Hiedra terrestre es el nombre común de una maleza perenne y rastrera llamada Glechoma hederacea. Es muy resistente y se adapta con facilidad, lo que significa que puede convertirse rápidamente en una maleza molesta y persistente. La planta se reproduce fácilmente a partir de las semillas y también a partir de pequeños esquejes, lo que provoca una rápida propagación. Los tallos pueden moverse con facilidad de un jardín o de una zona a otra. Tiene unas flores azules atractivas, pero a menudo es inconveniente debido a su agresividad.[1]

Método 1
Método 1 de 3:
Extraer la hiedra terrestre de forma manual

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    Encuentra las áreas adecuadas para la extracción manual. Esto funciona mejor en las áreas pequeñas que estén cubiertas o se vean afectadas por la planta. Si la hiedra terrestre se ha extendido ampliamente en un área, te tomará mucho tiempo el extraerla manualmente, por lo que es mejor considerar una privación de la luz solar o un tratamiento químico en estos casos.
    • Es recomendable usar unos guantes de protección si planeas extraer la planta con la mano. Los guantes pueden evitar la formación de ampollas, quemaduras por fricción y callosidades durante la extracción manual.
    • La hiedra terrestre es un alérgeno común para la piel que puede causar comezón o sarpullido por contacto. El uso de guantes evitará que tengas una respuesta alérgica inesperada al desmalezar.[2]
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    Extrae las hojas y los tallos. En el caso de las plantas que son particularmente gruesas, deberás cortar las hojas y los tallos con el fin de que las raíces sean más accesibles. Puedes hacerlo más fácilmente con unos cuantos recortes de unas tijeras de podar. Una vez que el follaje de protección superior haya sido removido, podrás concentrarte en las raíces en el suelo.
    • Mantén los pedacitos y trozos de hiedra terrestre recogidos a un lado o colócalos en una bolsa para desecharlos más tarde. Los pedacitos y trozos que se pierdan pueden resembrar la planta en la tierra.
    • Es mejor evitar hacer esto durante un día ventoso. El viento puede soplar una hoja suelta o un tallo a otro lugar donde no quieres que la planta crezca.
    • No es recomendable usar un azadón para romper el suelo o cortar a través de la capa superior de la planta. Esto puede extender aún más la hiedra terrestre.[3]
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    Arranca las raíces completamente. En los suelos sueltos y arcillosos, puede ser que las raíces se desprendan con relativamente poco esfuerzo. Sin embargo, en algunos casos, las raíces pueden ser muy resistentes. Agarra la raíz por la parte superior y aplícale una presión firme y constante hasta que se desprenda.
    • Es posible que tengas que usar una herramienta para arrancar las raices, que tiene la forma de un destornillador largo de punta plana, para ayudarte a extraer las plantas difíciles o las que tengan raíces profundas.
    • Debes inspeccionar el suelo después de la extracción manual de las raíces. Si dejas trozos de raíz, la hiedra terrestre podrá volver a crecer.[4]
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    Deshazte de todos los recortes y las raíces. Las hojas y los tallos recortados podrían servir para resembrar más hiedra terrestre, así que ten cuidado al desechar esta planta. Evita los lugares como las pilas de abono al descubierto donde el viento puede llevar semillas u hojas de vuelta a la parcela.
    • Usar un rastrillo con dientes finos puede ayudarte a cribar la suciedad para encontrar los restos de la hiedra terrestre. Incluso los trozos más pequeños pueden contribuir al rebrote.
    • Tirar la hiedra a la basura debería ser suficiente, pero también puedes deshacerte de los recortes quemándolos. Asegúrate de tener un permiso para quemar antes de hacerlo, si es algo exigido en la región donde vives.[5]
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    Agrega mantillo para evitar el rebrote. Una vez que hayas eliminado la maleza, puedes ayudar a evitar que vuelva a crecer agregando un mantillo, como las virutas de madera, en el área donde la planta crecía. Usa una cubierta normal de 5 a 7,5 cm (2 a 3 pulgadas) de mantillo para lograr un mejor efecto.[6]
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    Extrae la hiedra terrestre a medida que vuelva a crecer. Conseguir todo el sistema radicular y extraer todas las hojas portadoras de semillas puede ser una tarea difícil. Es probable que te falten algunas y que la planta reaparezca. Cada vez que veas que las hojas onduladas de hiedra terrestre reaparecen, arráncalas. Con el tiempo, deberán dejar de reaparecer.
    • Deberás notar que la hiedra terrestre disminuye después de cada desmalezamiento, pero puede tardar hasta un año o más antes de que la planta sea completamente eliminada.[7]

Método 2
Método 2 de 3:
Privar a la hiedra terrestre de la luz solar

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    Priva a la planta de luz solar. La hiedra terrestre, como otras plantas, necesita de la luz para crecer. Sin embargo, esta planta puede sobrevivir incluso con poca luz, como en una sombra densa. Por este motivo, si piensas utilizar este método, la luz debe estar completamente obstruida hacia la planta.[8]
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    Cubre el área afectada con hiedra terrestre. Hay muchos objetos que puedes usar para este propósito. Por ejemplo, puedes colocar un trozo grande de cartón, un paño o una lona sobre la planta para bloquear totalmente la luz.
    • Si la hiedra terrestre crece entre otras plantas que quieres conservar, puedes considerar hacer un agujero circular en un paño o en una lona pesada. De esta manera bloquearás la luz hacia la hiedra terrestre que rodea la planta que quieras conservar sin privarla de luz.
    • Cualquier planta circundante que sea privada de luz morirá junto con la hiedra terrestre. Esto probablemente significa que tendrás que volver a replantar la parcela más adelante.[9]
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    Protege la cubierta de las molestias. El viento, los animales u otros factores ambientales pueden hacer que la cubierta cambie de lugar. Estabiliza la cubierta amontonando algo de tierra, rocas u otro tipo de peso sobre ella para mantenerla en su lugar.
    • Para asegurarte de que la luz esté completamente bloqueada, debes comprobar que el cartón sea lo suficientemente grande como para cubrir al menos 15 cm (6 pulgadas) más allá de cualquier tallo sobresaliente.[10]
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    Espera a que la planta muera. En muchos casos, una semana de privación de luz causará que la hiedra terrestre se marchite y muera, aunque dependiendo de la riqueza del suelo y de otros factores, esto puede tomar más tiempo. Echa un vistazo periódicamente bajo la cubierta para revisar si la hiedra terrestre ha muerto o no.
    • Cuando notes que todas las partes de la hiedra terrestre están marchitas, arrugadas y carentes de color verde, la planta estará muerta.[11]
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    Extrae la planta y limpia los restos en el área. Existe el riesgo de que se resiembre la hiedra terrestre incluso después de que la planta haya muerto. Para evitar que vuelva a brotar, deberás recoger toda la materia vegetal, incluyendo las raíces, y deshacerte de ellas desechándolas o quemándolas.
    • Asegúrate de usar unos guantes cuando manipules o extraigas directamente la hiedra terrestre. Mucha gente es alérgica a esta planta.[12]
    • Algunos lugares requieren que solicites un permiso para la quema con el fin de evitar las falsas alarmas de incendio. Asegúrate de tener un permiso para la quema antes de intentar deshacerte de esta planta con fuego.

Método 3
Método 3 de 3:
Matar la hiedra terrestre con productos químicos

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    Elige un herbicida adecuado para tratar la hiedra terrestre. Existen muchos herbicidas que puedes usar, aunque debes saber que esta planta es resistente a muchos de los tratamientos comunes. Los herbicidas comunes usados para el control del diente de león probablemente no sean lo suficientemente fuertes como para matar a la hiedra terrestre.
    • Dale prioridad a los herbicidas de tres vías, conocidos como herbicidas Trimec, dado que los compuestos especiales que contienen son efectivos para eliminar la hiedra terrestre.[13]
    • Algunos herbicidas pueden afectar a otras plantas alrededor de la hiedra terrestre. Es aconsejable que consultes la etiqueta del mismo para conocer todos sus efectos antes de aplicarlo.
    • Algunos herbicidas dejan residuos durante un período de tiempo después de ser aplicados y que pueden ser perjudiciales para los niños o los animales. En estos casos, deberás cerrar el área y vigilar a los niños y a las mascotas hasta la próxima vez que llueva o hasta cuando se indique en la etiqueta que el herbicida ha disminuido a niveles seguros.
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    Trata la planta con herbicidas en otoño. Este es el momento ideal para tratar con productos químicos la hiedra terrestre. Debido a que en esta época del año, la planta comienza a almacenar nutrientes para el invierno en el sistema de tallos y raíces. Esto significa que el tratamiento herbicida tendrá un mayor efecto sobre la planta.[14]
    • Cuando se utiliza un tratamiento con herbicidas, una mayor cantidad no siempre es lo mejor. Sigue las instrucciones que vienen con el herbicida para lograr los mejores resultados.
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    Vuelve a tratar la hiedra terrestre en primavera, si es necesario.[15] Tratar la hiedra terrestre con herbicidas durante la primavera es una medida de seguimiento eficaz de los tratamientos en otoño, aunque la aplicación durante la primavera no será tan efectiva. Una aplicación de seguimiento durante la primavera es más adecuada para los casos severos o particularmente difíciles.[16]
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    Aplica tratamientos anualmente para conseguir los mejores resultados. Si tienes una parcela que es susceptible a la hiedra terrestre, o si esta planta es común en el área, es probable que reaparezca de nuevo por otra fuente incluso si la matas o la extraes por completo. En este caso, es probable que tengas que aplicar el herbicida anualmente en el jardín para asegurarte de que la planta no reaparezca.
    • También puedes hacer que el jardín sea menos acogedor para las hiedras terrestres si creas un ambiente con luz solar intensa al podar las ramas que dan sombra.
    • Una cubierta gruesa de césped también puede hacer que el jardín sea menos hospitalario para la hiedra terrestre. Al plantar césped que crezca bien bajo sombra, es menos probable que la hierba terrestre aparezca en las áreas a la sombra que sean más susceptibles a la planta.[17]
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    Utiliza un método natural para controlar la planta. Si no quieres usar productos químicos en la planta, puedes esterilizar la hiedra terrestre con un poco de vinagre hortícola. Otras opciones naturales para controlar la planta incluyen la adición de cal al suelo junto con calcio y magnesio. Esto elevará los niveles de pH del suelo y lo hará inhóspito para el crecimiento de hiedra terrestre.

Consejos

  • Dependiendo de la región en la que vivas, la hiedra terrestre puede responder de manera distinta a ciertos tratamientos químicos. Si el herbicida que utilizas no parece funcionar, deberás cambiarlo.
  • La hiedra terrestre se lleva mejor con la luz de baja intensidad. Puedes hacer que la parcela sea menos amigable con la hiedra terrestre al mantener las plantas bien podadas de modo que estén bien iluminadas.

Advertencias

  • Aunque a veces se recomienda utilizar una solución de sal de boro (conocida como bórax) para matar la hiedra terrestre, aplicar esta sustancia puede tener un efecto negativo significativo en la vida vegetal circundante y debe evitarse.[18]

Cosas que necesitarás

Extraer la hiedra terrestre de forma manual

  • guantes protectores (recomendados)
  • tijeras de podar (opcionales pero recomendadas)
  • rastrillo
  • escardilla (opcional)

Privar a la hiedra terrestre de la luz solar

  • guantes protectores
  • cubierta para la luz (una lona, un paño grueso, cartón, etc)
  • objetos pesados (como unas piedras, para mantener la cubierta en su lugar)

Matar la hiedra terrestre con productos químicos

  • pesticida adecuado (se recomienda el herbicida Trimec)
  • aplicador para el pesticida

Acerca de este wikiHow

Maggie Moran
Coescrito por:
Especialista del hogar y jardinería
Este artículo fue coescrito por Maggie Moran. Maggie Moran es profesional en jardinería en Pensilvania. Este artículo ha sido visto 7731 veces.