Cómo hacer flores de papel

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¿Deseas hacer una flor? ¡Puedes hacer una flor que parezca verdadera e incluso una original! Estas flores son el obsequio perfecto para el día de la madre, para ocasiones románticas, para decoración o como herramienta de aprendizaje. Es posible que algunos métodos sean más adecuados para niños o adultos, por eso asegúrate de ver todas las opciones. ¡Puedes empezar con el paso 1!

Método 1

Método 1 de 3:
Margaritas hechas de cartulina

1
Corta la hierba de base. Toma un pliego largo de cartulina verde y dóblala por la mitad en sentido longitudinal. Partiendo desde el borde cerrado realiza cortes de forma paralela en dirección al extremo abierto y hasta llegar a una distancia de 4 cm (1.5") del borde. Intercala el grosor del espacio entre los cortes dejando la mayoría juntos y unos cuantos un poco más gruesos (estos vendrían a ser la hierba y los tallos).
- Si se va a realizar esta actividad con niños pequeños, puedes marcar el papel donde se deba realizar el corte con 2.5 cm (1") de margen horizontal a lo largo del extremo abierto y líneas gruesas de 2.5 cm (1") espaciadas uniformemente para que los pequeños lo hagan.
2
Forma la hierba de base. Desde el extremo sin cortar, enrolla el papel formando una especie de círculo o cilindro y fíjalo con cinta adhesiva o pegamento.
3
Haz las flores. Dibuja las flores en cartulinas de diferentes colores y córtalas. También puedes añadir en el centro de la flor objetos decorativos como bolitas de felpa, botones y otros accesorios.
- Si lo deseas, también puedes hacer flores de aspecto más realista para ubicar en la base.
4
Coloca las flores en los tallos. Utiliza pegamento o cinta adhesiva para unir las flores a las secciones que quedaron en la base (los tallos).
5
¡Disfrútalas! Puedes poner tus flores en un macetero relleno de habichuelas para darle un efecto más realista y completo. También puedes convertirlas en un ramillete de flores enrollando papel alrededor de la base.

Método 2

Método 2 de 3:
Amapolas de papel crepé por el día de los veteranos

1
Prepara el papel. Consigue papel crepé rojo, papel encerado o papel glassine y córtalo en círculos del tamaño que desees tus amapolas. Una vez hechos los círculos, forma los pétalos cortando guiones redondeados en tres puntos ligeramente hacia dentro. Necesitas 2 círculos por cada flor que desees hacer.^{[1]
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Fuente de investigación}
2
Logra el aspecto del pétalo. Presiona con el dedo en el centro de los círculos y tira de los extremos hasta formar un ovalo. Presiona, enrolla e intenta crear arrugas que empiecen desde la base hacia el extremo de los pétalos. Aplana los círculos cuando estén suficientemente arrugados.
3
Corta los pétalos. Corta desde los guiones redondeados hasta cerca de dos tercios de camino hacia el círculo.
4
Une los pétalos. Coloca un punto de pegamento al centro de un círculo y únelo con otro intercalando los pétalos para un efecto más real y exuberante.
5
Crea los centros. Utiliza pequeños cuadrados o círculos de papel de seda color verde y negro. Repite el proceso arrugando el papel para crear el centro de la flor.
6
Une los centros. Coloca el centro de papel seda negro sobre el centro de papel seda verde. Una vez fijados con pegamento, pueden colocarse en el centro de la flor.
7
Agrega polen. Puedes usar corrector líquido o pintura blanca para dibujar puntos en los bordes del papel negro y así completar el aspecto de la amapola.

Método 3

Método 3 de 3:
Rosas hechas de filtro de café

1
Dobla el filtro de café en octavos. Dobla un filtro de café redondo por la mitad tres veces, quedará doblado en octavos. Repite el proceso con 7 filtros.
2
Dobla un par de filtros de manera diferente. También podrías doblar 2 filtros de otra forma, dos veces por la mitad y la última vez en tercios.
3
Da forma a los pétalos. Utiliza tijeras para cortar los triángulos octavos de manera que el ancho extremo superior quede ovalado y así tengas la forma básica de los pétalos. Corta uno y utilízalo de modelo para cortar el resto. Cuando hayas finalizado, desdóblalos en semicírculos y córtalos por la mitad. Coloca a un lado los pétalos que fueron doblados en tercios al final, ya que formarán el centro de la rosa.
4
Empieza por el capullo. A partir de los pétalos que fueron doblados en tercios, toma un juego a la vez y pliega el borde inferior. Une con pegamento desde este punto plegado a lo que hayas decidido utilizar como un tallo, envolviéndolo alrededor. Añadir el resto de pétalos de la misma manera, asegurándose de escalonarlos y alternarlos desde donde empiezan.
- Puedes utilizar de tallo un bolígrafo verde, un cable grueso, un cepillo limpiapipas o puedes adquirir tallos artificiales en un establecimiento de suministros de arte.
5
Agrega el resto de pétalos. Al finalizar con los pétalos en tercios, puedes continuar con el resto de ellos. Estos también deben ser doblados en la parte inferior, pegados y envueltos alrededor de los otros pétalos. No olvides escalonarlos. Continúa añadiendo pétalos hasta que tu rosa se vea completa.
6
Añade detalles finales. Cuando la rosa esté lista, podrías agregar algunos detalles finales. Puedes concluir con la base pegando papel de seda verde alrededor de la parte inferior de la flor o incluso se puede rizar los bordes de los pétalos con un lápiz.

Consejos

Intenta hacer flores de diferentes tamaños.
Puedes hacer gran cantidad de flores para juntarlas en un ramillete.
Después de hacer una flor, trata de diseñar y hacer más.
Para no pincharte los dedos, intenta doblar los extremos del cepillo limpiapipas.
Puedes ensartar cuentas al tallo de la flor (cepillo limpiapipas).
Rocía perfume a 3 pulgadas de distancia de la flor para evitar humedecerla.
Trata de añadir hojas cortándolas de papel verde y pegar el cepillo limpiapipas a través del papel.
Dobla los pétalos de la flor para darle un aspecto realista,

Advertencias

No rocíes mucho perfume en la flor, podría dañarla.
Si pretendes usar un perfume que no te pertenece, asegúrate de consultarlo antes.
Los cepillos limpiapipas pueden pincharte los dedos si no los manipulas con cuidado.