Las notas son útiles para que las utilices como referencias y memorices. Por lo general, la información de tu libro de texto explora y complementa lo que aprendes en clases. Sin embargo, algunos profesores esperan que aprendas de tu libro de texto de manera independiente y no que necesariamente estudies el material académico del libro con la ayuda de una instrucción directa. Por ello, es importante que leas, comprendas y tomes notas de manera efectiva de tu libro de texto.

Parte 1
Parte 1 de 5:
Revisar los capítulos

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    Conoce la lectura asignada. Revisa tu sílabo, calendario o notas de la clase que te orienten a leer una sección o unas secciones del libro de texto.[1] Lo ideal es que debes leer una página de la lectura asignada en cinco minutos.[2] Sin embargo, si lees lento, quizás necesites más tiempo para leer.
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    Revisa los títulos y los subtítulos de los capítulos.[3] Haz una revisión preliminar del capítulo antes de comenzar a leer o a tomar notas. La mayoría de los libros de texto se dividen en secciones más asimilables y que suelen separarse por títulos. Revisar previamente el capítulo y fijarte en los títulos y subtítulos desde el principio hasta el final puede darte una idea general de la extensión y la dirección del capítulo. Asimismo, es posible que notes algunas palabras claves a medida que leas si las has visto en subtítulos en negrita después en el capítulo.
    • De igual forma, busca las palabras que estén en negrita.[4] Estos suelen ser conceptos fundamentales o palabras de vocabulario que se definen en el capítulo o el glosario.
    • Si no hay títulos o subtítulos en tu libro de texto, lee la primera oración de cada párrafo.[5]
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    Examina los gráficos, los mapas o los cuadros informativos complementarios.[6] [7] Muchos estudiantes ignoran u obvian la información en los gráficos o cuadros de un capítulo. Sin embargo, esto es malo, ya que esta información suele ser fundamental para comprender o revisar los conceptos principales del capítulo. Fijarse en el material académico complementario (y leer los subtítulos debajo de las imágenes o los gráficos) puede ayudarte a enfocarte en la información fundamental mientras escribes.
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    Lee los “cuestionarios” al final del capítulo o la sección.[8] Los cuestionarios se brindan para asegurar que los estudiantes hayan logrado tener una “visión global” o entender los conceptos esenciales de una selección del texto. Leer estos cuestionarios con anticipación puede ayudarte a enfocar tu atención hacia los aspectos más importantes de un capítulo.

Parte 2
Parte 2 de 5:
Leer para comprender

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    Evita las distracciones. Leer activamente sin ruidos o distracciones puede hacer que sea más fácil concentrarse y retener la información que aprendes. Es muy importante que no haya distracciones si aprendes un material académico nuevo o una lectura nueva con ideas complejas. Encuentra un lugar que sea silencioso y grato y acomódate allí para leer y aprender.
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    Divide el texto asignado en secciones manejables. Si tienes que leer un capítulo de treinta páginas, debes tratar de dividirlo en secciones más pequeñas en las que puedas concentrarte. La extensión de las secciones dependerá del intervalo de tu atención. Algunas personas recomiendan dividir una lectura en segmentos de diez páginas,[9] pero si tienes dificultades para concentrarte y asimilar los conjuntos grandes de texto, podrías limitar las a cinco páginas. El capítulo se puede dividir en secciones más manejables.
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    Lee activamente. Puede ser sencillo leer pasivamente algo que te parezca complejo o poco interesante. La lectura pasiva se da cuando los ojos se fijan en cada palabra, pero no retienes la información ni piensas en lo que lees. Trata de pensar mientras lees para lograr leer activamente. Esto significa que debes tratar de resumir las ideas, conectarlas a los conceptos con los que tienes familiaridad o hacerte preguntas a ti o al texto mientras lees.
    • Para leer activamente, no trates de tomar notas o resaltar nada la primera vez que leas una sección del texto. En lugar de ello, solo enfócate en leer para comprender.[10]
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    Utiliza herramientas que te ayuden a comprender. Asegúrate de comprender el texto a medida que lo leas. Quizás necesites utilizar un diccionario o el glosario del libro de texto o el índice para definir las palabras que no conozcas.
    • Cuando llegues a la etapa de tomar notas, escribe las palabras fundamentales nuevas que sean importantes para el capítulo, además del número de la página donde hayas encontrado ese término y esa definición. De esta forma, puedes retomar fácilmente el libro de texto de ser necesario.
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    Resume los puntos principales a medida que leas. Después de leer cada sección de texto (ya sea una sección que hayas determinado o una división del libro de texto), piensa en los puntos principales. Trata de resumir la sección e identificar los tres detalles más importantes.[11]
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    No leas rápidamente el material académico complementario. Con suerte, habrás visto materiales complementarios como imágenes, gráficos y cuadros cuando revisaste previamente el capítulo. De lo contrario, asegúrate de leerlos a medida que leas la sección. Ver estos detalles en su contexto te ayudará a sintetizar la información.
    • Este tipo de suplementos podrían ser muy beneficiosos para los estudiantes que suelen aprender con un método visual. Cuando trates de recordar una información, es posible que puedas recordar más fácilmente la manera en que un gráfico o un cuadro se veía que una información basada en los hechos.

Parte 3
Parte 3 de 5:
Tomar notas

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    Sé selectivo pero minucioso. No debes escribir toda la información del libro. Ni tampoco debes escribir un hecho por página. Encontrar el equilibrio correcto para escribir lo suficiente, pero no demasiado, puede ser un desafío pero es lo fundamental para tomar notas de manera efectiva. Utilizar la estrategia de leer un párrafo y luego resumirlo puede ayudarte a dirigirte la cantidad apropiada de información.
    • Según el tema y el nivel del libro de texto, escribir una o dos oraciones de resumen por párrafo podría ser el ratio apropiado de información que debas anotar.
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    Parafrasea la información del texto. Debes escribir las notas con tus propias palabras.[12] Parafrasear una información suele demostrar que comprendiste genuinamente lo que leíste (es difícil expresar algo con tus propias palabras si no sabes qué significa). Podría convertirse en más significativo para ti luego cuando revises tus notas si las has escrito con tus propia palabras.
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    Utiliza un formato que te sirva. Tus notas podrían tomar la forma de una lista de información en viñetas. Es posible que dibujes una cronología de eventos de modo que puedas ver el orden de los sucesos y no solo una lista de eventos. Es posible que dibujes un tipo de diagrama de flujo para dar énfasis en una secuencia. De igual forma, es posible que hagas un esquema más tradicional con grandes ideas en un nivel y luego ideas de apoyo debajo de las anteriores. Finalmente, las notas son tu ayuda para estudiar, así que es preferible escribirlas de una manera que tengan sentido para ti.
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    Añade elementos visuales si te resulta útil. A las personas que aprenden de manera visual les suelen resultar útil las representaciones visuales en sus notas. Es posible que quieras escribir una copia breve de un gráfico, en vez de escribir al respecto. Es posible que quieras dibujar una tira cómica simple para demostrar un evento específico o una interacción específica entre unas personas. No dejes que el añadir elementos visuales te distraigan de la labor que haces: comprender y tomar notas del texto. Sin embargo, añadir elementos visuales te ayudará a sintetizar o recordar más efectivamente el material académico.
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    Organiza tus notas de una manera significativa. Según el tema, es posible que quieras organizar tus notas de una manera particular. Las notas de historia se podrían asimilar más lógicamente si se disponen en un orden cronológico (o incluso en el formato de una cronología). Sin embargo, las notas de ciencia se podrían asimilar si se disponen en una secuencia en particular que demuestre el dominio de un concepto antes de pasar al siguiente.
    • Si dudas de cómo organizar tus notas, opta por seguir la organización del libro de texto. Si la información se presenta con cierto orden en el libro de texto, entonces suele haber una razón para ello.

Parte 4
Parte 4 de 5:
Relacionar las notas del libro de texto con lo aprendido en el salón de clase

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    Presta atención a las clases. Los profesores suelen especificar qué capítulos o secciones de un libro de texto serán más relevantes para la próxima prueba. Conocer esta información antes de leer el libro de texto puede ahorrarte tiempo y energía, además de permitirte concentrarte en lo más importante que debes saber.[13]
    • Escribe lo que el profesor escriba en la pizarra. Es muy probable que esta información sea relevante para las clases futuras y los deberes o las pruebas próximos.
    • Pregúntale a tu profesor si te permitiría utilizar un dispositivo personal de grabación para grabar la clase y escucharla en casa. Todo lo que no escuchaste mientras tomabas notas en clase estará en la grabación, y puedes añadir esa información a tus notas después de la clase.
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    Aprende a escribir con abreviaturas. Podría ser difícil escribir notas tan rápido como el profesor hable. Aprender a escribir con abreviaturas es una forma muy buena para asegurar que las notas que tomes en clase cubran todo lo que el profesor espera que sepas.
    • Escribe los nombres, los lugares, las fechas, los eventos y los conceptos principales. Si tratas estos temas en tus notas, es muy probable que sea más fácil recordar los detalles específicos relacionados con estas personas o estos lugares cuando retomes el libro de texto.
    • Continúa los temas principales con indicios breves del contexto. Pueden ser algunas palabras o incluso una oración breve, pero contar con un tipo de notas breves te ayudará a darle sentido a los nombres o las fechas que has escrito durante la clase.
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    Revisa las notas que tienes de la clase. Ya que tienes las notas de la clase, deberás revisarlas para comenzar a aprender los temas importantes enseñados en clase.
    • Trata de repasar tus notas poco después de que haya terminado la clase. Revisarlas poco después de que la clase termine podría ayudarte a retener la información por más tiempo.
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    Combina las notas de la clase con las del libro de texto. Si cuentas con notas de la clase y del libro de texto, combínalas y compáralas. Debes identificar todo lo que el libro de texto y el profesor recalcaron, ya que esto suele ser un concepto muy importante.

Parte 5
Parte 5 de 5:
Utilizar tus notas

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    Estudia tus notas. Piensa en ellas como una guía de estudio para los exámenes de tu curso. El acto de escribir podría ayudarte a recordar ciertas pautas, pero es probable que no recuerdes nada del libro de texto si no estudias las notas que has tomado. Volver a revisar las notas puede ayudarte a recordar los conceptos fundamentales y los términos específicos, incluso meses después de estudiar la información.
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    Comparte las notas. Si aprendes con otros estudiantes en tu clase, es posible que quieras intercambiar y compartir notas. Esto puede ser una estrategia útil, ya que los estudiantes diferentes se enfocan o enfatizan en conceptos diferentes. Además, si tienes un amigo o compañero de clase que se perdió las clases o no comprendió un concepto, puedes compartirle las notas que tengas para ayudarlo.
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    Haz unas tarjetas educativas. Si tendrás un examen, puedes convertir tus notas en tarjetas educativas. Estas pueden hacer que sea más fácil aprender y memorizar los nombres, las fechas y las definiciones.[14] Además, puedes utilizarlas para colaborar y estudiar con otro estudiante o en un grupo de estudio, lo que mejora el desempeño en una prueba.[15]

Consejos

  • Estima tu tiempo. Es fácil que sientas agobio por todo lo que tienes que aprender. Sin embargo, si tomas buenas notas y gestionas bien tu tiempo, se sentirá mucho más manejable.
  • Escribe las fechas y los títulos en tus notas para mantener una organización. Es posible que quieras enumerar las páginas de tus notas si no están ordenadas o si planeas extraerlas de un cuaderno de notas.[16]
  • Utiliza viñetas. No sientas que debes escribir oraciones completas, solo escribe la información fundamental. Esto será útil para cuando revises tus notas y estudies, ya que el texto no te abrumará de esta forma.
  • Aprende qué hábitos de estudio te resultan más útiles. Ceñirte a un horario constante cuando leas, tomes notas y las revises te ayudará a seguir progresando con tus estudios, ya sea que seas una persona madrugadora o trasnochadora.
  • Mantén tu mente alerta. Relájate, haz estiramientos y toma descansos breves.
  • Haz resúmenes en una o dos viñetas por párrafo. Luego, utilízalos para crear un resumen general de la sección.
  • Si no entiendes lo que se indica en el texto, pregúntaselo a un profesor y vuelve a redactarlo para comprenderlo.
  • Si se puede, utiliza colores. El cerebro se atrae hacia los colores, lo que podría ayudar a memorizar los capítulos que tienes que aprender del libro de texto.

Acerca de este wikiHow

Michelle Golden, PhD
Coescrito por:
Doctorado en Inglés, universidad Georgia State
Este artículo fue coescrito por Michelle Golden, PhD. Michelle Golden es profesora de inglés en Athens, Georgia. Recibió su maestría en educación de maestros de artes lingüísticas en 2008 y recibió su doctorado en inglés en la Universidad Georgia State en 2015. Este artículo ha sido visto 24 530 veces.