El liderazgo comprende a una gran variedad de cualidades y habilidades. Un buen líder puede dirigir a las personas y las tareas, comunicarse con eficacia y fomentar un ambiente de equipo positivo. Puedes desarrollar tus cualidades de líder si evalúas tus fortalezas y debilidades, y si les brindas un buen ejemplo a tus colegas.

Parte 1
Parte 1 de 4:
Evaluar tus cualidades de líder

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    Reflexiona sobre el tipo de líder que eres. Si deseas desarrollar tus habilidades de líder, es esencial que evalúes tus fortalezas y debilidades con sinceridad. Esto te permitirá identificar las áreas que necesitas mejorar, y podrás estar más consciente de la manera en la que actúas y te comportas. Para empezar, hazte la pregunta “¿qué tipo de líder soy?”.
    • Quizás lideras con el ejemplo y no te involucras mucho con el trabajo de los demás.
    • Tal vez eres un líder que brinda su ayuda para solucionar los problemas, y que adopta un papel más activo y participativo.
    • Otra manera de ser un buen líder consiste en trabajar en equipo de manera adecuada y ayudar a los demás a tener una buena relación y trabajar juntos con más eficacia.[1]
    • Incluso puedes resolver cuestionarios de liderazgo en Internet, así evaluarás tus habilidades de líder.[2]
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    Ten en cuenta la opinión que los demás podrían tener de ti. Luego de tener una perspectiva más clara de la manera en la que te comportas como líder, será de mucha ayuda tener en cuenta lo que los demás opinan de ti como líder. Podría tratarse de tus colegas del trabajo o tus amigos de la escuela o la universidad. Podrás lograrlo si le prestas mucha atención a las interacciones en equipo, como la frecuencia con la que tus colegas se te acercan para pedirte consejos y la comodidad que sienten al hacerlo.[3]
    • Asimismo, puedes acudir a un amigo o colega de confianza y preguntarle qué es lo que opina sobre tus cualidades de líder.
    • Puedes acudir a un colega de mayor rango que te conozca a ti y tu trabajo, y pedirle algunos comentarios y orientación sobre gerencia y liderazgo.
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    Evalúa tus cualidades de líder. Luego de hacer las preguntas iniciales sobre la manera en la que lideras y en la que los demás te perciben, puedes tratar de evaluar tus cualidades de líder de manera más detallada. Luego elegirás los factores en los que trabajarás. Anota las preguntas brindadas a continuación e intenta responderlas de la manera más sincera y completa posible. Estas preguntas son las siguientes:
    • ¿Me esfuerzo por tener en cuenta los pensamientos y los sentimientos de mis colegas?
    • ¿Le brindo mi ayuda a los demás para que se desempeñen lo mejor posible y alcancen su potencial?
    • ¿Asumo la responsabilidad?
    • ¿Cuento con una mente abierta y pruebo ideas nuevas y maneras novedosas de resolver las cosas?
    • ¿Me puedo comunicar de manera eficaz con los demás?
    • ¿Soy bueno para resolver los problemas?
    • ¿Incentivo a brindar opiniones y puntos de vista, y los acepto?[4]
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    Determina cuáles son las áreas en las que debes mejorar. Estas preguntas serán de utilidad para destacar las cualidades sólidas de liderazgo que posees, y aquellas en las que necesitas mejorar. Divide tus cualidades de líder en tres partes teniendo en cuenta tus respuestas a las preguntas. Para empezar, identifica las cualidades sólidas que consideres tener. Luego, determina cuáles son las áreas en las que debes mejorar. Por último, identifica qué áreas son débiles y requieren una atención significativa.
    • Por ejemplo, si tienes en cuenta los pensamientos y sentimientos de tus colegas, y aceptas las opiniones de los demás, es probable que tu receptividad y tu compromiso con los colegas sean sólidos.
    • Si no le brindas tu ayuda a los demás para desempeñarse lo mejor posible, y no te comunicas con la eficacia que desearías, tendrás que trabajar en estas habilidades.
    • Estas cualidades de líder pueden dividirse en las áreas de comunicación más generales, la inspiración y el ejemplo para los demás, la receptividad y el trabajo en equipo y la cooperación.[5]

Parte 2
Parte 2 de 4:
Mejorar tus habilidades comunicativas

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    Establece un diálogo eficaz. Quizás la comunicación sea la cualidad de líder más importante, y una que afecta a todas las demás cualidades importantes. Uno de los elementos clave para garantizar una comunicación adecuada consiste en establecer un diálogo positivo (y a veces fuerte) sobre los problemas y las soluciones. Existen diversos estilos de liderazgo; sin embargo, si alguien rechaza los debates y reprime las conversaciones de manera constante, es poco probable que cuente con el apoyo de los demás por mucho tiempo.
    • Haz preguntas abiertas e incentiva a que las hagan, en lugar de hacer preguntas restrictivas.
    • Primero, destaca las áreas en las que acuerden y luego encárgate de los desacuerdos.
    • No seas autoritario y proporciona un entorno abierto en el que las personas puedan hablar sin miedo.[6]
    CONSEJO DE ESPECIALISTA

    "Si escuchas a las personas en la sala de descanso hablando sobre algo que dijiste, pero en sus palabras sabes que tu mensaje se está transmitiendo".

    Maureen Taylor

    Maureen Taylor

    Coach de comunicaciones
    Maureen Taylor es la directora ejecutiva y fundadora de SNP Communications, una empresa de comunicaciones corporativas con sede en el área de la Bahía de San Francisco. Ella ha ayudado a líderes, fundadores e innovadores en todos los sectores a perfeccionar sus mensajes y forma de hablar durante más de 25 años.
    Maureen Taylor
    Maureen Taylor
    Coach de comunicaciones
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    Exhibe un lenguaje corporal positivo. El lenguaje corporal positivo puede ser de utilidad para lucir como una persona dinámica, receptiva y cooperativa. Asimismo, este puede ser de ayuda para dar una impresión sólida al hablar, y eleva la intensidad y la eficacia de tus palabras. Una buena regla consiste en contar con un lenguaje corporal que coincida con lo que dices. Por ejemplo, no le pidas a alguien que haga algo mientras miras al piso. En lugar de ello, haz contacto visual y muestra una actitud receptiva y participativa.
    • Puedes emplear un lenguaje corporal positivo y afirmativo al hablar si mantienes el contacto visual, te paras de manera erguida y relajas el rostro.[7]
    • Las personas pueden interpretar tu lenguaje corporal como la manera en la que te sientes, por lo que debes tratar de mostrar un lenguaje corporal que transmita las cualidades y el enfoque de un buen líder.[8]
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    Escucha de manera activa. Para comunicarte con eficacia, tienes que escuchar de manera adecuada. Si haces el esfuerzo de escuchar, la persona lo notará y te considerará como alguien con quien puede conversar. Esta es una cualidad de líder esencial que debes desarrollar. El lenguaje corporal es importante, por lo que debes tratar de mantener el contacto visual con la persona con quien converses.[9] Puedes escuchar de manera activa si haces lo siguiente:
    • No juzgues a las personas.
    • Bríndale toda tu atención a la persona con la que converses.
    • Intenta comprender a los demás, antes de intentar hacer que te comprendan.
    • No interrumpas de manera innecesaria.[10]

Parte 3
Parte 3 de 4:
Liderar con el ejemplo

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    Muestra iniciativa. Uno de los aspectos característicos de un buen líder es actuar de manera rápida y decidida para solucionar un problema. Si notas que hay algo que debe hacerse y estás seguro de que conoces la manera más eficaz de hacerlo, recurre a tu iniciativa. Un líder sólido está preparado para tomar el control de las situaciones sin que se lo pidan.
    • Si muestras iniciativa, transmitirás una actitud positiva y capaz.[11]
    • No obstante, debes estar seguro de tus acciones. Compórtate de manera calmada y segura, y no intentes emplear una solución con prisa si el problema debe consultarse.
    • Otro aspecto de un buen líder consiste en saber en qué momento hacer caso a los consejos, y comprender si un problema requiere un conocimiento más profundo antes de abordarlo.[12]
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    Asume la responsabilidad. Si deseas brindar un ejemplo sólido como líder, es vital que asumas la responsabilidad de tus tareas y prioridades, y las del equipo en su totalidad. Si conoces las prioridades y asignas las funciones con claridad, esto hará que las personas puedan identificar sus propias responsabilidades con más facilidad.[13]
    • Bríndales apoyo a los miembros de tu equipo para que culminen sus tareas e intenta establecer un ambiente y una cultura cooperativos, y no competitivos.[14]
    • Si asumes la responsabilidad, esto también podría requerir que no asignes tareas a las personas que hayan demostrado que no pueden hacerse cargo de ellas.[15]
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    Sigue mejorando tus habilidades. Una manera de demostrar que cuentas con habilidades de líder adecuadas consiste en siempre estar al tanto de las nuevas oportunidades para aprender y desarrollar tus capacidades.[16] Si muestras un deseo continuo de mejorar tu persona y tu trabajo, esto puede ser un factor que motive a las personas que te rodean. Esto muestra tu compromiso con la excelencia y que no eres conformista.
    • Organiza y anota una serie de estándares claros para tu persona y luego trata de siempre ceñirte a ellos.
    • Supervisa tu trabajo e identifica las áreas en las que puedas mejorar.
    • Puedes elaborar un plan de desarrollo personal con estos estándares personales.[17]
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    Brinda una visión. Un buen líder es aquel que puede brindar una visión clara e interesante del futuro a corto y largo plazo. Los líderes sólidos se caracterizan por ser capaces de planificar con anticipación, pensar de manera estratégica y desarrollar prioridades.[18] Para lograrlo, tendrás que desarrollar una perspectiva más amplia, así podrás ver más allá de las fechas límite más próximas.
    • Si identificas el contexto más general, esto puede ser de utilidad para prever los problemas antes de que surjan.
    • Asimismo, este tipo de enfoque puede generar innovación y cambios estructurales que cuentan con beneficios a largo plazo.[19]

Parte 4
Parte 4 de 4:
Promover un buen trabajo en equipo

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    Motiva a los demás. En el caso del trabajo en equipo, debes motivar a tus colegas. Una de las maneras más eficaces en las que un líder puede motivar a sus colegas consiste en brindarles atención e indicarles que les darás tu apoyo y tu ayuda cuando lo requieran. Procura mantener a las personas enfocadas en los objetivos de mayor prioridad, así brindarás pautas más claras para el futuro.[20]
    • Si alguien tiene inquietudes o dificultades, no debes ser el último en enterarte.
    • Cuenta con una actitud activa y comunicativa, así identificarás los problemas y podrás afrontarlos.
    • Esto podría requerir modificaciones en tu equipo o la distribución del trabajo.
    • Por ejemplo, si alguien ya no siente interés porque el trabajo ya no le parece desafiante, idea maneras en las que puedas hacer que se interese por sus tareas.
    • Podrías explicar la manera en la que este trabajo es vital para el proyecto en general, a pesar de ser un poco aburrido.
    • Di algo como “Sé que este trabajo es un poco monótono, pero todo se estropeará si no lo cumples. Te lo he asignado porque eres muy atento con los detalles”.
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    Elogia el buen trabajo. Para motivar a los demás, es esencial que elogies el buen trabajo. Busca oportunidades en las que puedas elogiar a las personas por haber hecho un buen trabajo, y demuestra que sientes aprecio por lo que hacen. Sentir un interés activo por el trabajo de los colegas es una característica vital de un buen líder que puede motivar a su equipo.
    • En el caso de los empleados de menor rango, siempre debes estar al tanto de las oportunidades de desarrollo profesional.
    • Tendrás un grupo más motivado si cuentas con una cultura de trabajo positiva y cooperativa en la que se respete y se aprecie el trabajo duro de las personas.[21]
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    Coopera en lugar de competir. Si intentas convertirte en un sólido líder, podrías sentir la tentación de fomentar un mejor trabajo a través de la creación de un ambiente competitivo entre tus colegas. No obstante, el desarrollo de una cultura de trabajo más cooperativa suele generar un trabajo más eficaz y mejores relaciones.
    • Para encargarte de toda batalla que surja en una cultura competitiva, tendrás que emplear tiempo y recursos valiosos.
    • Lo mejor es establecer metas en común que puedan alcanzar juntos.[22]
    • Si estableces un ambiente cooperativo, esto fomentará la colaboración y evitará que los empleados trabajen por su cuenta.
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    Debes estar cerca y ser accesible. Si vas a liderar un equipo para un proyecto, es esencial que tus colegas puedan acudir a ti. Ten en cuenta que un buen líder no solo se encarga de velar por el cumplimiento de la tarea, también se dedica a ayudar a sus colegas para que desarrollen y alcancen su potencial. Debes estar dispuesto a supervisar a los colegas de menor rango, y debes dedicar un tiempo a capacitarlos de manera personal, si es necesario.[23]
    • Existen diversas maneras de mantenerte cerca y accesible. Por ejemplo, podrías programar un tiempo breve todos los días, en el cual puedas escuchar toda inquietud de tus colegas.
    • Podrías hacerlo de manera formal o tan solo reservar media hora para acudir al equipo y verificar cómo se encuentran.
    • Si alguien te hace una pregunta y no cuentas con tiempo para encargarte de ello de inmediato, no lo rechaces de manera rotunda. Programa un tiempo más adelante, cuando puedas conversar.

Acerca de este wikiHow

Maureen Taylor
Coescrito por:
Coach de comunicaciones
Este artículo fue coescrito por Maureen Taylor. Maureen Taylor es la directora ejecutiva y fundadora de SNP Communications, una empresa de comunicaciones corporativas con sede en el área de la Bahía de San Francisco. Ella ha ayudado a líderes, fundadores e innovadores en todos los sectores a perfeccionar sus mensajes y forma de hablar durante más de 25 años. Este artículo ha sido visto 32 709 veces.
Categorías: Finanzas y negocios