Cómo ser distante

Evita el drama innecesario. Mantente al margen de todo lo que no sea de tu incumbencia. Esto asegurará que no te pillarán en confusiones emocionales de otros. Esto es extremadamente perjudicial si quieres mantener un comportamiento distante. Expón con inteligencia, si tienes que hacerlo, que no te pillarán en esa situación. Puede que la gente se sorprenda, incluso que se enfade a veces, pero respetarán que no quieras tomar un bando en un conflicto que no te importa.

Mantente sereno. No dejes que nada te ofenda. Estate siempre preparado para cualquier cosa que se te pueda venir encima. Esta tranquilidad impregnará tu peculiaridad y traducirá "tranquilidad" a todo el mundo. Es una señal para los otros de que tienes cierta indiferencia que te permite entrar y salir de los líos de la vida sin perder tu tranquilidad vital.

No muestres tu dolor. ¿A quién le importa lo que otro escuchó o qué rumores van por ahí o quién vio qué con sus propios ojos? Si quieres ser distante, tienes que manejar tanto el dolor, como tu dignidad y gracia al máximo. Si te vas a desmoronar, hazlo en privado, en tu propia casa. No lo hagas en público.

Cree en ti mismo, pero siempre recuerda que la arrogancia hará que la gente te odie. Un poco de seguridad (humilde, pero orgulloso de ti mismo) te hará ganarte el cariño de la gente. Imagina una escala del 0 al 10, siendo 0 oprimido y 10 arrogancia chulesca. Un 5, justo en el medio, es una apuesta segura. Pero incluso entonces, no tengas vergüenza al proyectar hacia un 7 o un 8 para evitar que la gente te menosprecie.

Sonríe a veces. Sonreír es un gran potenciador del humor. Te sentirás mejor y todo el mundo a tu alrededor se sentirá mejor también. Además es una gran manera para mostrarle al mundo que tienes una buena naturaleza y eres incansable. Una sonrisa les dice a la gente que nada te puede deprimir.

Mantén a la gente en la oscuridad. Nadie necesita saber qué vas a hacer, a donde vas o a qué hora aparecerás en la fiesta. No tienes que ser solapado, simplemente guárdate tus asuntos para ti.

No hables demasiado. Recuerda: menos es mas. Responde las preguntas que la gente te haga pero no des pie a nada más. No hables cuando no tengas nada de decir y no rellenes espacio cuando hay un silencio en la conversación. Con asentir basta. Cuando hablas con más detalle, verás que la gente escucha más que si estuvieses hablando como si no hubiera mañana.

Sé enigmático. Si eres difícil de entender, parecerás más interesante. Por todos los medios, se abierto y generoso con tus amigos cercanos, pero mantén un halo de misterio cuando estés con gente conocida.