Los incendios eléctricos son una de las principales causas de los incendios domésticos y pueden provocar daños graves en tu casa u oficina. Los incendios eléctricos también pueden lesionar a tus seres queridos y poner a otras personas en riesgo de sufrir lesiones. Puedes prevenir los incendios eléctricos al asegurarte de que los enchufes, tomas de corriente y cables sean seguros. También debes utilizar los aparatos eléctricos de forma adecuada y mantener el cableado eléctrico de tu casa u oficina.

Método 1
Método 1 de 3:
Mantener los enchufes, tomas de corriente y cables eléctricos

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    Asegúrate de que todas las tomas de corriente estén bien puestas y sujetas a la pared. Empieza por revisar todas las tomas de corriente de tu casa o de tu trabajo. Asegúrate de que estén bien puestas y sujetas a la pared, ya que los enchufes sueltos pueden representar un riesgo de descarga o incendio. Si ves que alguna de las placas de pared está rota o que no hay una placa, coloca una nueva sobre las tomas de corrientes para que no haya cables eléctricos expuestos.[1]
    • También debes cubrir las tomas de corrientes que no se utilicen con tapas protectoras, en especial si tienes niños pequeños que pueden moverse en el lugar. Así evitarás electrocuciones y otras lesiones eléctricas.
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    No manipules los enchufes eléctricos. Nunca debes sacar la tercera clavija de un enchufe para intentar que encaje en una toma de dos conductores. Tampoco debes doblar o torcer las clavijas del enchufe, ya que eso puede ser un peligro eléctrico.[2]
    • Asegúrate de no forzar nunca los enchufes en una toma de corriente. En vez de ello, sujeta la sección superior cubierta del enchufe con firmeza para deslizarlo dentro y fuera de la toma de corriente. Jalar del cable puede desgastarlo y aumentar el riesgo de un incendio eléctrico.[3]
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    Utiliza un protector de sobretensión para varios enchufes. Sobrecargar una toma de corriente con muchos enchufes puede provocar un incendio eléctrico. En vez de ello, compra varios protectores de sobretensión o extensiones eléctricas y ponlos en las tomas de corriente de tu casa. De esta forma, no debes enchufar más de uno o tres cables a la vez en la extensión eléctrica.[4]
    • Asegúrate de conseguir extensiones eléctricas con protección interna contra sobrecargas. La protección interna contra sobrecarga hará que la extensión eléctrica se apague si hay sobrecarga, evitando que se produzca un incendio eléctrico.[5]
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    Reemplaza los cables eléctricos desgastados o agrietados. También debes revisar los cables eléctricos de tu casa para asegurarte de que no estén desgastados o agrietados. Si lo están, reemplázalos por unos nuevos. Es posible que tengas que ponerte en contacto con el fabricante de un aparato a fin de obtener un cable de repuesto.[6] [7]
    • También debes asegurarte de que el enchufe esté bien conectado al cableado eléctrico. No debe haber ningún cableado o componente expuesto en el enchufe o en el cable.
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    Utiliza cables de extensión como una solución temporal. Si bien puede ser tentador utilizar cables de extensión para alargar los cables de tus electrodomésticos o aparatos electrónicos, esto solo debe ser una solución temporal. No debes utilizar cables de extensión como un cableado eléctrico permanente para tu casa u oficina. Pueden ser un gran peligro eléctrico.[8]
    • Si utilizas cables de extensión, asegúrate de que tengan cierres de seguridad. Así evitarás que los niños pequeños reciban una descarga eléctrica con los cables.
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    Mantén los cables eléctricos lejos de las alfombras y del agua. Procura no colocar los cables eléctricos debajo de las alfombras, tapetes y muebles donde queden ocultos. Al final podrían provocar un incendio si se desgastan y entran en contacto con la alfombra o los muebles. También debes colocar los cables eléctricos en zonas de poco tránsito para que no los pisen con frecuencia ni los manipulen de ninguna manera.[9]
    • También debes mantener el agua lejos de los cables eléctricos, ya que el agua puede provocar chispas en los cables y podría provocar un incendio eléctrico. Por ejemplo, no utilices una secadora de cabello junto a un lavabo o una bañera.
    • No claves ni grapes los cables eléctricos en las paredes, piso u otros objetos, ya que esto puede interferir con la corriente eléctrica y provocar un peligro eléctrico.
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Método 2
Método 2 de 3:
Usar aparatos y equipos eléctricos de forma segura

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    Sigue las instrucciones del fabricante. Asegúrate de seguir las instrucciones del fabricante cuando uses cualquier aparato o equipo eléctrico. No uses los productos de una forma no recomendada por el fabricante.[10]
    • Nunca debes usar aparatos defectuosos en tu casa u oficina. Haz que el fabricante o un electricista calificado los revise.
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    Desconecta los electrodomésticos pequeños cuando no los uses. Trata de adquirir el hábito de desconectar los electrodomésticos pequeños, como los hervidores de agua, tostadoras y secadoras de cabello, una vez que termines de usarlos. Así ahorrarás electricidad y reducirás el riesgo de que se produzca un incendio eléctrico debido a estos aparatos.[11]
    • También debes asegurarte de desenchufar todos los aparatos antes de limpiarlos. Deberás evitar que el agua entre en contacto con los aparatos mientras estén enchufados.
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    Asegúrate de utilizar las bombillas adecuadas en el punto de iluminación. Solo debes utilizar bombillas que se ajusten a la potencia del punto de iluminación. No uses bombillas de mayor potencia que la recomendada en el punto de iluminación, ya que representa un riesgo eléctrico.[12]
    • Verifica que las bombillas estén bien puestas. Unas bombillas mal puestas pueden provocar un sobrecalentamiento, lo que a su vez puede provocar un incendio eléctrico.
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    Asegúrate de tener interruptores con detección de falla a tierra en tus tomas de corriente. Los interruptores con detección de falla a tierra (GFCI, por sus siglas en inglés) pueden ayudar a prevenir los incendios eléctricos al desconectarse de forma automática si un circuito está sobrecargado o en riesgo. Es posible que tu casa u oficina ya tenga GFCI instalados en las tomas de corriente. En las tomas de corriente habrá un pequeño botón negro de “prueba” y otro botón rojo de “reinicio”. Puedes usar esos botones para restablecer la corriente eléctrica en caso de sobrecarga.[13] [14]
    • El tipo más común de GFCI es el “tipo receptáculo”, el cual un electricista calificado puede instalarlo en las tomas de corriente.[15] Debes hacer que instalen GFCI en toda tu casa, como en tu cocina, baños, lavadero, taller, sótano y garaje.
    • También hay GFCI temporales y portátiles para los lugares de construcción y zonas exteriores en las que se utilizan herramientas eléctricas o equipos de jardinería, como cortacéspedes o recortadoras.
    • Los GFCI de tu casa u oficina los debes probar cada mes a fin de garantizar el correcto funcionamiento. Los debe probar un electricista calificado.
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Método 3
Método 3 de 3:
Dar mantenimiento al cableado eléctrico en tu espacio

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    Pon atención a las señales de advertencia de un cableado defectuoso. Las casas y departamentos más antiguos corren un mayor riesgo de tener cableado defectuoso. Debes estar atento a cualquier señal de advertencia de cableado defectuoso en tu espacio y asegúrate de que el cableado lo inspeccione un electricista calificado lo antes posible. Hay varias señales de advertencia, entre ellas:[16]
    • Las bombillas parpadean y las luces se atenúan cuando utilizas determinados aparatos.
    • Los interruptores de luz están calientes al tacto.
    • Los enchufes echan chispas al intentar conectarlos.
    • Los enchufes suenan, por ejemplo, hay un zumbido, crujido o silbido.
    • Los disyuntores y fusibles se disparan o hacen cortocircuito de forma constante.
    • Los cables eléctricos y cajas de fusibles se sienten calientes al tacto.
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    Haz que un electricista calificado revise el cableado eléctrico. Debes hacer inspeccionar el cableado eléctrico de tu casa u oficina antes de mudarte al espacio y de forma constante. Asegúrate de contratar a un electricista calificado para que haga la inspección de todo el espacio.[17]
    • El electricista debe verificar que los disyuntores y fusibles sean adecuados para el circuito que protegen. Los disyuntores también deben funcionar de manera correcta.
    • El electricista también debe revisar que no haya cables ni puntos de iluminación sueltos. Debe reemplazar el cableado roto o defectuoso que haya en el lugar.
    • El electricista también puede aconsejarte que aumentes la capacidad del servicio eléctrico de tu espacio, en especial si tiendes a tener fusibles que se funden o disparan con frecuencia. Quizás tengas que aumentar la capacidad del servicio eléctrico a fin de mantener el ritmo de un gran número de luces, electrodomésticos y aparatos electrónicos en tu espacio.
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    Cambia el cableado eléctrico cada diez años. Debes asegurarte de que el cableado eléctrico de tu espacio se cambie al menos cada diez años a fin de evitar cualquier riesgo de incendio eléctrico. Es posible que tengas que pedirle a un electricista calificado que haga pequeñas mejoras en tu espacio y que recomiende protección adicional, como GFCI en otras zonas de tu casa.[18]
    • También debes asegurarte de que los detectores de humo de tu casa se reemplacen cada diez años. Verifica la fecha de fabricación del detector de humo a fin de confirmar que tiene menos de diez años. Si no es así, reemplázalo por uno nuevo.
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