La humedad puede causar estragos en tu pelo si se lo permites. Afortunadamente, incluso un pequeño cambio en su rutina de cuidado puede controlar el cabello esponjado. Los productos especialmente fabricados y los remedios caseros conforman el ataque. Si no quieres conformarte con tener el cabello esponjado y desordenado en un día húmedo, podrás solucionar la situación.

Parte 1
Parte 1 de 3:
Cuidado diario del cabello en un medioambiente húmedo

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    Hazte el corte correcto. Si vives en un área conocida por su clima húmedo, piensa en hacerte un corte que vaya de acuerdo a tu tipo de cabello. Tenerlo largo y en cortes lisos añade el peso necesario para bajar el pelo que, de otro modo, se esponjaría. Un corte angular o con un poco de capas quitará un poco de volumen. Un corte en capas hará resaltar los rulos pero podría tener como resultado un cabello más esponjado.
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    Aplica champú dejando un día como mínimo. Este producto es excelente para limpiar el polvo y la mugre del cabello, pero no es tan bueno para controlar el esponjado. Esto se debe a que el champú le quita los aceites naturales a tu cabello, que hacen que esté sedoso y combaten el frizz.
    • Algunas personas dejan de lavarse con champú hasta por una semana. El tiempo exacto depende de ti, pero la opinión general es que esperar un par de días entre cada lavada tiene como resultado un cabello más saludable y menos esponjado.
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    Cuando acondiciones tu cabello después del lavado con champú, enjuaga el producto con agua fría. Existe un debate sobre la efectividad de este método, pero la idea es muy simple: el agua fría hace que las cutículas del cabello se contraigan, lo que da más brillo y controla el frizz al mismo tiempo.[1] Sin embargo, algunos científicos no creen en la efectividad del agua fría sobre el cuero cabelludo y dicen que como las cutículas del pelo no son células vivas, no pueden contraerse.[2] Dejando la controversia de lado, este consejo no provocará que el cabello se esponje, así que pruébalo y comprueba si funciona o no.
    • Como se expone más adelante, algunos acondicionadores sin enjuague especialmente diseñados pueden ayudar a combatir el cabello esponjado.
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    Seca el cabello con delicadeza. Si este tiende a electrizarse o a tener frizz, sécalo presionando cuidadosamente con una toalla en vez de frotarlo. Deja que se seque al aire libre tanto como sea posible para reducir el esponjado.
    • Si utilizas un secador de pelo, no muevas mucho el aparato. Sécalo lentamente y por secciones pequeñas en el nivel más bajo de calor.
    • Recuerda secar hacia abajo y a lo largo de la hebra del cabello y no de manera horizontal, lo que hace que este se separe. Si lo secas de abajo hacia arriba le proporcionarás volumen y lo levantarás, pero también lo volverás más esponjado si tienes cabello con frizz.
    • Ten en cuenta que utilizar el secador de pelo retira humedad de las hebras capilares, lo que incrementa el frizz.
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    No peines demasiado tu pelo. Puedes sentir la tentación de uniformar tu cabello cepillándolo varias veces cuando al salir de la ducha. Sin embargo, cepillarlo o peinarlo genera fricción, lo que, a su vez, provoca que la cutícula aumente de temperatura y se rompa.[3] Esto conduce a un cabello esponjado o con frizz. En lugar de peinarte como si estuvieras en un concurso, utiliza un peine de dientes separados o un cepillo acolchado con púas redondeadas. Termina con una pasada final utilizando tus dedos como si fueran un peine.
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    Elige un estilo para el día que funcione con tu tipo natural de cabello. En el clima húmedo, este tendrá una tendencia a hacer lo que naturalmente hace. Luchar con tu tipo de pelo probablemente te provocará mucha frustración. Es muy probable que termines perdiendo cada vez que lo intentes. Si tu cabello es lacio, no intentes ponerlo en ruleros o rulos en los días húmedos. Por el contrario, si este es naturalmente rizado u ondulado, trabaja con las ondas en vez de elegir un estilo liso.
    • Prueba amarrándote el cabello en un moño o una cola de caballo y termina aplicando un poco de gel anti-frizz.
    • Si estás en un día horrible para tu cabello, nunca subestimas la ayuda que puede proporcionarte un sombrero o una bufanda bien amarrada.

Parte 2
Parte 2 de 3:
Elegir los productos adecuados para tu cabello

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    Elige un champú para combatir el frizz o el cabello esponjado. Estos productos se fabrican para responder a las necesidades de los diferentes tipos de pelo. Puedes encontrar algunas marcas en la tienda que afirmen directamente en la botella que reducen el frizz en el cabello. De lo contrario, busca las palabras "humectante", "suavizante" o "hidratante" en el envase de tu marca favorita.
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    Elige el tipo adecuado de acondicionador. Puede ser normal o sin enjuague, todo depende de los ingredientes que tiene. Cuando vayas a elegir, busca los que tienen uno o más de los siguientes ingredientes: amino-siliconas y tensioactivos catiónicos. Estos dos componentes ayudan a combatir las dos causas principales del cabello esponjado: el daño en la hebra capilar y la electricidad estática.
    • La amino-silicona contribuye a que las siliconas presentes en el acondicionador se adhieran a las hebras de cabello dañadas y, en consecuencia, proporcionan un acondicionamiento más duradero.
    • Los tensioactivos catiónicos ayudan a reducir la esponjosidad causada por la electricidad estática pues tienen una carga positiva.[4]
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    Utiliza un producto para suavizar el cabello. Los sueros suavizantes cubren las hebras capilares y ayudan a reducir el frizz como lo hace un acondicionador. Sin embargo, algunos de estos productos son pesados y pueden aplastar mucho tu pelo. Utilízalos de a pocos para descubrir la cantidad de producto que debes utilizar en tu caso.
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    Aplica un producto para peinar. Aunque los sueros son excelentes para suavizar partes del cabello, no contienen agentes que lo sostengan y eviten que se separe. Utiliza un gel suavizante o ligero para fijar el pelo.

Parte 3
Parte 3 de 3:
Evitar el cabello esponjado con recetas caseras

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    Prueba un tratamiento profundo de aceite de oliva o de coco. Aplicarte tratamientos profundos de vez en cuando contribuye a controlar el frizz y el cabello esponjado manteniéndolo saludable. Aplica una o dos cucharadas llenas de aceite de oliva o de coco tibio en las puntas. Envuélvete el cabello con una gorra de plástico o de baño y espera de 30 minutos a varias horas. Échate el champú y el acondicionador como de costumbre para retirar cualquier exceso de grasa.
    • Ten cuidado del lugar donde aplicas el aceite. Dirígete a las puntas o a la parte media de la hebra. Ponerlo en las raíces puede obstruir los poros y provocar erupciones en tu cuero cabelludo.
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    Utiliza aceites sin enjuague en tu cabello. Los tratamientos en aceite que no necesitan enjuagarse como el aceite de argán (también conocido como aceite marroquí) y el de bebé pueden ayudarte a controlar tu pelo. Vierte menos de lo que crees que necesitarás en la palma de tu mano y cubre tu cabello suavemente, aplicándolo con cuidado.
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    Utiliza otros alimentos ricos en aceites como la mayonesa y la palta o aguacate. Los alimentos como la mayonesa o el aguacate machucado pueden ser otra manera de fortalecer tu pelo y evitar que se esponje; aunque es difícil aplicarlos sin hacer un desastre. Mezcla una cucharada de mayonesa con tu acondicionador si quieres probarla o machuca un aguacate como si estuvieras haciendo guacamole, aplícalo en tu cabello y cúbrelo por 10 minutos. Después enjuaga con agua tibia hasta que sientas tu pelo suave.

Consejos

  • Trata de tener laca a la mano. Rocía un poco en un peine o cepillo y pásalo por tu cabello cuando sientas que está más esponjado que de costumbre.

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