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Cómo cuidarse

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Una vez que recibe el diagnóstico del VIH, el paso más importante que puede dar a continuación es buscar cuidado médico. Buscar cuidado médico y mantenerse en tratamiento lo ayudará a manejar el VIH eficazmente y a tomar decisiones que pueden ayudarlo a conservar la salud por muchos años.

Póngale atención a su salud mental. Recibir el diagnóstico del VIH es un hecho que puede cambiarle la vida. Se pueden sentir muchas emociones: tristeza, desesperanza e incluso enojo. Pero tener el VIH no es, bajo ningún concepto, una sentencia de muerte. Los proveedores de atención médica y de servicios sociales aliados, que con frecuencia se encuentran en el consultorio de su proveedor médico, tendrán las herramientas para ayudarlo a superar las etapas que le siguen al diagnóstico y a comenzar a manejar la infección.

Hablar con otras personas que tienen el VIH también podría resultarle útil. Busque un grupo local de apoyo. Puede servirle saber cómo otras personas con el VIH manejaron su diagnóstico. También puede ver historias y testimonios sobre cómo otras personas viven bien con el VIH, en este sitio web y en el de la campaña Detengamos juntos el VIH de la iniciativa de los CDC Actúa contra el SIDA.

Diagnóstico reciente

Si recibió el diagnóstico en el consultorio de su proveedor de atención médica o en un entorno no clínico (feria de salud, organización comunitaria o evento de realización de pruebas), posiblemente ha recibido mucha información sobre el VIH, su tratamiento y como conservar la salud. Dese tiempo para asimilar la información y para buscar cuidado médico y tratamiento inmediatamente. Si no tiene mucha información, este sitio web es un buen lugar donde comenzar a familiarizarse con el VIH.

Si recibió el diagnóstico mediante una prueba del VIH en el hogar, es importante que lo confirme para estar seguro de que realmente está infectado. Los fabricantes de las dos pruebas del VIH para el hogar aprobadas por la FDA pueden ayudarlo con los próximos pasos. Los dos fabricantes ofrecen consejería confidencial y, según la prueba que se haya hecho, le darán una remisión para que se haga una prueba de seguimiento o le harán una prueba de seguimiento con la muestra de sangre que les había enviado.

Busque cuidado médico

Si tiene un proveedor de atención médica primario (alguien que maneja su atención médica habitual y sus pruebas anuales), esa persona podría tener el conocimiento médico para tratar su VIH. De no ser así, podrá remitirlo a un proveedor de atención médica que se especialice en el cuidado y el tratamiento del VIH.

El enlace de remisiones de la Academia Estadounidense de Medicina del VIH o el Localizador de centros de pruebas y servicios de cuidado del VIH en HIV.gov podrían ayudarlo a encontrar un experto en el VIH. Estos recursos proporcionan directorios de búsquedas de proveedores médicos especializados en el VIH, organizados por ciudad o estado, así como una lista de servicios que proporcionan y otros criterios de búsqueda. El Directorio del Programa de VIH/SIDA Ryan White también puede ayudarlo a acceder a cuidado médico.

Es importante que comience el cuidado médico y el tratamiento contra el VIH tan pronto como reciba el diagnóstico. La terapia antirretroviral (TARV) se recomienda para todas las personas que tengan el VIH, independientemente de la cantidad de tiempo que hayan tenido el virus o de lo sanas que estén. Comenzar la terapia antirretroviral retarda el avance del VIH y ayuda a proteger su sistema inmunitario. Si toma los medicamentos constante y correctamente, la TARV puede mantenerlo sano durante muchos años y reducir significativamente sus probabilidades de transmitirle el virus a sus parejas sexuales.

Muchas personas que tienen el VIH y que no buscan cuidado médico, terminarán por recibir un diagnóstico de SIDA. Esto sucede porque si no se trata, el VIH atacará el sistema inmunitario y permitirá que se produzcan diferentes tipos de cánceres e infecciones potencialmente mortales. Todavía no existe cura para el VIH, pero la terapia antirretroviral puede prolongar drásticamente la vida de muchas personas con el VIH y reducir sus probabilidades de infectar a otras personas.

Encuentre un equipo de profesionales de la salud

Encontrar un equipo de profesionales de la salud que sepan sobre el cuidado del VIH es un paso importante para manejar su cuidado y tratamiento.

¿Quiénes deben componer mi equipo de profesionales de la salud?

Su proveedor de atención médica para el VIH debe ser quien encabece su equipo de profesionales de la salud. Esa persona lo ayudará a determinar qué medicamentos para el VIH son los mejores para usted, le recetará terapia antirretroviral (TARV), seguirá su progreso y será su aliado en el manejo de su salud. Él o ella también puede ayudarlo a conectarse con otros tipos de proveedores que puedan atender sus necesidades. Su proveedor primario de atención médica para el VIH puede ser un médico con el título de MD o DO, un enfermero practicante (NP) o un asistente médico (PA).

Además de su proveedor de atención médica para el VIH, su equipo de profesionales de la salud puede incluir a otros proveedores, a profesionales de la salud aliados y a proveedores de servicios sociales que sean expertos en el cuidado de las personas con el VIH. Estos profesionales incluyen a los siguientes:

Proveedores de atención médica
Profesionales de la salud aliados
Proveedores de servicios sociales

¿Cómo puedo trabajar con mi equipo de profesionales de la salud para proteger mi salud?

El tratamiento del VIH tiene más éxito cuando usted participa activamente en su cuidado médico. Eso significa tomar sus medicamentos para el VIH cada vez, a la hora indicada y de la manera indicada, no faltar a sus citas médicas y comunicarse de manera sincera con su proveedor de atención médica. Esto se logra cuando usted hace lo siguiente:

También puede ver historias y testimonios en este sitio web sobre cómo otras personas con el VIH trabajan con sus equipos de profesionales de la salud para mantenerse en cuidado y tratamiento médicos.

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