Cómo criar peces betta

Deja que se instalen. Es mejor que dejes unos meses a tus peces betta para que se adapten al entorno antes de empezar con la reproducción. Pero recuerda que los machos son más fértiles cuando tienen menos de 14 meses. Planifica la reproducción cuando tengas suficiente tiempo sin interrupciones.

• Una vez que juntes al macho con la hembra, tendrás que dedicar al menos dos horas cada día durante más de 2 meses al cuidado de la pareja y de sus crías. Asegúrate de no tener que irte de vacaciones, de viaje por cuestiones laborales o asistir a eventos estresantes.

Instala el tanque de reproducción. El tanque de reproducción debe tener entre 19 a 38 L (de 5 a 10 galones) de capacidad, una pared divisoria desmontable, espacios para que se escondan, un filtro ajustable (como un filtro de esponja con una válvula) y un termostato para regular la temperatura a unos 26 °C (80 °F). Nunca pongas gravilla u otro substrato en el tanque de reproducción porque los huevos podrían perderse cuando caigan al fondo. Llena el tanque con 12 a 15 cm (5 a 6 pulgadas) de agua solamente y colócalo donde hayan pocas distracciones, tales como otros peces, colores brillantes y actividad humana.

Empieza por alimentarlos con comida viva cuando estén listos para la reproducción. Los camarones o los gusanos de sangre serán el mejor cebo, pero también los grillos, las cucarachas, los gusanos corrientes y otros insectos les irán bien. Será una buena idea cultivarlos o comprarlos en una tienda de animales o en un criadero para evitar las bacterias, la suciedad y los elementos químicos que podrían transportar los insectos silvestres. Si no puedes conseguir comida viva, prueba con crías de gamba congeladas o liofilizadas y con gusanos de sangre.

Empieza a criar a los alevines. Los alevines betta son muy pequeños y solo comen alimento vivo, por lo que en unas pocas semanas necesitarás un suplemento de comida viva minúscula para alimentarlos. Comienza desde ahora para tener un buen suministro en unas pocas semanas cuando los necesites. Los microgusanos son probablemente el mejor alimento, pero algunos criadores prefieren infusoria o anguilas en vinagre. También puedes alimentarlos con crías de gamba, pero de forma moderada, y solo hasta que encuentres otra fuente de alimento, pues si les das demasiadas puedes causarles alteraciones en la vejiga natatoria.

Junta a la pareja. Después de haber alimentado a la pareja con la comida viva durante una o dos semanas, estará lista para conocerse. Coloca al macho y a la hembra de manera que puedan verse mientras aún están separados. Puedes poner los tanques uno al lado de otro o colocar a los peces en los lados opuestos del separador, en el tanque de reproducción. Es esencial que se vean el uno a otro antes de juntarlos para minimizar el riesgo de lesiones serias.

• Algunos criadores colocan a los machos en un tanque de reproducción sin separador y usan un vaso de plástico o una lámpara de aceite para introducir a la hembra. Si utilizas este método, la hembra deberá permanecer dentro del recipiente solo unas pocas horas al día, ya que es un espacio muy reducido. Déjalos que se miren el uno al otro por algunos días.
• Algunos criadores luego separan a la pareja durante unos días antes de juntarlos por unos días más y luego proceden al siguiente paso.

Observa su comportamiento. Comprueba si los peces betta parecen estar interesados el uno en el otro. El macho nadará alrededor de la hembra exhibiendo sus aletas. La hembra mostrará barras verticales en su cuerpo e inclinará sumisamente la cabeza. Algo de agresividad es normal, pero si intentan atacarse entre sí a través del separador, no los juntes. Por el contrario, será mejor separarlos e intentarlo de nuevo después o probar con otra pareja de peces. Los peces betta pelean de vez en cuando, por lo que sería mejor que dediques un poco de tiempo a vigilarlos y esperar.

Quita el divisor. Una vez que el macho esté listo para reproducirse, construirá un nido de burbujas. Cuando esto ocurra, desconecta el filtro y coloca a la hembra dentro del tanque, vigilando siempre a la pareja. El macho probablemente la perseguirá, mordiendo sus aletas. Esto es lo adecuado siempre y cuando la vida de ambos peces no corra peligro. Este cortejo puede durar varias horas o incluso días. Asegúrate de que haya muchos sitios donde la hembra pueda esconderse para huir del acoso y controla a la pareja regularmente para prevenir heridas serias.

Deja que la naturaleza siga su curso. El macho finalmente pondrá a la hembra bajo su nido de burbujas y se abrazarán. Pueden necesitar varios abrazos para producir huevos. Entonces la hembra entrará en un estado vegetativo mientras los huevos caen a la base del nido desde su pequeño ovipositor blanco. El macho nadará por debajo y los fertilizará, poniéndolos uno por uno en el nido. Algunas hembras contribuyen a realizar esta tarea una vez que se recobran, pero otras se comen los huevos, así que vigila cuidadosamente y sácala si ves que se los está comiendo. Los dos peces pueden abrazarse muchas más veces, pero con el tiempo la hembra dejará de poner huevos.

Separa a la hembra betta. Una vez que la hembra haya puesto los huevos, el macho la acosará de nuevo y ella se esconderá. Sácala con cuidado e introdúcela en su tanque. Trata su tanque con "Maroxy" (desinfectante adecuado para peces) para ayudar a curar sus aletas. Lo mejor será tratar también el tanque de cría con "Maroxy" para evitar que los hongos maten a los huevos.

Deja al macho en el tanque hasta que los alevines puedan nadar. Esto sucederá unos tres días después de la fecundación. Algunos criadores no dan de comer al macho durante este tiempo. Se supone que de esta forma se reduce el riesgo de que se coma los huevos y a los alevines. Otros criadores lo alimentan cada dos días. Si decides alimentarlo, no te alarmes si no come, continúa ofreciéndole comida y quita los alimentos sobrantes con una espátula de cocina. Mantén el filtro desconectado para evitar molestias a los alevines, pero procura que el tanque esté iluminado día y noche.

Espera hasta que los alevines eclosionen. Cuando esto ocurra los alevines colgarán del nido de burbujas, y el macho pondrá de nuevo en su lugar a los que caigan. Pasados unos días, los alevines empezarán a "nadar libremente" con movimientos horizontales y se aventurarán a salir del nido. Antes de esto tendrán que alimentarse con los restos de la yema del huevo, pues aún no pueden comer por sí mismos.

Saca al macho del tanque con cuidado de no dañar a ningún alevín. El macho ya puede volver a su rutina ordinaria y a su horario de comida. Si todavía está magullado por el cortejo, añade un poco de "Maroxy" para ayudarlo a curarse.

Alimenta a los alevines. Tan pronto como retires al macho, puedes alimentarlos con una pequeña porción de microgusanos. Dales de comer dos veces al día y vigila bien para ver cuánto se comen. Si todavía quedan microgusanos vivos a la hora de la siguiente comida, puedes omitirla debido a que los alevines aún tienen comida. Si observas muchos microgusanos muertos, es señal de que estás sobrealimentándolos, así es que debes reducir las raciones. Los alevines necesitan poca comida viva, de los siguientes tipos:

• Infusoria: con esto alimentarás a los alevines durante su primera semana de vida.
• Microgusanos: necesitarás comprar una remesa y después ya no tendrás que comprarlos más. Son ideales para alevines de entre 3 a 40 días.
• Crías de gamba en salmuera: eclosionan fácilmente y suponen una forma sencilla de controlar la cantidad de alimento, ya que alimentar a los alevines en exceso puede ocasionar problemas en la vejiga natatoria.

Dales tiempo a los alevines para que crezcan. Debes mantenerlos a una temperatura de 26 °C (80 °F) y tapar el tanque para evitar las corrientes y la evaporación. Continúa alimentándolos y aumenta la cantidad de alimento. Cuando los alevines sean demasiado grandes para estar en el tanque de reproducción, tendrás que cambiarlos a un tanque mayor. No sobrevivirán todos los alevines en las primeras semanas, pero si ves que mueren muchos cada día, probablemente haya algún problema. Comprueba la temperatura, los niveles químicos y piensa en la posibilidad de darles un tratamiento para infecciones.

• Cuando los alevines tengan una semana, conecta el filtro, pero restringe el flujo con una válvula para que sea poco perceptible.
• Cuando los alevines tengan dos semanas, empieza a realizar pequeños cambios de agua (10 %) cada pocos días para mantener el tanque limpio y libre de comida muerta; usa una aspiradora suave o una espátula de cocina a fin de no dañar a los alevines y añade agua limpia muy despacio. Puedes empezar a apagar la luz del acuario por la noche.
• En las siguientes semanas, ve incrementando el flujo del filtro, observando cuidadosamente a los alevines para estar seguro de que son lo bastante fuertes para nadar contra la corriente.

Coloca a los alevines en tanques más grandes. Cuando tengan dos semanas, deberás cambiarlos a un tanque de al menos 75 litros (20 galones). Asegúrate de que la temperatura del agua es la adecuada para los alevines. Las crías son delicadas y cualquier desliz podría matarlas. Si tienes un tanque de 27 litros (10 galones) a medio llenar, puedes rellenarlo y meter a los alevines cuando tengan de 4 a 5 semanas.

Deja de dar comida viva a los alevines. Cuando tengan alrededor de un mes puedes ir acostumbrándolos para que coman comida congelada y liofilizada, así como alimentos en copos y bolitas. Asegúrate de que la comida esté lo bastante machacada como para caber en sus pequeñas bocas. Ofréceles pequeñas cantidades y quítales la comida viva poco a poco. Elimina siempre los restos.

• Colocar crías de guppy en el acuario podría ser de utilidad, ya que se comerán los gránulos. Luego las crías de betta empezarán a comérselos también.

Separa a los machos. Cuando los alevines macho empiecen a pelear (entre 5 a 8 semanas), será hora de cambiarlos de tanque. Instálalos en tanques individuales, colocados uno junto a otro, pues los alevines pueden deprimirse si se quedan solos de repente.

• Los machos que no se peleen pueden quedarse con las hembras hasta que empiecen a mostrarse agresivos.
• Algunos machos rechazarán la comida el primer o segundo día; intenta alimentarlos con comida viva para estimular su apetito.
• Continúa separando a todos los machos que se muestren agresivos. En los siguientes días y semanas deberás aislar a los machos con separadores opacos, para que no se alteren e intensifiquen sus ataques hacia los machos en los tanques adyacentes.

Decide el futuro de tu camada. Si quieres vender los alevines, tendrás que empezar a contactar con compradores potenciales. La mayoría de los alevines empezarán a mostrar sus rasgos distintivos de adultos entre las 10 a 11 semanas y entonces puedes seleccionar a los mejores peces para futuras crianzas o tomarles fotos para enviárselas a los compradores. Si tratas de crear una línea genética, querrás elegir solamente a los mejores peces de cada camada para continuar con la crianza y vender o regalar a los otros. Si no lo haces, te encontrarás con más peces betta de los que posiblemente puedes cuidar.