Una cadena de bicicleta es una colección de eslabones con pasadores, placas y rodillos que conecta los engranajes delantero y trasero, lo que te permite pedalear. Las cadenas suelen soltarse por una variedad de razones (por ejemplo, ajustes inadecuados y desperfectos). Sin embargo, este problema es fácil de solucionar. Tus manos pueden ensuciarse un poco con grasa, pero estarás pedaleando tu bicicleta nuevamente en poco tiempo.

Método 1
Método 1 de 3:
Reconectar la cadena

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    Examina la cadena de transmisión primero. Si presenta piezas dobladas o rotas, debes repararlas o reemplazarlas antes de reconectar la cadena suelta. Asegúrate de examinar no solo la propia cadena, sino también los cambios de velocidades y el cassette (que son los engranajes). Este detalle es especialmente importante después de un accidente para asegurarte de que no existan daños.[1]
    • Después de reparar la cadena de la bicicleta, es una buena idea que revises el cassette, los cambios de velocidades y los tornillos de límite para verificar si están correctamente ajustados o necesitan un reemplazo.
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    Coloca la bicicleta al revés o cuélgala desde un soporte. De esta manera, facilitarás la fijación de la cadena y evitarás que la bicicleta ruede mientras trabajas. Debes voltear la bicicleta para que descanse sobre el asiento y el manillar. Colócala suavemente en el suelo para evitar rayones y marcas.
    • Los soportes sostienen la bicicleta al revés en el aire y son excelentes para el mantenimiento. Sin embargo, dado que la mayoría de las cadenas se sueltan durante el recorrido, es probable que no tengas acceso a un soporte. En cambio, puedes colocar la parte frontal del asiento sobre una vara horizontal grande. Mantén la bicicleta a unos 1,2 m (4 pies) del suelo o al menos lo suficientemente alto como para que la rueda trasera no toque el suelo.
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    Observa en qué engranaje se encuentra la bicicleta. Los cambios de velocidad son las máquinas pequeñas en los engranajes delanteros y traseros que físicamente mueven la cadena de un engranaje a otro. Observa dónde descansa actualmente revisando el cambio, que estará alineado con el engranaje. El objetivo es volver a colocar la cadena en este engranaje.
    • El cambio delantero, justo al lado de los pedales, parece un pequeño soporte metálico que se cierne sobre el engranaje en el que debe ubicarse la cadena.
    • El cambio trasero, que se encuentra junto a la rueda trasera, parece un pequeño brazo mecánico. Este brazo se desliza hacia adelante y hacia atrás debajo del cassette (la colección de engranajes) para mover la cadena y se ubicará debajo del engranaje correcto.
    • Muchas bicicletas indican el número de engranaje sobre el manillar, pero debes saber interpretarlo para que tenga sentido:
      • La mano izquierda ajusta los engranajes delanteros: 1 es el engranaje más cercano a la bicicleta, o el engranaje más pequeño.
      • La mano derecha ajusta los engranajes traseros: 1 es el engranaje más cercano a la bicicleta, que es el engranaje más grande.[2]
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    Empuja el brazo del cambio trasero hacia el manillar para aflojar la cadena. Este es el brazo metálico pequeño al lado del engranaje sobre la parte inferior del cambio. Por lo general, existe un pequeño cuadrado metálico justo al lado del engranaje que te permite empujar el cambio sin ensuciarte con tanta grasa. Este debe doblarse suavemente hacia la parte delantera de la bicicleta para que la cadena cuelgue con bastante holgura.
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    Utiliza la otra mano para deslizar la cadena hacia atrás sobre el engranaje correcto. Utiliza de 2 a 3 dedos para levantar la cadena y colócala sobre la parte superior trasera apropiada. Lleva el otro extremo de la cadena a la parte inferior del engranaje delantero y mantenlo en ese lugar. Debes tener suficiente holgura para colocar de 10 a 15 piñones sobre el engranaje en las ranuras de la cadena. Suelta lentamente el cambio una vez que ubiques algunos piñones en su lugar.
    • También puedes utilizar un lápiz, un bolígrafo o un palo pequeño para guiar la cadena hacia los engranajes si no deseas utilizar los dedos.
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    Pedalea la bicicleta hacia atrás lentamente durante 1 rotación completa con la mano. A medida que pedaleas, notarás que los piñones que uniste con la mano guiarán el resto de la cadena a su lugar. Después de la primera rotación, debes pedalear hacia adelante durante 2 o 3 rotaciones más para asegurarte de que la cadena quede firmemente en su lugar.
    • Asegúrate de pedalear en la dirección correcta. La rueda trasera se moverá a medida que pedaleas hacia adelante, pero no hacia atrás.
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Método 2
Método 2 de 3:
Cuidar de la cadena

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    Cuida de la transmisión para evitar que la cadena se suelte. El tren motriz es la transmisión de la bicicleta que consiste en todas las piezas que hacen que la rueda trasera se mueva: anillos de cadena (los engranajes grandes al lado de los pedales), un cassette (la colección de engranajes sobre la rueda trasera), un cambio trasero (el brazo metálico sobre la rueda trasera) y la propia cadena. A medida que la suciedad, la arena y la mugre se acumulan sobre la transmisión, esta se desgasta y se vuelve propensa a rebotar y a soltarse.
    • La limpieza y el mantenimiento frecuentes de la transmisión pueden agregar años a la vida útil de la bicicleta.[3]
    • Debes colocar la bicicleta al revés o engancharla en un soporte para que puedas trabajar sobre el tren motriz.
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    Utiliza un trapo viejo y un poco de desengrasante ecológico para restregar la cadena. El desengrasante ecológico, que a veces se conoce como solvente biodegradable, es un poderoso detergente que corta la mugre, pero no echa a perder la cadena. La mayoría de las tiendas de bicicletas lo ofrecen junto con el lubricante para cadenas. Si no cuentas con uno, puedes utilizar alcohol isopropílico. Vierte un poco sobre un trapo húmedo y sujétalo suavemente sobre la cadena con una mano. Utiliza la otra mano para pedalear la bicicleta, pasando la cadena por el trapo por 2 o 3 ciclos.
    • Debes realizar de 2 a 3 ciclos ejerciendo presión sobre la parte superior e inferior de la cadena. Luego, otros cuantos ciclos ejerciendo presión sobre los lados.
    • Limpia ligeramente todos los residuos de grasa o mugre con el trapo si aún los detectas.
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    Utiliza un cepillo de limpieza para bicicletas o un cepillo de dientes viejo para limpiar los engranajes. Al igual que los dientes humanos, los engranajes necesitan el uso de hilo dental de vez en cuando. Sumerge el cepillo en el solvente biodegradable o el alcohol isopropílico y pásalo entre cada engranaje mientras pedaleas con la otra mano. De esta manera, eliminarás las acumulaciones de grasa que pueden desalojar la cadena si se les permite agrandarse demasiado.
    • Utiliza un destornillador para raspar las áreas difíciles de alcanzar o los puntos pequeños y precisos. Un destornillador es la herramienta ideal para eliminar cualquier mugre sobre las poleas del cambio trasero.
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    Elimina cualquier suciedad visible sobre el cambio y los platos. Si se ve sucio, entonces debes deshacerte de él. Utiliza el trapo húmedo, un cepillo y un poco de desengrasante para alcanzar todos los rincones y las grietas posibles, y hacer que la bicicleta quede impecable. Debes dejar que la bicicleta realice el trabajo por ti siempre que sea posible, manteniendo el trapo o el cepillo en su lugar mientras giras los pedales. Las áreas comunes en las que debes enfocarte incluyen las siguientes:
    • ambos lados de la roldana y las ruedas de la polea del controlador (que son los pequeños piñones sobre el brazo del cambio)
    • la parte trasera (más cercana a la bicicleta) de los platos
    • el cuadro de la bicicleta, las juntas y las bisagras cerca de la cadena
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    Compra un productor limpiador para tratar las cadenas demasiado sucias. Si un trapo y un cepillo de dientes no son suficientes, vas a necesitar una herramienta de limpieza para la cadena. Estas pequeñas cajas se sujetan sobre la cadena. Agrega desengrasante y mantener la herramienta en su lugar mientras pedaleas la bicicleta hacia atrás, lo que te permitirá cepillar y restregar de manera automática los eslabones de la cadena. Estos solo cuestan entre 20 y 30 dólares y con frecuencia vienen con un desengrasante y un cepillo.[4]
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    Lubrica la cadena de la bicicleta después de limpiarla. Compra una botella de lubricante para lubricar la cadena y protegerla de la suciedad y la humedad. Después de limpiar y secar la cadena con el trapo, debes girar lentamente los pedales. Aplica una sola gota de lubricante cada 2 o 4 eslabones, justo en la junta donde un eslabón se encuentra con otro. Después de tratar toda la cadena, debes cambiar de engranaje y aplicar otras 10 o 12 gotas.
    • Utiliza un trapo limpio para eliminar el exceso de lubricante de la cadena una vez que hayas terminado, ya que el lubricante adicional puede retener la suciedad y generar mugre.
    • El objetivo es aplicar una capa ligera de lubricante sobre toda la cadena.[5]
    • Cada vez que manejes la bicicleta bajo la lluvia, limpies la cadena o detectes un chirrido, debes aplicar lubricante.
    • Siente la cadena con los dedos. Si está seca al tacto, entonces debes aplicar más lubricante.
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Método 3
Método 3 de 3:
Solucionar problemas frecuentes

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    Aprende a realizar los cambios correctamente para mantener la cadena en su lugar durante las subidas. Un cambio incorrecto ejerce presión sobre la transmisión, y la cadena solo puede estirarse mucho antes de que se suelte o se rompa. El cambio mueve la cadena, y si subes los pedales cuesta arriba, esto puede hacer que pierdas los piñones del próximo engranaje. Algunos consejos para realizar un cambio seguro incluyen los siguientes:
    • Realiza el cambio antes de llegar a una subida. No esperes hasta que apenas puedas pedalear para realizar el cambio. Como regla general, tus pies siempre deben moverse a la misma velocidad. Debes continuar realizando los cambios para que esto sea posible.
    • Debes ejercer una “presión suave” al realizar el cambio. Justo al realizar el cambio, debes relajar los pies como si soltaras el gas. El objetivo no es dejar de pedalear, tan solo agregar menos peso sobre los pedales. Trabaja para cronometrar este movimiento con el cambio. Luego, reanuda el pedaleo normal.[6]
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    Ajusta los tornillos de límite si la cadena siempre se suelta en la misma dirección. Esto es algo común si, al cambiar a uno de los “engranajes extremos” sobre el lado opuesto de cualquiera de los conjuntos de engranajes, la cadena continúa y se suelta. Los tornillos de límite le indican al cambio de velocidad que deje de moverse en una dirección, y si el límite es demasiado ancho, la cadena continuará moviéndose al realizar el cambio, aunque no haya engranajes para atraparlo. Tanto el cambio delantero como el trasero cuentan con pequeños tornillos de límite etiquetados como “H” y “L” para los límites alto y bajo.
    • Gira los tornillos “H” hacia la derecha para evitar que la cadena se mueva demasiado a la derecha, lejos de la bicicleta.
    • Gira los tornillos “L” hacia la derecha para evitar que la cadena se mueva demasiado hacia la izquierda y dentro de la rueda en la parte posterior o para evitar que caiga entre el tubo del asiento y el anillo de la cadena en la parte delantera.[7]
    • Si te encuentras en el engranaje más lejano, observarás que el cambio se mueve a medida que ajustas los tornillos. Asegúrate de que se alinee en el medio del engranaje.
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    Reemplaza las cadenas desgastadas o aquellas con eslabones rotos o doblados. Con el paso del tiempo, tanto las cadenas como los cassettes se desgastarán debido a la fricción, lo que significa que los piñones del engranaje no pueden bloquearse con firmeza en su lugar en la cadena. Para verificar la cadena, debes utilizar una regla para medir una distancia de 30 cm (12 pulgadas) entre 24 pasadores en la cadena. Los pasadores son los círculos pequeños que se ubican en el medio de los eslabones al mirar la cadena desde un lado. Si el duodécimo pasador se encuentra a más de 2 mm (1/16 de pulgada) fuera de la marca de 30 cm (1 pie), vas a necesitar una cadena nueva.[8]
    • Es mejor que reemplaces una cadena con eslabones doblados o pegados que intentar reemplazar los eslabones individuales. El reemplazo de un solo eslabón en una cadena significa que los eslabones no se desgastarán al mismo ritmo, lo que podría resultar peligroso. Si absolutamente debes reemplazar un eslabón, asegúrate de que sea de la misma marca que la cadena y que esté diseñado para una bicicleta con la misma cantidad de velocidades.
    • Si la cadena está cubierta de óxido o los eslabones presentan problemas para moverse, es mejor que compres una cadena nueva.
    • Por lo general, las cadenas se desgastan más rápido que los cassettes y son mucho más económicas de reemplazar.[9]
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    Determina si necesitas un cassette nuevo. Los cassettes son más difíciles de diagnosticar que las cadenas, pero si sientes que necesitas uno nuevo, es probable que así sea. Si la cadena salta constantemente sobre los engranajes, se desliza o se suelta al pedalear, es probable que necesites un cassette nuevo. Lleva la bicicleta al taller si tienes alguna confusión como para llevar a cabo una evaluación personal.
    • Después de limpiar el cassette, debes observar los engranajes. Si acaso alguno luce más visiblemente desgastado que los demás, o detectas alguna disparidad, es probable que sea hora de conseguir un cassette nuevo.
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Consejos

  • Es crucial limpiar la cadena una vez cada 2 o 3 semanas para evitar problemas y un desgaste prematuro.
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Advertencias

  • Si aún presentas problemas con la cadena, debes llevar la bicicleta a un mecánico local para que diagnostique cualquier problema grave antes de que sufras un accidente.
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Cosas que necesitarás

  • un trapo
  • desengrasante
  • un cepillo de dientes o un cepillo de limpieza para bicicletas
  • lubricante para cadenas
  • un destornillador
  • un producto limpiador para cadenas (opcional)
  • un soporte para bicicletas (opcional)

Acerca de este wikiHow

Ikaika Cox
Coescrito por:
Mecánico de bicicletas
Este artículo fue coescrito por Ikaika Cox. Ikaika Cox es director de operaciones de Provo Bicycle Collective en Provo, Utah. Recibió su licenciatura en Literatura y Filosofía en la Universidad del Valle de Utah en 2015, y ha sido mecánico de bicicletas desde 2012. Este artículo ha sido visto 15 871 veces.
Categorías: Bicicletas
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