Cómo hacer un corrector

Coescrito por Shara Strand

Quieres preparar tu propio corrector cosmético porque el tuyo se te ha acabado o porque no quieres un producto comercial que cierra los poros. Existen varios métodos y recetas para preparar un corrector cosmético. Mezcla y combina los ingredientes según lo que te sea más cómodo, lo que se encuentre disponible y la consistencia deseada.

Método 1

Método 1 de 3:
Humectante y polvos

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Usa un humectante como base. Para empezar, toma un poquito de humectante en tu mano o en un recipiente pequeño. Si fuera posible, usa un humectante no comedogénico, ya que no cerrará tus poros ni te causará acné.^{[1]
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Fuente de investigación}
- Algunos humectantes cerrarán tus poros, creando un ambiente ideal para el acné. Si sueles tener acné, entonces es mucho mejor que elijas un humectante no comedogénico.
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Mézclalo con polvos que combinen con tu tono de piel. Si no tienes el color exacto, mezcla polvos más claros y más oscuros hasta que consigas una mezcla que sea lo suficientemente espesa y opaca para que sirva como un corrector cosmético.
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Usa cantidades iguales de polvos y humectante. A lo mejor tengas que probar un poco de ensayo y error para conseguir las proporciones adecuadas.
- Otra alternativa es usar un humectante con color. Puedes encontrar un humectante que combine con tu color de piel, que eliminará la necesidad de darle color a tu corrector cosmético.
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Aplícatelo en la piel. Usa el corrector cosmético casero de la misma forma que usarías un producto comprado en una tienda. Coloca el corrector cosmético en el lugar que quieres cubrir y siéntete libre de usar más si lo que te has puesto no es suficiente. Póntelo con tu dedo o con una brochita. Tal vez te parezca que una brochita limpia te brinda una mayor precisión y mejores resultados que usar solo tu dedo. También es una forma más higiénica.^{[2]
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Fuente de investigación}

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Método 2

Método 2 de 3:
Aceites e ingredientes naturales

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Usa tu creatividad. No tengas miedo de mezclar varios aceites, pigmentos y agentes naturales. No es necesario que uses humectantes comerciales ni productos químicos sintéticos. ¡Averigua sobre los efectos e interacciones de los diferentes ingredientes antes de ponértelos en la piel!
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Escoge tus aceites. Ve a una botica, farmacia o tienda naturista para escoger las mejores opciones. Considera agregar vitaminas y suplementos para conseguir un efecto adicional. Por ejemplo, la vitamina E puede ayudarle a la piel a sanarse más rápido.
- Se supone que el aceite de rosa mosqueta y el aceite de espino amarillo combaten el acné.^{[3]
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  Fuente de investigación}
- El aceite de argán puede sanarte la piel y prevenir las señales del envejecimiento.
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Espesa la mezcla. Usa cera de abejas, manteca de cacao, manteca de copoazú, manteca de karité, gel de aloe vera y cera emulsionante vegetal. Cada agente espesante cuenta con propiedades únicas, pero son ampliamente intercambiables si se usan en un corrector cosmético.^{[4]
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Fuente de investigación} Busca recetas que usen una mezcla específica de mantecas, aceites y hierbas.
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Mezcla los colores. Puedes comprar pigmento puro en tiendas de productos cosméticos. Consigue un pigmento que combine con tu color de piel. Si no puedes encontrar un color que te quede bien, un profesional de la belleza podría ayudarte a escoger los pigmentos adecuados para mezclarlos.^{[5]
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Fuente de investigación}

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Método 3

Método 3 de 3:
Vaselina y polvos compactos

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Usa la vaselina como base. Cualquier jalea de petróleo funcionará bien. Un poquito de vaselina sirve mucho de ayuda, pero no la uses en exceso. Saca una gota de vaselina en un tazón pequeño o en la palma de tu mano.
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Añade los polvos compactos. Mézclalos por completo. El polvo ayuda a fijar la base y el corrector cosmético, lo cual puede ser útil cuando usas algo tan aceitoso y viscoso como la vaselina.^{[6]
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Fuente de investigación} Usa polvos compactos, ya que son más fáciles de mezclar y transportar que los polvos sueltos. Sin embargo, si usas polvos sueltos, quizás puedas conseguir una mayor cobertura en tu corrector cosmético.^{[7]
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Fuente de investigación}
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Aplícatelo en el lugar que quieres cubrir. Es probable que este corrector cosmético de bricolaje no sea tan eficaz como la mayoría de los productos comerciales, pero debe ayudarte en caso de que sea necesario.

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Consejos

Si tienes polvos sueltos, puedes mezclarlos con una crema e45 para conseguir un corrector cosmético portátil.
Asegúrate de usar más polvos que humectante.
Para las manchas rojas, escoge polvos con subtonos amarillos. Estos polvos también cubrirán las ojeras.
Si usas Neutrogena, puedes conseguir un corrector cosmético de buena calidad, y está disponible en la mayoría de las farmacias. Es un poco caro (cuesta unos 8 dólares), pero contiene ácido salicílico, que ayuda a eliminar los granos.
¡Nunca te frotes el corrector cosmético, siempre debes ponértelo con palmaditas! Si te lo frotas, se te correrá, no se integrará en tu piel y aumentarán las probabilidades de que se formen pliegues. Para cubrir los granos y las manchas oscuras, ponte un poco de corrector cosmético directamente en ese lugar con una brochita o con la punta de tu dedo medio (el primero es más higiénico y consigue mejores resultados) y después integra el maquillaje en tu piel con cuidado y hacia afuera. Asegúrate de que los bordes estén bien integrados si vas a cubrir un área amplia. ¡Recuerda siempre integrar el producto en tu piel con palmaditas o toquecitos, nunca frotándote!
Usa algunos polvos en vez de uno solo. Podría ser una manera excelente de improvisar ¡Puedes usar tu loción como un humectante!

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Advertencias

Asegúrate de no ponerte demasiados polvos ni loción humectante. Este producto puede ser tu corrector cosmético permanente.
Usa con cuidado el corrector cosmético con vaselina por un corto periodo de tiempo, porque la vaselina cierra los poros y deja la piel grasosa. Como alternativa, podrías usar un humectante facial, no corporal ni una loción, ya que estos últimos podrían cerrar tus poros, pues son para el cuerpo y no para el rostro. Su usas un humectante facial en vez de la vaselina, dejará tu piel suave, menos grasosa y con los poros menos cerrados.

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