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Tirarse pedos es una función corporal natural que todo el mundo experimenta, pero eso no quita que sea bastante vergonzoso en el contexto equivocado. El mal olor y el ruido pueden ser desagradables para las personas alrededor y dejar en claro que fuiste el culpable. Y solo te quedará tragarte la vergüenza. Tirarse uno por error en el lugar y la hora equivocados puede causar situaciones muy incómodas, pero hay unas cuantas maneras sencillas de disimularlo.
Pasos
Método 1
Método 1 de 3:Afrontarlo sutilmente
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1No reacciones. Esta es la regla número 1. La manera más segura de que todos se den cuenta de que fuiste tú es verse preocupado o avergonzado inmediatamente. Si estás con gente y te tiras uno, no reacciones exageradamente. De hecho, no reacciones en lo absoluto. Esto es lo opuesto a lo que la mayoría de la gente hace cuando se tira un pedo por casualidad, por eso una fuerte muestra de desconocimiento hará que las sospechas de la gente se dirijan a otro lado.
- Si el pedo es demasiado sonoro o huele demasiado mal para pasarlo por alto de manera realista, es probable que tengas que orquestar un plan de escape. Muéstrate perplejo, crea alguna distracción y sal del lugar.
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2Haz lo tuyo. No solo no debes verte avergonzado si te tiras un pedo por accidente, sino que debes continuar haciendo la actividad que estabas haciendo como si nada hubiera pasado. Si no haces una “pausa” activamente mostrando sorpresa, los demás podrían no darse cuenta en lo absoluto y, si se dan cuenta, probablemente tengan el tino de no preguntar quién fue el culpable.[1]
- Es común oír sonidos extraños sin saber de dónde provienen y no hay motivo para que nadie piense que el sonido emitido era un pedo o que provino de ti.
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3Ponlo en entredicho. Quizá hayas logrado contener la erupción de un violento pedo, pero el hedor está empezando a sentirse: ¿qué hacer? No aceptes la culpa sin más. Mira a tu alrededor y finge asco o confusión para que todos sepan que pudo ser cualquiera de ellos. La mayoría de las personas estarán demasiado preocupadas por que los demás no piensen que fueron ellas y no estarán motivadas a averiguar quién fue el causante.
- No acuses directamente a una persona en particular por la indiscreción. Se supone que estarás tratando de esquivar la vergüenza y adjudicársela a otra persona es un acto deshonroso.
- Reírse un poco puede ayudar a aliviar la incomodidad de la situación, ya sea que otros sospechen que fuiste tú o no.
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4Culpa al perro. Si funciona, ¿por qué arreglarlo? Solo culpa al perro, si hay uno por ahí, en el caso de que el pedo haya sido especialmente desagradable. Al perro no le importará. De seguro está acostumbrado a ser el culpable de este tipo de cosas. Los bebés también son chivos expiatorios invaluables para los expertos en ocultar pedos. A algunos incluso les parecerá lindo que haya sido el inocente e ingenuo bebito sin saber que en realidad fuiste tú (orando no necesitar un cambio de pañal también).[2]
- Tienes que estar bastante cerca del perro si quieres que esta táctica sea convincente. La gente al final se dará cuenta si sigue percibiendo olorcillos feos mientras Firulais está al otro lado de la sala.
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Método 2
Método 2 de 3:Cubrir los rastros
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1Aíslate. Haz una pausa y excúsate con educación para retirarte del lugar. Los demás pensarán que simplemente vas a lavarte las manos, a fumar un cigarrillo o que dejaste algo en otra habitación, cuando en realidad estarás teniendo la cortesía de retirarte después de desplegar tus armas químicas sobre el público en general.
- Si bien este es el método más civilizado y reservado, hacer una pausa después de tirarse un pedo no siempre es posible. Si estuvieras en una hora y lugar donde no puedas justificar tu salida, es probable que tengas que probar otro método.
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2Retírate caminando. Inventa un motivo para retirarte caminando después de tirarte un pedo por accidente. Por varios motivos, este es quizá el mejor escenario de control de daños al tirarse un pedo abiertamente. En primer lugar, el movimiento de caminata ayudará a dispersar la emisión y se disipará más rápido. En segundo lugar, sea cual sea el olor, se dispersará rápidamente en el aire y ya estarás alejándote del origen del mal olor. Por último, la conmoción de ponerse a caminar será una grata distracción después del ruido (si lo hay) y el pedo en sí será más difícil de identificar con las distracciones circundantes.[3]
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3Únete a una muchedumbre. Con más gente alrededor, será imposible saber exactamente quién se tiró un pedo. Esta estrategia exige un poco de impasibilidad, ya que es probable que alguien del grupo haya oído u olido el pedo, pero estarás dependiendo del buen tino social de los demás para que alguien no lo delate por temor a que piensen que fue él.[4]
- Si eres del tipo que se sonroja fácilmente o crees no ser capaz de tirarte un pedo en una muchedumbre desprevenida, considera la posibilidad de buscar otro lugar para refugiarte después de tirarte un pedo sorpresa. Si este método no funciona, estarás en medio de un grupo de gente que muy probablemente descubra que fuiste tú.
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Método 3
Método 3 de 3:Evitar los accidentes (hacerlo discretamente)
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1Inclínate o ponte en cuclillas. Si sientes que un gas va a salir y las circunstancias lo permiten, ponte en una posición donde puedas inclinarte o ponerte en cuclillas. En estas posiciones, los intestinos están menos obstruidos, lo que quiere decir que puedes tirarte uno sin preocuparte tanto por despertar a los vecinos. Sin embargo, hacer esto no mitigará el olor si hay narices sensibles por ahí.[5]
- Este método puede ser una salvación para las personas con trabajos de mucho esfuerzo físico o que suelen realizar actividades en las que pueden moverse libremente, en especial si además tienes la ventaja de estar al aire libre.
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2Disimúlalo con otro ruido. Si estás en una habitación abarrotada de gente o en un cine estruendoso, no será gran problema. Pero si estás en la sala silenciosa de la casa de tus suegros, es probable que necesites una distracción auditiva. Toser, exclamar fuertemente y tirar objetos son clásicas aperturas que funcionan para tirarse un pedo, pero puedes explayar tu creatividad libremente: haz que el pedo coincida con un ataque de risa oportuno o espera a que alguien abra una bolsa de papas fritas.[6]
- No seas demasiado obvio con el ruido que vas a hacer para disimularlo. Actúa natural. Y, desde luego, si el problema se vuelve imposible de manejar en un evento social importante, quizá tengas hacer de tripas corazón y olvidarte de ello.
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3Escoge una superficie suave para sentarte. Entre más suave y acolchada sea la superficie donde te sientes, será más eficiente para insonorizar los pedos. Escoge un asiento de oficina o de conferencias que pueda resistir el ataque de tus gases. En lo posible, optar por un sofá viejo y no por un pretencioso sillón reclinable de cuero. Siempre y cuando seas cuidadoso, podrás tirarte los pedos que necesites sin tener que ponerte de pie.[7]
- Evita las superficies duras, como las bancas de los parques o las sillas de madera, y las superficies “reflectoras”, como el cuero y la goma dura, si tienes gases. La acústica de estos materiales tiende a amplificar las vibraciones de los ruidos fuertes y, si el dichoso pedo resulta ser demasiado poderoso, la superficie dura lo publicitará al mundo entero.
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Consejos
- Ten cuidado al toser, reírte o estornudar si estás a punto de tirarte un pedo. La onda expansiva puede hacerte perder el control.
- Si tratas de disimular el pedo tosiendo o haciendo otro sonido, tendrás que sincronizarlo bien. Hacer el sonido demasiado temprano o tarde hará que el pedo sea más notorio. El segundo que sientas que va a salir, prepara tu distracción.
- Nunca trates de tirarte un pedo haciendo un esfuerzo demasiado fuerte, porque las consecuencias pueden ser desastrosas. Cuando una flatulencia es de tal magnitud, no habrá manera de disimularla.
- Si alguien hace lo impensable y te pregunta directamente si te tiraste un pedo, puedes seguir negándolo o asumir la responsabilidad y hacerlo algo cómico. Recuerda que todos lo hacen. ¡No es el fin del mundo!
Advertencias
- Hay un tiempo y un lugar para todo. Si bien tirarse pedos es algo totalmente normal y saludable, puede ser considerado poco apropiado en muchas situaciones. Aprende cuándo está bien tirarse uno a escondidas y cuándo es mejor aguantarse un poco más.
- Evita los alimentos picantes, los lácteos enteros, las legumbres y cualquier otra elección alimenticia que pueda causarte hinchazón y flatulencias en exceso. Las medidas preventivas siempre son mejores que tener que reparar los daños después.[8]
Referencias
- ↑ https://www.youtube.com/watch?v=vaFRZuBw9JM
- ↑ http://barkpost.com/fart-chart/
- ↑ http://lifehacker.com/how-to-fart-in-public-and-get-away-with-it-1738843195
- ↑ http://jezebel.com/5843978/master-the-art-of-subtle-public-farting
- ↑ http://scicurious.scientopia.org/2013/07/05/friday-weird-science-the-best-pose-for-passing-gas/
- ↑ http://www.vice.com/en_uk/read/what-makes-a-fart
- ↑ http://brobible.com/guyism/article/comprehensive-guide-farting-around-girlfriend/
- ↑ http://www.cnn.com/2011/HEALTH/expert.q.a/11/17/flatulence.foods.jampolis/
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