Este artículo fue coescrito por Jaimie Scott. Jaimie Scott ha estado entrenando a dueños de perros como propietario de Jaimie Scott Dog Training en Sacramento, California, durante los últimos 15 años. Jaimie se reúne con clientes para brindarles capacitación individual, clases grupales (solo dueños, sin perros), así como clases de video en vivo. Jaimie ha publicado videos, artículos de blog y libros electrónicos para compartir consejos para el entrenamiento y su visión personalizada sobre el comportamiento de los perros. Con un enfoque en entrenar a los dueños, Jaimie cree que los perros necesitan saber quién tiene el control en un momento dado para sentirse seguros y felices. Jaimie tiene una licenciatura en Matemáticas e Informática otorgada por la Universidad del Pacífico.
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Al final, cómo decidas calmar a tu perro dependerá de la situación. Los extraños, los truenos, los fuegos artificiales, los camiones de basura, las visitas al veterinario y otros animales pueden hacer que se ponga asustado, ansioso y nervioso. Nuestro instinto es mimarlo y abrazarlo, pero hay mejores formas de manejar la situación que le enseñarán a tu perro a no sentir miedo, ansiedad o nerviosismo. Para calmarlo, necesitarás interpretar su conducta y tomarte el tiempo de entender lo que provoca su reacción.
Pasos
Método 1
Método 1 de 2:Calmar a tu perro
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1Reconoce el lenguaje corporal de un perro ansioso. El lenguaje corporal de un perro es complejo y puede malinterpretarse. No existe un signo universal de ansiedad o miedo que podamos buscar, ya que cada perro reacciona de manera distinta. No es raro que un perro miedoso actúe con agresividad y que otro huya y se esconda. Ambos quieren estar seguros, pero tienen una forma distinta de procesar la situación. Algunos signos comunes son:
- Postura corporal encorvada
- Mirada desviada o pupilas dilatadas
- Orejas aplastadas hacia atrás o ligeramente hacia atrás
- Ceño fruncido
- Gemir
- Temblar o tiritar
- Patas sudorosas
- Incontinencia urinaria o fecal[1]
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2Entiende la causa de la conducta de tu perro. La mayor parte del tiempo, esta será obvia. Tu perro claramente tiene miedo de los truenos, una persona específica, un sonido fuerte o un espacio en particular. Ponte en su lugar. Conoces poco del mundo, pero ves algo impresionante. ¿Cómo reaccionarías? Muestra empatía por tu amigo.[2]
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3Minimiza la fuente de ansiedad. Lleva a tu perro a otra habitación si una persona en particular lo pone ansioso. Cierra las persianas y sube el volumen de la música para ocultar el sonido de los truenos o los fuegos artificiales. Si el perro quiere huir y esconderse en su lugar seguro (tal vez su jaula), cúbrelo con una manta clara para ayudar a amortiguar el sonido aterrador. Nuevamente, el método que elijas emplear para calmarlo depende de a qué le teme.[3]
- Puedes crear un espacio seguro para él, abriendo la puerta de una habitación lejos de los sonidos fuertes o puedes entrenarlo para usar su jaula. En este último caso, el perro considerará su jaula como el lugar más seguro de todos.[4]
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4Distráelo. Debes darle al perro algo más en que centrar su atención, algo que sea “positivo” e incluso productivo. ¿Tiene un juguete o palito masticable favorito? Si es así, ofréceselo para distraerlo del estímulo negativo. Convierte una situación estresante en una situación propicia para jugar. Al final, el perro relacionará la causa inicial de su estrés con una experiencia divertida y posteriormente ya no se verá tan afectado por los estímulos negativos (por ejemplo, los extraños, los truenos, el veterinario u otros animales).
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5Acaricia a tu perro. Cada perro es distinto. Cada uno disfruta distintos tipos de caricias. A algunos les gustan las caricias suaves, mientras que a otros les gustan las palmaditas y los abrazos fuertes. Una de las caricias más comunes es una suave pasada por la espalda. Coloca la palma de tu mano en la parte superior de la cabeza del perro y sigue lentamente su espina dorsal hasta llegar a sus caderas. Hazlo repetidas veces para calmarlo.[5]
- Sin embargo, ten en cuenta que el perro puede malinterpretar las caricias como una recompensa por sentirse temeroso. Aunque parezca contradictorio, acariciar al perro puede entrenarlo involuntariamente a tener miedo en el futuro. Juzga la situación, pero a veces es mucho mejor ignorar su conducta temerosa para enviarle el mensaje de que no hay nada de qué preocuparse.
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7Reproduce música clásica para que la escuche tu perro. Muchos dueños y refugios de perros reproducen música clásica a bajo volumen para tranquilizar a estos animales.
Método 2
Método 2 de 2:Evitar la ansiedad en tu perro
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1Entrena a tu perro. Muchos entrenadores de perros creen que los perros excesivamente ansiosos, nerviosos o asustados son consecuencia directa del entrenamiento insuficiente. Debes reforzar la conducta positiva al momento de entrenar a tu perro. Enséñale a no ponerse ansioso en el veterinario, nervioso en el parque para perros o asustado cuando hay tormentas. Hazlo ofreciéndole una tarea alternativa en la cual enfocarse y luego recompensándolo cuando complete la tarea de forma exitosa.[8]
- Por ejemplo, durante una visita al consultorio del veterinario, si tu perro se pone muy ansioso en la sala de espera, dile que se siente o se acueste. Cualquier orden básica funcionará. Luego recompénsalo una vez que haya cumplido con éxito tu orden. Esto reforzará el entrenamiento y lo distraerá de la situación estresante. En el futuro, el perro incluso podría relacionar la sala de espera del veterinario con sentarse y recibir un premio, no con el ser examinado por un extraño.[9]
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2Oculta tu propia reacción. El perro te considera como un miembro de su manada. Si te ve ansioso o temeroso, adoptará un estado emocional similar. Si te encuentras en una situación perturbadora, no lo demuestres. Respira profundo varias veces y cuenta cada respiración, exhalando lenta y deliberadamente.
- Por ejemplo, si llevas a tu mascota al veterinario para que la operen y te sientes estresado al respecto, no permitas que tu perro lo note. Siempre debes crear una experiencia positiva para el perro en estas situaciones. En cambio, si gritas cada vez que oyes un trueno, tu perro pensará que hay algo de qué tener miedo. Esto también provocará ansiedad.[10]
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3Usa difusores de feromonas. Las feromonas son mensajeros químicos que emite la madre de un perro durante la lactancia para garantizar a sus cachorros que están seguros y protegidos. Las versiones sintéticas de dicho químico (conocido como feromona de apaciguamiento canino o DAP, por sus siglas en inglés) están disponibles en muchos supermercados para mascotas. Simplemente conéctalas a la pared o sujétalas al collar del perro y mira cómo calman a tu compañero canino.[11]
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4Dale a tu perro un suplemento Zylkene. Este contiene una proteína extraída de la leche que actúa como un agente calmante, de manera similar al diazepam. Esta cápsula se administra dos veces al día y ha demostrado calmar a los perros durante las tormentas, las visitas al veterinario o estadías en la caseta.[12]
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5Consulta con el veterinario. Él te recomendará qué medidas serán más eficaces, ya sean conductuales o médicas. Si es necesario, puedes obtener una prescripción para medicamentos más fuertes. Solo dáselos a tu perro si el veterinario los prescribe y hazlo de acuerdo a las instrucciones del veterinario. Por lo general, se utilizan cinco tipos de medicamentos para tratar los problemas de conducta de los perros. Estos son: benzodiacepinas (BZD), inhibidores de la monoaminooxidasa (IMAO), antidepresivos tricíclicos (ATC) e inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina (ISRS).[13]
Consejos
- Los estudios han demostrado que esterilizar o castrar al perro también ayuda a calmarlo. El momento adecuado para realizar la operación (por ejemplo, antes o después del primer celo en el caso de las hembras) aún está en debate.[14]
Referencias
- ↑ Canine Behavior: A Guide for Veterinarians. Bonnie Beaver. Publisher: Saunders
- ↑ Canine Behavior: A Guide for Veterinarians. Bonnie Beaver. Publisher: Saunders
- ↑ The Happy Puppy Handbook. Pippa Mattinson. Publisher: Ebury Press.
- ↑ http://www.brown.edu/Research/Colwill_Lab/CBP/Crate.htm
- ↑ http://moderndogmagazine.com/articles/how-massage-your-dog/2028
- ↑ http://www.thundershirt.com
- ↑ The Happy Puppy Handbook. Pippa Mattinson. Publisher: Ebury Pre
- ↑ In Defence of Dogs. John Bradshaw. Publisher: Penguin
- ↑ http://www.veterinarypartner.com/Content.plx?A=1574
- ↑ In Defence of Dogs. John Bradshaw. Publisher: Penguin
- ↑ Canine Behavior: A Guide for Veterinarians. Bonnie Beaver. Publisher: Saunder
- ↑ Canine Behavior: A Guide for Veterinarians. Bonnie Beaver. Publisher: Saunders
- ↑ https://www.aspca.org/pet-care/virtual-pet-behaviorist/dog-behavior/behavioral-medications-dogs
- ↑ https://www.aspca.org/pet-care/virtual-pet-behaviorist/dog-behavior/how-will-spaying-change-my-dog
Acerca de este wikiHow
Si tu perro se agita y quieres calmarlo, sigue algunos pasos para minimizar la causa de su ansiedad, como subir el volumen de la música para tapar el sonido de los fuegos artificiales. Otra opción es distraerlo dándole un palo para masticar o su juguete favorito. Si le gustan las caricias, acaricia su espalda o dale palmaditas suavemente para ayudar a que se calme. Otra opción que puedes considerar para lidiar con su miedo es usar una camiseta antiansiedad ("Thundershirt"), la cual ejerce presión en el torso del animal y resulta tranquilizante en algunos. Si quieres consejos para controlar la ansiedad de tu perro, incluida la importancia de entrenarlo bien, ¡sigue leyendo!