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Si eres un repartidor de pizzas que trabaja para Domino’s o para cualquier otra pizzería, es muy probable que dependas de propinas generosas para recibir buenos ingresos. No hay mucho que puedas hacer para obtener propinas más contundentes; sin embargo, si haces todos lo que esté a tu alcance, podrás notar la diferencia a largo plazo.
Pasos
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1Memoriza las rutas. Debes conocer las rutas más importantes de tu ciudad y a los clientes regulares, así como saber quiénes dan buenas propinas y quiénes no, y qué productos ofrece la tienda para la que trabajas. Les agradarás más a los clientes si puedes contestar todas sus preguntas.
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2Sé eficiente. No exageres con la velocidad para no poner en peligro tu vida o la vida de los demás. Sin embargo, asegúrate de entregar la pizza a tiempo. Asimismo, si estás a cargo de tomar pedidos por teléfono, diles a los clientes que la pizza tardará un poco más de tiempo de lo que en realidad tarda en llegar a su casa. Es probable que se decepcionen un poco al inicio, pero si les entregas la pizza antes de lo que esperaban, estarán muy contentos.
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3Sé muy amable. Sonríe aunque no haya motivo alguno para hacerlo y ríe aunque no haya nada gracioso de qué reírse. Pregúntale al cliente cómo le va, coméntale cuán bonita es su casa o di cualquier otra cosa que te permita mostrar tu personalidad amigable.
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4Si algo sale mal, discúlpate con MUCHO AHÍNCO. Luego, arregla el problema. No importa qué tanto digas que lo sientes, eso no arreglará el problema. Sin embargo, una soda gratis quizás lo haga. Incluso si no te dan una buena propina esa vez, te recordarán la próxima vez que toques a su puerta.
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5Clientes regulares. Ellos esperan que sepas lo que les gusta.
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6Si el cliente te da una buena propina, sé agradecido. Si la propina es realmente buena, agradécele excesivamente. A los clientes les gusta saber que aprecias su generosidad y lo tomarán en cuenta la próxima vez.
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7En general, trata de mostrarle al cliente que realmente te importa y que te tomas muy en serio tu trabajo. Este simple gesto es muy importante, ya que la mayoría de clientes realmente lo toman en cuenta cuando deciden cuánta propina dar.
Consejos
- La apariencia es más importante de lo que crees. Si luces andrajoso, si no te afeitaste o si estás desarreglado, el cliente va a tener esa imagen en su mente cuando coma su pizza. Los clientes no desean que los empleados desarreglados tengan nada que ver con su comida y eso se refleja en sus propinas.
- Todo se trata de la personalidad. Haz algo para diferenciarte de los otros repartidores de pizza en el mundo. Sé extrovertido y amigable. Recorre la segunda milla por el cliente.
- Si estás ocupado y sabes que llegarás tarde, llama al cliente en el camino. Dile tu nombre y que eres el repartidor de la empresa para crear una conexión personal con él. Luego, discúlpate. De este modo, podrías ahorrarte tener que lidiar con un cliente enojado, podrías evitar perder la propina e incluso aumentarla.
- Recuerda que al dar una propina, el cliente muestra su aprecio por un trabajo bien hecho. Este NO es un requisito de ninguna manera. No pienses que mereces una propina por el simple hecho de entregar una pizza.
Advertencias
- Cuando manejes, debes hacerlo con inteligencia y no con rapidez. Asegúrate de saber a dónde vas antes de salir de la tienda. No aceleres. No vale la pena recibir una multa o, aún peor, sufrir un accidente ni siquiera por la propina más generosa. Mantente a salvo y no pongas en peligro a otros conductores.
- No pongas en evidencia que lo que más te importa es la propina. Preocúpate por el cliente de manera sincera.
- Recuerda que el Servicio de Impuestos Internos de los Estados Unidos considera las propinas como ingresos. Si no reportas las propinas que recibes a tu empleador, es tu responsabilidad reportarlas cuando presentes tu declaración de impuestos. Mantén registros ordenados y verídicos, ya que PUEDEN auditarte (y sancionarte o hacerte pagar intereses si no reportaste dichos ingresos).