Cómo enseñarle a tus hijos a lavar los platos

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Enseñarle a tus hijos a lavar los platos puede tener muchos beneficios. Puede volverse parte de las obligaciones de tu hijo cuando crezca un poco más y también puede formar parte de sus habilidades cuando sea adulto y tenga su propia casa. He aquí cómo puedes enseñar a tu hijo a lavar los platos.

Pasos

1
Compra una escalera pequeña o consigue una caja en la que tu hijo se pueda parar para que alcance el fregadero.
2
Dale a tu hijo sus propias herramientas para lavar los platos, como su propia esponja o estropajo. Ten a la mano un contenedor donde tu hijo pueda guardar sus herramientas de trabajo al terminar de lavar los platos.
3
Si tienes un lavavajillas en tu casa, haz que tu hijo solamente enjuague los platos para que estén listos para introducirlos en el lavavajillas. Cuando tu hijo haya dominado la actividad de simplemente enjuagar los platos, entonces podrá pasar a actividades más difíciles para lavar los platos.
4
Comienza la enseñanza de tu hijo mostrándole cómo se ve y cómo debe quedar un plato limpio. Deja que tu hijo lave el siguiente plato observando cómo lo hace para que le aplaudas lo que está haciendo bien y le des consejos de cómo mejorar. Si tienes platos que se puedan quebrar, dile a tu hijo que te observe cómo los sostienes, mientras lo lavas tú mismo.
5
Seca los platos para que él vea cómo lo haces y muéstrale dónde se guardan. De esta manera estarás entrenando a tu hijo a que tenga un papel más activo, de manera que pueda colaborar lavando los platos después de una cena familiar.
6
Una vez que tus platos estén limpios, muéstrale a tu hijo como limpiar el área alrededor del fregadero.

Consejos

Nunca olvides premiar a tu hijo por u trabajo bien hecho.
Si tu hijo salpica mucha agua fuera del fregadero, no le des mucha importancia. tienes que hacer que le resulte divertido a tu hijo lavar los platos. Con el tiempo y la práctica tirará menos agua.
Siempre lava tú mismo los platos que se puedan romper o los cuchillos que puedan ser peligrosos para él, hasta que veas que tu hijo adquiera seguridad.