Cómo hablar con otras personas

Ser un gran conversador puede ayudarte a tener éxito en tu carrera, tu vida social y tu vida amorosa. Al igual que cualquier otra habilidad, para hablar con otras personas efectivamente se necesita de práctica y confianza. Hay varios pasos que puedes tomar para estar más cómodo al momento de comenzar y continuar una conversación.

Parte 1

Parte 1 de 3:
Empezar una conversación

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Habla con nuevas personas. A veces, la parte más difícil de hablar con las personas es encontrar la manera de iniciar la conversación. Esto puede ser especialmente intimidante si quieres hablar con alguien que no conoces. Para iniciar una conversación con una nueva persona, trata de encontrar algo que tengan en común.^{[1]
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- Por ejemplo, si estás esperando en la fila de la cafetería de tu barrio, podrías decirle a la persona delante de ti: "¿Qué es bueno aquí? Nunca he probado ninguna de sus bebidas".
- También puedes comentar la situación. Inténtalo decir: "¿No es un agradable día?". Si la persona responde en un tono favorable, puedes seguir con algunos comentarios más específicos.
- Otra forma de iniciar una conversación es haciendo un comentario acerca de la persona con la que quieres hablar. Podrías decir: "Me encanta ese bolso que llevas".
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Escoge una persona adecuada a la que puedas acercarte. Busca a alguien que no esté ocupado en otra cosa y que tenga una expresión amistosa. Por ejemplo, si estás en la fila y alguien hace contacto visual contigo, sonríele y hazle una pregunta abierta. Evita tratar de iniciar una conversación con alguien que esté hablando con otra persona o que esté desarrollando activamente una tarea.^{[2]
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- Un buen lugar para iniciar una conversación en una fiesta es cerca de la mesa de comida o en el bar. Estos lugares proporcionan temas naturales para iniciar una conversación, por ejemplo: "¿Has probado la salsa de espinacas?" o "¿Me puedes enseñar a utilizar este sacacorchos?".
- Si tienes problemas para integrarte a la fiesta, ve a la cocina. A menudo, este es un punto de encuentro, y puedes unirte a la gente mientras ayudas a mezclar bebidas o a servir los bocadillos.
- Las mismas reglas se aplican al momento de decidir acercarte a un compañero de trabajo. Espera hasta que no esté obviamente ocupado con otra persona. El almuerzo es un momento ideal para iniciar una conversación.
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Acércate a alguien que conozcas. Tal vez quieres hablar con alguien que ya conoces, pero no sepas romper el hielo. Una forma efectiva consiste en preguntarle a esa persona algo sobre sí mismo. Preguntar es una gran manera de conseguir una conversación bidireccional.^{[3]
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- Si deseas conversar con un colega en la cafetería, una buena manera de empezar es haciendo preguntas. Trata de decir: "¿Cómo estuvo tu fin de semana? ¿Aprovechaste el clima agradable?".
- Tal vez quisieras llegar a conocer a tu nueva vecina de al lado. Por ejemplo, cuando la veas recogiendo su correo, dile: "¿Cómo te estás adaptando a tu nuevo vecindario? Avísame si quieres que te recomiende una buena pizzería".
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Mantén las cosas simples. No es necesario que tengas una gran línea de apertura para comenzar a hablar con alguien. Puedes empezar diciendo algo tan simple como "Hola" o "¿Cómo estás?". A menudo, la otra persona partirá de ahí y mantendrá la conversación.^{[4]
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- Puedes hacer un simple enunciado sobre ti mismo. Después de una clase difícil de spinning, dile a la persona a tu lado: "Vaya, más tarde voy a estar adolorido".
- Al mantener las cosas simples, estarás iniciando una conversación, pero permitiendo que la otra persona te ayude a que las cosas comiencen. Tendrás menos presión encima si encuentras algo inteligente que decir.
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Evita compartir en exceso. Cuando trates de empezar una conversación, es importante que evites incomodar a la otra persona. Muchos tienen la tendencia de balbucear o hablar con nerviosismo al momento de tener una pequeña charla. Esto puede conducir a un problema social común conocido como "compartir en exceso".^{[5]
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- A menos que estés hablando en privado con alguien que te conoce bien, es mejor evitar intercambiar información privada. Por ejemplo, no trates de iniciar una conversación diciéndole a un conocido casual los recientes resultados de tu cita en el ginecólogo.
- A menudo, las personas se sienten incómodas cuando les comparten información privada. La cajera en el supermercado probablemente no quiera escuchar que a tu hija adolescente no le está yendo bien en el colegio. Cuando inicies una conversación, mantente alejado de los temas potencialmente delicados.
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Reconoce cuándo no hablar. A veces, el silencio puede ser incómodo. Tu predisposición natural podría ser la de eliminar el silencio con una pequeña conversación. Sin embargo, hay veces en las que es mejor permanecer en silencio.^{[6]
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- Si estás aburrido en el avión, es posible que quieras entretenerte hablando con tu compañera de asiento. Sin embargo, si ella te da ciertas señales sociales, encuentra otra manera de entretenerte.
- Si alguien está evitando hacer contacto visual, esa es una señal de que no quiere hablar. Probablemente, otra señal para permanecer en silencio es si ves que alguien tiene audífonos o está leyendo.
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Parte 2

Parte 2 de 3:
Continuar el diálogo

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Pregunta. Una vez que hayas roto el hielo, existen varias cosas que puedes hacer para continuar la conversación. Preguntar es una excelente manera de continuar el diálogo. Intenta preguntarle a la otra persona si puede hacer algo simple por ti.^{[7]
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- Por ejemplo, si vas a recoger a tu hijo al colegio, puedes decirle a otra madre: "¿Puedes recordarme a qué hora es la salida mañana?".
- Puedes pedirle a tu colega que te dé algunos consejos. Considera decir: "Rafael, tus diapositivas se ven siempre tan refinadas. ¿Podías darme algunos consejos?".
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Continúa con preguntas abiertas. Preguntar es una gran forma de continuar una conversación. No obstante, las preguntas abiertas son la clave para que la conversación fluya. Haz preguntas que requieran mucho más que un "sí" o un "no" como respuesta.^{[8]
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- En lugar de decir: "¿Cómo estuvo tu viaje a Cancún?", trata de decir: "Recuerdo que dijiste que ibas a viajar. ¿Qué tipo de cosas hiciste en tus vacaciones?". Esto permitirá una respuesta elaborada.
- Continúa haciendo preguntas después de la respuesta inicial. Si la persona dice: "Jugamos mucho al golf", puedes decir: "Oh, ¿cuál es tu hándicap? ¿Me puedes recomendar algún buen curso? Me encantaría mejorar mi juego".
- También puedes transformar los cumplidos en preguntas. Por ejemplo, puedes decir: "Me encanta ese vestido que estás usando. ¿Cómo encuentras prendas tan lindas?".
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Sé auténtico. No trates de forzar la conversación. En lugar de eso, trata de hablar sobre algo que realmente te importa. Si estás fingiendo interés, por lo general será evidente.^{[9]
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- En una cena, entabla una conversación con alguien que comparta tu interés. Por ejemplo, podrías decir: "Miguel, escuché que tienes una bicicleta nueva. Me encanta ir a pasear en bicicleta".
- Cuando estés en un partido de fútbol de tu hija, trata de hablar con otros padres sobre el nuevo entrenador. Por ejemplo, di: "Siento que Ana María está respondiendo bien a las prácticas adicionales. ¿Cómo le está yendo a Lucía?".
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Evita temas que maten la conversación. Después de haber estado conversando por un rato, es posible que te sientas más cómodo por cómo va la conversación. Sin embargo, todavía tienes que hacer un esfuerzo para que la conversación fluya sin problemas. Parte de ser un buen conversador es saber cómo evitar decir cosas que harán que la otra persona se sienta incómoda.^{[10]
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- Probablemente has escuchado el viejo dicho de que debes evitar hablar de política o religión en entornos sociales. Debes prestar atención a ese consejo cuando estés en un grupo diverso de personas.
- Evita aburrir a las personas. Por ejemplo, no des largos e intrincados resúmenes de tu programa de televisión preferido o de la salud de tu gato. Dales a otros la oportunidad de participar en la conversación.
- Dale el tono adecuado. En una mayor parte, la conversación debe ser alegre. Después de todo, quieres congeniar con alguien como tú. Todos nos sentimos naturalmente atraídos hacia la gente positiva. Cuando tengas duda, tratar de buscar algo optimista que decir.^{[11]
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- Por ejemplo, podrías decir: "Vaya, ha estado lloviendo mucho últimamente. ¡Al menos es probable que tengamos unas preciosas flores de primavera!".
- Está bien compadecerse por una situación incómoda. Solo trata de darle un giro positivo. Por ejemplo, di: "Ay no, hoy trabajamos hasta la noche. ¿Quieres ir a cenar luego? Conozco una buena pizzería".
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Cambia de tema. Durante la mayoría de las conversaciones que duran más que un par de minutos, es probable tocar más de un tema. Prepárate para avanzar hacia algo más que las preguntas que usaste para romper el hielo. Una buena manera de estar preparado es prestar atención a los acontecimientos actuales y a la cultura pop. Siempre podrás hacer comentarios acerca de esas cosas.^{[12]
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- Por ejemplo, podrías decir: "¿Has visto alguna de las películas nominadas a Mejor Película este año? Realmente me encantó El gran pequeño".
- Prepárate para tocar nuevos temas. Trata de decir cosas así: "Oh, tu historia me recuerda a mi viaje a República Dominicana. ¿Alguna vez has estado allí?". Esta táctica te ayudará a que la conversación fluya naturalmente.
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Incluye a otras personas. Cuantas más personas estén implicadas en la conversación, recaerá menos presión sobre ti. Toma medidas para involucrar a otros en tu grupo. Por ejemplo, si estás comiendo en la cafetería de tu trabajo, pásale la voz a tu compañero que está buscando un lugar donde sentarse y dile: "Carla, ¿te gustaría sentarte con Tomás y conmigo?".^{[13]
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- También puedes hacer esto en situaciones sociales. Tal vez estás teniendo una pequeña conversación con un conocido en una fiesta. Si ves que alguien cerca está parado solo, inclúyelo a tu círculo. Di, por ejemplo: "Vaya, estos camarones están estupendos. ¿Ya los has probado?".
- Incluir a otros en tu conversación no solo es de buena educación, sino que también puede ayudar a que la conversación fluya. Mientras más personas estén involucradas, encontrarán más cosas de las que hablar.
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Sé un buen oyente. Escuchar es tan importante como hablar. Para llegar a ser un buen conversador, debes practicar escuchar activamente. Puedes indicar verbalmente que estás escuchando y prestando atención.^{[14]
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- Trata de hacer comentarios neutros como "Eso es interesante". También puedes decir: "Dime más" para animar a la otra persona a continuar con la historia.
- Puedes utilizar un método llamado "hacer eco" para demostrar que estás escuchando. Di: "Vaya, es increíble que hayas viajado a todos los países de Europa".
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Parte 3

Parte 3 de 3:
Usar un lenguaje corporal adecuado

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Sonríe. Durante una conversación, el lenguaje corporal puede ser tan importante como las palabras que se dicen. Una de las maneras más efectivas de comunicarse es ofreciendo una sonrisa. Especialmente, es excelente para conectar con alguien que no conoces muy bien.^{[15]
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- Sonríele a alguien en el parque para perros. Si notas que sus perros están jugando juntos, sonríele al dueño de ese caniche. Eso te hará ver asequible.
- La sonrisa también es una forma eficaz para indicar apoyo. Si uno de tus compañeros de trabajo se detiene en tu escritorio para contarte una historia, si le sonríes, le estarás indicando que te interesa lo que está diciendo.
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Haz contacto visual. Mientras hablas con alguien, es importante mirarlo a los ojos. Esto demuestra que estás interesado en la conversación. Esto también indica que estás escuchando y eres respetuoso con respecto a lo que está diciendo.^{[16]
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- El contacto visual también ayuda a medir las reacciones de la otra persona. Los ojos reflejan las emociones de las personas, tales como el aburrimiento, la ira, o el afecto.
- No mires fijamente a las personas. No es necesario centrarse exclusivamente en los ojos de tu amigo. Puedes dejar que tu mirada se fije naturalmente en el entorno también.
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Asiente con la cabeza. Un simple movimiento de cabeza es una de las señales no verbales más eficaces que puedes utilizar. Asentir con la cabeza puede indicar varias cosas. Por ejemplo, le dice a alguien que entiendes lo que está diciendo.^{[17]
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- Asentir con la cabeza también demuestra que estás de acuerdo. Además, es una manera de mostrar tu apoyo a lo que se está diciendo.
- Evita mover excesivamente la cabeza. No asientes continuamente, sino anularás la autenticidad del gesto.
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Desarrolla tu confianza. El lenguaje corporal a menudo refleja nervios o ansiedad. Puede ser intimidante hablar con la gente, especialmente si eres tímido. Una de las mejores formas de aumentar la confianza en una conversación es estando preparado para escenarios distintos. Por ejemplo, si sabes que vas a conocer a mucha gente en una fiesta, ten algunos temas de conversación listos.^{[18]
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- Si vas a una fiesta de cumpleaños donde van a jugar a los bolos, prepárate para contar una anécdota divertida sobre el momento en el que te inscribiste a una liga de bolos en parejas.
- Pon en práctica tus habilidades. Ponte el reto de hablar con alguien nuevo cada día. Puede tratarse de alguien en la calle o en la escuela. Practica cómo iniciar y continuar una conversación.
- La confianza es clave cuando te acercas a un interés romántico. Una vez que hayas encontrado una línea de apertura que funcione para ti, pruébala en la persona que te gusta.
- Por ejemplo, podrías decir: "La música durante la clase de spinning siempre me hace querer bailar. ¿Conoces algún lugar bueno por aquí para escuchar música en vivo?". Dilo con una sonrisa y haciendo contacto visual.
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Consejos

Mantén una lista mental de temas útiles para iniciar una conversación.
No tengas miedo de nuevas situaciones. Probar algo nuevo te ayudará a conocer gente nueva y a practicar tus habilidades de conversación.

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