Los sapos vientre de fuego son una mascota popular que puede llegar a vivir entre 10 y 12 años o más si se le cuida de la forma adecuada. Será necesario que le brindes un entorno adecuado a tu sapo. Es importante contar con un acuario grande con una iluminación adecuada. Asimismo, debes alimentar a tu sapo con una dieta que consista de insectos frescos. Ten cuidado de no manipular en exceso a los sapos vientre de fuego, ya que tienden a ser animales privados y necesitan una gran cantidad de espacio para desarrollarse bien.

Parte 1
Parte 1 de 3:
Brindarles el hábitat adecuado

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    Consigue un acuario del tamaño adecuado. Por lo general, en el caso de los sapos vientre de fuego, mientras más grande, mejor. Estos animales son activos y necesitan espacio para deambular. Cinco sapos adultos pueden caber con comodidad en un acuario de 55 litros (15 galones), 60 cm (24 pulgadas) de largo, 30 cm (12 pulgadas) de alto y 30 cm (12 pulgadas) de ancho.[1]
    • Los acuarios pueden conseguirse en línea o en una tienda de mascotas.
    • Debes usar un acuario que venga con una pantalla como tapa. De este modo, se fomenta la ventilación, lo cual es importante para la salud de los sapos vientre de fuego.
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    Llena el acuario adecuadamente. Es necesario que el acuario tenga una zona de tierra y una zona de agua. Esto se debe a que los sapos vientre de fuego apenas son semiacuáticos. La zona de tierra debe ocupar entre dos tercios y la mitad del tanque. Debes tratar de establecer un hábitat de aspecto natural que contenga rocas, tierra, musgo, plantas artificiales y madera flotante. Estos suministros pueden comprarse en línea o bien en una tienda de mascotas.[2]
    • La zona de tierra debe tener una pendiente gradual hacia la zona de agua. Para crear una inclinación en dirección al agua, puedes emplear arena, gravilla para acuarios y madera flotante, entre otras cosas.
    • No utilices agua destilada. Esta no contiene los minerales que los sapos necesitan. Debes utilizar, en cambio, agua del grifo que esté acondicionada con los químicos adecuados para eliminar el cloro y los metales pesados del agua. El acondicionador para el agua del grifo puede conseguirse en línea o en una tienda de mascotas acuáticas.
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    Proporciona iluminación. En caso de que el lugar en donde vivas sea más frío o de que vayas a mantener el tanque en una parte fría de tu casa, debes utilizar un bombillo incandescente pequeño, el cual puede brindar calor. Asimismo, debes colocar una luz que vaya a proporcionarle rayos ultravioleta al sapo. Esto evitará la enfermedad metabólica ósea.[3]
    • Debes buscar luces ultravioleta que estén diseñadas específicamente para los animales (por ejemplo, ReptiGlo).[4]
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    Monitorea la temperatura. Los sapos vientre de fuego se desarrollan bien a una temperatura de entre 22 y 36 °C (71 a 78 °F), pero esta no debe ser mayor a 28 °C (82 °F). Por las noches, puedes bajarla hasta los 16 °C (61 °F). Debes colocar un termómetro en el tanque para así monitorear la temperatura. En caso de que se eleve demasiado, debes trasladar el tanque a una parte más fría de tu casa, encender el aire acondicionado o bien utilizar un ventilador.[5]
    • Quizás no necesites utilizar una lámpara de calor, ya que los sapos vientre de fuego tienen tolerancia a las temperaturas frías y se desarrollan bien a temperatura ambiente.[6]
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    Rocía la jaula con agua todos los días. Si bien la humedad no es tan importante para los sapos vientre de fuego como lo es para los demás anfibios, es recomendable que rocíes el tanque con agua mediante un rociador todos los días. De este modo, el tanque permanecerá lo suficientemente húmedo para los sapos vientre de fuego.[7]

Parte 2
Parte 2 de 3:
Alimentar a los sapos

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    Aliméntalos con grillos y gusanos de la harina. Los grillos y gusanos de la harina vivos, los cuales puedes conseguir en una tienda de mascotas, deben constituir el alimento básico de la dieta de tu sapo vientre de fuego. Debes alimentar a tus sapos con tantos grillos y gusanos como puedan comer en el espacio de 15 minutos.[8]
    • Debes elegir grillos que sean más pequeños para así evitar el riesgo de asfixia.[9]
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    Incorpora otros insectos a la dieta de tu sapo. Los sapos vientre de fuego pueden beneficiarse de tener otro tipo de comida a su disposición aparte de los grillos y los gusanos de la harina. Puedes incorporar al agua fuentes de alimento (por ejemplo, guppys y caracoles). Los sapos vientre de fuego son animales activos y, por tanto, puede beneficiarles que haya fuentes vivas de alimento en su acuario.[10]
    • Toda la comida debe estar viva, ya que los sapos vientre de fuego no reconocen las fuentes no vivas de alimento y estas podrían contaminar el tanque con rapidez.
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    Suplementa la dieta de tus sapos con vitaminas y minerales. Debes "enriquecer" a los grillos antes de dárselos a tus sapos, para lo cual debes comprar alimento para grillos diseñado específicamente para este fin. Estos pueden conseguirse en una tienda de mascotas. Asimismo, debes espolvorear los grillos con un suplemento de calcio y vitaminas una vez por semana, como mínimo.[11]
    • Conversa con tu veterinario antes de darle suplementos a tus sapos. Debes tener cuidado de que los que utilices sean saludables y seguros para ellos.[12]

Parte 3
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Mantener saludables a los sapos

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    Aborda los problemas de muda. Es necesario que los sapos vientre de fuego muden de piel por su salud y bienestar. Si observas que tu sapo está encogido en una posición encorvada, evita alarmarte, ya que esto significa que está preparándose para mudar de piel. En caso de que observes que tu sapo tiene este comportamiento, es importante que ayudes con el proceso de muda. Si es que tu sapo no muda de piel de la forma adecuada, puedes rociarlo con agua y hacerle un masaje suave hasta que se desprenda la piel. Esto puede ser estresante debido a que a los sapos vientre de fuego no les gusta que los manipulen.[13]
    • En caso de que la piel no se desprenda después de un masaje suave, debes llevar al sapo a un veterinario para animales exóticos, ya que, si sigues masajeándolo, esto puede dañarle la piel.[14]
    • Durante el periodo de muda, será necesario que haya una mayor humedad en el tanque. En caso de que observes que tus sapos se encorvan y que su nivel general de energía se reduce, debes empezar a rociar la jaula dos veces al día en lugar de una.
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    Dales privacidad a tus sapos. Los sapos vientre de fuego no son muy sociables. No les gusta que los manipulen con frecuencia y necesitan mucha privacidad. Solo debes levantarlos cuando sea necesario y debes tener cuidado de darles muchos escondites. Es posible comprar estructuras para que los sapos se escondan, ya sea en línea o en una tienda de mascotas.[15]
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    Lava el tanque con regularidad. Es necesario que laves el tanque con regularidad de forma que tus sapos puedan mantenerse saludables. Debes limpiar a diario el recipiente de agua usando un detergente lavavajillas suave. Luego, debes llenarlo con agua filtrada o declorada fresca.[16]
    • Limpia todos los componentes del tanque una vez cada dos meses usando un detergente lavavajillas suave y limpia la parte interior del tanque con vinagre y agua (una parte de vinagre y ocho partes de agua).
    • Ten cuidado de haber enjuagado bien todos los componentes antes de volverlos a colocar en el tanque.

Advertencias

  • Los sapos vientre de fuego son venenosos para otros animales que podrían querer comérselos, entre ellos las mascotas como los perros o los gatos. Tu sapo debe permanecer en un lugar seguro (por ejemplo, en un mostrador alto) y dentro de un recipiente que tenga una tapa segura para que así tus demás mascotas no puedan llegar a él.
  • Debes lavarte las manos después de manipular a tus sapos. Esto se debe a que su piel puede ser ligeramente tóxica. Asimismo, no debes manipular a los sapos a menos que sea absolutamente necesario.[17]

Acerca de este wikiHow

Lauren Baker, DVM, PhD
Coescrito por:
Veterinaria
Este artículo fue coescrito por Lauren Baker, DVM, PhD. La Dra. Baker es veterinaria y candidata a un PhD en Ciencias Biomédicas Comparativas. La Dra. Baker recibió su título de médica veterinaria en la Universidad de Wisconsin en 2016, y continuó para recibir un PhD a través de su trabajo en Comparative Orthopaedic Research Laboratory. Este artículo ha sido visto 9198 veces.
Categorías: Anfibios