El enanismo en los perros es un trastorno genético y hereditario. Sin embargo, por suerte, es relativamente fácil de detectarlo y los signos pueden distinguirse cuando un cachorro tiene tan solo dos semanas. Los cachorros con enanismo serán claramente más pequeños que el resto de la camada poco después del destete. Trabaja con el veterinario para monitorear el desarrollo del perro y pregúntale acerca de las soluciones posibles para cualquier malestar que observes. El dolor que produce el enanismo se puede controlar mediante medicamentos y, en casos de enanismo grave o muy doloroso, un cirujano veterinario puede corregir quirúrgicamente los huesos deformados.[1]

Método 1
Método 1 de 2:
Reconocer los signos de enanismo

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    Observa si el cachorro tiene un retraso en el crecimiento. Fíjate si el cachorro crece más lentamente que el resto de la camada. Los perros con enanismo tienden a conservar su pelaje esponjoso de cachorro y tienen un aspecto más pequeño y atrofiado. Mira su cara y su boca para ver si tiene hocico de zorro o un retraso en el crecimiento de los dientes.[2]
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    Inspecciona las deformidades o anomalías faciales del cachorro. Muchos de los signos iniciales de enanismo en los perros involucran un retraso en el crecimiento y una estructura ósea deforme en la cabeza y la cara. Estas anomalías empezarán a notarse cuando el cachorro tenga de 8 a 12 semanas.[3] Si tienes un cachorro que parece desarrollar estos rasgos, puede tener enanismo. Identifica las siguientes características:
    • cabeza grande en proporción al cuerpo
    • ojos saltones
    • dientes torcidos
    • huesos mandibulares desproporcionadamente grandes
    • dientes de cachorro que no se caen
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    Busca anomalías dérmicas y genitales en el cuerpo del cachorro. No todos los síntomas de enanismo están relacionados con la estructura ósea. El trastorno también puede afectar a la capacidad del perro de desarrollar una capa de pelo uniforme sobre el cuerpo. Es por esto que muchos perros con enanismo tienen un pelaje desigual y moteado. Los perros enanos macho también suelen tener los genitales externos muy pequeños. Además, uno de sus testículos o ambos pueden no descender.
    • Los perros enanos también pueden tener manchas de pigmentación más oscura o más clara junto con manchas de piel escamosa o seca.
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    Observa al perro mientras come y trata de detectar signos de megaesófago. Aunque es menos común que algunos de los otros síntomas asociados a los huesos, el megaesófago es un síntoma ocasional del enanismo en perros. Los perros con el trastorno tienen un esófago más grande que el promedio y tienen problemas para tragar y digerir la comida. En consecuencia, suelen vomitar después de comer y a menudo tienen un peso inferior al normal, pudiendo parecer desnutridos.
    • El trastorno se produce por la parálisis del esófago, lo que puede hacer que la comida o el agua se queden en el esófago o pasen a los pulmones.

Método 2
Método 2 de 2:
Cuidar a un perro con enanismo

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    Lleva al perro con un veterinario si sospechas que tiene enanismo. Si has notado alguno de los síntomas mencionados en el perro, llévalo con un veterinario lo más pronto posible. Dile los síntomas del cachorro, la gravedad aparente de los mismos y si parece estar adolorido. Toma en cuenta que cuanto más pronto lleves a un perro con enanismo a ver a un veterinario, más eficaces serán los tratamientos.[4]
    • Si sospechas que el perro tiene un megaesófago, descríbele al veterinario los síntomas relacionados. Por ejemplo, si el perro vomita siempre 30 minutos después de la cena y tiene problemas para mantener un peso saludable, díselo al veterinario.
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    Pídele al veterinario que le administre hormonas de crecimiento al perro. En algunos casos, a los perro con enanismo se les puede inyectar hormonas de crecimiento, lo que puede hacer que sus huesos atrofiados crezcan y se fortalezcan. Habla con el veterinario sobre esta opción. En la mayoría de los casos, le inyectará al perro hormonas de crecimiento extraídas de cerdos. Esta solución puede ser costosa y solo debes tomarla en cuenta si estás dispuesto a pagar por varias inyecciones caras.
    • Además, toma en cuenta que las hormonas de crecimiento pueden tener algunos efectos secundarios negativos en los perros, incluyendo reacciones alérgicas graves.
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    Dale al perro una dieta saludable para evitar la obesidad. Los perros con enanismo (que no tienen megaesófago) propenden a ser obesos a medida que envejecen. Evita este patrón poco saludable dándole al perro comida de alta calidad y asegurándote de que haga abundante ejercicio a diario. Habla con el veterinario para averiguar maneras en las que puedas ayudar al perro a mantener un peso saludable en función de su edad y raza.[5]
    • Si correr le produce dolor al perro, llévalo a pasear lentamente durante 20 minutos una vez al día.
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    Evita que el perro haga un esfuerzo físico excesivo. Aunque a la mayoría de los perros les gusta correr, saltar y jugar al aire libre, los perros con enanismo pueden lastimarse si ejercen demasiada tensión en sus patas pequeñas o en sus articulaciones hinchadas. Por lo tanto, minimiza cualquier actividad intensa y asegúrate de que el perro no termine agotado. Puede ser difícil con un cachorro enérgico, pero trata de sacarlo a pasear a un ritmo ligero y de mantenerlo calmado.[6]
    • Evitar que el perro haga un esfuerzo excesivo también ayudará a prevenir cualquier problema relacionado con la dificultad para respirar o la obstrucción de los conductos nasales.
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    Haz que el perro se someta a una cirugía dental si no se le caen los dientes de cachorro. Si el perro tiene 30 semanas y no se le han caído los dientes de cachorro, un veterinario tendrá que extraérselos quirúrgicamente. Si los dientes de cachorro no se extraen, los dientes de adulto crecerán atravesando las encías que los rodean, lo cual le causará un dolor intenso al perro. Lo más probable es que el veterinario pueda extraer todos los dientes problemáticos en una sola intervención. Es posible que adormezca o sede al perro dependiendo de su temperamento y de la intensidad de su dolor.

Consejos

  • Las hembras con enanismo suelen ser incapaces de reproducirse. Como síntoma asociado, pueden tener ciclos de celo muy cortos e irregulares, o no tenerlos del todo.
  • El enanismo tiene su origen en un problema de la glándula pituitaria del perro, lo cual provoca un retraso en su crecimiento. El enanismo en los perros no siempre es un problema. De hecho, algunas razas han sido modificadas para que presenten rasgos de enanismo, incluidas las patas cortas (por ejemplo, los perros salchicha, los corgis y los basset hounds).[7]
  • Lamentablemente, la mayoría de los perros con enanismo hipofisario grave no llegan a los 3 o 4 años de edad. Sin embargo, puedes seguir dándole al perro una calidad de vida razonablemente alta mientras viva.
  • Pregúntale al veterinario si se siente cómodo tratando a tu(s) perro(s) con enanismo. Si no tiene mucha experiencia con perros con enanismo, puede recomendarte a alguien más calificado.

Acerca de este wikiHow

Pippa Elliott, MRCVS
Coescrito por:
Veterinaria del Colegio Real de Cirujanos Veterinarios
Este artículo fue coescrito por Pippa Elliott, MRCVS. La Dra. Elliott es una veterinaria con más de 30 años de experiencia. Se graduó en la Universidad de Glasgow en 1987, y ha trabajado como cirujana veterinaria durante 7 años. Después, la Dra. Elliott trabajó como veterinaria en una clínica de animales durante más de una década. Este artículo ha sido visto 1135 veces.
Categorías: Perros