Nuestro equipo de editores e investigadores capacitados han sido autores de este artículo y lo han validado por su precisión y amplitud.
wikiHow's Content Management Team revisa cuidadosamente el trabajo de nuestro personal editorial para asegurar que cada artículo cumpla con nuestros altos estándares de calidad.
Este artículo ha sido visto 8973 veces.
Los jardines de hierbas son un gran complemento para cualquier hogar, y las hierbas frescas ya están fácilmente disponibles en muchos supermercados o mercados de agrícolas. Si ya tienes hierbas que necesitas secar, tal vez quieras secarlas en el horno. Aunque se puede arruinar el sabor de las hierbas si se cocinan de más, hacerlo en el horno te ofrece un método más rápido para completar el proceso. Adicionalmente, puede ser una gran opción para las personas que viven en áreas húmedas que no permiten secar al aire. Si estás listo para secar un manojo de hierbas frescas, primero deberás reunir y preparar las hierbas. Una vez que las hayas secado, debes guardarlas en un recipiente hermético.
Pasos
Parte 1
Parte 1 de 4:Recolectar las hierbas para el secado
-
1Cosecha las hierbas cuando están tiernas justo antes de que se formen las flores. El sabor que tendrá la hierba va a depender de en qué momento las cortes de la planta. Te darán el mejor sabor mientras las hierbas sigan tiernas, lo cual puedes sentir con los dedos. Si la hierba está floreciendo, esto será justo antes de que los brotes se abran.
-
2Escoge una mañana cálida y seca después de que el rocío se haya evaporado. Un día soleado es el mejor momento para cortar el cultivo porque las hierbas estarán más secas. Mientras más humedad permanezca en la hierbas, mas difícil será secarlas.[3]
- Es mejor esperar hasta la media mañana, ya que el rocío deberá haber desaparecido para entonces.[4]
-
3Usa unas tijeras para cortar los tallos justo arriba de una hoja o de las hojas. Puedes usar una tijera normal afilada o unas tijeras de podar pequeñas. Coloca las hierbas en un frasco de agua fresca hasta que hayas completado la cosecha.
- Deja por lo menos 10 to 15 cm (4 a 6 pulgadas) de tallo para que la planta crezca de nuevo.[5]
-
4Saca las hierbas de hojas grandes de su tallo antes de secarlas. Esto incluye las hierbas como la salvia o la menta. Si es fácil sostener la hoja, entonces es mejor removerla del tallo antes de secarla.[6]
- También puedes cortar las hojas de su tallo con tijeras afiladas, pero esto tomará más tiempo.
-
5Deja las hojas pequeñas y las hierbas plumosas en su tallo hasta después de que se sequen. Esto incluye hierbas como el hinojo, el eneldo y el romero. Si bien estas hierbas con el tiempo se serán removidas de su tallo en la mayoría de los casos, es mejor esperar hasta secarlas ya que el tallo hace que sean más fácil de manejar.[7]
- Además, algunos platos pueden lucir mejor con estas hierbas todavía en su tallo.
-
6Limita la cosecha a una sola hierba a la vez. Es fácil que se mezclen las hierbas o arruinar su sabor si se secan todas juntas. Para proteger su sabor, solo seca una hierba a la vez.[8]
Parte 2
Parte 2 de 4:Preparar las hierbas
-
1Elimina cualquier hoja o tallo dañado, con sucio, o imperfecciones. Revisa cada hoja o tallo para eliminar las partes que estén arruinados. Las hierbas sucias o manchadas tendrán un mal sabor, el cual podría arruinar la comida que sazones con las hierbas.[9]
-
2Revisa si hay insectos en las hierbas. Los insectos son comunes en los jardines de hierbas, pero no quieres que estén dentro de tus hierbas secas. Inspecciona cada hoja para ver si hay signos de visibles de insectos, tales como insectos rastreros, tela de araña, o puntos blancos que podrían ser huevos. Si ves alguna de estas señales, deshazte de esa hoja o tallo.[10]
- El horno tratará las hierbas por las cosas que sean muy pequeñas como para que las veas.
-
3Enjuaga las hierbas en agua fría, sacudiendo el exceso. Es mejor usar el agua directo del grifo para que cualquier suciedad y escombros se elimine de la hierba. Permite que el agua corra encima de ellas por unos segundos, luego sacúdelas con gentileza para sacar el exceso de agua. Coloca las hierbas húmedas en una toalla seca.[11]
- Si tienes hierbas más grandes, puedes enjuagarlas en un colador.
-
4Seca las hierbas con una toalla limpia sin restregarlas. Utiliza otra toalla seca, gentilmente presionándola sobre las hierbas. Una vez que las hierbas estén secas, transfiérelas a otra toalla seca o a un plato.[12]
Parte 3
Parte 3 de 4:Secar las hierbas
-
1Cubre una bandeja para hornear galletas con muselina o papel pergamino. Esto provee la mejor superficie para secar las hierbas, aunque puedes secarlas en una bandeja sola. Dependiendo del tamaño de las hierbas, también puedes hacer la prueba con una asadera o una rejillas para hornos.
- Si utilizas una rejilla, colócala encima de la bandeja de hornear galletas para prevenir que pedazos de hierba caigan en el fondo del horno.[13]
-
2Posiciona las hierbas en la bandeja en una fila de una sola capa. Asegúrate que ninguna de las hojas esté encima de otras o tocándose, esto podría causar que las hierbas se sequen de manera desigual. Si esto ocurre, entonces todas esas hierbas podrían arruinarse, ya que el centro de la hoja se quemaría si intentas terminar de secar los bordes que siguen húmedos.[14]
-
3Programa el horno en la temperatura más baja. El secado al horno puede destruir el sabor, color, y aceites en las hierbas, así que es importante que mantengas la temperatura baja. El proceso de secado debe ser lento en orden para mantener las hierbas comestibles.
- La temperatura más alta que se debe usar es de 82 ºC (180 ºF).[15]
-
4Deja la puerta del horno abierta si tienes horno eléctrico. El aire necesita circular alrededor de las hierbas mientras se secan, y dejar la puerta abierta permitirá que esto ocurra. Además, reduce el riesgo de que el horno se sobrecaliente y queme las hierbas.[16]
- Si tienes un horno a gas, no dejes la puerta abierta, ya que esto es muy peligroso. En su lugar, abre la puerta cada cinco minutos para permitir que el aire circule. Espera 30 segundos, entonces cierra el horno de nuevo.
-
5Voltea las hierbas cada 30 minutos. Utiliza un guante de cocina para sacar la bandeja. Con un par de pinzas o un tenedor, voltea las hierbas para que ambos lados sequen de manera uniforme.[17]
- Revisa las hierbas cada 15 minutos para asegurarte de que no se estén quemando. Si sospechas que esto está pasando, retíralas antes para saber si están secas.
-
6Retira las hierbas luego de 1 hora. La mayoría de las hierbas estarán secas en alrededor de una hora. Si no estás seguro, déjalas enfriar y revisa si están secas.[18]
- Si las hierbas no están secas, continúa secándolas durante 10 minutos a la vez.
-
7Revisa que las hierbas se hayan secado. Las hojas deben estar secas y crujientes. Toma una hoja o tallo y observa si se desmorona fácilmente entre los dedos. Gentilmente enrolla la hierba entre los dedos para ver si se si se deshace. Si lo hace, entonces estará seca.[19]
Parte 4
Parte 4 de 4:Guarda las hierbas
-
1Desmenuza todas las hierbas. Con frecuencia las hierbas se desmenuzan antes de guardarlas, lo cual las hace más fácil de agregar a las comidas. Con cuidado, frota las hierbas entre los dedos, quebrando las hojas. Continúa hasta que cada pedazo este desmenuzado.[20]
- Si las hojas todavía estaban en el tallo, no desmenuces el tallo. Mantenlo intacto y luego deséchalo una vez que las hojas sean removidas.
-
2Coloca las hierbas en un recipiente hermético. Puedes usar un frasco, recipiente táper, o una bolsa con zipper. Asegúrate que el cierre sea hermético, de otra manera, la humedad del aire podría dañar las hierbas.[21]
-
3Almacenar el recipiente en un lugar fresco y seco. Buenas opciones incluyen la despensa, el gabinete, o el refrigerador. Coloca la hierbas recién secas con el resto de los condimentos.
- Si utilizas un frasco transparente, guárdalo en la oscuridad para preservar el color de las hierbas.[22]
Cosas que necesitarás
- hierbas secas
- horno
- agua
- bandeja para galletas
- frasco, recipiente táper, o bolsa con zipper
- guantes de cocina
- pinzas o tenedor
- toallas limpias y secas
- muselina o papel pergamino (opcional)
- tijeras afiladas o tijeras de podar (opcional)
- frasco (opcional)
Referencias
- ↑ https://www.tasteofhome.com/article/how-to-dry-herbs/
- ↑ http://extension.illinois.edu/herbs/tips.cfm
- ↑ https://www.tasteofhome.com/article/how-to-dry-herbs/
- ↑ https://extension.psu.edu/drying-herbs
- ↑ https://extension.psu.edu/drying-herbs
- ↑ https://www.tasteofhome.com/article/how-to-dry-herbs/
- ↑ https://www.tasteofhome.com/article/how-to-dry-herbs/
- ↑ https://www.tasteofhome.com/article/how-to-dry-herbs/
- ↑ https://extension.psu.edu/drying-herbs
- ↑ https://extension.psu.edu/drying-herbs
- ↑ https://extension.psu.edu/drying-herbs
- ↑ https://extension.psu.edu/drying-herbs
- ↑ https://extension.psu.edu/drying-herbs
- ↑ https://extension.psu.edu/drying-herbs
- ↑ https://extension.psu.edu/drying-herbs
- ↑ https://extension.psu.edu/drying-herbs
- ↑ https://www.tasteofhome.com/article/how-to-dry-herbs/
- ↑ https://www.tasteofhome.com/article/how-to-dry-herbs/
- ↑ https://www.tasteofhome.com/article/how-to-dry-herbs/
- ↑ https://www.tasteofhome.com/article/how-to-dry-herbs/
- ↑ https://extension.psu.edu/drying-herbs
- ↑ https://www.tasteofhome.com/article/how-to-dry-herbs/
wikiHow's Content Management Team revisa cuidadosamente el trabajo de nuestro personal editorial para asegurar que cada artículo cumpla con nuestros altos estándares de calidad. Este artículo ha sido visto 8973 veces.