El cambio es una parte natural de la vida. Cuando los amigos se alejan, cambian o se vuelven hostiles, puede ser difícil aceptarlo. Sin embargo, decidir cuándo se acaba una amistad es un paso importante para superar esta situación. Si bien hay muchas situaciones en las que debes dejar morir una amistad, también hay maneras de salvar una que esté en peligro si decides hacerlo. Piensa cuidadosamente en la decisión de ponerle fin a la amistad.

Método 1
Método 1 de 5:
Identificar una amistad fallida

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    Pregúntate si te agrada tu amigo. Algunas veces, las personas que han estado en tu vida por mucho tiempo parecen adquirir una especie de permanencia, de modo que aun después de que sus vidas han tomado rumbos muy distintos y que tengan poco en común, sigues considerándolas amigas. Si sientes que la amistad se ha vuelto obsoleta o si no sientes ningún afecto particular por la persona a la que llamas amiga, probablemente es el momento de aceptar que la amistad ha terminado.[1]
    • Evalúa la condición de la amistad. ¿Quieres a tu amigo? Si es así, ¿este te quiere en igual o menor grado? ¿Qué tan importante es la amistad? Busca indicios de una amistad débil o decadente.
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    Piensa en la frecuencia con la que tienes conflictos con tu amigo.[2] ¿Tu amigo y tú suelen tener discusiones y malentendidos intensos que no se hayan resuelto? ¿Te sientes constantemente decepcionado de él? ¿Expresa una frustración o una decepción similar respecto de ti? Si es así, debes decidir ponerle fin a la amistad.
    • Los amigos no se llevan bien todo el tiempo, pero debes ser capaz de sentir que básicamente, tu amigo y tú comparten la misma visión la mayoría de las veces.
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    No toleres a amigos hirientes. Si tu amigo te critica constantemente cuando no estás presente (o peor, de manera directa), es momento de ponerle fin a la amistad. Si bien no siempre te llevas bien con los amigos, estos deben, en general, ser amables, atentos y considerados con tus sentimientos. Decidir ponerle fin a la amistad con personas que no lo sean es sencillo.
    • Por ejemplo, si ves un mensaje en redes sociales que diga algo como “(Tu nombre) es un tonto. ¡No sabe nada!”, no debes ser amigo de esa persona.
    • Los amigos hirientes también pueden compartir secretos con personas que se supone que no deben enterarse. Por ejemplo, imagina que tus padres estén a punto de divorciarse y que se lo hayas contado a tu amigo pidiéndole que no se lo diga a nadie más. La siguiente semana, muchas personas que no son tus amigas te preguntan acerca de la situación. En este caso, este amigo ha traicionado claramente tu confianza y debes decidir, con razón, ponerle fin a la amistad.
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    Reconoce si no son importantes el uno para el otro. Si tu amigo y tú no se hacen tiempo el uno para el otro o si solo se comunican cuando se ven en la escuela, en el trabajo o en otra situación social conveniente, puedes decidir con toda certeza ponerle fin a la amistad.[3]
    • Los amigos se darán prioridad el uno al otro y estarán ahí cuando el otro esté en apuros. Por el contrario, los amigos que no tienen ganas de pasar tiempo juntos o que solo aparecen cuando no hay problemas, son malos amigos. Cámbialos por personas que estén más dispuestas a arriesgarse por ti.
    • Puedes seguir tratando amigablemente a la otra persona, pero piensa en ella como un conocido y no como un amigo.
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    Evita a los amigos narcisistas. Los narcisistas creen que son el centro del universo. Si tu amigo siempre habla de sí mismo y nunca te pregunta acerca de tu día o de qué es lo que sucede en tu vida cuando pasan tiempo juntos, probablemente sea un narcisista.[4] Por lo menos, es evidente que no valora tu compañía. Toma la decisión correcta y ponle fin a la amistad.
    • Un amigo que no se disculpa después de una pelea también es un narcisista.
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    Acepta que las amistades cambian.[5] Las personas cambian. Algunas veces es algo bueno y otras no tanto. Si tu amigo y tú cambian y crecen juntos, manteniendo la sincronía de sus ideas y actitudes, estupendo. Sin embargo, si se distancian, no finjas que las cosas siguen siendo como antes. Dejar que esta “amistad zombi” continúe es inútil para ambos.
    • Los amigos no tienen que ser tus clones; sin embargo, si no comparten los valores e intereses básicos, entonces la amistad tiene pocos puntos en común sobre los cuales asentarse.

Método 2
Método 2 de 5:
Lidiar con los amigos problemáticos

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    Confronta a tu amigo respecto del problema. Si tienes pensado acabar una amistad debido a un problema en particular que tengas con la persona, díselo. Los amigos verdaderos siempre serán sinceros entre sí y hablarán de cualquier problema que tengan directamente.
    • No hagas comentarios superficiales acerca de un problema que quieras abordar con tu amigo. Por ejemplo, si tu amigo no te escucha y siempre hace las cosas a su manera, sé asertivo y pon el enfoque en las situaciones en las que este exhibe la conducta negativa.
    • Por ejemplo, no digas de manera ambigua algo como “No sé si quiero ir al mercado agrícola”. En vez de eso, di algo como “Ya te dije que no quiero ir al mercado agrícola. Siento que no valoras mi opinión cuando me excluyes del proceso de toma de decisiones. Tratemos ahora de tomar una decisión sobre los planes que tenemos juntos”.
    • Usa declaraciones en “primera persona” como en el ejemplo anterior y evita las acusatorias en “segunda persona”, como “Nunca me escuchas” o “Siempre ignoras lo que siento”.[6]
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    Siempre sé directo al hablar con tu amigo.[7] Dile lo que piensas si hay algún problema que te moleste. Sé honesto con respecto a lo que sientes y dile lo que quieres en términos claros.
    • No ignores a tu amigo esperando que se dé cuenta de que has decidido ponerle fin a la amistad. Si lo haces, puede estar confundido o preocupado por ti. Además, puede involucrar a otras personas, como amigos mutuos o tus padres, o tratar de confrontarte directamente en tu casa o en tu entorno laboral para saber qué sientes o piensas.
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    Pregúntale a tu amigo qué es lo que quiere de ti.[8] Crea un foro abierto para que tu amigo exponga sus quejas. Estas pueden o no concernirte a ti. Por ejemplo, tal vez el matrimonio de tu amigo no vaya bien y sienta que no puede compartirlo con nadie. Hacerle saber que puedes y quieres escuchar y comprender puede mejorar la amistad y ponerla de nuevo en el camino correcto.
    • A veces a los amigos les cuesta reconocer y decir lo que desean. Por lo tanto, preguntarle directamente a tu amigo si necesita algo es un paso importante para demostrarle el compromiso que tienes como amigo y el deseo de construir una amistad fuerte.
    • Por ejemplo, si crees que le pasa algo, hazle preguntas generales como “¿Está todo bien?”. Si sospechas de un problema específico, puedes preguntar algo como “¿Cómo van las cosas con tu esposa en estos días?”. Un amigo cercano se abrirá y confesará que tiene un problema o que se siente mal.
    • Sin embargo, a algunos amigos les cuesta hablar de sus sentimientos o problemas personales. En esos casos, lo único que puedes hacer es respetar su privacidad.
    • La amistad consiste en afrontar los momentos difíciles con los amigos.[9] Dile a tu amigo algo como “Si en algún momento quieres hablar de algo, estoy aquí para ti”.

Método 3
Método 3 de 5:
Buscar alternativas para no tener que ponerle fin a la amistad

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    Sé más considerado con tu amigo. Si valoras su amistad y no quieres que se acabe, busca maneras simples de mejorarla.[10] Por ejemplo, es posible que te haya dejado plantado a ti y al resto de sus amigos para salir con su novia. Aunque es su culpa, haz un esfuerzo para comprenderlo y dile que sigues siendo su amigo. Invítalo a almorzar o a ir de compras, y hazle saber que echas de menos su compañía.
    • Por supuesto, mejorar la relación no debe ser algo unilateral. Busca indicios de que también tu amigo hace un esfuerzo para mantener fuerte la amistad. Por ejemplo, si acepta hacer tiempo para que salgan juntos, eso indica que aún tiene interés en la amistad, pero que quizás ha estado demasiado ocupado con el trabajo y otros deberes.
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    Perdona a tu amigo. La amistad muchas veces significa dejar el pasado en el pasado. ¿La ofensa que cometió es completamente imperdonable? ¿Es algo que en una o dos semanas perderá importancia? Si bien un acto o un comentario determinado puede parecer realmente atroz en el momento, aléjate de la situación y trata de poner la conducta de tu amigo en un contexto razonable.
    • No justifiques a tu amigo. Si hizo algo malo, debe admitirlo y disculparse. Los amigos que no asumen la responsabilidad de sus acciones no son buenos amigos.
    • Perdonar a tu amigo no significa olvidar lo que hizo. Si bien no es una buena cosa mencionar constantemente un pecado del pasado, debes tratar de mantener su mala conducta en el fondo de la mente en todo momento y estar atento a conductas similares en el futuro. Su conducta decepcionante puede ser parte de un patrón mayor.[11]
    • Por ejemplo, si tu amigo te ofreció recogerte de la escuela, pero nunca llegó, puede que con toda razón estés molesto con él. Si te dice que se quedó dormido y que no escuchó la alarma, puedes perdonar su conducta como un accidente. Sin embargo, si constantemente no cumple las promesas que hace y pone pretextos poco convincentes, debes tener la certeza de que tu decisión de ponerle fin a la amistad es correcta.
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    Toma un descanso de tu amigo.[12] Aunque te guste salir con un amigo en particular, a veces sus expectativas y las tuyas pueden ser distintas. Si trata de presionarte para que pases todo el tiempo con él y no respeta tus límites, puede ser inseguro. Los amigos inseguros forman vínculos poco saludables con los demás y tratar con estos puede ser muy molesto y difícil. Sin embargo, no es necesario que pongas fin a la amistad con un amigo que es inseguro o dominante.
    • Explícale la próxima vez que quiera visitarte o que te invite a pasar el rato, que estás un poco agotado y que deseas quedarte en casa. No respondas rápidamente a los mensajes que recibas de un amigo inseguro y sé firme al comunicarle tu decisión de estar (o salir) solo.[13]
    • Aunque no sea particularmente inseguro, es posible que estés aburrido de él por alguna otra razón. Si tu amigo y tú salen constantemente y hacen todo juntos, o si siempre quiere hacer algo contigo, es posible que empieces a desear algo de privacidad y de tiempo a solas.
    • El descanso de tu amigo puede durar tanto como quieras, desde un día hasta un mes o más. Trata de darte el espacio que necesitas.
    • Si tu amigo no respeta tu necesidad de un descanso o se pone hostil al sugerirlo, toma en cuenta la posibilidad de ponerle fin a la amistad del todo. Un amigo que no respeta tus deseos no es un amigo en absoluto.

Método 4
Método 4 de 5:
Ponerle fin a la amistad

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    Confronta a tu amigo en persona. Luego de que hayas decidido que la amistad se acabó, no se lo digas a tu amigo a través de un correo electrónico o un mensaje de texto.[14] La mejor manera de ponerle fin a una amistad es hablando sobre cómo te sientes y qué es lo quieres para el futuro de la relación en persona.
    • Busca un momento en el que ambos puedan reunirse y asegúrate de que tu amigo no tenga nada planeado para después de la reunión (como ir al trabajo o una reunión familiar), pues acabar con una amistad puede tener un costo emocional.
    • Si crees que tu amigo puede ponerse hostil o violento, no te reúnas con él en persona. En vez de eso, escríbele una carta o un correo electrónico explicándole que deseas ponerle fin a la amistad y dándole los motivos por los que lo haces.
    • Si tu amigo se rehúsa a reunirse contigo del todo, escríbele una carta diciéndole cómo te sientes. Escribe las cosas que deseas decirle. No es necesario que le envíes la carta, aunque ciertamente puedes hacerlo si crees que la leerá.[15]
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    Busca las palabras adecuadas para ponerle fin a la amistad. Explicarle a alguien que has decidido dejar de ser su amigo puede ser difícil. Las circunstancias de la disolución de cada amistad son distintas. Sin embargo, ser honesto y estructurar la conversación inevitable de una manera lógica puede ayudar a que el proceso proceda más fluidamente.
    • Empieza la conversación con el reconocimiento de que (en algún punto) disfrutaste de ser amigo de la persona. Por ejemplo, puedes decir algo como “Tenemos muy buenos recuerdos juntos. ¿Recuerdas cuando fuimos a acampar al lago Big Bear?”. Piensen en recuerdos felices y evóquenlos juntos por unos momentos.[16]
    • Pasa poco a poco a hablar del período en que la amistad comenzó a declinar. Plantéalo como una transición. Puedes decir algo como “Desde que empecé la universidad, siento que nos hemos distanciado”. Usa una terminología pasiva para evitar culparte a ti mismo o a tu amigo. No lo ataques verbalmente.
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    Trata de acabar en buenos términos. Cierra la conversación con algunas resoluciones. Puedes decir simplemente algo como “Creo que ninguno de los dos se beneficiará con la continuación de esta amistad. Evitemos las dificultades y el dolor innecesarios poniéndole fin a esta relación amigablemente”. Dale la mano y deséale lo mejor cuando la reunión haya terminado.
    • Algunas veces, es imposible acabar una amistad en buenos términos. Si la otra persona se muestra furiosa, agresiva y rencorosa por lo que piensas o sientes, o si no te perdona, dile algo como “Lamento que te sientas así” o “Perdóname si te ofendí”.[17] Sin embargo, no te retractes de la resolución de ponerle fin a la amistad solo porque está molesta o resentida.
    • Recuerda, eres responsable de tus propios sentimientos, no de los de tu amigo. Incluso si tu amigo reacciona de manera inmadura o infantil, debes mantener el control. Haz lo correcto.
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    No sientas que le debes algo a tu amigo. Si, por alguna razón, has decidido ponerle fin a la amistad, no debes sentirte culpable. No es culpa de nadie que las personas se distancien. Si la amistad se termina, eso no te hace un mal amigo.
    • No te sientas culpable por decidir que la amistad ha llegado a su fin solo porque tu amigo tenga pocos amigos. Debes hacer lo que es correcto para ti. Algunas veces, eso significa decidir que la amistad se terminó.
    • Trata de tomarlo como una oportunidad para tu amigo y para ti de hacer nuevos amigos.
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    Acepta que la amistad se terminó. Ahora que has decidido que la amistad se terminó, tienes que vivir con esa decisión. Piensa en los buenos momentos que pasaste con tu amigo y comprende que las amistades (o las relaciones de cualquier tipo) pueden ser temporales.[18] Las personas cambian. No sigas esperando que la amistad se arregle por sí sola o deseando volver atrás para hacer las cosas de otra manera.
    • No trates de “arreglar” o cambiar a tu amigo. Solo él puede cambiarse a sí mismo.[19]
    • Aunque es normal sentirse triste luego de decidir ponerle fin a una amistad, no debes obsesionarte al respecto o dejar que el recuerdo te nuble el juicio. Recuerda, la amistad se terminó por una razón.
    • Si tienes problemas para aceptar que la amistad se terminó, habla con otro amigo o con un familiar de confianza acerca de la situación.
    • Si la amistad terminó en malos términos, reconoce que no puedes controlar lo que sucedió. Enfócate en el futuro. No es necesario que olvides a tu amigo, pero no puedes vivir en el pasado.[20] Piensa en cada día como una oportunidad de conocer nuevos amigos.

Método 5
Método 5 de 5:
Hacer nuevos amigos

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    Únete a un club. Hay muchos clubes que abarcan intereses y pasatiempos de todo tipo (clubes de lectura, de astronomía, de cine, etc.). Revisa las redes sociales y sitios como Meetup.com para encontrar clubes y grupos recreativos en tu área.
    • Si te gustan los clubes de lectura, ponte en contacto con la biblioteca local. Es probable que las bibliotecas grandes de las ciudades principales tengan varios clubes de lectura, quizás dirigidos a tipos particulares de literatura. Por ejemplo, puedes encontrar un club de lectura de historia, de literatura afroamericana, etc.
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    Asiste a un servicio religioso. Si crees en un poder divino, asiste al servicio religioso que prefieras. Además de satisfacer tus necesidades espirituales, asistir a un servicio religioso puede ser una buena oportunidad para conocer a personas nuevas que compartan tus creencias. Busca servicios locales en tu área para encontrar el que sea adecuado para ti.[21]
    • No temas probar distintas iglesias, mezquitas, etc., antes de quedarte en una. Recuerda, la asistencia es gratuita, así que puedes ir a tantas como puedas hasta que encuentres una que te guste.
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    Conoce mejor a tus colegas. Hacerte amigo de tus colegas puede hacer que la vida laboral sea más animada y agradable.[22] Invita a algunos colegas a tomar algo o a cenar después del trabajo una noche. Por ejemplo, diles algo como “¿Les gustaría ir a comer algo después del trabajo? Conozco un buen restaurante cerca de aquí”.
    • No les digas que conoces un buen restaurante que está muy cerca del trabajo si no es cierto.
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    Únete a un equipo deportivo. Tendrás muchas oportunidades de unirte a un equipo deportivo. Ya sea en un equipo de baloncesto del vecindario o un equipo de fútbol comunitario bien organizado, los deportes pueden ser buenas maneras de hacer amigos. Los vínculos que se hacen al entrenar, jugar, ganar e incluso perder como equipo pueden durar de por vida.

Consejos

  • Si no quieres ser amigo de alguien, entonces ponle fin a la amistad. Las malas amistades no son buenas para la salud mental.

Acerca de este wikiHow

Julia Lyubchenko, MS, MA
Coescrito por:
Consejera de adultos e hipnoterapeuta
Este artículo fue coescrito por Julia Lyubchenko, MS, MA. Julia Lyubchenko es una consejera de adultos e hipnoterapeuta con sede en Los Ángeles, California. Con una práctica llamada “terapia bajo hipnosis”, Julia tiene más de ocho años de experiencia en terapia y asesoramiento, y se especializa en resolver problemas emocionales y de comportamiento. Tiene un certificado en Hipnosis Clínica de la Escuela del Método Bosurgi y está certificada en Psicoterapia Psicodinámica e Hipnoterapia. Obtuvo una maestría en Asesoramiento Psicológico y Terapia Matrimonial y Familiar en la Universidad Internacional de Alliant, y una maestría en Ciencias en Psicología del Desarrollo y del Niño en la Universidad Estatal de Moscú. Este artículo ha sido visto 1595 veces.
Categorías: Amistad