Una sesión espiritista te permitirá ponerte en contacto con el mundo espiritual para hacer preguntas y buscar guía. Para conseguir los mejores resultados, vas a requerir un grupo de creyentes espirituales que estén abiertos a ponerse en contacto con un espíritu. Prepara una sesión espiritista en una habitación silenciosa, luego siéntate con los participantes en un círculo. Cuando estés listo, comienza la sesión y haz las preguntas que tengas. Después de que el espíritu deje de responder o hayas terminado, termina la sesión agradeciendo al espíritu.

Parte 1
Parte 1 de 4:
Crear la atmósfera correcta

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    Escoge una habitación silenciosa para usar. Es importante conducir la sesión en un lugar donde haya la menor cantidad de interrupciones posibles. Escoge un espacio silencioso con iluminación que puedas adaptar para que quede tenue. Asegúrate de que la habitación sea cómoda y no esté llena de aparatos electrónicos que distraigan, obras de arte llamativas u otros artículos que podrían distraer a las personas de la experiencia.[1]
    • Muchas personas creen erróneamente que una sesión espiritista debe conducirse en un lugar embrujado. La habitación o el edificio que escojas no tiene que estar embrujado. Los espíritus llegan a cualquier lugar siempre que se sientan recibidos cuando los llamas.
    • Sin embargo, quizás quieras realizar la sesión en un lugar que tenga un significado espiritual para ti y las demás personas que estarán presentes. Por ejemplo, podrías tenerla en la casa de un ser querido si quieres conectar con esa persona por medio de la sesión.
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    Invita personas que creen en el mundo espiritista. Una sesión será mucho más poderosa si todos los presentes creen realmente que es posible comunicarse con los espíritus. Los escépticos debilitan la energía de la sesión, lo que dificulta que los espíritus vengan. Escoge personas que crean en lo sobrenatural y tengan el deseo de ponerse en contacto con los espíritus.[2]
    • Sería bueno que invites personas que hayan perdido a alguien con quien quieran comunicarse. Una sesión es una oportunidad para comunicarse con los seres queridos que están al otro lado.
    • No invites a alguien que tenga mucho miedo de los fantasmas o que suela ponerse nervioso cuando suceda algo fuera de lo ordinario. Esto puede perturbar la sesión.

    Consejo: por lo general, lo mejor es pedirles a 3 personas que participen. Una persona actuará como médium, mientras que las demás personas que participan se llamarán “asistentes”. Los asistentes fortalecen la energía de la sesión para ayudar al médium a ponerse en contacto con éxito con el mundo espiritual.[3]

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    Pídeles a los participantes que preparen preguntas básicas para el espíritu. Una vez que te pongas en contacto con él, haz las preguntas. Es posible que tengas una cantidad limitada de tiempo para hablar con el espíritu, así que lo mejor es tener preguntas preparadas con anticipación. Diles a los invitados que piensen unas cuantas que quieran preguntar antes de empezar. Lo mejor es usar preguntas de sí o no porque así recibirás respuestas más claras.[4]
    • Si sabes con quién te quieres contactar, las preguntas deben ser para esa persona. Sin embargo, también podrías crear preguntas generales si solo quieres llegar al mundo espiritual.
    • Por ejemplo, podrías planificar hacerle las siguientes preguntas a tu abuela que falleció: “¿estás bien?, ¿estás entre nosotros?, o ¿crees que estoy en el camino correcto?”.
    • Ten en mente que es posible que no obtengas respuestas claras a tus preguntas. Lo más fácil es hacer preguntas de sí o no.
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    Prepara tu mesa con velas e implementos para rituales. Estos elementos crearán la atmósfera para la sesión. Además, hacen que el área sea más acogedora para los espíritus. Acomoda la mesa de modo que se sienta bien para ti. Estos son algunos de los elementos que podrías escoger:[5]
    • Las velas pueden iluminar el espacio y atraer espíritus con su luz y calidez. Las blancas son una excelente opción porque puedes usar este color para cualquier ritual. También puedes probar velas violetas a fin de aumentar los poderes psíquicos, velas azules para mejorar la comunicación, naranjas para atraer las buenas cosas y expulsar los poderes negativos.[6]
    • El incienso sirve para aumentar los poderes psíquicos y atraer espíritus. Escoge aromas como la canela, el olíbano o el limoncillo.
    • Una foto de una persona con quien quieres ponerte en contacto si estás tratando de llamar a una persona en específico.
    • Un artículo que haya pertenecido a una persona con la que te quieres poner en contacto.
    • El tablero espiritista o péndulo, si vas a usar uno.

    Consejo: puedes hacer una sesión en el suelo si quieres. Simplemente haz un círculo con tus amigos y coloca las velas y los artículos para el ritual en el centro.

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    Asegúrate de que todos apaguen sus aparatos electrónicos. Esto ayudará a que todos entren en el estado mental correcto como para experimentar la sesión. Pídeles a todos que pongan sus aparatos en silencio y que los guarden antes de empezar la sesión. Una vez que esta esté en curso, cualquier tipo de distracción podría alterar la energía y hacer que termine de manera prematura.[7]

Parte 2
Parte 2 de 4:
Escoger una herramienta para ponerse en contacto con los muertos

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    Usa un tablero espiritista para comunicarte fácilmente con los espíritus. Un tablero por lo general tendrá impresos el alfabeto y las palabras “sí”, “no” y “quizás”. Además, cualquier persona puede usar el tablero. Incluye un tablero en una sesión si quieres respuestas claras.[8]
    • Por ejemplo, un tablero de ouija es un tipo de tablero espiritista conocido.
    • Sigue las instrucciones que vinieron con el tablero. Normalmente todas las personas que están en la sesión colocan sus manos en un puntero llamado planchette que se mueve por todo el tablero para indicar las respuestas del espíritu.
    • También puedes hacer un tablero espiritista si escribes el alfabeto y las respuestas básicas “sí” y “no” en un pedazo de papel.
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    Usa un péndulo si vas a hacer preguntas simples de sí y no. Un péndulo es un objeto con peso que cuelga de una cuerda o un hilo. Sostenlo por un extremo. Luego, dile al espíritu que mueva el péndulo de adelante hacia atrás para “sí”, de un lado a otro para decir “no” o en un círculo para decir “no lo sé”.[9]
    • Puedes encontrar péndulos hechos de piedras y madera. A veces, cuelgan de una cadena de metal.
    • También puedes improvisar un péndulo con un collar.
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    Prueba que el espíritu golpee la mesa como una opción básica para las preguntas de sí y no. Este método de comunicación le pide al espíritu que haga un sonido o haga una señal a modo de respuesta. Pídele al espíritu que golpee una vez para “sí” o dos veces para “no”.[10]
    • Golpear funciona mejor para las preguntas de sí y no porque son fáciles de responder.
    • Escucha detenidamente a ver si hay ruido después de cada pregunta.

    Variación: también puedes pedirle al espíritu que te dé señales. Por ejemplo, podrían hacer vibraciones o derramar un vaso de agua. De igual modo, podrías poner 3 velas en frente del médium. Escribe “Sí” en la primera vela, “No” en la segunda y “No sé” en la tercera. Pídele al espíritu que apague una vela para responder a cada pregunta.

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    Pídele a un médium psíquico que asista a la sesión y que actúe como un conducto. Se cree que algunas personas poseen la capacidad de ver y hablar con los espíritus. A estas personas se les llama médium y son capaces de dirigir una sesión en tu lugar. Si conoces a uno, pídele que vaya a la sesión y se ponga en contacto con los espíritus.[11]
    • Quizás puedas contratar a un médium si buscas por Internet. Sin embargo, ten presente que algunas personas pueden ser fraudes.
    • Usar un médium podría ayudarte a tener más éxito porque por lo general estará más sincronizado con el mundo de los espíritus.
    • Un médium podría ayudarte a tener una sesión segura si te preocupan los entes negativos. Por lo general, un médium puede darse cuenta del tipo de espíritu con el que está hablando.

    Consejo: si no ningún médium va a asistir a la sesión, lo mejor es pedirle a uno de los asistentes que actúe como uno. Esta persona conducirá la sesión, pero si aún tienes que usar un tablero espiritista, un péndulo o los golpes para obtener respuestas de los espíritus.

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    Filma o graba la sesión para recoger más respuestas. Las grabaciones a menudo captan sonidos o imágenes que los presentes no ven o escuchan. Piensa en colocar una cámara de video o una grabadora para grabar lo que sucede. Más adelante podrás escuchar la grabación para ver si hay algún mensaje especial o movimiento que no se ve.[12]
    • Por ejemplo, quizás escuches la respuesta a tus preguntas que no pudiste captar con el oído en audio.
    • Si grabas la sesión, puedes buscar señales de un espíritu, como un orbe de luz o una sombra.

Parte 3
Parte 3 de 4:
Acoger a los espíritus

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    Siéntense en un círculo e iluminen las velas. Haz que todos se sienten y esperen pacientemente mientras enciendes las velas en el centro de la mesa. Asegúrate de apagar o atenuar la iluminación eléctrica. Enciende incienso y pon música instrumental si quisieras. Una vez que todo esté listo, evalúa el ambiente y haz ajustes si fuera necesario para crear la atmósfera correcta.[13]
    • Habla con los demás asistentes para asegurarte de que todos estén relajados. Si fuera necesario, medita por 5 a 10 minutos de modo que todos estén concentrados en el mundo espiritual.
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    Asegúrate de que todos estén listos para ser parte de la sesión. Habla con los asistentes y hazte una idea de sus ánimos. Es normal que las personas estén un poco ansiosas y algunos se reirán de nervios o se verán preocupados. Sin embargo, si alguien es cínico o está asustado, sería mejor que le pidas que no participe.[14]
    • No obligues a alguien a que participe en la sesión si no estuviera listos. Lo más probable es que altere el ritual y podría molestar más a la persona.
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    Tómense de las manos y cierren los ojos para empezar la sesión. Cada persona debe tomar las manos de quienes están a cada lado. Luego, todos se relajarán y cerrarán los ojos. Ten los ojos cerrados hasta que la sesión empiece.[15]
    • Agarrarse de las manos cierra el círculo y permite que la energía se acumule dentro de él.
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    Enfócate en el propósito de la sesión para que te ayude a hacer contacto. Todas las personas que participan de una sesión se deben enfocar en el mismo objetivo. Por ejemplo, tu propósito podría ser ponerse en contacto con un pariente que falleció. Esto intensifica tu energía y aumenta las probabilidades de que tengan éxito. Piensa en el propósito de la sesión mientras esperas a que empiece.[16]
    • Si así lo decides, la persona que actúa como médium puede decir en voz alta el propósito para que los pensamientos de todos se concentren en él. Podría decir “Hoy día estamos aquí para ponernos en contacto con el espíritu de Greta Darlow” o “Esta noche nos reunimos para buscar la guía del mundo espiritual”.
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    Recita un encantamiento de apertura si vas a actuar como un médium. Este encantamiento comienza oficialmente la sesión e invita a los espíritus a unirse. Por lo general, este encantamiento lo enuncia el médium. Pronúncialo en una voz firme y clara.[17]
    • Podrías decir lo siguiente: “Invitamos a cualquier espíritu bueno que esté cerca de nosotros a unirse a nuestro círculo. Por favor, haznos conocer tu presencia” o “Nos queremos comunicar con la Sra. Greta Jeane Darlow. Por favor, únase a nuestro círculo esta noche cuando esté lista”.
    • Si no pasa nada por varios minutos después de pronunciar el encantamiento de apertura, dilo nuevamente. Sigue repitiendo el encantamiento dejando unos minutos hasta que pase algo.

    Consejo: podrías decir una oración o un conjuro de protección antes de comenzar. Podrías decir “Oramos por protección contra los seres que nos lastimen. Le pedimos al dios o la diosa que solo los buenos espíritus puedan entrar a nuestro círculo esta noche” o “Juntos les pedimos a los espíritus esta noche que nos envíen solo a los bendecidos e iluminados, pedimos protección para todos aquí y que ningún ser maligno pueda acercarse a nosotros”.

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    Hazle una pregunta al espíritu cuando sientas que está cerca. O el médium hace todas las preguntas o los asistentes se turnan para preguntar. Hagan una pregunta a la vez y dejen una pausa de varios minutos para esperar la respuesta. Asegúrate de que todos se mantengan en silencio, pues la presencia del espíritu podría ser difícil de notar.[18]
    • Recuerda que las preguntas de sí o no tienen mayores probabilidades de obtener una respuesta. Las preguntas como "¿Estás con nosotros?" y "¿Tienes un mensaje para nosotros?" son mejores que "¿Cómo es vivir en el mundo espiritual?".
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    Manténganse tomados de las manos durante toda la sesión para conservar el círculo. Se cree que romperlo no es seguro, así que manténganse tomados de las manos durante toda la sesión. Si alguien se levanta y se va o se distrae de algún modo, la energía espiritual se perderá, lo que provocará que la sesión termine. Pídeles a todos los asistentes tranquilos hasta que la sesión haya terminado.[19]
    • Si alguien necesita irse en realidad, puedes intentar continuar la sesión sin esa persona. Sin embargo, es probable que el espíritu se vaya cuando el círculo se rompa.
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    Descifra las respuestas de los espíritus a tus preguntas. Préstales atención a las respuestas que obtengas por medio de la herramienta que estés usando para comunicarte con el mundo espiritual. Un médium psíquico podría hablar en nombre del espíritu. Si vas a usar un tablero espiritista, deletrea las respuestas. Si vas a usar un péndulo, los golpes o las señales, reflexiona si el espíritu parece decir “sí” o “no”.[20]
    • Presta atención a lo que pasa físicamente en la habitación. Señales como que el agua se derrame, una vela que parpadea o una puerta que se cierra abruptamente podrían indicar que hay un espíritu presente.
    • Escucha los sonidos que no sean comunes y no tengan una fuente que se pueda explicar.

Parte 4
Parte 4 de 4:
Terminar la sesión

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    Continúa con la sesión siempre que recibas respuestas. Una sesión puede durar entre 15 minutos hasta más de una hora. Pídeles a todos que se queden en el círculo hasta que parezca que los espíritus se hayan ido, ya no recibas respuestas o hayas agotado tus preguntas. Decide terminar la sesión cuando sientas que es el momento correcto.[21]
    • Una sesión puede ser una experiencia emocionalmente intensa que genere una serie de reacciones diferentes. Si alguien llora o está ofuscado, lo mejor es terminar la sesión o permitir que se vayan.
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    Agradece a los espíritus por venir cuando estés listo para terminar. Siempre será buena idea tener un cierre de sesión, como lo harías con cualquier otro servicio o ritual espiritual. Para terminarla, agradece a los espíritus por haberse unido a tu círculo. Podrías pronunciar una oración de cierre. Agradece a los asistentes por su participación también, luego sopla las velas para terminar la sesión formalmente.[22]
    • Podrías decir lo siguiente: “Gracias a la abuela Greta por unirse a nuestro círculo esta noche. Apreciamos su guía y su amor” o “Agradecemos a los espíritus por venir a nuestro círculo y compartir su guía con nosotros”.
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    Enciende las luces cuando todos se sientan listos. Permíteles unos momentos a las personas para que se recuperen en silencio del mundo espiritual y vuelvan al momento físico presente. Luego, enciende las luces y adáptense al mundo de los vivos. Dense unos minutos para procesar lo que acaba de pasar.[23]
    • Algunas personas se tardarán más que otras en sentirse listas para hablar.
    • A veces, es bueno comer un bocadillo para asentarse en el mundo real.
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    Hablen de la sesión y de lo que aprendieron cuando todos estén listos. Conversen de lo que pasó y lo que todos experimentaron. Luego, analicen las señales y respuestas que recibieron de los espíritus. Traten de reconocer lo que los espíritus les dijeron.[24]
    • Por ejemplo, ¿la causa de un portazo podría haber sido una corriente de aire o crees que el responsable fue un espíritu?
    • Si grabaste la sesión, mira y escúchala. Sube el volumen, y escucha las voces y sonidos que nadie notó durante la sesión.

Consejos

  • Puedes tratar de hacer una sesión por tu cuenta. Sin embargo, lo mejor es tener al menos 3 personas de modo que tengas suficiente energía para llamar al mundo espiritual.[25]
  • Ten en mente que algunas personas podrían mover la planchette en un tablero espiritista o podrían balancear el péndulo para engañar a los demás participantes del grupo. Trata de no invitar a bromistas a tu sesión.

Advertencias

  • Sé precavido cuando te pongas en contacto con el mundo espiritual. Es posible ponerse en contacto con una entidad negativa o un demonio, lo que podría provocarte problemas.
  • No trates de hacer una sesión si crees que hay un portal cerca o si un espíritu mencionara uno. En el lenguaje espiritista, un portal es una puerta al otro lado que cualquier espíritu puede usar. En algunos casos, realizar una sesión cerca de un portal podría abrirlo y permitir que más espíritus crucen y se queden.

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Categorías: Ciencias ocultas