Los pantalones nítidamente blancos de tu uniforme de béisbol no tienden a permanecer en ese estado por mucho tiempo. Después de incontables deslizamientos, roces y resbalones en el plato, es probable que se ensucien un poco. Eliminar las manchas de barro y césped de las telas de colores claros puede resultar una tarea desesperante, pero no tiene que ser así. Si empleas las herramientas adecuadas, puedes lograr que incluso los pantalones más desgastados luzcan como nuevos. Tan solo necesitas unos cuantos productos especiales de limpieza y un poco de esfuerzo para eliminar las manchas más difíciles que se producen en cada entrada.

Parte 1
Parte 1 de 3:
Darles un tratamiento previo a las manchas

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    Elimina el exceso de suciedad y los escombros. Utiliza un cepillo de cerdas duras o una esponja seca para extraer toda la suciedad que puedas de los pantalones cuando aún estén secos. Debes barrer a lo largo de los pantalones teniendo cuidado de no extender la suciedad a las áreas limpias. Sacúdelos por completo una vez que termines.[1]
    • Debes cepillar los pantalones al aire libre para que no armes un desastre dentro de casa.
    • Es importante que las manchas reciban tratamiento lo antes posible para que tengan menos tiempo de asentarse sobre la tela.[2]
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    Combina peróxido de hidrógeno y un detergente suave en una botella de aerosol. Debes mezclar aproximadamente dos partes de peróxido de hidrógeno con una parte de detergente lavavajillas y agitarlos. Ambos ingredientes contienen agentes activos de limpieza y son fundamentales para eliminar las peores manchas antes del lavado.[3]
    • Debes conservar la solución de peróxido en una botella para que cuentes con un suministro listo a la mano y le brindes tratamiento a un uniforme sucio después de cada juego.[4]
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    Rocía la solución para combatir las manchas de los pantalones. Debes rociar los pantalones abundantemente por ambos lados y concentrarte en las áreas en las que la suciedad y la decoloración son más intensas. Luego, utiliza un cepillo para aplicar la solución más profundamente sobre las fibras de la prenda y esta pueda continuar haciendo efecto sobre las manchas.[5]
    • Vuelve a aplicar la solución después de remover las manchas con el cepillo.
    • Si las manchas son muy notorias, debes colocar los pantalones al revés y rociar y cepillar también el lado opuesto de la tela.[6]
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    Deja que la solución se asiente durante 20 o 30 minutos. Debes darle tiempo a la solución para que surta efecto antes de pasar a otros métodos de limpieza más profundos. Es probable que te sorprenda lo bien que funciona el tratamiento inicial con tierra, césped y manchas de sangre.[7]
    • Deja los pantalones sobre una superficie plana y seca (como una encimera o una tabla de planchar) mientras la solución se asienta.
    • Cuanto más tiempo dejes que la solución combata las manchas, mejor será el resultado final.
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Parte 2
Parte 2 de 3:
Remojar los pantalones

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    Llena un fregadero grande con agua tibia. Debes verter agua suficiente como para sumergir por completo los pantalones. Es importante que utilices agua tibia o caliente en lugar de fría, ya que resultará más eficaz para aflojar las manchas más problemáticas.[8]
    • También puedes remojar los pantalones en una bañera si el fregadero es pequeño.
    • Si es necesario, puedes utilizar un objeto pequeño y pesado y colocarlo sobre los pantalones para mantenerlos bajo el agua.[9]
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    Agrega lejía de oxígeno. Puedes agregar al fregadero aproximadamente una taza de un limpiador a base de lejía (por ejemplo, uno de las marcas OxiClean o Clorox Oxy Magic). Revuelve el agua y el limpiador hasta que se distribuyan de manera uniforme. Estos productos están diseñados para eliminar manchas difíciles con una acción de blanqueamiento natural leve, por lo que no es necesario que restriegues demasiado las prendas.[10]
    • Para lograr los mejores resultados, debes buscar productos que estén especialmente formulados para su uso en prendas blancas.
    • Es una buena idea utilizar guantes de limpieza al manipular productos que contienen lejía y otras sustancias químicas agresivas.[11]
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    Remoja los pantalones durante varias horas. Debes colocar los pantalones en el fregadero con agua tibia y lejía. Lo ideal es que permanezcan en la solución durante un mínimo de 2 a 3 horas. Si es posible, debes dejar que se remojen durante toda la noche para asegurarte de que el limpiador cuente con el tiempo suficiente para hacer efecto.[12]
    • Si tienes prisa, puedes utilizar un limpiador que tenga una concentración ligeramente más alta y sumergir los pantalones suavemente en el agua con la mano.
    • El proceso de remojo es indispensable para eliminar las manchas de las telas blancas.
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    Enjuaga los pantalones con agua limpia. Retira los pantalones del fregadero y escurre el exceso de solución de limpieza. Vacía el fregadero y deja correr agua tibia del grifo sobre los pantalones. De esta manera, ayudarás a eliminar los escombros restantes y el agua sucia.[13]
    • Debes exprimir toda el agua de los pantalones después de enjuagarlos.
    • Luego, debes colocarlos en la lavadora y programar un ciclo de lavado regular, incluso si las manchas han desaparecido casi por completo.[14]
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Parte 3
Parte 3 de 3:
Lavar los pantalones a máquina

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    Coloca los pantalones en la lavadora. Después de remojarlos bien, es importante que laves los pantalones de inmediato antes de que se sequen. Asegúrate de lavar los pantalones de tu uniforme de béisbol solo con otras prendas blancas. Si necesitas lavar todo el uniforme, puedes colocar el resto de las prendas junto con los pantalones en la máquina.[15]
    • Si las manchas sueltas se secan por segunda vez, es probable que se vuelvan aún más difíciles de eliminar.[16]
    • Si lavas el uniforme junto con otras prendas de colores brillantes que tienden a desteñirse, podrías terminar enfrentándote a un nuevo grupo de manchas difíciles.
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    Agrega un detergente fuerte. Debes verter el detergente directamente sobre la ropa, en lugar de agregarlo por separado en un dispensador. Tendrás mejor suerte con los detergentes que disuelven manchas, ya que están específicamente formulados para prendas blancas.[17]
    • Debes utilizar una tapa llena de detergente para proporcionar el máximo poder de limpieza.
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    Lava los pantalones. Debes programar la lavadora en un ciclo de lavado normal y utilizar agua tibia. Las manchas que queden de las dos primeras fases de limpieza deben disiparse por completo después de un lavado minucioso a máquina.[18]
    • Agrega una taza de vinagre blanco destilado durante el ciclo de enjuague. El vinagre puede aclarar y suavizar las telas de colores claros, por lo que constituye una herramienta excelente para proporcionar los toques finales a las prendas más resistentes.[19]
    • Es probable que sea necesario lavar los pantalones especialmente sucios en un ciclo de lavado más pesado.
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    Cuelga los pantalones para que se sequen al aire. El intenso calor de la secadora puede hacer que los pantalones de algodón y lana mezclada se encojan. Para evitar este problema, debes colgar los pantalones en un área bien ventilada durante toda la noche. Después de esto, estarán limpios y listos para que puedas lucirlos lo mejor que puedas durante el próximo juego.[20]
    • Por lo general, es seguro colocar los pantalones hechos de poliéster y otras telas sintéticas en el secador.
    • Si los pantalones se arrugan después de secarse, puedes plancharlos a baja temperatura.[21]
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Consejos

  • Para mantener el uniforme en las mejores condiciones, las manchas deben recibir tratamiento lo más pronto posible después de que se produzcan.
  • Entre el tratamiento previo de las manchas y el proceso de remojo y secado, lavar los pantalones de un uniforme de béisbol puede tomarte un poco de tiempo. Debes tener en cuenta este detalle para que tengas listo el uniforme antes del próximo juego.
  • Utiliza un cepillo de dientes limpio para disipar las manchas adheridas después de rociarlas con una solución de peróxido de hidrógeno.
  • Debes invertir en un segundo uniforme. De esta manera, te aseguras de contar siempre con un uniforme limpio y disponible para cada juego.
  • Busca productos especialmente formulados para eliminar manchas en uniformes deportivos (por ejemplo, los de la marca Slide Out).
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Advertencias

  • Si vas a utilizar productos de limpieza a base de lejía, debes trabajar siempre en un área bien ventilada y evitar aspirar vapores nocivos o manipular limpiadores con las manos descubiertas.
  • Ciertos tipos de manchas (por ejemplo, las de arcilla roja) son particularmente resistentes y pueden ser imposibles de eliminar por completo. En estos casos, es probable que no te quede más remedio que comprar un uniforme nuevo.
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Cosas que necesitarás

  • peróxido de hidrógeno
  • un detergente lavavajillas líquido
  • lejía de oxígeno (de las marcas OxiClean, Clorox Oxy Magic, etc.)
  • un detergente para ropa (que disuelva las manchas)
  • un cepillo de cerdas duras o una esponja
  • una botella de aerosol
  • vinagre blanco destilado (opcional)

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Coescrito por:
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