En ocasiones, es difícil verte reflejado en tus amigos cuando han tenido sexo y tú no. Quizás hablen de lo que han hecho y te sientas excluido, o tal vez te presionen para que tengas sexo. Incluso podrían burlarse de ti por ello. Sin embargo, es importante que recuerdes tu valor propio y que seas fiel a tus valores.

Método 1
Método 1 de 3:
Validar tus elecciones personales

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    Piensa por qué has elegido seguir siendo virgen. Quizás lo seas porque tomas la decisión consciente de serlo. Tal vez esperes el momento correcto y a la persona correcta. Quizás sigas una religión que requiera que te abstengas hasta el matrimonio. Todas estas son razones válidas para seguir siendo virgen, a pesar de lo que tus amigos hagan.[1]
    • De hecho, no existe un motivo "incorrecto" para ser virgen. Conservar la virginidad es totalmente normal, y no es algo de lo que debas avergonzarte. Si tus amigos que no son vírgenes te hacen sentir avergonzado o inexperto, recuerda que está totalmente bien que sigas siendo virgen.
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    Comprende que no hay apuro. Por más que no seas virgen por elección y simplemente no hayas encontrado a la persona correcta, es normal y nada de lo que debas avergonzarte. Todas las personas tienen sus tiempos, y hay mucho más en la vida que las experiencias sexuales.
    • Ten en cuenta que estarás mucho mejor si esperas el momento correcto o la persona correcta que si pierdes la virginidad solo para "quitártelo de encima" o sentir que has alcanzado alguna especie de hito. Ten paciencia y date tiempo.
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    Reconoce los riesgos que has evitado. La actividad sexual conlleva varios riesgos y posibles consecuencias para las que podrías o no estar preparado. Por ejemplo, la abstinencia es el único método 100 % efectivo para prevenir los embarazos. Evitar la actividad sexual también puede protegerte de enfermedades de transmisión sexual. [2]
    • En el caso de las mujeres, ser sexualmente activas también significa visitar a un ginecólogo todos los años para detectar el cáncer cervical y las ETS. Estas visitas implican exámenes pélvicos que, a menudo, pueden ser incómodos. Si no eres una persona sexualmente activa, no necesitarás asistir a estas visitas anuales hasta los 21 años.[3]
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    Comprende tu valor propio. Recuerda que, a pesar de lo que tus amigos hagan, vales mucho más que tu nivel de actividad sexual. Tienes más para ofrecer a tus amigos que historias de tus experiencias sexuales. Tus amistades deben basarse en el respeto mutuo y la amabilidad en vez de las críticas.
    • Si tus amigos te critican negativamente por ser virgen, ten en cuenta el hecho de que quizás no sean los mejores amigos para tener en la vida. El objetivo es tener amigos comprensivos y útiles en vez de prejuiciosos o críticos.

Método 2
Método 2 de 3:
Evitar la presión de los compañeros

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    Mantente fiel a tus valores. Sin importar cuáles sean tus valores relacionados con la actividad sexual, mantente fiel a ellos. Si has tomado la decisión de no tener sexo hasta casarte, respétala. Si has decidido que quieres esperar el momento correcto, sé fiel a esta idea.
    • No permitas que tus amigos sean la razón por la que sueltas algo en lo que siempre has creído.
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    Ten sexo solo cuando realmente estés preparado. Por más que no seas virgen por elección, no tengas sexo solo para "quitártelo de encima" o estar a "la altura" de tus amigos. Espera hasta conocer a la persona correcta, y hazlo solo cuando se sienta cómodo, apropiado y seguro.[4]
    • No tengas sexo solo para charlar con tus amigos del tema y luego arrepentirte, o sentir emociones negativas acerca de lo que has hecho. Tu virginidad es importante, al igual que tú.
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    Recuerda que eres la única persona que puede decidir. Sin importar lo que digan los demás, perder la virginidad depende de ti por completo. Recuerda que el consentimiento se puede dar y quitar en cualquier momento, y que tus parejas deben respetar tus elecciones.
    • Además, recuerda que todos los actos sexuales, incluso el sexo oral y los besos, requieren un consentimiento. No permitas que nadie te presione para realizar una actividad sexual si no estás dispuesto a participar o no quieres hacerlo.[5]
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    Pídeles a tus amigos que no hablen de sexo cuando estén contigo. Si escuchar sobre sus experiencias sexuales te genera incomodidad, cambia de tema cuando surja. Pídeles con respeto que no hablen del tema cuando estés cerca. No tengas miedo de hacerles saber que realmente no te interesa hablar del tema.
    • Busca otros temas para hablar con tus amigos. Puedes redirigir la conversación a cualquier otro tema, sin siquiera hacerles saber que evitas el tema del sexo.
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    Habla con los amigos que te provoquen o molesten. Si alguno de tus amigos te molesta porque eres virgen, dile cómo te afecta su comportamiento. Pídele que deje de burlarse de ti. [6]
    • Por ejemplo, puedes decirle "Realmente valoraría que dejes de molestarme por ser virgen. Hiere mucho mis sentimientos y me hace sentir que no me valoras como amigo".

Método 3
Método 3 de 3:
Superar el estigma social

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    Ten en cuenta que algunos de tus amigos podrían mentir. No es raro que las personas a menudo mientan sobre su vida sexual, en especial en la secundaria y la universidad. Dado que existe un estigma extraño relacionado con la virginidad en estos tiempos, muchas personas mienten y dicen que han tenido sexo, por más que no sea así.[7]
    • Existen muchas personas que son vírgenes en sus veinte años. No es raro que las personas sean vírgenes durante toda la secundaria y la universidad.
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    No permitas que la virginidad te defina. En vez de identificarte constantemente como una persona virgen, busca tu identidad en otra parte. No permitas que este sea el punto central para describirte. Recuerda que tienes otras cualidades y experiencias para compartir con los demás, y que la historia sexual es solo una pequeña parte de lo que eres.[8]
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    No bases tu confianza en tu historia sexual. A la hora de tener citas, no sientas que tienes que haber tenido una experiencia sexual para sentirte sexi o seguro en las relaciones nuevas. Puedes sentirte sexi y seguro al mismo tiempo que eres virgen.[9]
    • A la hora de tener citas e intimidad, no comiences a pensar cosas como "Soy virgen, así que seré muy malo a la hora de tener intimidad física". En cambio, piensa en algo como "Soy una persona atractiva, segura y sexi, y cualquier persona sería afortunada de tenerme como pareja sexual".

Advertencias

  • Recuerda siempre que puedes dar y quitar el consentimiento en cualquier momento con una potencial pareja sexual.

Acerca de este wikiHow

Josh Spurlock, MA, LPC, CST
Coescrito por:
Consejero profesional licenciado
Este artículo fue coescrito por Josh Spurlock, MA, LPC, CST. Josh Spurlock es consejero profesional licenciado, así como el fundador y el presidente ejecutivo de MyCounselor.Online. Con más de 15 años de experiencia, se especializa en consejería matrimonial, consejería familiar y terapia sexual a través de una perspectiva de consejería cristiana. Asimismo, tiene una licenciatura en lenguas, literaturas y lingüísticas bíblicas, además de una maestría en psicología de consejería que recibió en la Universidad Evangel. Este artículo ha sido visto 1693 veces.
Categorías: Amistad