La creación de tus propios fuegos artificiales puede constituir un proceso bastante sencillo una vez que hayas reunido los ingredientes correctos. Las bengalas, las bombas de humo y las serpientes luminosas son bastante seguras, pero siempre debes tener precaución al hacer o encender fuegos artificiales. Revisa las leyes y ordenanzas locales para asegurarte de que el uso de este tipo de fuegos artificiales sea legal en el lugar donde vives antes de comenzar cualquiera de estos proyectos.

Ingredientes

Hacer bengalas

  • 300 g (11 onzas) de clorato de potasio
  • 60 g (2 onzas) de virutas de aluminio
  • 2 g (0,071 onzas) de carbón
  • 1 cucharadita de dextrina
  • 9 cucharaditas de agua
  • ½ kg (18 onzas) de nitrato de estroncio (opcional, para el color rojo)
  • 60 g (2 onzas) de nitrato de bario (opcional, para el color verde)

Crear bombas de humo

  • 128 g (4,5 onzas) de azúcar
  • 192 g (6,8 onzas) de nitrato de potasio

Hacer serpientes luminosas

  • arena
  • alcohol de alta graduación (por ejemplo, Bacardi 151)
  • 1,5 g (0,053 onzas) de azúcar
  • 0,375 g (0,0132 onzas) de bicarbonato de sodio

Método 1
Método 1 de 3:
Hacer bengalas

  1. 1
    Mezcla clorato de potasio, virutas de aluminio y carbón en un tazón. Vierte 300 g (11 onzas) de clorato de potasio, 60 g (2 onzas) de virutas de aluminio y 2 g (0,071 onzas) de carbón en un tazón. Utiliza una cuchara para mezclar estos polvos hasta que se distribuyan de manera uniforme.[1]
    • Utiliza una balanza digital para pesar las proporciones de cada ingrediente de forma específica.
    • Desintegra los grumos que se formen en el polvo para que los ingredientes se mezclen por completo
    • Puedes conseguir cada uno de estos ingredientes en tiendas de productos químicos a través de internet o páginas web de minoristas como Amazon.
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    Agrega dextrina y agua a la mezcla hasta que se conviertan en una lechada húmeda. Mezcla 1 cucharadita de dextrina con 9 cucharaditas de agua en una taza. Luego, vierte una pequeña cantidad en la mezcla de polvos en el tazón. Continúa agregando agua y dextrina a la mezcla hasta que se convierta en una melaza.[2]
    • La mezcla debe lucir como un líquido espeso cuando termines de mezclar.
    • Puedes comprar dextrina en tiendas de productos químicos a través de internet.
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    Agrega nitrato de estroncio si deseas hacer bengalas rojas. Sin ningún ingrediente adicional, las bengalas se quemarán blancas. Si prefieres las bengalas rojas, mide ½ kg (18 onzas) de nitrato de estroncio en la balanza digital y agrégalo a la mezcla. Una vez que tengas la cantidad correcta, debes agregarla a la mezcla.[3]
    • Si al agregar el nitrato de estroncio la mezcla se vuelve demasiado seca, puedes agregar una pequeña cantidad de agua y dextrina para volverla una lechada.
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    Agrega nitrato de bario si deseas bengalas verdes en su lugar. En lugar de agregar nitrato de estroncio para hacer bengalas rojas, puedes utilizar nitrato de bario para crear bengalas verdes. Vierte 60 g (2 onzas) de nitrato de bario en la mezcla después de pesarlo con precisión en la balanza. Luego, mézclalo bien.[4]
    • Asegúrate de mezclar bien los ingredientes para que se distribuyan de manera uniforme.
    • Agrega más agua y dextrina si la mezcla se seca demasiado.
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    Sumerge alambres o palos en la mezcla dejando espacio suficiente para un mango. Puedes utilizar cualquier alambre o palo de madera rígido para hacer los mangos de las bengalas. Las brochetas funcionan particularmente bien. Sumerge cada mango en la mezcla y luego extráelo lentamente, de manera que la parte superior de cada palo quede completamente cubierto por la mezcla. Deja el tercio inferior descubierto para que sirva como mango.[5]
    • Una buena longitud para un palo es 25 cm (10 pulgadas). Además, es la longitud común para las brochetas.
    • Asegúrate de dejar al menos 10 cm (4 pulgadas) en la parte inferior para el mango.
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    Espera 24 horas para que las bengalas se sequen. Deja los palos en un espacio seguro y seco que se encuentre alejado de chispas o llamas abiertas. Si deseas, puedes ensartar cada palo o mango de alambre en una caja de zapatos para mantenerlos en posición vertical mientras se secan, pero esto no es necesario.[6]
    • También puedes colocar las bengalas de costado mientras se secan.
    • No toques la mezcla hasta que se seque por completo o se desprenda del mango.
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    Expón el extremo cubierto a una llama para encender la bengala. Sostén el extremo descubierto del palo o alambre como el mango. Coloca el extremo opuesto de la bengala en una llama abierta y espera a que la mezcla se encienda.[7]
    • Evita el uso de un encendedor o un fósforo para encender la bengala, ya que puedes quemarte la mano. Las velas funcionan mejor.
    • Por seguridad, debes mantener la bengala extendida lejos de tu cuerpo mientras se quema.

Método 2
Método 2 de 3:
Crear bombas de humo

  1. 1
    Crea un molde de cualquier forma con papel de aluminio. Tu bomba de humo puede tener la forma que desees. Para crear bombas en forma de disco, debes envolver el fondo de una lata de gaseosa en papel de aluminio y luego retirar la lata. La lámina debe mantener la forma.[8]
    • Además, es probable que desees utilizar una pelota, algo cuadrado o un diseño sencillo de tu elección.
    • Dale forma al papel de aluminio de manera que la abertura apunte hacia arriba y luego deja el molde a un lado.
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    Vierte 128 g (4,5 onzas) de azúcar en una sartén. Mide el azúcar con una jarra medidora seca para asegurarte de conseguir la cantidad correcta. Viértela en una sartén de tamaño estándar de 30 cm (12 pulgadas), pero aún no enciendas el fuego.[9]
    • Evita usar una jarra medidora para fluidos, ya que las medidas son diferentes.
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    Agrega 192 g (6,8 onzas) de nitrato de potasio. Vierte el nitrato de potasio en el azúcar. Utiliza una cuchara de madera para revolver ambos polvos hasta que se mezclen bien entre sí.[10]
    • Asegúrate de que los ingredientes se mezclen bien. De lo contrario, podrías terminar con una quemadura inusual una vez que termines.
    • Esparce la mezcla en la sartén una vez que la revuelvas bien.
    • Puedes conseguir nitrato de potasio en tiendas de productos químicos a través de internet o incluso en algunas grandes tiendas minoristas.
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    Aplica fuego lento a la sartén mientras revuelves la mezcla con una cuchara. Coloca la sartén en la estufa con la hornilla a fuego bajo y continúa revolviendo los ingredientes con movimientos largos y lentos. Con el tiempo, el azúcar comenzará a derretirse.[11]
    • Continúa revolviendo la mezcla a medida que el azúcar se derrite y se combina con el nitrato de potasio.
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    Retira la mezcla del fuego cuando se licúe. A medida que el azúcar se derrite y se mezcla con el nitrato de potasio, ambos elementos comenzarán a formar un lodo líquido. Una vez que se haya vuelto lo suficientemente líquido como para rodar por la sartén, debes retirarlo del fuego y apagar la hornilla.[12]
    • Continúa revolviendo la mezcla mientras la retiras del fuego.
    • Mueve rápidamente. La mezcla comenzará a endurecerse poco después de que la retires del fuego.
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    Vierte la mezcla líquida en el molde de aluminio. Ten cuidado de no derramarla mientras lo haces. Una vez que haya una capa gruesa de la mezcla en el fondo del molde (que puede tener la profundidad que escojas), deja a un lado la mezcla restante.[13]
    • Si te queda suficiente, siempre puedes crear otra bomba de humo.
    • No toques la lámina una vez que la mezcla se encuentre en su interior, ya que estará demasiado caliente.
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    Deja que la bomba de humo se enfríe y retírala de la lámina. Deja la mezcla en el papel de aluminio durante toda la noche y luego desprende la bomba de humo. La bomba en sí misma es completamente inflamable, por lo que no necesita un fusible.[14]
    • Evita encender la bomba en interiores o aspirar el humo que produce cuando está encendida.
    • Debes tener mucho cuidado al encender la bomba, ya que puede producir más humo del que esperas.
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    Enciende la bomba de humo exponiéndola a una llama. No existe un fusible en la bomba. Para encenderla, simplemente debes encender cualquier porción con un encendedor o un fósforo y luego colocarla en el suelo u otra superficie horizontal para que se queme.[15]
    • Es probable que la bomba de humo no arda con una llama visible, pero de todos modos debes mantenerla alejada de cualquier objeto inflamable por seguridad.
    • Evita sostener la bomba de humo mientras se quema.

Método 3
Método 3 de 3:
Hacer serpientes luminosas

  1. 1
    Vierte 1,5 g (0,053 onzas) de azúcar en polvo en un tazón. Mide el azúcar en un tazón mediano que sea fácil de revolver. Asegúrate de conseguir azúcar blanca en polvo como la que comúnmente se utiliza para hornear.[16]
    • Puedes moler el azúcar de mesa en un molinillo de café si no tienes azúcar en polvo.
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    Agrega 0,375 g (0,0132 onzas) de bicarbonato de sodio. Utiliza una cuchara para asegurarte de que el azúcar y el bicarbonato de sodio se mezclen bien antes de pasar al siguiente paso.[17]
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    Crea un montículo de arena y haz una depresión en el medio. No importa si eres específico acerca de la cantidad de arena que vas a utilizar, pero debes verter lo suficiente como para crear un pequeño montículo sobre el plato o la charola para hornear. Luego, presiona el dedo índice en la parte superior del montículo para crear la depresión.[18]
    • Una vez que hayas terminado, el montículo lucirá como una rosquilla.
    • La depresión debe llegar hasta la sartén o el plato en el centro del montículo.
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    Humedece la arena con alcohol de alta graduación. Vierte alcohol que sea superior al 40 % en la arena. Cuanto mayor sea la graduación del alcohol que utilices, con mayor facilidad se encenderá. El alcohol de alta graduación (como Bacardi 151) es el mejor.[19]
    • Si no tienes alcohol de alta graduación, también puedes utilizar un combustible diferente (por ejemplo, líquido para encendedores).
    • Vierte lo suficiente en la arena para humedecerla, pero no para arruinar su forma.
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    Vierte la mezcla de azúcar y bicarbonato de sodio en la depresión en la arena. Utiliza una cuchara para llenar la depresión en el centro del montículo de arena con la mezcla de azúcar y bicarbonato de sodio. Una vez más, esto no requiere una medida específica, simplemente debes llenar la depresión hasta el tope.[20]
    • En este punto, la serpiente luminosa estará lista. Para encenderla, simplemente debes encender la arena empapada en alcohol.
    • Evita agregar más alcohol o combustible una vez que enciendas la serpiente, ya que corres el riesgo de que la botella se encienda.
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    Toca la arena húmeda con una llama para encenderla. No existe una mecha en la serpiente luminosa. En cambio, simplemente debes encender un fósforo o utilizar un encendedor y acercar la llama a la arena empapada en alcohol. La arena se encenderá primero y luego la serpiente comenzará a expandirse.[21]
    • Debes alejarte de la serpiente luminosa en cuanto se encienda.
    • Ten cuidado con el área en la que vas a encender la serpiente luminosa. A medida que se enciende, la serpiente puede extenderse más allá del plato donde está colocada. Debes mantener todos los objetos inflamables lejos de la serpiente hasta que se apague.

Advertencias

  • Debes consultar las leyes locales acerca de cómo hacer y encender tus propios fuegos artificiales antes de comenzar cualquiera de estos proyectos.
  • Nunca sostengas fuegos artificiales en la mano después de haberlos encendido.
  • Siempre debes utilizar protección ocular al encender fuegos artificiales.
  • Debes mantener un extintor cerca cada vez que utilices fuegos artificiales.

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Categorías: Fuegos artificiales