Plantar un árbol de guayaba es mucho más fácil de lo que piensas y, si lo haces bien, puede dar frutos con más vitamina C que las naranjas. Fuera de protegerlo del frío, el árbol es también bastante autosuficiente una vez alcanza su madurez.

Parte 1
Parte 1 de 3:
Elegir una ubicación para plantar

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    Cultiva los árboles de guayaba en un ambiente tropical o subtropical. Los árboles de guayaba prosperan en zonas donde los veranos son cálidos y los inviernos frescos. Las temperaturas exteriores normales deben estar entre 15 y 28 °C (59 °F y 82 °F). Puedes preguntar al vivero local si tu ubicación actual es buena para el cultivo.
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    Selecciona un lugar bien iluminado por el sol. Asegúrate de que el lugar reciba al menos de 6 a 8 horas de sol al día. Querrás mantener el árbol fuera de la sombra, así que encuentra un lugar donde la casa y otros objetos no hagan sombra durante el día. Asegúrate de que la zona esté en un espacio abierto, para que la copa del árbol no choque con nada.
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    Encuentra un suelo húmedo y bien drenado. La guayaba crece en una gran variedad de suelos, siempre y cuando el suelo tenga un buen drenaje interno y externo. Esto solo significa que el suelo permite que el agua pase a través de él fácilmente. Para comprobar si hay este tipo de suelo, cava un hoyo de 30 cm (1 pie) y vierte un poco de agua en él. Si el agua desaparece en solo unos minutos, es un buen suelo. Si continúa asentándose, entonces necesitarás encontrar otro lugar.
    • Debes evitar el suelo poco profundo, y el suelo compacto y en capas. Esto dificultará el estiramiento de las raíces.
    • Si el suelo es duro y compacto, puedes añadir abono para ayudar a que alcance las condiciones correctas. Excava 60 cm (2 pies) de profundidad y trabaja el compuesto en el suelo.
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Parte 2
Parte 2 de 3:
Plantar el árbol de guayaba

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    Planea plantar durante la temporada de primavera. Esto será a finales de marzo. Las condiciones del clima primaveral hacen que sea el momento perfecto para plantar cualquier cosa, incluyendo guayabas.
    • Durante la primavera, el suelo será más fácil de romper y cavar, la lluvia ayudará a regar las plantas, y el sol saldrá lo suficiente como para dar al árbol la luz que necesita.
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    Decide si vas a plantar con un esqueje o con una semilla. El proceso de crecimiento de cualquiera de los dos es más o menos el mismo. No obstante, aunque es más común plantar árboles de guayaba por semillas, los esquejes son en realidad más óptimos. Los esquejes producen más fruta, y estas son de mejor calidad en comparación con las semillas; por otro lado, las semillas son más baratas.[2]
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    Cava un agujero de unos 60 cm (2 pies) de profundidad. Retira las rocas u otros escombros que encuentres mientras cavas. Una vez tengas el agujero, afloja un poco la tierra del fondo con la herramienta que usaste para excavar.
    • Si usas una maceta, asegúrate de que también tenga al menos 60 cm (2 pies) de profundidad.
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    Coloca la semilla o esqueje en el agujero. Llena el agujero hasta la longitud de tu dedo índice para crear un montículo. Si trabajas con semillas, colócalas en la parte superior de este montículo. Para los esquejes, sujétalos por la línea de injerto o corona (la parte de la planta donde el tallo se une a las raíces) y colócalos sobre la tierra, asegurándote de que la línea de injerto esté por encima del nivel del suelo. Luego extiende las raíces a través del agujero.[3]
    • Como el montículo de tierra añadido se crea a partir del suelo ya quebrado, este permite que las nuevas raíces tengan más facilidad para penetrar en el suelo.
    • Si plantas varios árboles, plántalos a una distancia de 3 a 4 m (10 a 12 pies), para que no canibalicen la fuente de agua del otro.[4]
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    Llena el agujero alrededor del árbol o la semilla. No compactes la tierra después de rellenar el agujero, mantenla suelta. Asegúrate de que el árbol tiene espacio para extender las raíces y crecer con poca resistencia.[5]
    • En el caso de los esquejes, hay que tener cuidado de que no haya raíces sobre el suelo y la línea de injerto. Corta cualquier raíz por encima de la línea del injerto si es necesario.
    • Baja hasta el suelo para asegurarte de que los esquejes estén completamente verticales una vez plantados.
    • Marca donde has colocado las semillas con pequeñas banderas que puedan ser quitadas fácilmente una vez la semilla ha brotado.
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Parte 3
Parte 3 de 3:
Cuidar del árbol de guayaba

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    Riega el árbol. Mientras el árbol es joven, deberías regarlo dos o tres veces a la semana. No obstante, una vez madure no necesitará tanta agua, así que regar de dos a tres veces al mes debería ser suficiente. Los árboles de guayaba son sensibles al encharcamiento, así que asegúrate de regular lo que le das.
    • Los árboles de guayaba son principalmente de secano.
    • Elimina las malas hierbas y la hierba de la zona del árbol, pues un árbol de guayaba joven no puede competir por el agua y los nutrientes de manera adecuada.[6]
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    Fertiliza el árbol una vez cada tres meses con fertilizante orgánico. El árbol debe estar bien establecido antes de realizar este paso. Dispersa el fertilizante alrededor del árbol asegurándote de no entrar en contacto con el tallo. Una vez hecho esto, riega el árbol y el fertilizante completamente.[7]
    • Es preferible que esperes un año antes de fertilizar el árbol.
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    Poda la plata para darle una forma de árbol. Querrás empezar a podar alrededor de tres o cuatro meses después de que el árbol haya brotado. Si el árbol tiene múltiples troncos, encuentra el del medio y corta los otros en su base. Recorta las ramas laterales para mantenerlas de 60 cm a 90 cm (2 o 3 pies) de largo. Corta cualquier rama que brote de otras ramas y cualquier rama muerta o dañada que encuentres también.[8]
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    Cubre el árbol con una lona durante los inviernos fríos para protegerlo de las heladas. La exposición al frío extremo puede dañar gravemente o matar a un árbol de guayaba. Puedes usar lonas o mantas para proteger la copa del árbol. No necesitas cubrir todo el árbol, solo la copa. Ancla las esquinas de lo que sea que hayas usado para cubrir el árbol hasta el suelo.
    • Además de esto, puedes colocar otra fuente de calor debajo del árbol para darle una protección prácticamente completa contra la congelación.[9]
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    Revisa el árbol para ver si hay enfermedades. Las enfermedades comunes que hay que buscar son la enfermedad del marchitamiento de la guayaba, la putrefacción del extremo del estilo y la antracnosis.[10]
    • Los síntomas de la enfermedad del marchitamiento de la guayaba incluyen marchitez y amarillamiento o bronceado de las hojas, flacidez notable, y caída prematura de los frutos. No hay cura para esto, pero grandes dosis de nitrógeno después de la fructificación y proteger las raíces de los daños puede evitarlo.
    • La putrefacción del extremo del estilo solo afecta al fruto del árbol, decolorándolo a marrón o negro. La fruta infectada no se puede salvar, pero un aerosol fungicida puede salvar el resto de la cosecha.
    • La antracnosis hace que los brotes jóvenes mueran rápidamente mientras dejan al fruto y las hojas pegados. También causa que los frutos y las hojas desarrollen lesiones oscuras. Al igual que la putrefacción del extremo del estilo, se trata de una infección por hongos y los frutos no afectados pueden salvarse con un aerosol fungicida.[11]
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    Recoge la fruta de guayaba. Es todo, has cultivado el árbol de guayaba. Sabrás cuando la fruta esté lista, y lo suficientemente madura como para recogerla, por el cambio del color y la textura. El color cambiará de verde a amarillo, y entonces la fruta se suavizará.[12]
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Acerca de este wikiHow

Steve Masley
Coescrito por:
Especialista del hogar y jardinería
Este artículo fue coescrito por Steve Masley. Steve Masley ha estado diseñando y manteniendo huertos orgánicos en el Área de la Bahía de San Francisco por más de 30 años. Es consultor de jardinería orgánica y el fundador de Grow-It-Organically, un sitio web que enseña a clientes y estudiantes los entresijos de la horticultura orgánica. En 2007 y 2008, enseñó la práctica de campo de agricultura sostenible local en la Universidad de Stanford. Este artículo ha sido visto 10 060 veces.
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