Este artículo fue coescrito por Mia Danilowicz. Mia Danilowicz es una maestra sastre que trabaja en escenarios y en la alfombra roja en Los Ángeles, California. Con más de una década de experiencia, Mia se especializa en accesorios y vestidos de alta costura para novias, reconstrucción de prendas y diseño personalizado. Ha trabajado en los premios Oscar, Grammy, premios SAG y Globos de Oro. Sus clientes incluyen una larga lista de estrellas en la industria del entretenimiento y la moda, importantes revistas de moda, marcas de consumo de lujo y medios de comunicación populares. Mia se formó en el Fashion Institute of Design and Merchandising y obtuvo su asociado de artes en diseño de modas, así como su licenciatura en gestión de empresas.
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Todos tenemos ropa vieja que ya no usamos. En lugar de dejar que se quede dentro del armario para siempre, ¿por qué no reutilizarlas para unas bonitas almohadas? Es una gran forma de reciclar tu ropa en lugar de tirarla a la basura, y puedes ponerte creativo con una variedad de opciones de tela.
Pasos
Parte 1
Parte 1 de 3:Seleccionar los materiales
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1Reúne tu ropa vieja. Hurga en tu armario y busca prendas que ya no uses y que serían un gran color o diseño para una almohada. Debes seleccionar ropa que esté relativamente intacta ya que reutilizarás la tela.
- Las prendas que son apropiadas para este proyecto incluyen las chaquetas de mezclilla, las camisas de franela y las faldas o vestidos largos que tengan mucha tela.
- Busca prendas que tengan diseños o patrones interesantes, como arreglos florales o tela a cuadros. Estos diseños pueden ayudar a darle un poco de vida a tus diseños de almohadas.
- Las hebillas, cremalleras y botones en la ropa pueden incorporarse también a la almohada. Si eliges resaltar estos artículos, corta la tela apropiadamente.
- Si te falta un color que complete tu diseño, considera visitar una tienda de segunda mano o preguntarles a tus vecinos si tienen ropa que ya no quieran.
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2Elige el tipo de almohada que quieres hacer. Existe una variedad de diseños de almohadas, así que piensa en el propósito de la tuya.
- ¿Será decorativa? En este caso, el tamaño, la forma y la tela dependen completamente de tu gusto. Las personas rara vez se sientan sobre las almohadas decorativas, así que la comodidad no tiene que ser un factor.
- ¿La almohada se usará como un cojín? Por ejemplo, ¿las personas se recostarán contra ella en el sofá o la almohada se usará para dormir? Si es así, el tamaño, la forma, la tela y el relleno tendrán un papel importante en el nivel de comodidad de la almohada.
- Los cojines pequeños comunes son cuadrados y tienen un tamaño de entre 30 x 30 cm (12 x 12 pulgadas) y 60 x 60 cm (24 x 24 pulgadas).[1]
- Las almohadas de cama comunes son más rectangulares y su tamaño es de alrededor de 50 x 66 cm (20 x 26 pulgadas) en adelante.[2]
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3Selecciona la tela que usarás para la almohada. Una vez que hayas identificado el propósito de la almohada, selecciona la tela que desees usar de la ropa vieja que reuniste anteriormente.
- Revisa tus materiales cuidadosamente. Si quieres hacer una almohada grande pero solo tienes una pequeña cantidad de la tela necesaria, es posible que debas cambiar de planes.
- Elige ropa con telas más suaves, como el satén, la seda, el algodón o la franela, si vas a hacer una almohada que exija comodidad, como una almohada para cama.
- Las telas más duras, como el poliéster o el lino, son muy buenas para usarlas en almohadas decorativas ya que su composición robusta ayuda a las almohadas a mantener su forma y durar más.
- Las telas más duras también son útiles si tienes que hacer un cojín robusto para niños o mascotas.[3]
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4Selecciona el relleno para la almohada. Elegir el relleno adecuado para tu almohada va de la mano con la selección de la tela para crear la almohada perfecta para tus necesidades. Los rellenos diferentes se prestan bien para diferentes propósitos.
- Los materiales como el algodón, la lana y el plumón o las plumas de pato o ganso están entre los tipos más suaves de rellenos para almohadas y son muy buenos para las almohadas de cama. Ten cuidado al seleccionarlos ya que algunos rellenos, como el plumón, no pueden lavarse ya que las plumas no secarán.
- Los materiales sintéticos, como el poliéster, la espuma y las microesferas, tienden a ser más baratos que los materiales naturales y pueden oscilar en sus niveles de firmeza.
- Las semillas y hierbas como el alforfón, el mijo, la linaza y la lavanda también pueden usarse como rellenos para almohadas si vas a hacer una almohada decorativa. Toma nota de que estos rellenos son más duros que otros tipos y a menudo son un poco ruidosos. Sin embargo, ciertas semillas y hierbas emiten un aroma agradable, lo cual puede ayudar a realzar el propósito de una almohada decorativa.[4]
Parte 2
Parte 2 de 3:Preparar tu ropa
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1Extiende la ropa que usarás para tu almohada. Elige una superficie dura, como una mesa de trabajo o un piso de madera dura. Coloca la ropa de adentro para afuera y alísala para eliminar las arrugas. Debes planchar la tela antes de comenzar a trabajar.
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2Usa una regla o cinta métrica para medir el tamaño y la forma necesarios para la almohada. Asegúrate de sumar 2,5 cm (1 pulgada) al tamaño de la almohada para permitir un margen adecuado para las costuras. Traza a lo largo de esta medida con tiza a fin de darte una guía para cortar.
- Si la prenda es idéntica tanto por delante como por detrás y tienes confianza en tu habilidad para cortar, puedes trazar solo una medida con tiza y usarla para cortar ambos trozos de tela a la vez.
- También puedes marcar ambos lados de la tela con tiza si deseas. Esto será necesario si vas a usar dos prendas diferentes para la almohada.
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3Corta a lo largo de las medidas marcadas usando un par de tijeras afiladas. Si es posible, corta la parte delantera y la trasera de la ropa al mismo tiempo para obtener dos trozos simétricos de tela. Si planeas usar dos estilos diferentes de tela para la almohada, solo tienes que cortar un trozo de cada prenda de las medidas correctas.
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4Decora la tela. Puedes bordarla, añadir listones, fijar diamantes de imitación o lentejuelas o incluso pintar la superficie de la tela para hacer que el diseño sea completamente tuyo.
- Si vas a pintar o pegar decoraciones a la tela, asegúrate de que la pintura o el pegamento sean apropiados para la tela en cuestión y que no dañen el material. Es posible que también quieras elegir pintura o pegamento lavables.
- Deja suficiente tiempo para que la pintura o el pegamento se sequen antes de continuar trabajando en la almohada.
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5Une ambos trozos de tela con un alfiler. Extiende los trozos de tela uno sobre el otro de forma que, al coserlos, la funda esté de adentro para afuera. Coloca alfileres a lo largo de los bordes de la tela para sujetar la forma de la almohada en su lugar.[5]
- Asegúrate de que los trozos estén perfectamente alineados. Si vas a usar tela con un patrón, asegúrate de que no se vea torcido una vez que cosas la almohada.
- Deja un borde de la almohada sin unir de forma que tengas espacio para rellenar la funda una vez que esté cosida.
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6Cose la tela. Esto puede hacerse ya sea a mano o usando una máquina de coser. Cose los tres lados de la funda unidos con alfileres, asegurándote de que la costura esté de 0,5 a 1,2 cm (0,25 a 0,5 pulgadas) del borde cortado de la tela.
- Considera usar el método de la puntada invisible para esconder los hilos en la almohada, si deseas.
- La distancia entre la costura y el borde cortado de la tela afectará la tensión de la almohada y la cantidad de relleno que podrás introducir. Un mayor margen de costura (1,2 cm o 0,5 pulgadas) significa que podrás introducir menos relleno a la almohada. Lo opuesto aplica para los márgenes más pequeños (0,5 cm o 0,25 pulgadas).
- Cose parcialmente el cuarto lado de la almohada. Deja suficiente espacio en el cuarto lado de forma que puedas introducir fácilmente tu mano en la funda.
Parte 3
Parte 3 de 3:Terminar la almohada
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1Recorta el exceso de tela de las esquinas si deseas. Un estrechamiento suave de 1,2 cm (0,5 pulgadas) en las esquinas de la tela ayudará a reducir las puntas afiladas en la almohada, dándole un aspecto más redondeado y suave.
- ¡No cortes más allá de la línea de costura!
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2Retira los alfileres y dale la vuelta a la funda para que tenga el lado correcto hacia afuera. Los bordes de la tela estarán escondidos dentro de la almohada, lo que dará como resultado una apariencia más lisa.
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3Rellena la almohada. Usa la abertura que quede en la funda para introducir el relleno que hayas elegido para la almohada. Usa más o menos relleno según tu preferencia. Para lograr un relleno uniforme y nivelado, haz lo siguiente:
- Despedaza y ahueca los materiales más suaves del relleno, como el algodón o el plumón. De esta forma, te aseguras de la suavidad mientras eliminas los grumos duros.
- Empieza a rellenar con pequeñas partes en la esquina de la almohada que esté más lejos de la abertura. Hazlo suavemente pero con firmeza. Puedes usar tus manos o una cuchara o vara para ayudarte a rellenar la almohada.
- Rellena las siguientes esquinas de la misma forma. Trabaja lentamente hacia la abertura de la almohada.
- Vigila la parte exterior de la almohada al rellenar. Debes abordar las irregularidades o terrones visibles en la parte exterior de la almohada redistribuyendo el relleno o añadiendo más.
- Una vez que la almohada esté rellenada en su mayoría, apriétala suavemente. Si está demasiado firme, retira un poco del relleno a tu gusto. Si está demasiado suave, añade más relleno.[6]
- Los rellenos duros, como las microesferas o las semillas, no deben rellenarse tan apretadamente en la almohada. Llénala a alrededor de tres cuartos de su capacidad con el relleno más duro y luego prueba la firmeza.
- El relleno duro también puede mezclarse con otro relleno más suave para ayudar a equilibrar la firmeza. Las semillas y los pétalos de flores, por ejemplo, pueden crear una combinación aromática y texturalmente agradable.[7]
- Cose sobre las costuras de la almohada para crear costuras más ajustadas si no estás satisfecho con el nivel de relleno posible en tu almohada. Una costura más ajustada creará un ambiente más apretado y compacto para el relleno.[8]
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4Cierra la almohada. Cose a mano la abertura usada para rellenar cuando estés satisfecho con la apariencia de la almohada. Si estás interesado en conservar la habilidad para abrir la almohada, ciérrala cosiendo una cremallera en la abertura. Esto te ayudará a abrir la almohada fácilmente para cambiar el relleno en el futuro.
- Asegúrate de estar satisfecho con la forma cómo hayas rellenado la almohada antes de cerrarla.
- Si vas a usar un trozo de tela con una cremallera, puedes alinearla con el borde de la almohada de forma que puedas usarlo para abrir y cerrar la almohada cuando desees.
Consejos
- El relleno puede conseguirse en la mayoría de las tiendas de telas o de manualidades.
- Antes de ensamblar la almohada, añade una puntada recta o en zigzag a todos los bordes de la tela si es propensa a deshilacharse.
- El margen de costura es la cantidad de tela que se extiende más allá de las puntadas.
Cosas que necesitarás
- ropa vieja
- tijeras
- aguja
- hilo que combine
- alfileres comunes
- máquina de coser
- relleno
- decoraciones
Referencias
- ↑ http://www.pillowdecor.com/Square-Throw-Pillows-s/25.htm
- ↑ https://www.pacificcoast.com/blog/pillows/pillow-sizes-guide.html
- ↑ http://www.doityourself.com/stry/what-are-the-best-materials-for-pillow-cases#b
- ↑ http://www.sew4home.com/tips-resources/buying-guide/understanding-filler-materials-polyfil-pellets-microbeads-beanbag-filler
- ↑ http://www.rufflesandstuff.com/2011/07/turning-t-shirt-into-pillow-tutorial.html
- ↑ http://www.sew4home.com/tips-resources/sewing-tips-tricks/pillow-personality-fairfield-processing-pillow-stuffing-tips
- ↑ http://www.frontiercoop.com/learn/diy-flax-seed-and-lavender-neck-pillows.php
- ↑ http://www.sewmamasew.com/2011/02/how-to-make-a-basic-pillow-how-to-finish-a-pillow-with-binding/