Si a los gatos se les cría para pasar la mayor parte de su tiempo al aire libre, por lo general, mostrarán su comportamiento de cazador natural. Esto significa que pueden ser fantásticos para controlar a los roedores molestos en tu casa, patio o granero. En ocasiones, a los gatos de caza al aire libre se les conoce como “gatos de granero” o “cazadores de roedores”. Estos animales seguirán necesitando que los alimenten y los cuiden. No obstante, con un poco de motivación, aprenderán a combatir a los roedores con rapidez.

Parte 1
Parte 1 de 3:
Elegir un gato

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    Determina qué tipo de gato quieres criar. Los gatos de exterior son diferentes a los que se les permite salir de casa.[1] La mayoría de los gatos practicarán el comportamiento de cazador al salir al aire libre. Sin embargo, los de exterior estarán acostumbrados a pasar todo su tiempo (o casi todo) al aire libre, y serán más aptos para cuidarse que los gatos caseros que pasen un poco de tiempo fuera de casa. Si quieres un verdadero cazador de roedores, la mejor opción será un gato de exterior.
    • Los gatos de pelo corto son la mejor opción para este fin, ya que no tendrán que preocuparse por que su pelaje se enrede, se apelmace o se quede atrapado en algo.
    • Las gatas son cazadoras más constantes que los machos.
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    Consigue un gato. Podrás conseguir un posible cazador de roedores en cualquier fuente que brinde gatos. Sin embargo, muchos refugios de animales tienen gatos que solían ser callejeros, los cuales serán gatos de exterior fantásticos. Estos felinos estarán acostumbrados a pasar tiempo al aire libre, e incluso se sentirán felices de estar allí. Asimismo, no dependerán constantemente de un compañero humano.[2] [3]
    • Puedes conseguir más de un gato de exterior. Ellos disfrutarán teniendo un compañero con el cual acurrucarse, acicalarse y cazar.[4]
    • Los gatitos no estarán listos por sí solos para empezar a cazar de inmediato. Asimismo, serán más vulnerables a los depredadores, como los búhos y los lobos.[5] [6] Por este motivo, lo mejor será conseguir un gato que ya tenga el tamaño aproximado de un conejo si quieres que cace roedores.
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    Haz que el veterinario lo revise. Luego de haber elegido a tu futuro cazador de roedores, deberás llevarlo al veterinario para que lo revisen. Él garantizará que esté saludable y le brindará toda vacuna y cuidado que pueda requerir.[7]
    • Esterilizar o castrar a los gatos de exterior no hará que dejen de ser cazadores eficaces. Estos procedimientos reducirán su tendencia a deambular, lo que ayudará a mantenerlos en tu propiedad.[8] [9]
    • El veterinario podrá introducir un microchip diminuto en el gato para poder identificarlo.

Parte 2
Parte 2 de 3:
Entrenarlo

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    Deberás cuidar de las necesidades básicas de tu gato. Estos cazadores de roedores necesitarán un refugio y un suministro constante de comida y agua, incluso si pasan todo su tiempo al aire libre. También deberás brindarle una caja de arena cuando lo lleves a casa por primera vez.[10] [11] [12] [13]
    • Puedes usar comederos y tazones de agua automáticos (disponibles en las tiendas de suministros de mascotas), o reabastecer la comida y el agua del animal por tu cuenta todos los días.
    • Su refugio deberá ser de fácil acceso, cubierto, seco y protegido del viento, el frío y el calor. Las opciones adecuadas incluyen a los graneros, los cobertizos o las casas para gatos.
    • Verifica que el animal tenga un lugar en donde dormir que esté libre de las molestias como los perros, los autos y los niños.
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    Deja al gato en una jaula al principio. Cuando lo lleves a casa por primera vez, el animal estará un poco estresado a medida que conozca el entorno. Si lo mantienes al principio en una jaula grande o un área cerrada, esto lo protegerá y evitará que escape.[14] [15] [16] [17] Coloca la jaula cerca del refugio que el gato vaya a usar una vez que se acostumbre a su nuevo entorno, de modo que asocie esta área con su hogar.
    • Verifica que el área cerrada sea lo suficientemente grande como para que el animal pueda deambular con libertad, estirarse y ejercitarse un poco. Esta también deberá estar protegida contra el calor, el frío, la lluvia, etc.
    • El refugio de animales de tu localidad podría brindarte una jaula que puedas usar.
    • Verifica cómo se encuentra el gato con frecuencia. Vuelve a llenar sus tazones de agua y comida, y vacía su caja de arena siempre que sea necesario.
    • Dale algunos juguetes con los que pueda mantenerse ocupado y algunas golosinas, así asociará su nueva casa con las buenas sensaciones.
    • Si colocas toallas o mantas en el área cerrada, esto también puede hacer que se sienta más cómodo. Una toalla, manta o camiseta usadas ayudarán al gato a acostumbrarse a tu aroma.
    • Pasa un tiempo con él, de modo que se acostumbre a tu presencia y al sonido de tu voz. Sin embargo, no trates de acariciarlo o sostenerlo si parece temeroso o agresivo. Con el tiempo, el animal empezará a confiar en ti.
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    Déjalo suelto. El gato deberá estar listo para deambular por su cuenta luego de aproximadamente una semana.[18] Abre el área en la que haya estado confinado y deja que salga por sí solo. Podría desaparecer por 1 o 2 días para explorar. Deja la jaula o el área cerrada en donde se encuentre, y mantén un suministro de comida y agua. El gato regresará para alimentarse.
    • Una vez que parezca sentirse cómodo con su nuevo entorno, podrás retirar la jaula y dejar que use el refugio permanente que le hayas colocado.
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    Observa que atrape a los roedores. Los gatos cazarán, incluso si se les alimenta con frecuencia, debido a sus instintos de caza.[19] No tendrás que entrenarlo para que cace.
    • Los gatos son oportunistas. Los roedores son más fáciles de atrapar que otros animales (como las aves), y los gatos se sentarán y esperarán a que los ratones y las ratas salgan de sus madrigueras y otros escondites.[20]
    • Algunos gatos les llevarán a sus dueños los roedores que hayan matado como un “obsequio”. Otros se los comerán o los dejarán en otro lugar.

Parte 3
Parte 3 de 3:
Cuidarlo

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    Sigue velando por las necesidades básicas del animal. Incluso si se ha convertido en todo un cazador de roedores, aun así, necesitará que le brindes un suministro constante de comida y agua. Es un mito que los gatos dejarán de cazar si los alimentas.[21] [22] [23] Deberás mantener su refugio seco y cómodo. Si hace frío, coloca algunas mantas o paja en su interior.
    • Dale un suministro constante de comida seca. Si también le ofreces comida húmeda por la noche, lo atraerás a su refugio y lejos de los depredadores como los lobos, los coyotes y los búhos.
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    Pasa tiempo con tu gato. Los gatos de granero o cazadores de roedores podrían ser más solitarios que los de interior. Sin embargo, aun así valorarán un poco de atención, por lo que deberás acariciar al tuyo y jugar con él de forma frecuente.
    • En ocasiones, los gatos cazadores de exterior desaparecerán por 1 o 2 días, ya que irán a deambular y explorar. Por lo general, ellos regresarán.[24] Si no has visto al tuyo por mucho tiempo, podrías tener que buscarlo para garantizar que esté bien.
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    Haz que el veterinario lo revise. Estos gatos necesitarán controles frecuentes, vacunas y otros tratamientos preventivos.[25] [26] Dado que pasan la mayor parte del tiempo (o su totalidad) al aire libre, también podrían ser más propensos a las lesiones, los riesgos y las enfermedades; por lo que deberás vigilar al tuyo.[27]
    • El veterinario podría recomendar que tu gato reciba tratamientos especiales a fin de evitar los problemas con las pulgas, las garrapatas, los gusanos y otras plagas.

Consejos

  • A los gatos cazadores que se coman su presa con frecuencia se les deberá desparasitar una vez al mes para tratar a las ascárides; y cada tres meses, para eliminar a las tenias.

Advertencias

  • Los gatos pueden contraer una enfermedad llamada toxoplasmosis, la cual en algunos casos surge al cazar y comer animales salvajes. La mayoría de ellos serán inmunes a esta afección, pero puede transmitirse a las personas a través del contacto accidental con las heces o la arena sanitaria del gato (así como la manipulación peligrosa de la carne cruda). La mayoría de las personas serán inmunes a la toxoplasmosis, pero los niños y aquellas que tengan un sistema inmunitario débil podrían tener que ser más cuidadosos con la arena sanitaria de los gatos.
  • Las mujeres embarazadas nunca deberán sostener la arena sanitaria o las heces de gatos, ya que la toxoplasmosis causa anomalías congénitas.

Acerca de este wikiHow

Pippa Elliott, MRCVS
Coescrito por:
Veterinaria
Este artículo fue coescrito por Pippa Elliott, MRCVS. La Dra. Elliott, miembro del Colegio Real de Cirujanos Veterinarios, es una veterinaria con más de 30 años de experiencia en cirugía veterinaria y práctica en animales de compañía. Se graduó de la Universidad de Glasgow en 1987 con un título en Medicina y Cirugía Veterinaria. Ella ha trabajado en la misma clínica de animales en su ciudad natal durante más de 20 años. Este artículo ha sido visto 11 651 veces.