Cómo pintar un piso laminado

Si quieres que el piso laminado de tu casa adquiera un mejor color, una de las mejores opciones es barnizarlo. Sin embargo, a diferencia de los pisos de madera o de concreto, el laminado no es poroso y, por lo tanto, no reacciona bien a la mayoría de los barnices. Lo que puedes hacer es utilizar algún producto específico para el acabado de pisos laminados o pintura de poliuretano los cuales también le proporcionan un brillo y un color similar. Después de haber limpiado, de haber pintado o aplicado el acabado y de que el piso se haya curado, tendrás un piso laminado con un barnizado brillante y hermoso en poco tiempo.

Método 1

Método 1 de 3:
Limpiar el piso

1
Lava bien el piso antes de barnizarlo. Cuando el piso laminado esté bien limpio, el acabado podrá adherirse mejor, por eso debes barrerlo y trapearlo detenidamente sin pasar por alto las esquinas ni cualquier polvo o residuo visible.^{[1]
X
Fuente de investigación}
2
Repara cualquier abolladura, grieta o desportilladura del piso laminado. Inspecciona el piso para encontrar desportilladuras, grietas o abolladuras antes de barnizarlo y repara los daños pequeños con el material adecuado para parchar el laminado o, si los daños fueran grandes, reemplaza las tablas comprometidas.^{[2]
X
Fuente de investigación}
- Puedes comprar el material para parchar el laminado en la mayoría de las tiendas de mejoras para el hogar. Rellena toda la abolladura, grieta o desportilladura con este material con la ayuda de una espátula y déjala secar por al menos 24 horas.
3
Lija el piso con un papel de lija de grano 220. Presiona ligeramente un papel de lija de grano 220 y pásalo sobre la superficie del piso. restriega el papel de lija con movimientos circulares de tal manera que cualquier deformación o imperfección quede alisada.^{[3]
X
Fuente de investigación}
- Los acabados y las pinturas se adhieren mejor a los pisos laminados cuanto estos están lijados.^{[4]
  X
  Fuente de investigación}
- Para acelerar el proceso del lijado, puedes utilizar un taco para lijar o una lijadora orbital.
4
Limpia todo el polvo y los residuos del papel de lija. Después de haber lijado el piso, usa un paño húmedo para eliminar el polvo que deje la lijada, luego usa un paño seco para absorber el exceso de agua del piso para poder aplicar el barniz.^{[5]
X
Fuente de investigación}
- No barnices el piso laminado hasta que esté completamente seco.

Método 2

Método 2 de 3:
Aplicar el acabado para pisos laminados

1
Elige un acabado que tenga un color rico y cálido. A pesar de que los barnices tradicionales no funcionen con el laminado, los acabados para pisos laminados pueden proporcionarles un color similar. Compra por internet un acabado para pisos laminados cuyo color se asemeje a un barniz para madera para poder mantener el color por más tiempo.
- Por ejemplo, si quieres lograr un acabado rojizo, elige un acabado para pisos laminados de color caoba.
- Asegúrate de comprar un acabado para pisos laminados, no para madera. El piso laminado es menos absorbente que la madera y necesita un producto especial.
2
Aplica el acabado sobre una de las secciones del piso laminado con un paño. Moja el paño con el producto y aplícalo sobre el piso con pinceladas delgadas y uniformes. Completa una sección de 60 cm (2 pies) antes de avanzar a la siguiente.^{[6]
X
Fuente de investigación}
- Suaviza cualquier línea que haya quedado con el paño para que el acabado sea uniforme y brillante.
- Después de cubrir la primera sección, observa el color y decide si te agrada para que puedas aplicarlo a todo el piso.
3
Aplica el acabado al resto del piso. Espera de 30 a 60 minutos para que la primera sección se seque y luego repite el proceso con la siguiente. Avanza desde el fondo de la habitando hasta el frente para no manchar el acabado antes de que se seque completamente.^{[7]
X
Fuente de investigación}
- Deja que cada sección se seque por al menos 30 minutos antes de continuar con la siguiente.
4
Añade de 2 a 3 capas de acabado. Deja que la primera capa se seque por unas 2 horas y luego añádele más capas para que el color sea más vivo y el acabado sea más duradero. Aplica más capas hasta que logres el color deseado sin dejar de esperar 2 horas entre capa y capa.^{[8]
X
Fuente de investigación}
- Añadir nuevas capas también ayuda a suavizar las marcas de pinceladas de las capas anteriores.
5
Deja que la capa final se seque durante 48 a 72 horas. Después de haber aplicado la última capa, abandona la habitación para que el acabado se seque por al menos 2 o 3 días. Evita pisar o tocar el piso mientras este se seque para no rayarlo ni mancharlo.^{[9]
X
Fuente de investigación}
- Con el tiempo, el color del acabado puede desvanecerse, pero puedes aplicarle 1 o 2 capas de acabado cuando esto suceda o cuando quieras enriquecer el color.

Método 3

Método 3 de 3:
Oscurecer el laminado con pintura

1
Elige una pintura a base de poliuretano que tenga un color semejante al barniz. Para obtener un color todavía más vivo que el del acabado para pisos laminados, puedes optar por la pintura. Elige una pintura que imite el tono del acabado deseado (por ejemplo cerezo, arce o miel) y que tenga un color fuerte semejante al del barniz.^{[10]
X
Fuente de investigación}
- Puedes comprar pinturas a base de poliuretano en internet o en la mayoría de las tiendas de mejoras para el hogar.
- Las pinturas opacas o semibrillantes son por lo general más durables sobre pisos laminados.^{[11]
  X
  Fuente de investigación}
2
Cubre la superficie con una capa de imprimante para laminado. Moja una brocha de espuma con el imprimante para laminado y aplica una capa delgada sobre la superficie con pinceladas largas, desde el fondo hasta el frente de la habitación. Deja que la superficie se seque por 30 a 60 minutos antes de aplicar la capa de pintura.^{[12]
X
Fuente de investigación}
- Elige un imprimante que esté especialmente hecho para pisos laminados para que la pintura se adhiera mejor.
- Si no puedes encontrar un imprimante para laminados, puedes utilizar uno a base de aceite.
3
Aplica la primera capa de pintura a base de poliuretano. Lava la brocha de espuma y mójala con la pintura para aplicarla con pinceladas delgadas sobre toda la superficie. Hazlo desde el fondo hasta el frente de la habitación para evitar las manchas y espera que la pintura se seque por al menos una hora antes de aplicar las demás capas.^{[13]
X
Fuente de investigación}
- Si te incomoda el olor de la pintura, puedes utilizar un respirador para trabajar.
4
Añade de 2 a 3 capas de pintura. Después de esperar por una hora para que la primera capa se seque, aplica otra sobre la primera con el mismo método. Dependiendo de la intensidad del color que quieras lograr, puedes aplicar 1 o 2 capas de pintura más sin dejar de esperar una hora entre cada aplicación.^{[14]
X
Fuente de investigación}
- Para obtener un color más fuerte y duradero, aplica por lo menos 3 capas de pintura.
5
Deja que la pintura se cure por al menos una semana. Después de aplicar varias capas de pintura, deja la habitación y deja que la pintura se seque por una semana. Evita tocar o pisar la superficie mientras se seca para no mancharla.^{[15]
X
Fuente de investigación}