Las mariposas son insectos únicos y delicados que pueden encontrarse en muchos colores y patrones diferentes y hermosos. En caso de que debas alimentar con regularidad a algunas mariposas o de que tan solo quieras darles un bocadillo a las que pasen por tu jardín, puedes hacerlo de varias formas. El tipo de alimento que les des a las mariposas y la forma como debas alimentarlas dependerá de si están heridas, si están en la naturaleza o si están en un hábitat.

Método 1
Método 1 de 3:
Alimentar a las mariposas en la naturaleza

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    Bríndales néctar de flores a las mariposas en la naturaleza. Las mariposas en su entorno natural sobreviven consumiendo el néctar que producen distintos tipos de flores, por lo que este es el mejor tipo de alimento que puedes darles. Los algodoncillos, las zinnias y las caléndulas gozan de popularidad entre las mariposas, así que podrías plantarlos en tu jardín como una forma de atraer y alimentar a las mariposas.[1]
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    Emplea néctar de fruta enlatado como una alternativa al néctar de flores. En caso de que no quieras sembrar flores y cuidar de ellas, podrías comprar en cambio un poco de néctar de fruta enlatado. Para tener éxito al servirlo, debes verter un poco en la tapa de una botella de plástico o saturar un pañuelo de papel con él y luego colocarlo en un comedero para mariposas, en el pasamanos de un porche o en algún lugar similar.[2]
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    Dales agua con azúcar a las mariposas en caso de que no cuentes con néctar. El agua con azúcar sirve como un néctar improvisado. Para ello, debes mezclar 1 parte de azúcar de mesa blanca de caña y 4 partes de agua tibia hasta que el azúcar se disuelva por completo. Con esto, les brindarás nutrición y energía a las mariposas de forma que puedan desarrollarse bien.[3]
    • El azúcar de mesa blanca de caña les brinda a las mariposas los mejores nutrientes, además de que se disuelve con facilidad en comparación con los azúcares de otro tipo.[4]
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    Alimenta a las mariposas con fruta podrida como una alternativa. Corta un poco de fruta que esté echándose a perder para dársela a las mariposas. Les gusta comer sobre todo toronjas, naranjas, fresas, duraznos, nectarinas, manzanas y plátanos que estén pudriéndose. Puedes mantener las rodajas de fruta apeteciblemente húmedas añadiéndoles un poco de agua o jugo de fruta.[5]
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    Elabora un comedero para mariposas. Para alimentar a las mariposas en la naturaleza, lo mejor es comprar o elaborar un comedero para mariposas de algún tipo, lo cual puede hacerse de diversas formas (por ejemplo, puedes colgar de un árbol una botella de agua de plástico llena de comida o disponer en el jardín un plato poco profundo con una base). Deja volar tu imaginación y elabora un comedero apetecible que atraiga a tantas mariposas como sea posible.

Método 2
Método 2 de 3:
Alimentar a las mariposas en un hábitat

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    Emplea Gatorade o jugo de fruta como una solución fácil. Para alimentar a las mariposas dentro de un hábitat, lo más fácil es emplear Gatorade o una bebida de jugo ya preparada. El Gatorade y el jugo de fruta por sí solos contienen el azúcar y el agua necesarios para brindarles nutrientes a las mariposas. Si lo que quieres es poder alimentarlas con rapidez y facilidad, debes utilizar estos productos.[6]
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    Elabora tú mismo una solución creativa de alimento para las mariposas para así obtener los mejores resultados. En caso de que estés dispuesto a dedicar un poco más de tiempo y esfuerzo al alimento para las mariposas de forma que te asegures de brindarles la nutrición máxima, puedes preparar tú mismo una solución de alimento mezclando 90 ml (3 onzas) de agua o Gatorade y 1 cucharadita (5 ml) de jarabe simple. Luego, incorpora 6 gotas de salsa de soya.[7]
    • Puedes preparar tú mismo un jarabe simple añadiendo 1 taza (240 ml) de azúcar a 1 taza (240 ml) de agua. Haz que la mezcla casi hierva, pero retírala del fuego justo antes de que empiece a hacerlo.
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    Sirve el alimento líquido en un recipiente pequeño y poco profundo para que sea de fácil acceso. Si quieres que el alimento sea atractivo para las mariposas, será necesario que lo sirvas en un recipiente adecuado. Mientras más pequeño y menos profundo sea, mejor. En lo posible, opta por un platillo o la tapa de una botella. Tan solo debes llenar el platillo o el recipiente, colocarlo en el hábitat y cerrar el hábitat.[8]
    • Asimismo, puedes emplear una taza pequeña o una vela votiva. Sin embargo, estas opciones son más profundas, por lo que debes tener cuidado de llenar el recipiente con canicas de forma que las mariposas puedan posarse sobre ellas al comer.
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    Dales fruta fresca en brochetas si tienes diversas especies de mariposas. Las frutas constituyen una fuente adecuada de comida para todo tipo de mariposas. Por tanto, esta podría ser tu mejor opción si en tu hábitat hay diversas especies. Atraviesa trozos de fruta con una brocheta o un trozo de bambú y luego colócalos en el hábitat.[9]
    • En caso de que la fruta no permanezca en la brocheta, asegura una atadura de alambre para pan debajo del trozo de fruta que se encuentre en la parte inferior.
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    Coloca la fruta en la zona más iluminada del hábitat. Debido a que, por instinto, las mariposas se sienten atraídas hacia las zonas con mucha luz, les será más fácil encontrar la fruta si se encuentra en una parte más iluminada del hábitat.[10] Coloca las brochetas de fruta de manera horizontal en el suelo del hábitat de las mariposas o bien disponlas de manera vertical en un rincón de la parte más iluminada. Las mariposas deben poder encontrar y consumir la comida por su cuenta.[11]

Método 3
Método 3 de 3:
Ayudar a las mariposas heridas a comer

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    Opta por líquidos como jugos calientes para niños, refrescos de cola y ponches de fruta. Los jugos para niños, los refrescos de cola y los ponches de fruta constituyen el mejor tratamiento de primeros auxilios para las mariposas que estén heridas o enfermas o que sean jóvenes. En lo posible, emplea estos líquidos como alimento, teniendo cuidado de dárselos a temperatura ambiente o a una mayor.[12]
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    Empapa un papel toalla con el alimento líquido y luego colócalo en un plato. Elige el tipo de alimento que prefieras y empapa un papel toalla con él. De esta forma, las mariposas podrán consumir el alimento sin que sus patas se mojen demasiado.[13]
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    Levanta cada mariposa y colócala sobre el papel toalla empapado. En primer lugar, debes asegurarte de tener las manos completamente secas. Cuando una de las mariposas cierre las alas, tómalas con mucho cuidado por los extremos, levanta la mariposa y colócala sobre el papel toalla para que pueda probar el alimento que haya allí. Haz lo mismo con todas las mariposas.[14]
    • Es muy fácil herir de gravedad a las mariposas al levantarlas si no lo haces con suavidad. Tener cuidado al manipularlas es de gran importancia.
    • Debes hacerlo de esta forma, ya que las mariposas saborean con las patas.
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    Baja la probóscide de la mariposa usando un mondadientes si es que ella no lo hace por sí misma. Después de colocar a las mariposas sobre el papel toalla, es probable que reconozcan que hay comida a su disposición y bajen automáticamente las probóscides para consumirla. En caso de que alguna de las mariposas no lo haga, debes tomar un mondadientes o un sujetapapeles y bajar tú mismo la probóscide con mucho cuidado hacia la comida.[15]
    • Es posible que la mariposa al principio se resista e intente alejar el mondadientes o el sujetapapeles, pero debes persistir durante un par de minutos. En caso de que para entonces no deje de resistirse, debes detenerte y volver a intentarlo en el espacio de 1 a 2 horas.
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    Ofréceles comida a las mariposas por lo menos una vez al día. Levanta con cuidado a cada una de ellas por los extremos de las alas y colócalas sobre el papel toalla empapado de comida por lo menos una vez al día. En caso de que tengas dificultades para lograr que una mariposa coma, debes darle unas cuantas oportunidades más para ello en el transcurso del día. Es posible que incluso las mariposas que coman voluntariamente coman también en estas otras oportunidades, ya que las mariposas suelen preferir alimentarse en momentos espaciados.[16]

Advertencias

  • Los cuerpos de las mariposas son extremadamente delicados, y podrías herirlas de gravedad o matarlas por accidente si no las tratas bien. Para evitarlo, debes asegurarte de no tratar de tocarlas e interactuar con ellas sin antes saber con exactitud cómo hacerlo de forma segura.

Cosas que necesitarás

Ayudar a las mariposas heridas a comer

  • jugos para niños, refrescos de cola o ponches de fruta
  • papeles toalla
  • platillo
  • mondadientes o sujetapapeles (opcional)

Alimentar a las mariposas en la naturaleza

  • flores
  • néctar de fruta enlatado
  • tapa de botella o pañuelo de papel
  • azúcar de mesa blanca de caña
  • agua tibia
  • comedero para mariposas

Alimentar a las mariposas en un hábitat

  • Gatorade o jugo de fruta
  • jarabe simple
  • salsa de soya
  • recipiente pequeño y poco profundo
  • canicas (opcional)
  • brocheta o bambú
  • trozos de fruta fresca
  • atadura de alambre para pan (opcional)

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