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Los pisos que rechinan son más que un problema irritante y, en los casos graves, pueden incluso devaluar el precio de tu casa si decides venderla. Afortunadamente, puedes arreglarlos con una reparación sencilla que solo requerirá unos minutos y las herramientas adecuadas. Este problema es causado por la fricción que ocurre entre las láminas del parqué o del contrapiso. La fricción intermitente causa vibraciones y ruido. Aprender a identificar las láminas defectuosas y a asegurarlas te ayudará a acabar con el ruido.
Pasos
Método 1
Método 1 de 2:Repara desde la parte inferior
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1Identifica la fuente del ruido. La mejor forma de identificar los ruidos es pararse en el sótano, mirar el contrapiso mientras otra persona camina en el área buscando el ruido. Escucha y observa el área que rechina para identificar la zona con el problema y determinar la mejor forma de repararla.
- La mayoría de los ruidos son causados por la fricción que ocurre entre el contrapiso de madera contrachapada y las vigas del piso. En ocasiones, el contrapiso (el soporte estructural debajo del piso superior sobre el que caminas) se encoge con el tiempo conforme la madera se seca, lo que cambia un poco la forma y causa ruidos irritantes y agudos.
- En los pisos de madera noble, también es común que el piso superior rechine. Para eliminar los ruidos en las láminas superiores del parqué, ve directamente al siguiente método. Todas las láminas que rechinen y que estén debajo de baldosas, linóleo o alguna otra superficie para pisos requerirán que las repares desde la parte inferior, ya sea en el entresuelo o en el sótano.
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2Presiona el área que rechina desde arriba. Es útil presionar el piso desde arriba para comprimir las láminas y hacer que tu reparación sea más efectiva. Puedes usar algunos muebles, pesas, bolsas de sal, libros pesados o algún otro objeto pesado. Si no tienes otra opción, puedes pedirle a alguien que se pare en el área para mantenerla comprimida mientras trabajas.
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3Coloca una abrazadera entre la viga y el contrapiso. Si parece que el piso rechina porque el contrapiso y las vigas están sueltos, la mejor forma de solucionar el problema es instalar una abrazadera que los asegure y elimine el sonido irritante. Squeak-Ender es una marca de soportes para vigas que no cuestan mucho y están disponibles en la mayoría de las tiendas de materiales para reparaciones del hogar. Estos consisten en abrazaderas de metal que conectan las vigas y el contrapiso que rechina.
- Para instalar una de estas abrazaderas para vigas y contrapiso, atornilla la placa de montaje en la parte inferior del contrapiso, directamente debajo del área que rechina. Usa los tornillos incluidos o tornillos para madera que sean lo suficientemente pequeños para que encajen en los agujeros del soporte.[1]
- Coloca el soporte en la varilla incluida y fíjalos en la viga, ajustando el mecanismo con una llave inglesa hasta que el contrapiso esté firme.
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4Instala cuñas de madera entre el contrapiso y la viga. Las cuñas son piezas delgadas y pequeñas que se utilizan para rellenar espacios, enderezar ángulos en los proyectos de carpintería y evitar que los materiales se hinchen y rechinen. Usa cuñas de madera para llenar los espacios vacíos si los ruidos son causados por espacios pequeños cuya reparación sería más fácil y menos costosa usando cuñas en lugar de una abrazadera.
- Si encontraste la fuente del ruido, pero no hay una holgura considerable entre las láminas del contrapiso y las vigas, compra un paquete de cuñas pequeñas e insértalas en los espacios que generan el sonido. Cubre las cuñas con pegamento para madera y luego colócalas directamente en el espacio.
- Trata de no aplicar mucha fuerza para que las cuñas entren en espacios pequeños, ya que empujarías la lámina hacia arriba, lo que empeoraría el ruido o lo llevaría a otra área. Es importante que siempre presiones el piso desde arriba si vas a usar este método.[2]
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5Atornilla el contrapiso en el piso. Si no tienes otra opción, puedes usar tornillos para madera para ajustar las piezas por tu cuenta. Esta es una forma más primitiva de solucionar el problema, pero si estás en un apuro, conectar el piso al contrapiso con tornillos para madera de una forma segura puede ser muy útil. Usa un taladro eléctrico para perforar un agujero guía que tenga casi la misma longitud que la del tornillo que elegiste (puedes usar cualquier tornillo para carpintería) para asegurarte de no perforar mucho y llegar al otro lado de la madera.
- Es difícil conocer el grosor de las capas individuales del piso, pero debes tener mucho cuidado de no perforar demasiado y hacer que la punta de la broca salga por el lado superior del piso. Para asegurarte de no hacerlo, perfora un agujero guía que tenga la longitud de los tornillos que compraste para garantizar tu seguridad. Luego instala los tornillos como lo harías normalmente.
Método 2
Método 2 de 2:Repara desde la parte superior
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1Retira la alfombra en el área que rechina, si es necesario. Si tienes un piso de madera noble, puedes omitir este paso y buscar directamente las vigas. Sin embargo, si tienes un piso que rechina y tiene alfombra, debes decidir si cortarás una franja pequeña de la alfombra para instalar por debajo o si usarás tornillos que puedes colocar por encima.
- Algunos kits (Squeak-No-More) disponibles pueden usarse por encima y a través de las alfombras, sin necesidad de retirarlas y correr el riesgo de dañarlas. El proceso será básicamente el mismo, así retires la alfombra o no.
- Si tienes que retirar la alfombra, levántala cerca del área que rechina y mantenla lo más limpia y segura posible para que después puedas volver a colocarla con un pegamento para alfombras. Si puedes levantar un segmento en particular de la alfombra que esté cerca de una costura (lo que la mantendrá segura), esta será la mejor forma de levantarla, en lugar de cortar un segmento del centro. No hay una forma fácil de cubrir el trabajo que realizaste y es probable que siempre sea visible, salvo que lo hagas a través de una costura natural.
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2Ubica la viga más cercana al ruido. Camina en el área que rechina hasta que estés seguro de haber encontrado el punto que emite el ruido. Luego encuentra la viga más cercana al ruido usando un detector de vigas.[3]
- Si no tienes un detector de vigas, puedes usar un martillo o algún otro objeto pesado para golpear el piso y escuchar. Las vigas sonarán como si fueran más planas o delgadas, mientras que el otro lado tendrá un sonido más profundo.
- Para estar completamente seguro, puedes perforar un agujero guía usando una broca con control de profundidad en tu taladro de velocidad regulable para asegurarte de alcanzar la viga antes de usar un tornillo que no tenga una longitud suficiente.
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3Fija la lámina suelta en la viga. Perfora las láminas que rechinan y el contrapiso, y conecta ambos con la viga para asegurar la lámina que rechina. Para hacerlo, necesitarás tornillos para madera reforzados que tengan la longitud apropiada. Tendrás una noción de su longitud cuando perfores el agujero guía.
- Algunos kits incluyen tornillos que pueden romperse para que las reparaciones sean casi imperceptibles, en especial en las alfombras. Esta es una forma muy efectiva de asegurar tus láminas de forma limpia y eficiente.
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4Rellena el agujero con masilla para madera. Si vas a trabajar en un piso de madera noble, es importante asegurarte de que el área quede lo más limpia y lisa posible. La masilla para madera, también conocida en algunos lugares como madera plástica, es una masilla hecha de aserrín y un tipo de pegamento, y es muy efectiva para rellenar los agujeros que quedan alrededor de los clavos. Puedes comprarlos en las tiendas de materiales para reparaciones del hogar y no son muy costosos. Aplica una cantidad pequeña y lija el área para que quede lisa.
- Puedes hacer que el tono de la mayoría de las masillas para madera coincida con el tono del piso. Trata de que el tono sea lo más parecido posible. Si vas a volver a colocar una alfombra, no es necesario que uses masilla para madera.
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5Lija el área. En algunos casos, puede ser una buena idea lijar la parte superior del tornillo que instalaste para que el área quede lisa. Si el piso tiene manchas decorativas, esta podría ser una mala idea, pero es posible que necesites alisar los pedazos de madera con los que trabajaste cuando colocaste los tornillos o los bordes disparejos de la masilla para madera que colocaste. Usa una lija de grano muy fino y no lijes en exceso.
Consejos
- Los tornillos fijan mejor que los clavos. Si los tornillos normales lucen antiestéticos, puedes usar tornillos especiales fabricados por una compañía de herramientas confiable, cuya cabeza sea desprendible y que, básicamente, se encastren ellos mismos. Estos pueden instalarse incluso a través de alfombras.
Advertencias
- Esto hará que tu hogar esté sano y salvo. Si hay adolescentes en tu casa o si un ser querido se despierta a mitad de la noche para buscar algo de comer, no habrá un piso que rechine y te despierte. En ocasiones, las láminas de parqué que rechinan pueden ser un indicador de un problema más grave; es importante tener tus láminas de parqué en el mejor estado posible por razones de seguridad.
Cosas que necesitarás
- Martillo
- Clavos de acabado
- Avellanador
- Cera de relleno del mismo color del piso
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- Taladro con broca
- Tornillos