Cómo hacer pirograbado

Consigue algunas herramientas esenciales. Para practicar el pirograbado, necesitarás algunas herramientas básicas con las que puedas comenzar. Después de haber completado exitosamente un par de dibujos, es posible que quieras ir más allá, aunque puedes arreglártelas perfectamente con los siguientes elementos:

• Pirógrafo. Básicamente viene en dos variedades: uno de estilo soldador con un ajuste de calor así como con puntas de latón intercambiables y el que tiene un alambre de calidad superior con dos agujas y diferentes ajustes de calor. Puedes obtener un pirógrafo de estilo soldador por unos $20 o más mientras que los de alambre más versátiles se venden por cientos de dólares.^[2]
• Puntas de pirograbado de distintas variedades. Estas puntas te permitirán tener mayor libertad para producir marcas más ligeras o pesadas, así como patrones distintos.
• Un suavizador y óxido de aluminio para limpiar periódicamente las puntas de latón del pirógrafo.
• Alicates.
• Olla de barro o algo que sostenga el pirógrafo (por seguridad cuando el dispositivo aún está caliente).

Consigue una buena madera para realizar el pirograbado, de preferencia una que sea más suave. La dureza de la madera se mide en una escala del 1 al 10, donde 1 es la más suave (como madera de balsa) y 10 es la más dura (como madera de Padouk). Para los principiantes, mientras más suave sea la madera, mejor. La madera dura es costosa, resistente al calor y por lo general es más oscura. Por otro lado, la madera suave es más barata, fácil de quemar y ligera, lo que te brinda un buen contraste con las partes pirograbadas. Si recién empiezas a practicar el pirograbado, opta por conseguir algunos de estos tipos de madera suave:

• Pino
• Tilia
• Betula
• Fresno
• Arce

Maneja el pirógrafo con cuidado. El pirógrafo se calentará con bastante rapidez, de modo que debes colocar la punta con la que trabajarás “antes” de encender el aparato. Siempre coloca y quita las puntas con ayuda de los alicates. Espera unos dos minutos para que el pirógrafo se caliente y, mientras lo hace, apóyalo en un soporte para pirógrafo o sobre una olla de barro para minimizar el riesgo de sufrir una quemadura accidental.

Lija la madera antes de empezar. Toma una lija de grano 320, envuélvela alrededor de un trozo de madera plano o colócala en una lijadora y lija ligeramente todas las áreas de la madera para uniformizarla. Los detalles serán más definidos y nítidos cuando la superficie de la madera sea muy suave.

• Al lijar, hazlo siguiendo la veta de la madera. La veta es la direccionalidad de las fibras de la madera. Al lijar siguiendo estas vetas minimizarás la posibilidad de dejar rebabas o rayones pequeños que surjan a causa del lijado en contra de la veta.
• Cuando termines de lijar, limpia la superficie con una toalla húmeda. Esto quitará los restos de aserrín y hará que sea más sencillo transferir el diseño.

Emplea trazos suaves en lugar de apoyar demasiado la mano. Muchos principiantes cometen el error de presionar demasiado fuerte el pirógrafo sobre la madera pensando que es necesario para que de esa forma el diseño se marque mejor. Pues no es verdad. De hecho, es preferible usar trazos suaves que presionar con demasiada fuerza. De esta manera, es más fácil guiar el pirógrafo, reducir los errores y eliminar prácticamente la posibilidad de sufrir una quemadura accidental.

Tómate tu tiempo cuando realices el pirograbado. No ganarás ningún premio por apresurarte a terminar el diseño en tiempo récord. El pirograbado, independientemente del material que uses, es un proceso lento. A medida que te familiarizas con el pirógrafo, recuerda:

• Mantener una presión constante es lo mejor. En el caso de la mayoría de diseños principiantes, querrás que el margen que hagas con el pirógrafo sea uniforme en todos lados.
• Mientras más tiempo sostengas el pirógrafo sobre un área, más oscura y profunda se volverá.

Sigue el sentido de la veta para que sea más fácil realizar el pirograbado. Gira el trozo de madera hasta que la mayor parte de la veta apunte hacia abajo. Esto te facilitará mucho el trabajo, ya que moverás el pirógrafo en una dirección hacia abajo la mayor parte del tiempo, siguiendo el sentido de la veta. Pirograbar en contra de la veta dará lugar a una mayor resistencia de la madera.

Practica un poco en un trozo de madera y experimenta. Una vez que tengas todos los materiales y sepas los conceptos básicos, reúne varios trozos de madera con los que puedas practicar utilizando diversas puntas que vendrán incluidas junto con el pirógrafo. Una vez que tengas una buena idea de lo que hace cada punta, sabrás cuáles usar para diversos proyectos. Las puntas que usarás dependerán del tipo de imagen y de la cantidad de detalles que plasmarás en ella.