le caigas bien y a entablar un fuerte vínculo con él.^{[16]
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Fuente de investigación}
- Evita mover, acariciar o jugar con tu gato mientras se asea, come, bebe o duerme. Si lo haces, podrías asustarlo, estresarlo o molestarlo, lo cual podría causar una reacción nada placentera.^{[17]
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  Fuente de investigación}
CONSEJO DE ESPECIALISTA

Pippa Elliott, MRCVS
Veterinaria del Colegio Real de Cirujanos Veterinarios
La Dra. Elliott es una veterinaria con más de 30 años de experiencia. Se graduó en la Universidad de Glasgow en 1987, y ha trabajado como cirujana veterinaria durante 7 años. Después, la Dra. Elliott trabajó como veterinaria en una clínica de animales durante más de una década.

Pippa Elliott, MRCVS
Veterinaria del Colegio Real de Cirujanos Veterinarios

Pippa Elliott, veterinaria licenciada, explica: "Menos es más en el caso de los gatos. Es mejor esperar y dejar que el gato vaya hacia ti en lugar de abrumarlo con atención".
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Sé amable y cariñoso. Siempre demuestra amabilidad y cariño cuando estés con tu gato. Esto le demuestra que puede confiar en ti. De la misma manera, esto hace posible que tu gato te busque y desee pasar tiempo de calidad contigo.
- Siempre acarícialo y tómalo en tus brazos con suavidad. No olvides que él es mucho más pequeño que tú.
- Nunca aprietes a tu gato ni jales su cola.
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Permite que tu gato se acerque a ti. Aunque quizás te sientas tentado a expresar tu amor por tu gato al seguirlo y tomarlo en tus brazos, recuerda que, a menudo, esto es algo contrario al comportamiento gatuno. Permite que tu gato se acerque a ti cuando lo desee. Al brindarle tu atención, lo ayudarás a sentirse relajado y cómodo.^{[18]
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Fuente confiable
American Society for the Prevention of Cruelty to Animals
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- Puedes enseñarle a tu gato a acercarse a ti cuando lo llamas para comer, o en otras ocasiones, con métodos simples de entrenamiento.^{[19]
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  Fuente confiable
  American Society for the Prevention of Cruelty to Animals
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- Nunca persigas a tu gato ni le levantes la voz. Esto podría no solo asustarlo en el momento, sino también en el futuro.
- Si tu gato no quiere acercarse a ti, intenta seducirlo con un bocadillo o con hojas de nébeda.
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Colócate a la misma altura de tu gato. Si te pones en cuclillas, te recuestas o te arrodillas para estar al mismo nivel de tu gato, lucirás menos intimidante. Esto podría hacer que tu gato se sienta más relajado en tu presencia y que esté más dispuesto a establecer una relación fuerte contigo.
- Te darás cuenta de que recostarte en el suelo lo atraerá hacia ti.
- Sentarte en el sofá o en una silla también es una manera de hacer que tu gato se acerque a ti de una manera cómoda.^{[20]
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  Fuente confiable
  The Humane Society of the United States
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- Debido a que a los gatos les gusta observar a otros animales más pequeños, considera recostarte o sentarte cerca de una ventana. Si lo haces, entretendrás a tu gato y podrás acariciarlo cuando se acerque.^{[21]
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  Fuente confiable
  The Humane Society of the United States
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Acaricia a tu gato. Los gatos siempre permanecen alerta y son observadores. Por este motivo, casi siempre elevan la cabeza. Acaricia y toca a tu gato de la manera en que le gusta para ayudarlo a relajarse y para caerle bien.^{[22]
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Fuente de investigación}
- Masajea el cuello de tu gato o cualquier otra área que le guste, tal como su lomo, debajo de su mentón o incluso su vientre.
- Con el pasar del tiempo, reconocerás los lugares en los que a tu gato le gusta ser acariciado. Del mismo modo, es posible que tu gato te busque para que lo acaricies en el futuro.
- Asegúrate de ser amable cuando acaricies a tu gato.
- Acaricia a tu gato para premiarlo por hacer algo bueno, tal como usar su caja de arena. Incluso podrías darle palmaditas ocasionalmente mientras colocas su nuevo tazón lleno de comida en el suelo.
- Si deseas acariciar a tu gato y él no te lo permite, estira tu mano y deja que la olfatee. Es posible que él frote su mejilla en tu mano y que se sienta más cómodo con tus caricias en ese momento.
- Si tu gato lo prefiere, permítele dormir sobre tu regazo mientras lo acaricias.
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Sé recíproco con el afecto que tu gato te demuestra. Una de las mejores maneras para caerle bien a tu gato es demostrarle afecto que no consista únicamente en los cuidados básicos. Tocarlo, acariciarlo y jugar con él ayuda a crear un vínculo de confianza y amor entre tú y tu gato. Algunas maneras comunes en las que tu gato te mostrará afecto que puedes retribuir incluyen:
- Chocar las cabezas. Esta es la manera en la que un gato saluda. Esta acción estimula las glándulas sebáceas que se ubican en la parte frontal de sus orejas, permitiéndole plasmar su olor en ti. Si él choca su cabeza con la tuya, haz lo mismo suavemente.
- Mostrarte su trasero. Tu gato podría mostrarte su trasero y levantar su cola. Esto significa que él desea que tú, su padre, lo limpies. Puedes corresponderle al soplar suavemente en su trasero. El gato asociará esta acción con tu estilo de limpieza.
- Sobarse contra ti. Esta es una señal de que tu gato está feliz y que te asocia con su madre. Permítele hacerlo tanto como quiera para ayudarlo a relajarse y a crear un vínculo entre ustedes dos.
- Lamerte. Lamerse es una manera en que los gatos establecen un olor común entre los miembros de su manada. Lamerte le permite a tu gato marcarte como su propiedad y mejorar su relación contigo.^{[23]
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  Fuente de investigación}
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Habla con tu gato. Es importante que tu gato conozca su nombre. Habla con él a menudo y llámalo por su nombre. Si tu gato maúlla, habla con él. Esto alegrará a tu gato y lo hará más propenso a buscarte cuando requiera tu atención.^{[24]
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Fuente de investigación}
- Por ejemplo, si ya casi es hora de dale de comer y tu gato empieza a maullar, puedes decirle “¿Tienes hambre, Sam?”. Luego, sigue con la conversación mientras el gato siga maullando.
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Juega con tu gato. Por naturaleza, los gatos tienen mucha energía y necesitan jugar para permanecer felices y saludables. Jugar con tu gato y brindarle juguetes estimulantes le ayudará a permanecer feliz y te permitirá caerle mejor.
- Bríndale a tu gato una variedad de juguetes, incluidos aquellos con los que pueda jugar solo, otros que requieran interactuar contigo y otros que le den la oportunidad de “cazar”. La mayoría de tiendas de mascotas te ofrecerán diferentes tipos de juguetes para estimular a tu gato.
- Cuando uses juguetes que requieran interacción contigo, tales como opciones con movimiento o colgantes, habla con tu gato y dale palmaditas por haber jugado bien.
- Dale a tu gato oportunidades para jugar. Coloca bolsas de papel sin asas o cajas alrededor de la casa. esto le permitirá explorar e investigar.
- Crea una “casa del árbol para gatos” cerca de una ventana que le permita a tu gato observar aves, ardillas u otros animales pequeños.
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Consejos

Puede tomar unos días para que el gato se acerque a ti. No te desanimes si esto no sucede de inmediato.
Si abrazas o sostienes a tu gato en tus brazos, libéralo cuando este lo desee. Abrazar a tu gato contra su voluntad podría traumatizarlo. Si un gato sabe que lo colocarás en el suelo si se retuerce, su confianza en ti crecerá.
Si tu gato te araña, asegúrate de lavar la herida con agua caliente y un jabón suave.
Si tu gato bufa en tu presencia, abandona la habitación hasta que se calme. Si es necesario que permanezcas en esa habitación, evita mirarlo o tocarlo. Asimismo, mantén una distancia saludable para ayudarlo a calmarse.
No seas tosco con tu gato, ya que esto podría causarle estrés o ansiedad y el gato podría atacarte.
Aunque esto no es muy común, a algunos gatos les gusta el tocino. Si este es el caso de tu gato, asegúrate de desmenuzarlo en pedazos muy pequeños, de modo que sean fáciles de tragar.

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Advertencias

Los juguetes con cuerdas y plumas pueden ser peligrosos o fatales para un gato si este se los traga. Usa este tipo de juguetes únicamente si el gato está bajo tu supervisión. Asimismo, asegúrate de guardarlos fuera de su alcance cuando haya terminado de jugar con ellos.

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