¿Tienes un libro que está pasando por un mal momento? Si tienes páginas sueltas o rotas, una cubierta desprendida, una encuadernación rota o manchas de suciedad en todo el libro, no te preocupes. Es bastante simple resucitar un libro para unos cuantos años más de buena lectura. Dependiendo de lo que busques arreglar, puedes volver a tener el libro funcionando con un poco de pegamento o cinta adhesiva, una goma de borrar, paciencia y una mano firme.

Método 1
Método 1 de 5:
Insertar páginas sueltas

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    Abre el libro en donde pertenezcan las hojas sueltas. Si unas cuantas hojas en el libro se han soltado, no te preocupes. Abre el libro en el lugar en donde te gustaría insertar la página suelta.
    • Si el libro no se queda abierto por su cuenta, asegúrate de sujetar las páginas con un pisapapeles.[1]
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    Aplica una línea delgada de pegamento a lo largo de la encuadernación de la página en el libro. Coloca una línea delgada de pegamento archivístico a lo largo del borde vertical de la página a la que te gustaría adherir la página suelta. El pegamento debe estar lo más cerca posible de la encuadernación. Asegúrate de usar un pegamento archivístico, el cual no debe contener ácido.[2]
    • No pegues múltiples páginas sueltas juntas ya que esto no será estable con el tiempo.
    • Puedes comprar pegamento archivístico en tiendas de artesanía o de un proveedor de productos archivísticos.[3]
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    Vuelve a insertar la página en su lugar. Coloca la página en su lugar cuidadosamente, teniendo cuidado de alinear los bordes de la página suelta con los bordes de las páginas adyacentes.
    • Para prevenir que brote cualquier pegamento, puedes poner un trozo de papel manteca a lo largo de la página para que absorba cualquier pegamento que se escape. De esta manera, las páginas no se pegarán.[4]
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    Cierra el libro y colócalo debajo de pesos. Para garantizar que la página se quede plana dentro del libro mientras se seca, sujétalo con otro libro más pesado.[5]
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    Deja que el libro se seque de 24 a 48 horas. Aunque el pegamento archivístico se secará dentro de unas cuantas horas, es mejor dejar que el libro seque por lo menos durante 24 horas.[6]

Método 2
Método 2 de 5:
Reparar páginas rotas

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    Identifica la dirección de la rasgadura. En la página rota, identifica si la rasgadura tiene una sola dirección. Si no la tiene, será recomendable reparar solo una dirección a la vez.[7]
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    Corta una tira de cinta adhesiva que sea 0,6 cm (1/4 pulgada) más larga que la rasgadura. Corta la cinta adhesiva archivística 0,6 cm (1/4 pulgada) más larga que la rasgadura de tal manera que la reparación sea más estable.
    • Debes ser selectivo con el tipo de cinta adhesiva que uses. Una cinta adhesiva de reparación de documentos archivísticos será más segura para el libro.[8]
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    Coloca la cinta adhesiva a lo largo de la rasgadura. Centra la cinta adhesiva sobre la rasgadura de tal manera que la cinta se extienda más allá de esta en ambas direcciones. Luego coloca la cinta a lo largo de la rasgadura y alísala con las manos o con una carpeta rígida.[9]
    • Si vas a usar una carpeta rígida, usa el borde para alisar la cinta adhesiva.

Método 3
Método 3 de 5:
Arreglar una cubierta desprendida

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    Abre la cubierta sobre una superficie plana. Coloca la cubierta abierta sobre una superficie plana delante de ti.
    • Si la cubierta del libro está extremadamente suelta, pero no completamente desprendida, puedes despegarla cuidadosamente del libro en rama, la parte del libro que está contenida dentro de la cubierta.[10]
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    Aplica pegamento archivístico en el lomo del libro en rama. Usando un pincel pequeño, aplica pegamento archivístico uniformemente a lo largo del libro en rama y deja que seque por 10 minutos.
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    Aplica una capa delgada de pegamento archivístico a lo largo del lomo de la cubierta. Usando el pincel, aplica pegamento uniformemente a lo largo del lomo de la parte interna de la cubierta.[11]
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    Vuelve a colocar el libro en rama dentro de la cubierta. Alineando el lomo del libro en rama y el lomo de la cubierta, vuelve a colocar el libro en rama dentro de la cubierta del libro.
    • Puedes colocar papel manteca entre la cubierta y la primera y última página del libro para prevenir cualquier goteo de pegamento.[12]
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    Cierra el libro y coloca pesos encima. Cierra el libro firmemente, asegurándote de que todo esté alineado correctamente. Luego coloca un libro más pesado encima para sujetarlo mientras se seca.
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    Deja que el libro seque de 24 a 48 horas. Aunque el pegamento archivístico se secará dentro de unas cuantas horas, es mejor dejar que el libro seque por lo menos durante 24 horas.[13]

Método 4
Método 4 de 5:
Arreglar una grieta en la encuadernación

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    Abre el libro en donde la encuadernación esté rota. Abre el libro en donde el pegamento de encuadernación se haya roto. Sabrás que esto ha pasado porque el libro se abrirá fácilmente en la grieta y serás capaz de ver el pegamento de la encuadernación. Repararlo garantizará que las páginas o los segmentos de páginas no se caigan de la encuadernación.[14]
    • En particular, el pegamento de encuadernación de libros gruesos es infame por romperse parcialmente mientras estás leyendo.
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    Aplica una línea delgada de pegamento archivístico a lo largo de la unión. Aplica pegamento archivístico cuidadosamente a lo largo de la unión interior del libro en donde esté expuesto el pegamento viejo.
    • Puedes usar un pincel pequeño si te gustaría aplicar el pegamento más uniformemente.
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    Cierra el libro y usa bandas elásticas para asegurarlo. Cierra el libro firmemente y coloca 2 bandas elásticas a su alrededor para mantenerlo estable. Coloca una banda elástica hacia la parte superior del libro y otra hacia la parte inferior.[15]
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    Deja que el libro seque de 24 a 48 horas. Aunque el pegamento archivístico se secará dentro de unas cuantas horas, es mejor dejar que el libro seque por lo menos durante 24 horas.[16]

Método 5
Método 5 de 5:
Limpiar el libro

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    Usa una esponja de limpieza seca para eliminar la suciedad superficial. Usa una esponja de limpieza seca, que es un bloque de goma vulcanizada que se encuentra en tiendas de productos archivísticos, para quitar cuidadosamente la suciedad. Quita cualquier residuo con un pincel suave o un accesorio de cepillo suave en la aspiradora.[17]
    • Nunca uses agua con la esponja. Esto le causará daños permanentes al libro.
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    Absorbe las manchas de grasa con toallas de papel. Si tienes una mancha de grasa problemática, puedes colocar toallas de papel a lo largo de esta y cerrar el libro. Esto debe absorber la grasa de una mancha reciente.[18]
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    Borra las marcas de lápiz. Usando una goma de borrar plástica, puedes eliminar las marcas de lápiz borrando con un movimiento hacia delante. Quita el polvo de goma de borrar con un pincel suave o una aspiradora.[19]
    • Las marcas de tinta no se pueden eliminar.

Advertencias

  • Si el libro tiene un valor monetario o sentimental, debes llevarlo a un conservador de libros profesional para garantizar mejores resultados.

Cosas que necesitarás

  • pegamento archivístico
  • esponja seca
  • goma de borrar
  • pinceles
  • papel manteca
  • libros pesados
  • bandas elásticas

Acerca de este wikiHow

Lois Wade
Coescrito por:
Lois Wade
Exbibliotecaria de bachillerato
Este artículo fue coescrito por Lois Wade. Lois Wade fue bibliotecaria de bachillerato durante 4 años. Tiene experiencia en la reparación, encuadernación y protección de libros, así como el cuidado y la organización general de libros. Este artículo ha sido visto 129 599 veces.
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