Si el pequeño de la casa encontró un Sharpie, es posible que hayas encontrado más decoraciones en las paredes de las que tenías por la mañana. Este marcador permanente puede ser tu mejor amigo o tu peor enemigo. Existen varios métodos que puedes emplear para quitar las manchas de una pared pintada, y la mayoría implican el uso de artículos del hogar.

Método 1
Método 1 de 7:
Marcador para pizarra

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    Pinta sobre la mancha del Sharpie con un marcador para pizarra. Lo mejor es que sea del mismo color que el Sharpie.
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    Soba ambas manchas con un trapo seco y limpio. La tinta de ambos marcadores deberá borrarse dejando solo una mancha suave. Probablemente debas repetir este proceso unas cuantas veces para quitar por completo la mancha del Sharpie. [1]

Método 2
Método 2 de 7:
Pasta dental

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    Con ayuda de un trapo, esparce una pequeña cantidad de pasta dental blanca directamente sobre la mancha de Sharpie. No utilices la pasta dental de tipo gel; las que son baratas y de color blanco funcionan mejor. Otra opción es diluir la pasta dental ligeramente con un poco de agua en una taza. Esparce esta mezcla diluida sobre la mancha de Sharpie.
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    Deja que la pasta dental actúe por 5 a 10 minutos.
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    Restriega la mancha con un trapo. Utiliza movimientos circulares para ayudar a quitar la mancha de la pared.
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    Quita el residuo de la pasta dental con un trapo húmedo. Al terminar, la mancha deberá haber desaparecido.

Método 3
Método 3 de 7:
Bicarbonato de sodio

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    Utiliza una esponja con un lado verde más áspero. Moja la esponja y coloca una pequeña cantidad de bicarbonato de sodio en un montoncito. Ubica la esponja en el área afectada de la pared y soba suavemente con movimientos circulares. Probablemente debas enjuagar y repetir, dependiendo de qué tan drástica sea la mancha y el color (posiblemente esta sea la razón por la que las personas dicen que la pasta dental funciona: también contiene una gran cantidad de bicarbonato de sodio).

Método 4
Método 4 de 7:
Artículos de aseo personal a base de químicos

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    Prueba con alcohol isopropílico (alcohol desinfectante), desinfectante para manos, aerosol para el cabello o quitaesmalte. Utiliza guantes cuando manipules estos productos de limpieza. De este modo también evitarás mancharte las manos con tinta. Si el área de la pared que está manchada es grande, es buena idea abrir una ventana.
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    Haz una prueba del producto en la pared. Coloca una pequeña cantidad del limpiador en un área pequeña y poco visible de la pared. Muchos productos limpiadores pueden decolorar o quitar la pintura, así que soba con cuidado para ver cómo afecta a la pared.
    • Si la pintura es látex, ten mucho cuidado al aplicar productos limpiadores para quitar manchas. Este tipo de pintura tiende a ponerse pegajosa o salirse si la sobas con alcohol isopropílico, quitaesmalte o productos de ese tipo. También quitará el brillo de esa área. [2]
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    Vierte el limpiador en un paño suave o en una bola de algodón. Si empleas un paño, asegúrate de que sea descartable.
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    Aplica el producto sobre la mancha de Sharpie dando pequeños toques. Si esto no funciona, intenta restregar con movimientos circulares. Probablemente sean necesarias varias pasadas para quitar toda la mancha del marcador.
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    Limpia el área con un jabón suave y agua. Luego de quitar la mancha de Sharpie, limpia la pared para quitar cualquier residuo químico.

Método 5
Método 5 de 7:
WD-40

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    Ponte guantes antes de utilizar WD-40. Este producto es un químico lubricante multiuso que quita tierra, mugre y agua.[3] Si el área de la pared que está manchada es grande, es buena idea abrir una ventana. Asegúrate de prestar atención a las advertencias del producto.
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    Aplica una pequeña cantidad de producto sobre la mancha de Sharpie. Sostén un trapo debajo de la mancha mientras aplicas el aerosol. De este modo, evitas el riesgo de que las gotas del producto manchen el resto de la pared.
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    Restriega la mancha con movimientos circulares utilizando un paño limpio y seco.
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    Limpia el área con un jabón suave y agua. Luego de quitar la mancha de Sharpie, limpia la pared para quitar cualquier residuo químico. [4]

Método 6
Método 6 de 7:
Quitamanchas de uso casero

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    Prueba con un quitamanchas. Estos productos están hechos para limpiar manchas resistentes de ciertas superficies. Por ejemplo, puedes probar productos como "Mr. Clean Magic Eraser", “El Mago”, “Dr. Beckmann” o “Mr. Músculo”. Siempre revisa las instrucciones para asegurarte de que el producto sea apropiado para su uso en paredes.
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    Aplica el quitamanchas sobre la mancha de Sharpie.
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    Restriega la mancha suavemente con ayuda de un trapo suave. Esto quitará la mancha.
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    Limpia el área con un jabón suave y agua. Luego de quitar la mancha de Sharpie, limpia la pared para quitar cualquier residuo químico.

Método 7
Método 7 de 7:
Pinta sobre la mancha

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    Pinta sobre la mancha para cubrirla. Si la mancha es demasiado grande o ninguno de los métodos anteriores funciona por completo, es posible que no tengas más opción que volver a pintar el área de la pared donde está la mancha.
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    Si tienes una reserva, busca la pintura que sea del color de la pared. De lo contrario, compra un balde nuevo del color exacto. Utiliza una cartilla de colores si no sabes su nombre.
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    Prepara el área de la pared como lo harías habitualmente antes de pintar. Límpiala bien con un trapo, restriega el área si es necesario y deja secar.
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    Pinta sobre la mancha. Pinta varias veces para asegurarte de que el área quede cubierta. Nivela la nueva mano de pintura con el resto de la pared de modo que no resalte demasiado ni se vea como un “parche”.
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    Deja que la pintura se seque.

Consejos

  • Mantén los marcadores permanentes fuera del alcance de los niños.
  • Mientras más rápido te ocupes de la mancha, mejor será, pues evitarás que la pared absorba la tinta por completo.
  • Las paredes con pintura brillosa o semibrillosa son más fáciles de limpiar que las de color mate o sin lustre.
  • Puedes emplear estos métodos para quitar las manchas de todo tipo de marcador permanente, no solo las de los Sharpies.

Advertencias

  • Si restriegas o utilizas ciertos productos quitamanchas, probablemente queden manchas, marcas y parches en las paredes pintadas. También existe el riesgo de que la pintura se salga por partes. Si esto llegara a suceder, la única solución será volver a pintar la pared.

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