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La pitaya o fruta del dragón tiene cáscara gruesa (como la textura del cuero), que es de color rojo brillante y dulce, como la pulpa del kiwi. Es parte de la familia de los cactus y es rica en fibra, vitamina C y vitaminas del grupo B. Puedes cortarla a la mitad y comerla con una cuchara, o cortarla en cubos y asarla. También puedes licuarla junto con un poco de yogur para preparar un batido. Sigue leyendo para aprender más maneras sabrosas de disfrutar de la pitaya.
Pasos
Método 1
Método 1 de 4:Comer pitaya
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1Busca una pitaya. La parte más difícil de comer una pitaya es encontrarla, dependiendo de dónde vives. Se vende comúnmente en Asia, pero está menos disponible en los Estados Unidos y Europa. Si tu tienda local no vende pitayas, prueba en los mercados asiáticos de tu área.[1]
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2Elige las frutas maduras. La pitaya debe ser de color rojo brillante o de color rosado. Al igual que un kiwi o un durazno, su sabor es mejor cuando está completamente madura.[2]
- Presiona la pulpa de la pitaya. Si cede un poco, es probable que esté madura. Si es demasiado suave, significa que está demasiado madura y la textura no será tan buena. Si está dura, dale un par de días antes de comerla.
- Evita la fruta que tenga moretones o manchas oscuras y secas, o espinas secas.
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3Corta la pitaya por el medio. Usa un chuchillo afilado para cortar a través de ella. Encontrarás pulpa blanca y brillante que se parece a la de un kiwi por dentro, con pequeñas semillas negras distribuidas por todo el fruto.
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4Saca la pulpa con una cuchara. Pásala a lo largo de los bordes de la cáscara y luego ve hacia abajo para aflojar la pulpa. Si la fruta está madura, se debe separar fácilmente de la cáscara.[3]
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5Comete la pitaya. Llévate la cuchara directamente a la boca, córtala en cuatro, como una manzana o usa una de las siguientes recetas. También puedes cortarla en cinco partes y crear un patrón genial.
- La pitaya tiene un sabor especialmente delicioso si está fría. Piensa en la posibilidad de refrigerarla.
- Ten cuidado de no comer cualquier pedazo de cáscara de la pitaya. La cáscara no es comestible y podría darte dolor de estómago si te la comes.
Método 2
Método 2 de 4:Hacer kebabs de pitaya
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1Remoja algunos pinchos de madera. Necesitarás un pincho para cada kebab. Remoja todos los que necesitas en un recipiente con agua durante diez minutos. Esto evitará que la madera se carbonice cuando pongas los pinchos a asar.[4]
- Si prefieres los pinchos de metal, también funcionan bien. Estos no necesitan remojarse.
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2Enciende la parrilla. Los kebabs de fruta deben ser a la parrilla a fuego medio-alto. Usa una parrilla eléctrica o al carbón.
- Una parrilla de estufa también funcionará para hacer kebabs.
- Si no tienes una parrilla, los kebabs se pueden cocinar en la parrilla del horno. Enciéndelo a fuego alto para cocinar los kebabs.
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3Prepara la fruta. Combina la pitaya con cualquier fruta tropical. Para estos kebabs, usa mango y piña.[5]
- Corta una pitaya a la mitad. Saca la pulpa y córtala en trozos pequeños.
- Corta un mango maduro a la mitad. Quítale la cáscara y córtalo en trozos pequeños.
- Corta una piña por la mitad. Corta la cáscara y luego corta la pulpa en trozos pequeños.
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4Coloca las frutas en los pinchos. Alterna las frutas poniendo la misma cantidad de cada fruta en los pinchos. Deja espacio en cada extremo para levantar y agarrar los kebabs.[6]
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5Coloca las kebabs en la parrilla. Cocínalos hasta que estén ligeramente dorados por un lado y luego dales la vuelta para cocinarlos al otro lado.
- Si usas una parrilla, colócalos en una bandeja para hornear y hornéalos. Deja que se cocinen durante 2 minutos, luego sácalos del horno, muévelos y colócalos en el horno para cocinarlos durante otros 2 minutos.
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6Saca los kebabs del calor. Colócalos en un plato para servir y de inmediato coloca un tazón con azúcar para espolvorearlos.
Método 3
Método 3 de 4:Hacer batidos de pitaya
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1Prepara la fruta. Acompaña la pitaya con bananos, arándanos y cualquier otra fruta que te guste con los batidos.[7]
- Corta la pitaya por en medio. Saca la pulpa con una cuchara, luego córtala.
- Pela un banano. Córtalo en trozos.
- Lava una pinta de arándanos.
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2Escoge una base. La pitaya tiene una pulpa cremosa que tiene un sabor delicioso, emparéjala con una base cremosa. Elige entre las siguientes:[8]
- Yogurt, natural o de tu sabor favorito.
- Leche entera, parcial o descremada, según tu preferencia.
- Leche de soya, natural o de tu sabor favorito.
- Leche de nuez, como la de almendras o la de marañón.
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3Considera agregar extras. Si te gustan los batidos extra dulces y con sabor, elige entre estos ingredientes adicionales:
- Jugo de manzana o uva.
- Un par de cucharadas de azúcar, jarabe o miel.
- Mantequilla de maní o mantequilla de almendra.
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4Agrega los ingredientes a la licuadora. Coloca la pitaya, el banano y los arándanos. Cúbrelos con una taza de tu base de elección y unas cucharadas de cualquier edulcorante adicional o la mantequilla de nuez que quieras.
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5Mezcla los ingredientes. Usa la función "pulsar" en la licuadora para mezclar los ingredientes hasta que queden suaves.
- Si el batido parece demasiado espeso, agrega un poco de leche, jugo o agua para suavizarlo.
- Si quieres un batido más espeso, agrega un poco de avena instantánea.
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6Viértelo en un vaso y sírvelo. Tomate el batido con una pajilla, o si lo hiciste demasiado grueso, cómetelo con una cuchara.
Método 4
Método 4 de 4:Hacer un sorbete de pitaya
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1Procesa 2 pitayas. Córtalas por la mitad y saca la pulpa por ambos lados. Corta la pulpa en trozos.[9]
- La cáscara bonita de la pitaya es excelente fuente para servir el sorbete. Guarda la mitad en el congelador si quieres servir el sorbete en ella.
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2Mezcla la pitaya con otros ingredientes para el sorbete. Coloca la pitaya en la licuadora junto con ¾ tazas de agua, 2 cucharadas de azúcar y 1 cucharada de jugo de limón. Presiona hasta que los ingredientes estén suaves.
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3Vierte la mezcla en un congelador. Sigue las instrucciones del fabricante para congelar el sorbete.
- Si no tienes un congelador de helados, todavía puedes hacer sorbetes siguiendo estas instrucciones:
- Vierte la mezcla del sorbete en una molde para hornear. Cúbrelo con plástico y colócalo en el congelador.
- Después de 2 horas, la mezcla debe estar congelada. Usa una cuchara para revolver el fondo, tápalo y vuélvelo a meter en el congelador.
- Sigue agitando el sorbete cada dos horas durante 8 horas.
- Después de 8 horas, deja que el sorbete se congele durante toda la noche.
- Si no tienes un congelador de helados, todavía puedes hacer sorbetes siguiendo estas instrucciones:
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4Sirve el sorbete en la mitad de la pitaya. Sirve con pastel de ángel, bizcocho u otra masa liviana.
Consejos
- Asegúrate de lavar el exterior de la fruta. Cortarla con la cáscara intacta puede introducir bacterias en la carne de la fruta y enfermarte.
Advertencias
- Comer la cáscara de la pitaya puede causar enfermedades.
- Si notas que la pitaya está dañada, lo mejor es no comerla. Incluso si no te enferma, no tendrá un sabor agradable.
Cosas que necesitarás
- un cuchillo para frutas
- pitayas
- cuchara
Acerca de este wikiHow
Para elegir una pitaya madura, busca una que tenga un color rojo o rosado brillante, y que se hunda un poco cuando presiones su carne. Usa un cuchillo afilado para cortar la pitaya a la mitad, luego pasa una cuchara por los bordes de la cáscara y úsala por debajo para aflojar el interior de la fruta. Ahora podrás comer la fruta entera, cortarla en secciones o usarla en un plato, como un batido o un sorbete. Sin embargo, no deberás comer la cáscara de la fruta, ya que puede provocar dolor estomacal.