Cómo preparar tej

2 métodos:Tej tradicional Tej alternativo rápido

El tej (o t'ej) es un hidromiel de Etiopía. Hay muchas formas de elaborar esta bebida alcohólica, pero la tradición más simple solo requiere de miel y agua. Si tienes poco tiempo, también puedes hacer una versión corta de coctel con miel, agua y vino blanco.

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Ingredientes

Tej tradicional

Para 4 L (1 galón) aproximadamente

1 L (1 cuarto) de miel
4 L (1 galón) de agua
375 ml (1 a 1/2 taza) de flores comestibles (opcional)

Tej alternativo más rápido

Para 1 L (4 tazas) aproximadamente

500 ml (2 tazas) de vino blanco
500 ml (2 tazas) de agua
60 ml (1/4 de taza) de miel

Método 1 de 2: Tej tradicional

1
Hierve el agua. Vierte los 4 L (1 galón) de agua en una cacerola grande y haz que hierva a fuego alto.
- Déjala hervir entre 1 y 2 minutos. Después retírala del fuego y permite que se enfríe hasta llegar a temperatura ambiente.
- Este paso solo es necesario si vas a utilizar agua de caño, pues esta suele tener elementos contaminantes como cloro y minerales duros. Podrás obviar este paso si decides utilizar agua destilada.
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2
Prepara cualquier tipo de flor comestible fresca. Aunque no es necesario, puedes darle sabor al tej con flores comestibles como los dientes de león y las violetas, u otras hierbas.^[1]
- Recoge las hierbas y lávalas para retirar toda la suciedad y otros contaminantes.
- Corta la flor en piezas irregulares y luego espárcelas en el fondo del pote o frasco que piensas utilizar.
3
Incorpora la miel. Vierte 1 L (1 cuarto) de miel en el pote o frasco que vas a usar. Debes echarla directamente sobre las flores preparadas previamente, si corresponde.
- La miel cruda y sin pasteurizar funciona mejor en este proceso, pero la que está preparada comercialmente también servirá si es la única opción que tienes disponible.
- Cuando prepares bastante tej, es más fácil utilizar un pote grande o alguna vasija de cerámica similar. Sin embargo, si es necesario puedes reemplazarlo por varios frascos de vidrio más pequeños.
- Si utilizas varios frascos, cerciórate de distribuir los ingredientes en todos los recipientes por igual.
4
Cubre la miel con la misma cantidad de agua. Vierte 1 L (1 cuarto) de tu agua a temperatura ambiente en el pote de miel. Revuélvela bien hasta que la miel se haya disuelto.^[2]
- Para obtener mejores resultados, utiliza una cuchara de palo para este paso y para todo el resto del proceso. No la laves entre las etapas. Las bacterias “buenas” de fermentación pueden acumularse en la madera porosa, razón por la cual esta favorece el proceso de descomposición y mejora el sabor final de la bebida.
5
Añade el resto del agua. Vierte los 3 L (3 cuartos) restantes de agua sobre la miel disuelta, dentro del pote. Revuélvelos bien hasta que se combinen.
- La textura de la mezcla debe ser uniforme en todo el tej.
- Si pruebas la mezcla en este momento, te parecerá muy dulce. Sin embargo, este sabor se atenuará conforme la bebida se vaya fermentando.
- Asegúrate de que haya al menos entre 2,5 y 5 cm (1 y 2 pulgadas) de espacio libre en la parte superior del pote o frasco después de incorporar el agua. Este espacio adicional hará que revolver la mezcla sea más fácil.
6
Deja que la mezcla repose entre tres y siete días. Cubre la boca del pote con estameña o una toalla de cocina limpia. Ponla a un lado en un lugar cálido y deja que se fermente por varios días o hasta que aparezca espuma con burbujas en la superficie del líquido.
- Mezcla la bebida dos o tres veces al día durante este paso.
- Cubrir el pote con una tela evitará que ingrese el polvo o algún insecto, pero su característica porosa permitirá que entre la levadura natural y trabaje en tu bebida. No lo cubras con una tapa apretada.
- Lo ideal será que el líquido se fermente entre 16 y 27 °C (60 y 80 °F) de temperatura. Colocarlo en una mesa o un mostrador lejos de la luz solar directa generalmente proporcionará la calidez adecuada.
- El tiempo exacto puede variar. Si el aire a su alrededor es un poco frío, la bebida necesitará un periodo inicial de fermentación más largo.
7
Cuela los sólidos. Una vez que termine el periodo inicial de fermentación, vierte la bebida a través de un tamiz de malla fina en una jarra de vidrio grande.
- Si no tienes un tamiz puede colocar estameña o filtros de café sobre un embudo y verter el tej a través de ellos. Solo tienes que colar las hierbas, flores y contaminantes sólidos.
- Asimismo, puedes utilizar un sifón para transferir la bebida del pote a la jarra.
- Deja la menor cantidad posible de espacio libre en este recipiente. Un menor acceso de oxígeno es mejor para la parte final de la fermentación. De ser necesario, puedes llenar el espacio que sobra con más miel y agua en la proporción de una medida de miel por cuatro de agua.
8
Cierra la jarra con una válvula de fermentación. Coloca una en la parte superior de la jarra. El sello entre la válvula y el recipiente debe estar bien apretado.
- Las válvulas de fermentación con diseños diferentes funcionan de manera distinta, de modo que es una buena idea leer las instrucciones que vinieron con la tuya para saber cómo instalarla adecuadamente.
- Generalmente, tendrás que insertar un corcho especial o un tapón de goma en la parte superior de la jarra y colocar la válvula en un agujero al centro de esta pieza. Agrega agua, brandy o vodka a la válvula de fermentación, llenándola hasta la mitad, antes de asegurarla con su tapa.
9
Fermenta el tej hasta que las burbujas se detengan. Regresa la bebida a una ubicación cálida y deja que fermente entre dos y cuatro semanas.
- Como se indicó anteriormente, la temperatura ideal oscila entre 16 y 27 °C (60 y 80 °F).
- El tiempo exacto que se requiere para la fermentación puede variar. Sin embargo, en esencia solo tienes que esperar hasta que no se formen más burbujas en tu válvula de fermentación. Una vez que esto sucede, las levaduras que se encuentran dentro de la bebida ya no estarán consumiendo azúcar ni produciendo gas.
10
Coloca el producto final en una botella. Vierte el tej terminado en botellas de vidrio. Ciérralas con corchos o tapas herméticas.
- Podría ser más fácil verter el tej en las botellas con la ayuda de un embudo. También se puede utilizar un sifón para el traslado.
- Ten en cuenta que tendrás que retirar la tapa de la válvula de fermentación antes de poner la bebida en las botellas.
11
Disfrútalo fresco o añejo. El tej está listo y lo puedes disfrutar de inmediato. No obstante, si deseas puedes guardarlos a temperatura ambiente por varios años antes de consumirlo.
- Añejar el tej suavizará el dulce natural de la bebida, lo que creará un sabor más intenso y maduro.
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Método 2 de 2: Tej alternativo rápido

1
Calienta el agua y la miel juntos. Combina estos dos ingredientes en una cacerola pequeña. Colócala sobre la estufa y calienta el contenido a fuego lento.^[3]
- Revuélvelos mientras los calientas. Sigue moviendo y calentando hasta que la miel esté completamente disuelta y la mezcla se vea espesa y uniforme.
- Este paso generalmente tomará entre 5 y 10 minutos.
2
Enfría la mezcla. Vierte el agua con miel en un recipiente hermético de vidrio o plástico. Colócalo en el refrigerador y enfría la mezcla completamente.
- Dependiendo de la temperatura que haya alcanzado la mezcla, enfriarla podría tomar entre 30 minutos y 2 horas. Debe sentirse completamente fría al tacto antes de utilizarla.
3
Combina el hidromiel con el vino. Vierte toda la mezcla de agua con miel y todo el vino en un decantador de vidrio. Mézclalos bien para combinarlos.
- Utiliza una cuchara de bar o una varilla agitadora larga para mezclar la bebida.
- Sigue mezclando hasta que no puedas diferenciar los dos líquidos.
- Un vino blanco ligero y un poco dulce servirá mejor. Considera el Riesling, el Soave o el Pinot grigio.^[4]
4
Sirve frío. Enfría un poco la bebida antes de verterla en vasos para servir. Disfruta de inmediato.
- Puedes guardar esta versión rápida por varias semanas, pero es posible que tengas que mezclarla ligeramente después de unos días si la miel empieza a asentarse.
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