La base de maquillaje es un cosmético muy popular que ayuda a crear la ilusión de una piel suave y con un tono uniforme. El problema es que las bases de las marcas comerciales no siempre son asequibles o compatibles con el color que quieres. Es por eso que muchas personas pueden encontrar valioso conocer el secreto de cómo hacer su propia base personalizada.

Método 1
Método 1 de 3:
Comprar una sombra de ojos adecuada

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    Compra una sombra de ojos un poco más oscura que tu color de piel. La sombra de ojos le dará el color a tu base. Elige un tono que coincida con tu tono de piel.
    • Escoge un color que sea ligeramente más oscuro que el tuyo para que, cuando se mezcle con ingredientes de color más claro durante el proceso de elaboración de la base, se aclare hasta alcanzar el tono perfecto.
    • Mientras que la mayoría de la gente argumenta que las bases de gama media a alta son productos de mejor calidad, el beneficio de usar sombra de ojos para las bases caseras es que es menos costosa de comprar que las bases ya preparadas. Con los costos individuales anuales del maquillaje rondando un mínimo de 100 dólares, aquellas personas con un presupuesto más ajustado pueden preferir probar con algo un poco más barato.[1]
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    Elige entre una sombra en crema o una en polvo. Cualquiera de los dos tipos funcionará para hacer la base. Elige lo que mejor se adapte a tu tono de piel.
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    Pruébala en la tienda. Es importante probar la sombra de ojos en la tienda antes de comprarla.
    • Usa un dedo para frotarte una pequeña cantidad de sombra de ojos en la cara o en la mano y difuminarla. Si el tono coincide con el tuyo, desaparecerá en la piel. Escoge una sombra de ojos que sea un tono más oscuro que el que te de una coincidencia exacta. Además, cuando hagas la prueba, recuerda que es probable que las manos tengan un bronceado más oscuro que el de la cara.[2]
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Método 2
Método 2 de 3:
Crear la base

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    Compra una crema hidratante no perfumada. Compra un producto hidratante que pueda actuar como el ingrediente "cremoso" de la base.
    • El hidratante facial fabricado específicamente para la piel sensible de la cara funciona mejor, pero también se puede utilizar una simple loción corporal suave.
    • La loción corporal es una opción hidratante más barata, pero también puede irritarte o resecarte la piel de la cara.[3]
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    Mezcla 3/4 de cucharadita de sombra de ojos con 1 cucharadita de hidratante. Utiliza una brocha de maquillaje pequeña para mezclar cuidadosamente la sombra de ojos y la crema hidratante en un tazón.
    • Si es la primera vez que haces una base casera, puedes elegir hacer una cantidad menor hasta que perfecciones tu receta. Prueba reduciendo las cantidades a la mitad.
    • Esta es la cantidad recomendada para la sombra de ojos en polvo. La base de maquillaje con sombra en crema tiene otras cantidades.
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    Reduce la cantidad de hidratante para la base con una sombra de ojos en crema. Mezcla 3/4 de cucharadita de sombra de ojos en crema con solo 3/4 de cucharadita de hidratante.
    • Es necesario reducir la cantidad de hidratante cuando se mezcla con una sombra de ojos en crema para evitar que la base quede aguada. Esto se debe a que la sombra de ojos en sí ya es bastante cremosa.
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    Revuelve bien. Revuelve la base en un tazón con una brocha de maquillaje hasta que quede bien mezclada.
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    Usa una cuchara para comprobar la consistencia. Fíjate en la rapidez con la que la base se desliza por la cuchara. Esto determinará si está demasiado espesa, demasiado líquida o si está bien.
    • Toma una cantidad mínima de base con una cuchara. Inclina la cuchara dejándola en posición vertical. Si la base se escurre rápidamente, está demasiado líquida y necesita más sombra de ojos en la mezcla. Si la base se asienta en la cuchara y apenas se mueve, agrega más hidratante. Si la base se desliza de la cuchara a un ritmo normal o medio, tiene una consistencia perfecta.
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Método 3
Método 3 de 3:
Probar, modificar y almacenar la base

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    Prueba la base recién hecha. Aplícate un poco de base en la mitad de la cara y usa un espejo para comparar la mezcla de colores con la mitad de la cara al natural.[4]
    • Sumerge la punta de una brocha para maquillaje en la base y aplícala suavemente sobre la piel. Usa una brocha de pulido para mezclar desde el centro de la cara hacia afuera. Esto te dará una textura suave.[5]
    • Usa un espejo para asegurarte de que el color de la base coincida con tu color de piel. Si te gusta, aplícate la base en la otra mitad de la cara para tener un aspecto completo y uniforme.
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    Modifica si es necesario. Si no te convence el color de la base al compararla con tu color de piel, modifica la mezcla.
    • Si es demasiado clara, añade más sombra de ojos para oscurecerla. Si es demasiado oscura, agrega un poco de hidratante para aclarar la mezcla o empieza de nuevo y usa menos sombra de ojos. Cada tipo y color de piel es diferente. Ninguna cantidad específica es perfecta para todos los tipos de piel. Usa las cantidades sugeridas acá como una guía aproximada.
      • Los cosméticos caseros están basados en la experimentación. Puede que tengas que jugar con las cantidades y los ingredientes hasta que logres una base personalizada que te satisfaga.[6]
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    Guarda la base en un contenedor hermético. Cuando la base esté satisfactoriamente terminada, guárdala bien en un contenedor hermético para evitar que se seque.
    • Un taper pequeño funcionará muy bien para el almacenamiento. Simplemente transfiere la base del tazón mezclador al recipiente de almacenamiento. Ten cuidado de no derramarla cuando la viertas, ya que la base puede manchar algunas superficies.
    • Ten cuidado con el almacenamiento. Almacena la base en un lugar seco, lejos de la luz solar directa. No almacenes tu maquillaje en el baño ya que la humedad de la ducha puede favorecer el crecimiento de bacterias. El aire, el sol y la humedad hacen que los cosméticos se dañen con rapidez.
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Consejos

  • El rubor natural en colores neutros también puede funcionar como una alternativa a la sombra de ojos.
  • Para prevenir manchas, coloca papel periódico sobre la superficie de trabajo y usa ropa vieja al mezclar los ingredientes.
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Advertencias

  • La base casera puede endurecerse con el tiempo. Si esto sucede, agrégale hidratante y mézclala bien.
  • No uses la base si te irrita la piel.
  • Evita el contacto directo con los ojos. Si esto ocurre, enjuágate bien con abundante agua limpia.
  • Las bases líquidas se derraman fácilmente. Mantenlas en posición vertical en todo momento y ten cuidado al hacerlas, mezclarlas y aplicarlas.
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Cosas que necesitarás

  • sombra de ojos que coincida con tu tono de piel (también se puede usar rubor)
  • recipiente hermético
  • cucharilla
  • hidratante o una loción corporal suave no perfumada
  • brocha de maquillaje o cuchara para mezclar
  • tazón viejo para mezclar
  • esponja aplicadora (opcional)
  • ropa vieja (opcional)
  • periódicos (opcional)

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