Debido a su material fino y diseño delicado, las copas de vino necesitan un poco más de cuidado que el resto de la vajilla normal cuando se trata de almacenamiento. Ya sea que decidas guardarlas en un armario o en un estante, el objetivo principal debe ser mantenerlas libres de polvo y residuos mientras se minimiza el riesgo de quiebre.

Método 1
Método 1 de 3:
Almacenar en un armario

  1. 1
    Colócalas en posición vertical para protegerlas contra el debilitamiento del borde. El borde es la parte más frágil de la copa, por lo que es importante poner el menor peso posible sobre el cristal delicado. Coloca con cuidado la parte inferior plana del vidrio en el gabinete o en el estante del armario, asegurándote de no golpear otras copas.[1]
    • Esto también evitará que la humedad quede atrapada en el interior, como el agua restante luego del lavado.[2]
  2. 2
    Deja aproximadamente 1,5 cm (1/2 pulgada) de espacio entre cada copa para evitar que se astillen. Es importante asegurarse de darle suficiente espacio a las copas para que no se toquen o golpeen entre sí. Esto puede ocasionar quiebres y grietas, especialmente si se han almacenado boca abajo. Cuando las guardes en el gabinete, asegúrate de colocarlas alrededor de 1,5 cm (1/2 pulgada) de las otras copas.
  3. 3
    Fija el gabinete a la pared si vives en un área propensa a terremotos. En general, un gabinete es la mejor opción para almacenar las copas a largo plazo. Si aún no lo has hecho, asegúrate de que el gabinete esté bien sujeto o atornillado a la pared y que tenga puertas con cerrojos para que las copas no se caigan.[3]
    • Si compras copas en grandes cantidades, mantenlas en las cajas hasta que tengas suficiente espacio en los gabinetes para almacenarlas.
  4. 4
    Coloca un forro o una alfombrilla con textura de agarre en los estantes del gabinete. El agarre adicional ayudará a que las copas puedan mantenerse en pie con mayor facilidad en caso de temblores o sacudidas. Compra un rollo de forro de estante antideslizante o varias alfombrillas individuales texturizadas de silicona, que puedes encontrar en línea o en tiendas de mejoras para el hogar. Colócalos en los gabinetes de acuerdo con las instrucciones del empaque, asegurándote de no arrugar o amontonar el forro o el material de la alfombrilla.[4]
    • El forro antideslizante del estante suele tener un lado adhesivo para colocarlo en el estante y mantenerlo en su lugar.
    • Las alfombrillas pueden estar texturizadas en ambos lados, lo que les permite aferrarse tanto al gabinete como a las bases de las copas de vino.
  5. 5
    Agrega un armazón deslizable que mantenga las copas en su lugar de manera vertical. Esta opción funciona muy bien como una precaución adicional contra los terremotos. Asegúrate de elegir y medir un espacio dentro del gabinete para el armazón deslizante estilo cajón, luego cómpralo en una tienda de mejoras para el hogar de acuerdo con las especificaciones. Elige un material que coincida con el gabinete existente para que se combine bien.[5]
    Anuncio

Método 2
Método 2 de 3:
Usar un estante

  1. 1
    Use un estante tipo repisa para exhibir las copas en posición vertical. Asegúrate de que el estante sea lo suficientemente fuerte y firme como para sostener las copas. Si eliges un estante tipo repisa, solo necesitarás algunos tornillos y un taladro para instalarlo en la pared. Asegúrate de usar anclajes para paneles de yeso si el estante es pesado y no puedes encontrar una viga en la pared.
    • La madera es la mejor opción para este estante, ya que un estante de metal grueso puede ser demasiado pesado y difícil de instalar.
    • Si el estante viene con su propio equipo, úsalo para la instalación.
  2. 2
    Instala un estante debajo del mostrador para ahorrar espacio. Los estantes debajo del mostrador permiten guardar las copas boca abajo sin ninguna presión sobre los bordes. Esto evita que el polvo, la suciedad o los insectos se acumulen dentro de los recipientes y contaminen el vino. Compra un estante para colocar debajo del mostrador en línea o en una tienda de mejoras para el hogar.[6]
    • Puedes instalar fácilmente el estante con un taladro y algunos tornillos, perforando el gabinete para mantener el estante seguro.[7]
    • Sin embargo, como las copas se mostrarán al aire libre, pueden acumular una buena cantidad de polvo en el exterior del recipiente, el tallo y la base. Si este es el caso, enjuágalos muy bien antes de usarlos.
    • La madera o el metal son las mejores opciones de materiales para un estante debajo del gabinete.
  3. 3
    Elige un estante independiente para una instalación sencilla. Coloca este tipo de estante sobre una superficie plana y resistente, como una repisa de cocina. Asegúrate de que esté hecho de materiales resistentes y de calidad, como madera o metal. Ten en cuenta que el estilo independiente es una excelente opción para una familia de adultos de bajo perfil, pero puede que no sea la opción perfecta para una casa con niños.[8]
    • Si el estante tiende a mecerse o sacudirse, no pongas las copas de vino en ella. Encuentra un nuevo estante o repara el existente para evitar el riesgo de romper las copas.
    • Si vives en un área propensa a terremotos, asegúrate de atornillar o fijar el estante a una pared.
    Anuncio

Método 3
Método 3 de 3:
Mantener las copas en buenas condiciones

  1. 1
    Intercambia las copas si tienes una colección bastante grande. Es fácil buscar siempre las mismas copas en el gabinete o en el estante, pero si tienes más de 6 u 8 copas, es una buena idea rotarlas para evitar el desgaste excesivo. Cuando laves una copa, ponla en la parte de atrás y luego toma una del frente la próxima vez que abras una botella.[9]
    • El uso regular también ayudará a evitar que el polvo y la suciedad se acumulen en los tazones de la copa.
  2. 2
    Limpia las copas antes y después de usarlas. No importa cómo las almacenes, las copas de vino siempre acumularán polvo entre usos. Para una pequeña cantidad de polvo, enjuágala rápidamente con agua caliente. Usa un cepillo de cerdas suaves para eliminar suavemente el polvo o la suciedad, luego enjuaga y usa un paño de microfibra limpio para secarla completamente.[10]
    • Asegúrate de que el agua no contenga altos niveles de cloro, lo que podría contaminar el sabor del vino. Puedes comprar un kit, tableta o solución en línea para probar los niveles de cloro en el agua del grifo.[11]
  3. 3
    Utiliza el lavavajillas como un último recurso para limpiar copas de vino más difíciles. Asegúrate de usar un ciclo de lavado delicado, omite el ciclo de secado caliente y sepáralas para que no tintineen. Sin embargo, debido a que los lavavajillas tienden a dejar un pequeño residuo, lograrás un mejor resultado a largo plazo con el lavado a mano.[12]
    • Utiliza esta opción solo para copas de vino con bases y tallos gruesos. Las copas de cristal delicadas pueden romperse fácilmente en el lavavajillas.
  4. 4
    Lava las copas inmediatamente después de usarlas. El vino tinto tiende a manchar el cristal, por lo que es importante enjuagar el tazón con bastante prontitud. Usa agua tibia jabonosa y una esponja suave limpia para eliminar cuidadosamente cualquier marca o residuo. Estos pueden incluir cualquier vino que quede dentro del tazón, marcas de lápiz labial alrededor del borde o huellas dactilares en el borde del tazón.[13]
    • Si no puedes lavar las copas de inmediato, al menos llénala con agua para que el vino no se evapore y deja una mancha.
  5. 5
    Seca las copas inmediatamente con una toalla de microfibra limpia. Esto ayudará a prevenir la formación de manchas de agua. Un paño suave y limpio también las protegerá contra rasguños o la contaminación. Frota suavemente la toalla de microfibra sobre el vidrio en círculos, absorbiendo el agua sin aplicarle demasiada presión.[14]
    Anuncio

Consejos

  • También puedes guardar las copas de vino en sus cajas originales cuando no las estés usando. Sin embargo, el cristal a veces puede absorber el olor a humedad de las cajas e interferir con el sabor del vino.[15]
Anuncio

Advertencias

  • Nunca coloques copas de cristal extremadamente delicadas en el lavavajillas, ya que pueden romperse fácilmente.
  • Si tienes niños o mascotas, debes mantener el estante en algún lugar seguro y fuera de su alcance.
  • Si almacenas las copas en un estante, ten en cuenta que corres el riesgo de que se rompan al tener una distancia de caída mas grande.
Anuncio

Acerca de este wikiHow

Robert Rybarski
Coescrito por:
Especialista organizacional
Este artículo fue coescrito por Robert Rybarski. Robert Rybarski es un especialista en organización y copropietario de Conquering Clutter, un negocio que personaliza armarios, garajes y persianas de plantación para garantizar hogares y estilos de vida organizados. Robert tiene más de 23 años de experiencia en consultoría y ventas en la industria de la organización. Su negocio tiene una sede en el sur de California. Este artículo ha sido visto 4632 veces.
Categorías: Vino | Mobiliario y gabinetes
Anuncio