Enseñarle a un gato a usar el baño tiene muchos beneficios. En primer lugar, elimina los olores causados por una caja de arena y te ahorra el trabajo de limpiarla. Sin embargo, este proceso requiere tiempo, educación y paciencia. Sigue el proceso de entrenamiento de manera precisa y prepárate para experimentar posibles contratiempos.

Parte 1
Parte 1 de 3:
Prepararse para la transición

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    Designa un baño especialmente para tu gato. Si has decidido entrenar a tu gato para que use el baño, el primer paso del proceso es designar un baño donde el gato haga sus necesidades. Escoge el baño de tu casa al que tu gato pueda acceder con más facilidad. Mueve la caja de arena del gato al interior del baño y colócala cerca del retrete.[1]
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    Recolecta provisiones. Necesitas una variedad de provisiones para entrenar a tu gato para que use el baño. Tu gato pasará de usar su caja de arena regular a usar un asiento de baño de entrenamiento gradualmente hasta que finalmente utilice solo el retrete.
    • Un asiento de entrenamiento es un aparato pequeño que se coloca sobre la taza del retrete. Hay un pequeño agujero al centro del aparato, el cual debes llenar con arena para gatos desechable. Conforme veas progreso en el entrenamiento, usa agujeros cada vez más grandes en el asiento de entrenamiento hasta que tu gato se acostumbre a orinar y defecar directamente en el retrete en lugar de hacerlo en la arena. Puedes comprar un asiento de entrenamiento o confeccionar uno por ti mismo.[2]
    • Litter Kwitter es una marca conocida de asientos de entrenamiento. Este tipo de asientos tiene bandejas de diferentes colores dependiendo del tamaño. Conforme veas que tu gato progresa en su entrenamiento, debes cambiar la bandeja por una más pequeña. Tarde o temprano podrás retirar la bandeja por completo y tu gato hará sus necesidades directamente en el retrete. La marca Litter Kwitter puede ser muy útil, pero también bastante costosa. Por lo general, su precio varía entre $40 y $50.[3]
    • Si prefieres ahorrar dinero, puedes crear una bandeja de entrenamiento por ti mismo. Para esto, necesitarás cinta de tela, revestimiento de plástico o papel film para cocina y una fuente de aluminio para horno de aproximadamente 32 x 25 x 7 cm (12 5/8 x 10 1/8 x 3 pulgadas).[4]
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    Entiende cómo crear una bandeja de entrenamiento. Si eliges crear tu propia bandeja de entrenamiento, el proceso es muy simple. Debes saber cómo crear una bandeja de entrenamiento antes de hacer la transición de la caja de arena al retrete.
    • Para crear una bandeja de entrenamiento, simplemente coloca la fuente de aluminio para horno sobre el borde del retrete. Luego, asegura la fuente con cinta de tela.[5]
    • Si la bandeja no es lo suficientemente grande para cubrir la tasa del retrete por completo, cubre los vacíos con papel film.[6]

Parte 2
Parte 2 de 3:
Empezar el entrenamiento

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    Eleva la caja de arena un poco cada semana. Para lograr que tu gato pase de la caja de arena al retrete, deberás elevar la caja de arena hasta que esta alcance la altura del asiento del retrete. Tarde o temprano, tu gato aprenderá a saltar sobre el retrete cuando deba hacer sus necesidades cada semana. Con ayuda de periódicos, cartones o revistas, eleva la caja de arena aproximadamente 7 centímetros (3 pulgadas) cada día hasta nivelarla con el asiento del retrete.[7]
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    Coloca la caja de arena sobre el asiento del retrete. Una vez que hayas nivelado la caja de arena con el asiento del retrete, colócala encima de él. Déjala en el mismo lugar por un par de días. El proceso se trata de qué tan rápido se acostumbrará tu gato a hacer sus necesidades en el retrete.[8]
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    Reemplaza la caja de arena con un asiento de entrenamiento relleno de arena desechable. Una vez que tu gato se acostumbre a utilizar la caja de arena sin tener ningún accidente, es momento de empezar a usar el asiento de entrenamiento. Asegura el asiento de entrenamiento en la tasa del retrete.
    • Si utilizarás Litter Kwitter u otro producto similar, utiliza la bandeja de entrenamiento más pequeña. Esta bandeja no tiene ningún agujero y simplemente deberás llenarla con arena desechable.[9]
    • Si utilizarás una bandeja de aluminio, simplemente colócala en el lugar apropiado y llénala con arena desechable. Todavía no es momento de hacer ningún agujero en la bandeja.[10]
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    Acostumbra a tu gato a hacer sus necesidades en el retrete de manera gradual. Dale a tu gato un par de días para acostumbrarse a hacer sus necesidades en la bandeja de entrenamiento. Una vez que lo haga y no se presente ningún incidente, es momento de empezar con la transición.
    • Si utilizarás Litter Kwitter u otro producto similar, utiliza asientos de entrenamiento cada vez más grandes de manera gradual. Los agujeros de los asientos de entrenamiento serán cada vez más grandes según tu gato progrese en su entrenamiento.
    • Si utilizarás una bandeja de aluminio, usa un destornillador para hacer un agujero al fondo de la bandeja. Cada día, haz que el agujero de la bandeja sea un poco más grande.[11]
    • De igual manera, reduce la cantidad de arena que utilizas gradualmente. Cada vez que tu gato haga sus necesidades en la bandeja, reemplaza la arena con una cantidad menor.[12]
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    Retira el asiento de entrenamiento. Luego de dos semanas de incrementar el tamaño del agujero o de las bandejas de entrenamiento, puedes retirar el asiento completamente. A estas alturas, tu gato debe sentirse cómodo haciendo sus necesidades directamente en el retrete en vez de hacerlo en la caja de arena.[13]

Parte 3
Parte 3 de 3:
Tomar precauciones

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    Determina si entrenar a tu gato para que use el baño es lo más apropiado para ti y para él. Este tipo de entrenamiento no es ideal para todos. Si tú y tu gato no tienen la mentalidad correcta, es mejor que sigan usando la caja de arena.
    • Si tu gato tiene menos de seis meses de edad o si ya tiene problemas al utilizar su caja de arena, entrenarlo para usar el baño podría no ser la mejor opción. Los gatos con más edad o aquellos que ya se sienten cómodos con su caja de arena son los mejores candidatos para este tipo de entrenamiento.[14]
    • Si tu gato es asustadizo, es posible que le resulte difícil acostumbrarse al entrenamiento con la caja de arena. Por lo general, los gatos más tímidos prefieren cubrir sus heces y orina para protegerse de potenciales depredadores.[15]
    • Entrenar a tu gato para que use el baño requiere tiempo, organización y dedicación. Si, por lo general, no eres una persona organizada o si estás muy ocupado, es mejor que sigas usando la caja de arena.[16]
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    Familiarízate con las desventajas del entrenamiento. Muchos veterinarios no recomiendan entrenar a un gato para que use el baño. Familiarízate con las críticas a este tipo de entrenamiento, de modo que puedas tomar una decisión bien informada sobre si esto es lo adecuado para ti y tu gato.
    • En primer lugar, entrenar a tu gato para usar el baño va contra sus instintos naturales. Los gatos tienen la tendencia natural a cavar y enterrar cuando hacen sus necesidades. Usar el retrete, aún después de un entrenamiento apropiado, puede ser estresante para tu gato. No querrás que usar el baño sea una experiencia estresante, ya que esto puede causar problemas de comportamiento o salud en tu gato.[17]
    • Siempre debes dejar abierta la tapa del retrete. Si un invitado o tú mismo dejan la tapa cerrada por accidente, tu gato hará sus necesidades en otro lugar.[18]
    • A los gatos viejos o aquellos que sufren de problemas en las articulaciones les resultará difícil trepar a la taza del retrete y mantener su balance sobre el borde de esta. Existe un riesgo de lesión en este tipo de entrenamiento, en especial, para los gatos mayores.[19]
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    Prepárate para sufrir contratiempos. Entrenar a tu gato para usar el baño, incluso si lo haces de la manera correcta, a menudo generará contratiempos. Si tu gato se resiste a realizar un paso del proceso, es posible que empiece a hacer sus necesidades en otro lugar. Si esto ocurre, da un paso atrás en el entrenamiento y fíjate si esto ayuda. Es una buena idea contar con muchos utensilios y productos de limpieza cuando entrenes a tu gato para usar el baño. Tomando en cuenta todas las posibilidades, habrá por lo menos un incidente durante el proceso.[20]

Consejos

  • Nunca regañes a un gato por hacer sus necesidades fuera del retrete o caja de arena. Los gatos no responden bien ante los regaños y podrían comportarse mal si lo haces.
  • Habla con los amigos que te visiten con frecuencia y cuéntales que estás entrenando a tu gato para que use el retrete. Asegúrate de que sepan que deben dejar la tapa de retrete abierta.

Advertencias

  • Nunca entrenes a un gatito para usar el baño. El gatito podría caerse dentro del retrete y ahogarse.

Acerca de este wikiHow

Brian Bourquin, DVM
Coescrito por:
Veterinario
Este artículo fue coescrito por Brian Bourquin, DVM. Brian Bourquin, mejor conocido como "Dr. B” para sus clientes, es veterinario y propietario de Boston Veterinary Clinic, una clínica veterinaria y de salud para mascotas con tres sedes: South End/Bay Village, Seaport y Brookline, Massachusetts. Boston Veterinary Clinic se especializa en atención veterinaria primaria, incluyendo atención preventiva y de bienestar; atención médica y de emergencia; cirugía de tejidos blandos; y odontología. La clínica también brinda servicios especializados en conducta, nutrición y terapias alternativas para el manejo del dolor mediante acupuntura y tratamientos terapéuticos con láser. Boston Veterinary Clinic es un hospital acreditado por la AAHA (American Animal Hospital Association), y es la primera y única clínica certificada como Fear Free (reducción de sentimientos de estrés en las mascotas) de Boston. Brian tiene más de 19 años de experiencia veterinaria y obtuvo su doctorado en Medicina Veterinaria en la Universidad de Cornell. Este artículo ha sido visto 153 985 veces.
Resumen del artículoX

Si quieres educar a un gato a usar el baño, pon su caja de arena cerca del inodoro. Una vez a la semana, eleva la caja de arena unos cuantos centímetros (un par de pulgadas) poniendo periódicos o revistas viejos apilados debajo de ella. Cuando la caja de arena esté al mismo nivel del asiento del inodoro, pon la caja sobre el asiento y déjala ahí unos cuantos días. Cuando tu mascota parezca estar cómoda, instala un asiento entrenador para gatos sobre el inodoro y llénalo con arena para gatos apto para desechar por el inodoro. Dale unos cuantos días para que se acostumbre al asiento entrenador y luego pasa gradualmente a asientos entrenadores más y más grandes hasta que logre hacer sus necesidades en el inodoro. Tomará unas 2 semanas antes de que puedas quitar el asiento entrenador por completo. Sigue leyendo para que nuestra experta en veterinaria te explique, por ejemplo, algunas de las desventajas de educar a un gato a usar el baño.