Cómo regar bambú

Coescrito por Maggie Moran

El bambú es una hermosa planta que requiere mucho tiempo y esfuerzo. No obstante, ¡no temas! Regarlo adecuadamente puede asegurar que permanezca vivo y saludable. Puedes regar con facilidad un bambú que crece en el suelo o en una maceta con gravilla o guijarros.

Parte 1

Parte 1 de 2:
Mantener el bambú en suelo húmedo

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Rocía agua sobre la tierra cada dos días. Llena una botella de espray con agua destilada o de lluvia. Luego, rocía un poco sobre la planta cada dos días. Si lo haces con regularidad, evitarás que la planta se empape demasiado o se seque.^{[1]
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- El agua destilada y de lluvia son las mejores opciones para regar un bambú. Esta planta es sensible a las sales y los productos químicos del agua del grifo.^{[2]
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Palpa la tierra para revisar la humedad. Cada 3 o 4 días, introduce un dedo en el suelo hasta que alcance el primer nudillo. Muévelo alrededor para ver si la tierra está seca o húmeda. Si está seca, rocía un poco de agua o riégala.^{[3]
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Vierte agua en la maceta semanalmente. Cada 7 o 10 días, vierte una pequeña cantidad de agua en el contenedor del bambú. Deja que el agua drene en la tierra por un minuto antes de revisar la humedad nuevamente con tu dedo. Añade más agua hasta que sientas que la planta está lo suficientemente húmeda.^{[4]
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- El bambú es sensible a los niveles del agua y no le gusta estar empapado. Retira el agua en exceso de la maceta si has vertido demasiado.^{[5]
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CONSEJO DE ESPECIALISTA

Maggie Moran
Especialista del hogar y jardinería
Maggie Moran es profesional en jardinería en Pensilvania.

Maggie Moran
Especialista del hogar y jardinería

Riega las plantas jóvenes de bambú con mayor frecuencia. La horticultora Maggie Moran señala que “se necesita regar frecuentemente las plantas nuevas de bambú. Debes regarlas dos veces a la semana en verano. Además, debes hacerlo con mayor frecuencia si la temperatura aumenta”.
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Asegúrate de que drene adecuadamente. Retira cualquier obstrucción que evite que el agua drene con facilidad de la maceta. Revisa si hay orificios en el mantillo, piedras u otro objeto que hayas puesto en la parte superior de la tierra.
- En el caso de bambús en el exterior, agrega más material de drenaje en cualquier orificio o parte cubierta escasamente.^{[6]
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- Agrega piedras, guijarros, entre otros, para mantener los tallos derechos y asegurarte de que haya un buen drenaje.^{[7]
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Modifica las cantidades de agua según tu ubicación y estación. Riega el bambú 3 o 5 veces a la semana en verano o si hace calor en tu área.^{[8]
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Fuente de investigación} Reduce la frecuencia con que riegas las plantas a 7 o 10 días si es invierno o el clima es frío. Asegúrate de que el suelo esté húmedo en cualquier estación o clima al palpar con tu dedo.^{[9]
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Retén la humedad usando mantillo. Esparce una capa de 5 o 7 cm (2 o 3 pulgadas) de grosor de mantillo sobre el suelo. Colocar esta capa puede ayudar a que la planta retenga la humedad durante todo el año y fomente un drenaje adecuado.^{[10]
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Parte 2

Parte 2 de 2:
Hidratar el bambú con agua

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Asegúrate de que las raíces del bambú estén bajo el agua. Revisa la planta todos los días. Inspecciona las raíces, las cuales puedes cubrir con guijarros, gravilla o incluso canicas. Asegúrate de que las raíces y la parte inferior del tallo estén sumergidas en agua.^{[11]
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Agrega agua para mantener un nivel constante. Si te das cuenta de que las raíces no están cubiertas, vierte agua en la maceta hasta que las cubra. Riega la planta por completo cada 7 o 10 días para asegurarte de que las raíces permanezcan sumergidas.^{[12]
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- Agrega agua con mayor frecuencia en verano o si hace calor en tu área.
- Puedes usar agua del grifo, destilada o de lluvia. Si vas a usar agua del grifo, deja que se asiente durante toda la noche para que el cloro, que puede dañar la planta, se evapore.^{[13]
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Verifica el suministro de agua por completo cada dos días. Retira el agua de la maceta y los guijarros, gravillas o canicas cada dos semanas. Limpia el contenedor y los objetos de drenaje con agua mineral embotellada, filtrada o limpia. Vuelve a colocarlos en la maceta junto con el bambú, y llénala de nuevo con agua de lluvia, filtrada o destilada.^{[14]
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