Este artículo fue coescrito por Beverly Ulbrich. Beverly Ulbrich es una educadora y conductista de perros, además de la fundadora de The Pooch Coach, una empresa privada de adiestramiento canino con sede en el Área de la Bahía de San Francisco. Es una evaluadora con certificación CGC (Canine Good Citizen) otorgada por el American Kennel Club y ha sido miembro de la Junta Directiva de la American Humane Association y Rocket Dog Rescue. Recibió el galardón como la mejor adiestradora de perros privada en el Área de la Bahía de San Francisco cuatro veces por SF Chronicle y por Bay Woof, y ha ganado 4 premios “Top Dog Blog”. También ha aparecido en televisión como experta en conducta canina. Beverly tiene más de 18 años de experiencia en adiestramiento y comportamiento canino, y se especializa en entrenamiento de agresión y ansiedad en perros. Tiene una maestría en administración de empresas de la Universidad de Santa Clara y una licenciatura de la Universidad de Rutgers.
Este artículo ha sido visto 7386 veces.
Tener una puerta para perros puede ser excelente para el perro y para su dueño ya que le dará un poco más de libertad para entrar y salir de la casa como le plazca y los dueños no tendrán que despertarse temprano en la mañana para sacarlo a dar un paseo matinal. Sin embargo, los perros no siempre son capaces de averiguar por su cuenta la forma de usar una puerta para perros y al principio pueden incluso tenerle miedo. Toma medidas para entrenar a tu perro a fin de que utilice la puerta y estará encantado de usarla en poco tiempo.
Pasos
Método 1
Método 1 de 3:Entrenar a tu perro con golosinas y estímulo verbal
-
1Programa la sesión de entrenamiento de forma adecuada. Es importante limitar el entrenamiento de tu perro a periodos cortos de tiempo cuando puedas darle tu completa atención. Elige una hora del día en la que no te distraigas con otras tareas y cuando tu perro esté alerta y activo.[1]
- Asegúrate de que la golosina favorita de tu perro sea de fácil acceso ya que deberás ser capaz de dársela de inmediato después de realizar el comportamiento correcto.
- Limita las sesiones de entrenamiento a 10 minutos cada vez. Esto ayudará a evitar que tu perro y tú se frustren. Puedes hacer más de una sesión en un día; sin embargo, asegúrate de tener varias horas de “descanso” entre cada sesión y no presiones la atención de tu perro por más de 10 minutos de entrenamiento.
-
2Decide si tu perro preferiría entrar o salir. ¿A tu perro le encanta ser perezoso y echarse adentro en el sofá o preferiría estar afuera corriendo alrededor del jardín? Cuando entrenes a tu perro, querrás que tenga la mayor cantidad de incentivo como sea posible para cruzar por la puerta. Si a tu perro le encanta estar afuera, haz las sesiones de entrenamiento de modo que esté adentro y tú estés afuera.[2]
- Practica con tu perro haciéndolo entrar y salir por la puerta; sin embargo, si no la utiliza para nada, empieza por hacer que vaya al lugar en el que más disfruta estar.
-
3Consigue algunas golosinas que tengan un olor fuerte. Elige una golosina que tenga un olor lo suficientemente fuerte de modo que pueda olerlas a pocos metros de distancia. Pon algunas de las golosinas en tu mano y cierra el puño con firmeza. Deja que el perro huela y lama tu mano para que sepa que las tienes.[3]
- Utilizarás estas golosinas como una recompensa cuando llegue a cruzar toda la puerta para perros. Sin embargo, es importante recompensarlo por cualquier progreso que muestre. En caso de que tu perro llegue a o cruce parcialmente la puerta, utiliza bastante estímulo verbal, pero no le des la golosina.
-
4Párate en el lado opuesto de la puerta como tu perro. Deja que tu perro te vea cruzar por la puerta. Esto no significa que tengas que arrastrarte por la puerta para perros; sin embargo, tu mascota deberá ser plenamente consciente de que estás al otro lado.[4]
- Por ejemplo, si la puerta para perros está instalada en la puerta, entonces deja que te vea salir por esa puerta (la puerta para humanos). Si está instalada en una pared normal, asegúrate de que tu perro te vea salir.
-
5Levanta por completo la solapa. Si la puerta para perros es de las que necesita un chip, tendrás que desactivarlo para el entrenamiento. Levanta la solapa hasta que quede abierta.[5]
- En la etapa inicial de entrenamiento es importante que la solapa no golpee a tu perro cuando entre o salga. Para algunos perros esto puede ser traumático y hará que tengan miedo de la puerta.
-
6Llama a tu perro. Asegúrate de utilizar una voz muy feliz y entusiasta. Actúa como si nunca hubieras estado más emocionado de ver a tu perro y que realmente querías que viniera hacia ti.[6]
- Utilizar una voz entusiasta lo emocionará y hará que quiera venir hacia ti.
-
7Recompénsalo. Es importante recompensar al perro con bastante estímulo verbal a medida que entre y salga por la puerta, incluso si no llega a salir por completo. Si tu perro sí llega a salir por completo, debes celebrar con él como si fuera lo mejor que hizo alguna vez y asegúrate de darle una golosina.[7]
- Ofrécele bastante afecto y utiliza un tono de voz muy feliz. Esto le mostrará que hizo lo correcto y que pasar por la puerta para perros no está fuera de los límites.
- Si tu perro es asustadizo, debes utilizar una voz feliz y bastante afecto, pero no debes gritarlo ya que eso puede asustarlo. Trata de adaptar la recompensa a la personalidad de tu perro. Si tu perro se asusta fácilmente, entonces mantén una voz feliz pero suave.
-
8Anda al otro lado de la puerta. Puedes repetir el proceso, pero esta vez tú deberás estar en el lado opuesto de donde empezaste. De esta forma, tu perro se acostumbrará a ir en ambos sentidos.[8]
- Si tu perro todavía tiene mucho miedo a la puerta, puedes mantenerte en el mismo lado en que empezaste, lo cual significará que cruzará por la puerta hacia su lugar preferido (interior o exterior) y hacia su persona preferida (tú).
-
9Mantén la solapa un poco más baja. Una vez que tu perro parezca cómodo con el hecho de cruzar por la puerta para perros con la solapa completamente abierta, haz que repita el proceso; sin embargo, esta vez sostén la solapa de modo que simplemente esté medio abierta. Esto significa que la solapa tocará a tu perro.[9]
- Esto puede ser un poco más aterrador para tu perro, por lo tanto, recuerda usar muchísimo estímulo, incluso si no llega a cruzar por la puerta completamente.
- Recuerda no presionar demasiado a tu perro. Si tratas de bajar la solapa y tu perro está demasiado asustado como para cruzar, termina la sesión y empieza de nuevo luego de unas cuantas horas (o al día siguiente) pero con la solapa un poco más abierta.
-
10Baja la solapa cada vez más. A medida que el entrenamiento siga y que tu perro esté más cómodo con el hecho de que la solapa lo toque, podrás bajarla un poco más cada vez. Mantén el entrenamiento positivo y optimista. Al final tu perro pasará la solapa sin que tengas que sostenerla.[10]
- Sin embargo, toma las cosas con calma. Es importante entender que el entrenamiento puede tomar semanas o meses para algunos perros. Si notas que en algún momento tu perro se pone temeroso, detén el entrenamiento y empieza de nuevo con la solapa un poco más arriba (o completamente hacia arriba). Puedes necesitar paciencia, pero al final aprenderá que la puerta es algo bueno.
-
11Haz que el perro use la solapa sin que lo llames. Durante el entrenamiento, habrás estado utilizando tus llamadas como una señal para cruzar por la puerta. Una vez que tu perro parezca completamente cómodo con el hecho de cruzar la solapa sin ayuda, puedes enseñarle que está bien cruzar la solapa sin ti.[11]
- Para hacerlo, pon a tu perro a un lado de la puerta y anda al otro lado sin llamarlo. Haz algo que sabes que tu perro disfruta. Sal y juega (con niños si tienes). Corre por el jardín y haz ruidos felices que le indiquen que se está perdiendo algo divertido. Si sale por su cuenta, celebra con él. Dale bastante afecto y juega con su juguete favorito.
Método 2
Método 2 de 3:Animar a que tu perro cruce por la puerta
-
1Decide si la personalidad de tu perro es correcta para este método. Este método solo debes utilizarlo con perros que no tienen miedo a la puerta y con los que simplemente no han descubierto la forma de utilizarla. Si intentas este método y tu perro muestra algo de miedo, entonces trata un método diferente.[12]
- Este método probablemente no funcione bien para un perro grande que no puedes levantar con facilidad y colocar en la puerta usando tus dos manos.
-
2Elige el momento adecuado para entrenar a tu perro. Cuando entrenes a tu perro, elige un momento en el que esté activo y alerta y en el que no se distraiga ni perturbe por otras cosas que pasan en la casa.[13]
- Limita la sesión de entrenamiento a 10 minutos cada vez para evitar la frustración. Si entrenas por demasiado tiempo, tanto tú como tu perro pueden llegar a sentirse frustrados, lo cual hará que el perro asocie la puerta con sentimientos negativos. Al limitar las sesiones a 10 minutos cada vez, mejorarás tus probabilidades de éxito.
- Puedes entrenar más de una vez al día si lo deseas, pero asegúrate de tener varias horas de “descanso” entre cada sesión.
-
3Levanta a tu perro. Con una voz suave y tranquila, levanta a tu perro usando tus dos manos. No querrás que tenga la idea de que algo malo va a pasar o que ha hecho algo malo. Asegúrate de que tenga claro que todo está bien.[14]
- Pon las manos con cuidado pero firmemente alrededor de la caja torácica de tu perro para que se sienta seguro.
-
4Haz cruzar a tu perro con cuidado por la puerta. Para hacerlo, tendrás que presionar la cara de tu perro suavemente contra la puerta y hacerlo cruzar. Hazlo con cuidado y de forma lenta para que no se asuste.[15]
- Hazlo con cuidado. No atasques a tu perro por la puerta ya que probablemente lo asustarás e incluso se podría lesionar.
-
5Elogia a tu perro. Una vez que tu perro cruce por la puerta, emociónate. Muéstrale que estás feliz porque cruzó por la puerta y dale bastante afecto y una golosina (si lo deseas).[16]
- Si tu perro parece tener miedo o ponerse inquieto con la puerta, detén el entrenamiento y trata otro método.
-
6Repite este proceso varias veces. Siempre y cuando tu perro se sienta cómodo, puedes seguir este tipo de entrenamiento durante algunos días. Cada vez que tu perro cruce por la puerta, asegúrate de celebrar el evento con mucha atención.[17]
- Puedes poner al perro para que cruce por la puerta más de una vez en una sesión de entrenamiento; sin embargo, recuerda limitar la sesión a 10 minutos.
-
7Sostén a tu perro delante de la puerta. Una vez que hayas puesto a tu perro cerca de la puerta varias veces, trata de sostenerlo desde su caja torácica a pocos centímetros de tal puerta. El perro debe usar su propia nariz para abrirse paso.[18]
- Si el perro parece no entender, sigue colocándolo cerca de la puerta. Al final, llegará a dominarlo.
- No olvides darle a tu perro muchos elogios cuando lo alientes a pasar por la puerta.
-
8Llama al perro para que regrese por la puerta. Una vez que tu perro haya aprendido a cruzar por la puerta, párate al otro lado y llámalo. Si llega a cruzar por su cuenta, dale bastantes elogios y una golosina.
- Si no regresa, levántalo y sostenlo de nuevo delante de la puerta para que pueda avanzar a través de ahí.[19]
Método 3
Método 3 de 3:Garantizar la seguridad
-
1Asegúrate de que la puerta sea lo suficientemente grande como para que tu perro pueda caber con facilidad. La puerta debe tener por lo menos 6 cm (2 pulgadas) más por encima de la parte superior de los hombros de tu perro a fin de que sea lo suficientemente alta para él. Asimismo, la puerta debe ser por lo menos 6 cm (2 pulgadas) más ancha que la parte más ancha del cuerpo de tu perro (por lo general los hombros o las caderas).[20]
- Cuando instales la puerta para perros, asegúrate de considerar que puede aumentar de peso a medida que envejezca. Si bien deberás asegurarte de que tu perro se mantenga en un peso saludable, si está delgado en el momento, considera que pueda ponerse más pesado en la vejez.
- Si tu perro es cachorro cuando instales la puerta, asegúrate de pensar en el hecho de que crecerá. En el caso de algunas razas, tu cachorro crecerá bastante. Cuando instales la puerta, averigua qué tan grande podría ser el perro e instala una puerta que sea lo suficientemente grande como para un perro adulto de ese tamaño.
-
2Considera la posibilidad de intrusos. Esto no necesariamente hace referencia a las personas; sin embargo, si la puerta para perros es muy grande, los ladrones podrían entrar por ahí si no es segura. También debes pensar en los posibles animales de tu zona que podrían entrar a través de la puerta para perros. Por ejemplo, si vives en una zona donde hay muchos mapaches, podrían entrar por la puerta.
- Si te preocupa este problema, considera la posibilidad de instalar una puerta de plástico que venga con cerradura. Esto te permitirá asegurar y abrir manualmente la puerta cuando sea necesario. También podrías considerar una puerta electrónica. Estas puertas vienen con un chip que va en el collar del perro y solo se abrirá con un animal que lo use. Algunas puertas incluso funcionan con el microchip de tu mascota y se abrirá para tu perro cuando se acerque.
-
3Asegúrate de que tu jardín sea un lugar seguro para tu perro. Las puertas para perros deben llevar a una zona que sea segura para tu mascota. Por lo general, este lugar será un jardín cercado. Antes de entrenar a tu perro para que use la puerta, tómate el tiempo de asegurarte de que tu jardín sea seguro para tu mascota.[21]
- Por ejemplo, asegúrate de que la valla sea lo suficientemente alta de modo que tu perro no pueda saltar. Algunos perros pueden saltar más alto de lo que podrías pensar, por lo tanto, investiga un poco sobre la raza de tu perro para ver cuán alto podría ser capaz de saltar.
-
4Refuerza la valla si es necesario. Si un perro no puede saltar, podría cavar con más facilidad. Puedes evitarlo al proteger la valla con piedras grandes o al hacer que la valla esté muy profunda en el suelo de modo que tu perro tenga que cavar bastante para sacarla.
- Antes de dejar a tu perro en el jardín sin supervisión, asegúrate de pasar tiempo viendo su comportamiento ahí a fin de que eso te ayude a identificar partes en la valla en las que tu perro podría considerar como un buen juego para saltar o cavar.
-
5Fíjate si hay plantas venenosas y sustancias químicas en tu jardín. Algunas plantas son tóxicas para los perros, por ejemplo, una hierba conocida como cola de zorro puede hacer que tu mascota se enferme gravemente si hace contacto con sus ojos o boca. Otras plantas como los helechos, aloe vera y alocasia son tóxicas para los perros. Aquí puedes encontrar una lista más completa de plantas tóxicas para perros.
- Guarda los pesticidas o sustancias químicas que estén cerca. Si notas alguna botella de herbicida, sustancia química o cualquier sustancia que pueda ser potencialmente perjudicial para tu mascota, encuentra un lugar seguro para guardarla. No la dejes tirada ahí o tu perro se puede aburrir y jugar con eso.
- Si has tratado tu césped con pesticidas o sustancias químicas, revisa la etiqueta para ver qué dice sobre las mascotas. Si no dice nada, mantén a tu perro lejos del césped hasta por lo menos 24 horas después de la aplicación y ponte en contacto con tu veterinario para ver lo que dice.
-
6Levanta cualquier roca pequeña, juguete u otro desecho que tu perro pueda tragar. Los perros algunas veces se tragan rocas por accidente y se pueden quedar atrapadas en sus intestinos. Lo mismo pasa con cualquier objeto pequeño que tu perro podría meter en su boca, el cual se lo podría tragar o hacer que se ahogue. Limita las cosas que se encuentran en tu jardín a los juguetes que son seguros para tu perro.
-
7Asegúrate de que el jardín sea un lugar divertido para tu perro. Si bien querrás que tu jardín sea seguro para tu perro, también querrás que sea divertido de modo que no se aburra y no busque formas de escapar. Asegúrate de que tu perro tenga acceso a agua fresca, sombra para ocultarse del sol caliente y bastantes juguetes para perros con los que pueda jugar.
- Por ejemplo, una buena opción son los juguetes que están hechos de caucho y que no tienen cuerdas u otras piezas que tu perro podría masticar e ingerir. Asegúrate de que el juguete sea lo suficientemente grande como para que pueda masticarlo o jugar con él, pero que a la vez no pueda tragarlo.[22]
- Si deseas darle a tu perro algo suave a fin de darle comodidad mientras tú sales durante el día, trata de usar un suéter suave y viejo durante unos días. Luego dáselo a tu perro para que lo tenga. Así le brindarás algo para que se lleve a su boca y será reconfortante para él porque olerá a ti.
-
8Enseña a los niños que la puerta para perros no es para ellos. Si tienes niños pequeños, es importante que les enseñes que la puerta para perros solo es para el perro. Un niño pequeño que trata de pasar por la puerta para perros se podría quedar atascado y sufrir lesiones. Incluso podría resultar fatal si el niño se queda atascado ahí y no puede respirar.[23]
- Instalar una puerta para perros que solo se puede abrir con un microchip o con un chip en el collar del perro también puede ayudar a evitar este problema.
Consejos
- Limita las sesiones de entrenamiento a 10 minutos. Si dedican más tiempo, es probable que tu perro y tú se sientan cansados y frustrados.[24]
- Recuerda que la paciencia es fundamental cuando se trata de entrenar animales. Tu perro aprenderá, pero le puede tomar un tiempo. No pierdas la esperanza si no lo descubre de inmediato.
Advertencias
- Nunca debes golpear a un animal ya sea que los entrenes o no. Abusar físicamente de un animal solo hará que tema la situación y también a ti. Además, eso podría dañar de forma permanente la confianza que el animal tiene en ti y en los humanos.
- Mantén el estímulo positivo. Incluso si tu perro no aprende rápidamente, no debes castigarlo. Deberás hacer que todas las asociaciones con la puerta para perros sean positivas.
Referencias
- ↑ http://thehousebreakingbible.com/wp/training-dog-door-use/
- ↑ http://thehousebreakingbible.com/wp/training-dog-door-use/
- ↑ http://thehousebreakingbible.com/wp/training-dog-door-use/
- ↑ http://thehousebreakingbible.com/wp/training-dog-door-use/
- ↑ http://thehousebreakingbible.com/wp/training-dog-door-use/
- ↑ http://thehousebreakingbible.com/wp/training-dog-door-use/
- ↑ http://thehousebreakingbible.com/wp/training-dog-door-use/
- ↑ http://thehousebreakingbible.com/wp/training-dog-door-use/
- ↑ http://thehousebreakingbible.com/wp/training-dog-door-use/
- ↑ http://thehousebreakingbible.com/wp/training-dog-door-use/
- ↑ http://thehousebreakingbible.com/wp/training-dog-door-use/
- ↑ http://thehousebreakingbible.com/wp/training-dog-door-use/
- ↑ http://thehousebreakingbible.com/wp/training-dog-door-use/
- ↑ http://thehousebreakingbible.com/wp/training-dog-door-use/
- ↑ http://thehousebreakingbible.com/wp/training-dog-door-use/
- ↑ http://thehousebreakingbible.com/wp/training-dog-door-use/
- ↑ http://thehousebreakingbible.com/wp/training-dog-door-use/
- ↑ http://thehousebreakingbible.com/wp/training-dog-door-use/
- ↑ http://thehousebreakingbible.com/wp/training-dog-door-use/
- ↑ https://www.rover.com/blog/dog-doors/
- ↑ https://dogs.thefuntimesguide.com/2008/07/how_to_dog_proof_your_yard.php
- ↑ http://www.humanesociety.org/animals/dogs/tips/dog_toys.html?referrer=https://www.google.co.uk/
- ↑ https://www.rover.com/blog/dog-doors/
- ↑ https://www.petdoors.com/pet-door-training.html