Si nunca lo has hecho antes, comprar condones puede parecer una tarea abrumadora y difícil. No obstante, el proceso es bastante simple una vez que sabes dónde comprar los anticonceptivos y cómo clasificarlos por sus diferentes tamaños, estilos y materiales.

Método 1
Método 1 de 3:
Comprar condones en persona

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    Compra condones de uso general en una farmacia o tienda de descuentos. Por ejemplo, puedes encontrar condones en tiendas de descuento como Wall-Mart y Target, así como en farmacias como Walgreens y CVS (en los Estados Unidos). Estos lugares tienen una variedad de condones de uso general de marcas populares como Trojan y Durex.[1]
    • Busca condones cerca del área de higiene personal o farmacia de la tienda.
    • Dependiendo de la tienda, es posible que la caja de condones de 3 unidades cueste entre 2 y 6 dólares.
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    Compra condones especiales en una tienda para adultos. A pesar de que puedes conseguir condones genéricos en las farmacias y tiendas de descuento, quizás las tiendas para adultos sean tu única opción para encontrar anticonceptivos únicos y extravagantes. Además de las variedades puramente funcionales, las tiendas para adultos ofrecen una amplia selección de condones divertidos con diferentes texturas, colores, sabores y aromas.
    • Por lo general, las tiendas para adultos cobran significativamente más por condón que las farmacias o tiendas de descuentos.
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    Consigue condones gratis en una organización de salud de tu localidad. En ciertas ciudades, se pueden adquirir condones de manera gratuita o con descuento en un consultorio médico o en un centro de salud local, como Planned Parenthood en el caso de los Estados Unidos. Algunos lugares mantienen los condones en un área abierta donde la gente pueda tomar todos los que necesite. En otros lugares, es posible que tengas que solicitarlos directamente.[2]
    • Visita sitios web como http://condomfinder.org en inglés para encontrar distribuidores de condones gratuitos cerca de ti.
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    Averigua si tu escuela ofrece condones gratis. Si estás en la escuela secundaria o en la universidad, consulta en el centro de salud, en la oficina de residencia universitaria o en la oficina del consejero de la institución si ofrecen condones gratis. Aunque no todas lo hacen, muchas escuelas distribuyen anticonceptivos gratuitos con la esperanza de reducir los embarazos no deseados o la propagación de las ETS.[3]

Método 2
Método 2 de 3:
Comprar condones por Internet

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    Busca condones estándar en los sitios web de compras generales. Las tiendas en línea como Amazon ofrecen una selección de condones populares comparables a las tiendas de descuentos o farmacias. Dependiendo de la marca específica, estos condones pueden ser incluso más baratos si los compras por Internet.
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    Compra anticonceptivos especiales en sitios web de preservativos. Las tiendas en línea como CondomDepot ofrecen una selección de condones mucho más amplia que los sitios web de compras estándar. Además de la variedad tradicional, estas tiendas ofrecen preservativos de productores independientes de todo el mundo y diversos anticonceptivos divertidos y únicos que pueden darle vida a tu actividad sexual.[4]
    • Si quieres comprar condones sin que nadie lo sepa, consulta la política de envío del vendedor para asegurarte de que ofrezcan un envío discreto.
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    Compra condones al por mayor para ahorrar dinero. La mayoría de las tiendas físicas solo venden unas pocas unidades de condones a la vez. Sin embargo, muchas tiendas en línea ofrecen condones al por mayor que son más baratos por unidad que sus alternativas en la tienda. Una vez que encuentres una marca que te guste, considera comprar al por mayor para reducir los gastos generales.

Método 3
Método 3 de 3:
Elegir el tipo de condón

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    Decide qué material funciona mejor para ti y tu pareja. Los condones vienen en una variedad de materiales diferentes. Todos dan una sensación diferente. No obstante, cuando se usan correctamente, son igual de efectivos para prevenir un embarazo.[5]
    • El látex es el material más común del condón. Estos anticonceptivos son económicos y efectivos, pero necesitarás usar otro tipo si tú o tu pareja son alérgicos a él.
    • La piel de cordero es una alternativa natural al látex, la cual es increíblemente efectiva para prevenir embarazos no deseados. Sin embargo, los condones de piel de cordero no previenen la propagación de enfermedades de transmisión sexual.[6]
    • Los condones de poliuretano son más fuertes y más gruesos que los condones de látex, lo que significa que son más caros. Mientras se usa, el material se calienta hasta que la temperatura sea igual a la del cuerpo, lo cual hace que uno sienta como si no se estuviera usando nada.
    • Los condones Tactylon son más elásticos que otras variedades, lo que les ayuda a adaptarse mejor a la forma del pene.
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    Encuentra un condón que te quede. Para asegurarte de que el anticonceptivo no se deslice o se rompa durante las relaciones sexuales, asegúrate de elegir el tamaño adecuado para ti o para el pene de tu pareja. En general, los condones de tamaño regular le quedan a los penes que miden entre 10 y 18 cm (4 y 7 pulgadas) de largo.[7]
    • Si bien probar diferentes tamaños es la mejor manera de descubrir qué te queda mejor, también puedes buscar tablas de tallas en los sitios web especializados en preservativos.
    • Tu condón debe deslizarse fácilmente y mantenerse en su lugar por sí solo.
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    Escoge una textura que se sienta bien para ti y tu pareja. Algunas personas quieren sentir que sus condones ni siquiera están allí, mientras que otras disfrutan la sensación de los condones que tienen canales o protuberancias. Cada textura tiene la misma eficacia, así que haz una elección basada en lo que tú y tu pareja encuentran placentero.[8]
    • Los condones pueden estar acanalados por dentro para aumentar el placer del usuario o pueden estarlo por fuera para aumentar el placer del receptor.
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    Compra condones lubricados para una experiencia sexual más cómoda. Algunos condones vienen con un lubricante previamente aplicado. Esto reduce la fricción no deseada durante el sexo, haciendo que la experiencia sea más agradable para todos y evitando que el condón se rompa.[9]
    • También puedes comprar un lubricante por separado. Los lubricantes a base de agua y silicona funcionan con la mayoría de los tipos de condones, pero solo debes usar unos a base de aceite con condones de poliuretano y Tactylon.
    • Para mayor protección, compra condones que vengan con un lubricante espermicida. El espermicida mata a una gran parte de los espermatozoides después de la eyaculación. Ten en cuenta que los espermicidas a veces pueden causar efectos secundarios como irritación, ardor e infecciones urinarias.
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    Compra condones de colores, perfumados o con sabor para mayor diversión. Para que puedas mejorar tu vida sexual, las tiendas especializadas venden condones en una gran variedad de colores que incluyen turquesa, anaranjado, rosado, azul y negro. Los condones también vienen en una variedad de diferentes aromas y sabores, como canela, menta y cereza.
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    Busca condones femeninos como una alternativa a los condones masculinos. Los condones femeninos se ajustan dentro de la vagina y también cubren parte de los labios, protegiendo eficazmente a las mujeres de cualquier embarazo y las ETS. A pesar de que no son tan comúnmente utilizados como los condones masculinos, pueden ser una gran opción para ciertas parejas.[10]
    • Los condones femeninos no son tan efectivos como los condones masculinos, así que úsalos en conjunto con un método químico de control de natalidad.
    • No utilices condones femeninos y condones masculinos al mismo tiempo.
    • Puedes utilizar los condones femeninos hasta 8 horas antes del coito. Esto los convierte en una excelente opción para las personas que no les gusta interrumpir el juego previo para ponerse un condón.

Advertencias

  • Revisa la fecha de vencimiento de un condón antes de comprarlo.

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Categorías: Sexualidad